antes que nada LA HISTORIA NO ME PERTENECE, ES DE UNA MUY QUERIDA AMIGA, LA CUAL ME DIO EL PERMISO CORRESPONDIENTE PARA PUBLICAR SU HISTORIA...los personajes tampoco, son de la grandiosa mangaka RUMIKO TAKAHASHI...

sin mas que decir aqui les dejo, en mi opinión, esta magnifica historia

UNA NOCHE DE COPAS

CAPITULO UNO

by

CHOBITS080

La sala de su departamento estaba hecha un desastre, había copas de licor por donde sea que miraras, refresco, botanas, los ceniceros repletos de colillas y de cenizas de cigarros, sin duda la encargada de la limpieza tendría trabajo extra al día siguiente, solamente quedábamos el y yo de esa ruidosa fiesta, que era en lo que se había convertido su fiesta de cumpleaños.

Me sentía muy mareada desde hacia un buen rato y no era que haya bebido demasiado, sino porque las pocas copas que bebí se me subieron rápido a la cabeza. Esa era la primera vez que bebía.o:p/o:p

Risitas involuntarias escapaban de mi garganta sin que yo pudiera evitarlo, el se acerco a mi entonces y retiro de mi mano una copa casi llena de brandy que yo sostenía torpemente por mi borrachera, cosa que después le agradecí internamente, de haberme acabado su contenido la poca conciencia que aun me quedaba se hubiera ido por un tubo y de lo que después pasaría en su recamara no me acordaría absolutamente de nada.o:p/o:p

-ya es muy tarde Aome te llevare a tu casa –me solicito, extendiendo su mano para ayudar a levantarme de ese sillón, envolví su mano con las dos mías y lo mire fijamente a los ojos.o:p/o:p

-¿podría quedarme contigo esta noche? –le pregunte buscando en sus ojos dorados algún indicio de querer aceptarme en su cama, pero al parecer el no tenia muchas ganas de dormir conmigo.o:p/o:p

-estas muy ebria mejor te llevo a tu casa –me volvió a insistir.o:p/o:p

-no quiero Inuyasha y no estoy tan ebria como tu crees, todavía no te veo doble y todavía no veo elefantes rosas –el se sonrió ante mi entupido comentario, con esa sonrisa un poco chueca porque sus labios se curvaban mas hacia el lado izquierdo, no se si era algo natural o algo que el hacia a propósito pero lo que si se, es que eso fue algo que me llamo poderosamente la atención de el cuando le vi. Esa sonrisa por primera vez cuando sango me lo presento hace apenas una horas.o:p/o:p

Me adueñe de su brazo y lo jale hacia donde yo pensé era su recamara, gran decepción era la cocina.o:p/o:p

-podríamos hacerlo sobre la mesa, pero te abierto que seria algo incomodo.o:p/o:p

Me dijo en un tono divertido, pero a mi no me pareció nada divertido.o:p/o:p

-apuesto a que han sido docenas de mujeres las que has tenido sobre esa mesa ¿verdad? –no era una pregunta era un reproche, si hubiera estado en mis cinco sentidos me hubiera sentido tan tonta reclamándole sus conquistas cuando no existía nada entre nosotros.o:p/o:p

Fue esa noche en su fiesta de cumpleaños cuando sango me presento a Inuyasha formalmente y cuando cruzamos palabras por primera vez después de algún tiempo de solo conocerlo de vista. Yo iba muy seguido a las oficinas administrativas del taller de estructuras metalicas "colmillo de acero" a encontrarme con sango para irnos a comer juntas, negocio en el cual Inuyasha es el dueño era lógico que lo viera de vez en cuando.o:p/o:p

Abrí otra puerta de su amplio y lujoso departamento esta vez acerté, me adentre en la recamara y me senté en la orilla de la cama, sintiendo al instante lo cómoda y suave que esta era, no pude evitarlo me empecé a impulsar hacia arriba, saltando feliz en la cama como una niña de cinco o seis años, quizás fue ese comportamiento infantil que a veces poseo lo que me llevo a prepararme como educadora de niños.o:p/o:p

Inuyasha me observaba parado en el umbral de la puerta.o:p/o:p

-ya déjate de tonterías, voy a llevarte a tu casa –en esta ocasión su tono de voz fue mas firme dándome a entender que hablaba muy en serio.o:p/o:p

tenia que reconocerlo el podría ser un mujeriego de lo peor pero no era ningún aprovechado y no quería sacar ventaja de mi estado de embriaguez y si yo no era una sus mujerzuelas ¿porque mi empeño en querer perder mi virginidad con el? en ese momento no podía pensar claramente en el motivo, lo único que sabia era la rabia que había sentido al haberlo rodeado de esas bellas mujeres causa por la cual empecé a beber durante la fiesta y la rabia se extendió aun mas cuando Kikyo acaparo toda su atención. Según sango me había platicado Kikyo quería llevar a Inuyasha hasta el altar con el viejo truco de la novia embarazada, pero Inuyasha siempre cargaba con por lo menos tres preservativos en su cartera, hombre prevenido vele por tres, para ser solo su contadora le sabe demasiadas cosas a su jefe, pensé o es que sango es muy metiche o Inuyasha muy poco discreto me incline por lo segundo.o:p/o:p

Así que empecé a beber para apagar esa furia que crecía en mí en forma descontrolada, misma furia que empezaba a sentir nuevamente al pensar en la cantidad de rameras que habían desfilado por esa cama.o:p/o:p

Estando de pie y con el valor que las copas me daban me deshice de mi blusa y de mi falda quedando solo en ropa interior e Inuyasha parecía inmutable parado aun en la entrada de la habitación para ser un hombre tan fácil me estaba resultando muy difícil ¿tan fea y desagradable me encontraba? empezaba a fastidiarme su acritud.o:p/o:p

-Si yo fuera Kikyo ya te hubieras acostado conmigo desde hace mucho –le reclame nuevamente en ese tonito celoso que no venia al caso. estaba decidida a hacerle olvidar a esa maldita aunque sea solo por esa noche me acerque hasta el y empecé a desabotonar uno a uno los botones de su camisa y la jale hacia abajo con un poco de violencia para quitársela, pero la camisa no cedía por mas que lo intentaba no podía quitársela del todo estaba empezando a perder la paciencia cuando Inuyasha con una expresión divertida en su cara levanto sus manos y las puso a la altura de mi cara para mostrarme sus muñecas había olvidado desabrochar los puños de su camisa de manga larga.o:p/o:p

Estando ya su camisa haciéndole compañía a mi falda y a mi blusa en algún lugar del piso, empecé con mis manos a tocar sus brazos, notando lo duro y perfectos que estaban sus bíceps, me pare de puntitas para poder besar con mayor facilidad su cuello, el rebasaba con suma facilidad mi estatura y mas estando yo descalza, empecé a dibujar círculos con mis manos sobre su pecho desnudo y roce sus pezones con mis pulgares y el continuaba, como si nada, tan quieto como una estatua, no estaba segura de estarlo haciendo bien nunca antes había seducido a ningún hombre mejor dicho nunca había estado con ningún hombre a punto estaba de darme por vencida ante la pasividad de el cuando sentí que dos fuertes brazos me rodeaban sacándome mas de un suspiro, acaricio mi larga y negra cabellera con una de sus manos, sintiéndome desfallecer en sus brazos ante ese contacto tan sutil tomo mi rostro con sus manos y mi corazón latió a mil por horas, iba a besarme!!!... gran desilusión, solo pego su frente con la mía y me pregunto casi en un susurro.o:p/o:p

-¿Aome estas segura?o:p/o:p

-Si Inuyasha –nunca había estado tan segura de algo en toda mi vida, al menos en ese momento así lo sentía, ya después tendría suficiente tiempo apara arrepentirme sobre todo por las consecuencias que ese acto tan irresponsable me acarrearía.o:p/o:p

o:p /o:p

Me cargó y me recostó en la cama con tanto cuidado como si tuviera miedo de romperme, y no pude evitar preguntarme si con Kikyo era igual de delicado, ¡maldita sea! ¿Por qué tengo que pensar en esa bruja, en este preciso momento? Inuyasha es solo para mi por lo menos en este momento y eso es lo único que debe de importarme.o:p/o:p

Deposito mis manos una a cada lado de mi cabeza entrelazando sus dedos con los míos y besó cada centímetro de mi rostro, empezando por la frente, mis parpados, cada una de mis mejillas, tocaba el turno de mi boca, pero no me beso en los labios, tomo el sendero que llevaba hasta mi cuello, y fue dejando una trayectoria de pequeños besos hasta mi barbilla, sentí que levantó un poco su cabeza, ¡por dios esta vez si iba hacerlo! , sin embargo el encontró mas interesante mordisquear y juguetear con sus dientes con el lóbulo de una de mis orejas, y no era que eso me disgustara pero para que hacerme tonta toda la noche estuve preguntándome a que sabrían sus labios en la que se dibujaba esa sonrisa de fábula que tanto me gusta, de seguro no soportaba mi aliento alcohólico, no podía ser eso posible esa noche me haría el amor y ni siquiera me besaría en la boca, debí haber conseguido algún chicle de menta o algo parecido, entonces hizo lo que yo tanto esperaba, presiono sus labios con los míos, ¡dios! era mejor de lo que esperaba la sensación mas placentera que había tenido en mi vida, no tomo que insistir mucho para que yo le diera permiso de explorar en mi boca, sintiendo su lengua acariciando mi paladar mis dientes, mi propia lengua se unió en la suya en una especie de confrontación de lo mas exquisita, en fin paso su lengua por cada rincón de mi boca, arrancándome gemidos que salían de lo mas profundo de mi ser, acelerando cada vez mas y mas los latido de mi corazón, experimentando nuevas sensaciones que nunca nadie me había hecho sentir, ni siquiera el sentimentalismo de Hoyou, ni el salvajismo de Kouga en aquellos años de la prepa en que fui novia de houyo, cuando entre a la universidad un año después me hice novia de kouga y desde hace aproximadamente dos años que no salía con nadie entregada a mis estudios y después a mi trabajo ningún hombre me había llamado la atención como Inuyasha, sin duda Inuyasha era el balance perfecto entre houyo y kouga, quizás por eso con ella las cosas nunca pasaron de ser un simple noviazgo me alegro que así haya sido dudo mucho que ellos me hubieran hecho sentir lo que estoy sintiendo ahora con Inuyasha.o:p/o:p

Mis pulmones me suplicaban por oxigeno y contradictoriamente no quería que Inuyasha abandonara mi boca convirtiendo ese acto tan lleno de pasión en una exquisita y agradable tortura.o:p/o:p

Mire Inuyasha separarse un poco de mi para jalar aire con la boca abierta no pude evitar sonreír a el le había gustado tanto como a mi.o:p/o:p

Inuyasha se incorporo, observaba detenidamente cada uno de sus movimientos, imposible no darse cuenta del prominente bulto de su entrepierna desabrocho su pantalón permitiendo que se deslizara primero por sus caderas luego por sus piernas y luego cayera al suelo, llevando después sus manos al borde del elástico de sus calzoncillos, baje mi mirada no pude seguir mirándolo, una inesperada oleada de timidez invadió mi ser cubriendo mis mejillas de color carmesí.o:p/o:p

Un movimiento en la cama me indico que el otra vez estaba sobre el colchón, sintiendo su mano recorrer desde la punto de los dedos de mi pie, subiendo por mi pierna mi muslo mis caderas a pesar de ser un rocé tan suave casi imperceptible provoca que todos los bellos de mi piel se erizaran, apoyando sus manos a cada lado de mi cuerpo empezó a besar mis senos aun por encima de mi ropa interior que yo todavía traía puesta deslizando sus brazos por detrás de mi espalda me levantó para retirar esa prenda con mayor facilidad y la arrojo lejos como si estuviera molesto con ella. Me volvió a recostar y pasó algo que no me esperaba, más bien dicho no pasaba nada el se quedó muy quieto mirando fijamente mi rostro, ¿había algo malo en mi cara?, ¿Qué tanto me miraba?, no lo se, pero su mirada penetrante empezaba a mortificarme, acarició mi mejilla y acomodó un mechón detrás de mi oreja.o:p/o:p

-Eres la mujer más hermosa que he visto- me dijo con una sinceridad en sus ojos que no dejaba lugar a ninguna duda, pero yo tenía muchos motivos para dudar de su afirmación, "lo mismo les dices ha todas" pensé en decirle, pero de mis labios no salió palabra alguna, era tan agradable la atmósfera que se estaba creando entre nosotros que no lo quise arruinar, ahora entendía perfectamente porque Inuyasha podía tener a la mujer que quisiera, no solo era guapo y rico, además el poseía esa forma única de decir frases tan simples pero a la vez tan profundas haciendo imposible el no creerle y caer inevitablemente bajo sus garras.o:p/o:p

o:p /o:p

Estando mi cuerpo casi desnudo bajo el suyo, sintiéndome desfallecer en cada ocasión en que el pasaba sus labios cálidos y húmedos en cada centímetro de mi piel, acariciándome con sus manos sin restricción alguna, pensando que mi placer no podía ser mayor, pero creció enormemente en el mismo momento en que empezaste a mordisquear mis senos, seguido después mis pezones, ahora sin ninguna prenda estorbosa de por medio volviéndose imposible contener los gemidos que escapaban de mi garganta, loca de placer lo único que atinaba hacer era abrazarlo con fuerza, como si temiera que se me fuera escapar.o:p/o:p

o:p /o:p

-Eres ……la me…jor- me dijo con gran esfuerzo, no sabiendo exactamente a que se refería con eso, la mejor en la cama, imposible, siendo esta mi primera experiencia, no puede ser, tampoco me iba a poner a preguntarle, aunque lo hubiese querido no hubiera podido hacerlo, yo ya no era dueña de mi cuerpo ni de mis acciones y de mi boca solo salía su nombre, acompañada de un largo y sonora suspiro.o:p/o:p

o:p /o:p

Sentí su mano en mi entrepierna, tuve que apretar los dientes para que no se me escapara un grito, viendo como arrugabas el entrecejo, tan perdido estabas de pasión que no recordaba que te faltaba retirar esa última prenda de mi cuerpo ya no había tiempo para hacerlo de una manera delicada, tan desesperado te encontrabas por estar dentro de mí, que me la quitaste de un solo tirón, para que luego te acomodaras entre mis piernas, y guiándote con tu mano, colocaste la punta de tu miembro en la entrada de mi intimidad, apreté mis ojos con fuerza ante lo que venía, no pudiendo evitar mi nerviosismo, ni poderlo disimular, debí haber sido demasiado obvia por que Inuyasha no se atrevía a penetrarme.o:p/o:p

o:p /o:p

-¿Sucede algo malo?- me preguntaste, nunca en mi vida había tenido que contestar algo tan difícil y nunca pensé que era posible tener tantos sentimientos encontrados; pasión, temor, deseos, nervios y hasta curiosidad de saber que se sentiría tenerlo adentro.o:p/o:p

o:p /o:p

-No…..es…..que- trataba de contestar sin mucho éxito, -es que….he escuchado muchas cosas acerca de la primera vez.o:p/o:p

Pasaron segundos que me parecieron eternos, descifré en tus ojos, la incertidumbre, de seguir o parar e irte a duchar con agua fría para que se te bajara la calentura, pero ya las cosas estaban muy avanzadas como para detenerse y ninguno de los dos queríamos dejar las cosas a medias y fui sintiendo como tu rigidez fue entrando lentamente en mí, siendo cobijado inmediatamente por mi humedad y cálida cavidad y después de eso nada, permaneciste inmóvil, ¿Qué acaso, el señor toda experiencia no sabia que hacer con una virgen en su cama?o:p/o:p

o:p /o:p

En un tierno beso posaste tus labios en mi frente y entonces pude percatarme de la preocupado que estabas por no hacerme daño, llenaste mi boca con la tuya en un arrebatador beso, mientras empezabas a moverte lentamente, acoplándome poco a poco a tu ritmo imitando tu danza, -te amo- me dijiste al tiempo que aumentabas tus movimientos, no le di importancia sin duda fue por culpa de la excitación, flexione una de mis piernas y ni tardo ni perezoso te apoderaste de ella, envolviéndola en un vaivén sin fin que iba desde mi rodilla, pasando por todo mi muslo para llegar hasta la altura de mi cadera y tu otro brazo colocado a un costado de mi cabeza sosteniendo un poco tu cuerpo, dándote la oportunidad de acariciar de vez en cuando mi negra cabellera, enrolle mi pierna que se encontraba libre de tus caricias alrededor de tu cintura, la baje un poco más sintiendo la dureza de tus nalgas, tus embestidas cada vez más incontrolables, cada vez se me hacia más difícil seguir tus movimientos.o:p/o:p

o:p /o:p

-Vamos preciosa……falta poco- tratabas de animarme creyendo que me desfallecería de cualquier momento a otro, mis manos aferradas a tu espalda con fuerza, sirviendo de apoyo, tratando de complacerte y de complacerme, hacia un gran esfuerzo para impulsar mis caderas hacia arriba, tratando de que la unión fuera lo más profunda posible, en ese momento el cielo podría caerse a pedazos, arder el mundo en llamas, nada me importaba sabiendo que moriría feliz en tus brazos, sintiendo así mi primer orgasmo mi cuerpo empezó a convulsionarse, sintiendo la culminación del acto, arremetiste con mayor fuerza por última vez espaciando tu esencia en mí, negándote a salir de mi cuerpo pegaste tu frente con la mía, haciendo chocar nuestras agitadas respiraciones, mirándonos fijamente a los ojos, acariciaste de nuevo mi cabello pensando inevitablemente lo molido que debía de haber estado tu brazo izquierdo, puesto que aún se encontraba sosteniéndote, teniendo mucho cuidado de no aplastarme con todo tu peso, al tranquilizarse un poco nuestro respirar, saliste de mi lentamente como si te pesara mucho la separación.o:p/o:p

o:p /o:p

-¿Cuántos años tienes, Aome?- Me preguntaste, con curiosidad mientras me atraías a tu cuerpo sirviendo tu amplio y bien formado pecho como almohada.

-Tengo veinticuatro… Lamento no haberte traído un regalo de cumpleaños- Intente disculparme contigo.

-Me haz dado el mejor regalo de cumpleaños de toda mi vida- me dijiste con esa sonrisa de fábula que tanto me gusta. Mis ojos se empezaron a cerrar dando paso a ese sueño reparador que mi cuerpo tanto me exigía, totalmente ignorante en ese momento que tú habías sembrado con éxito tu semilla en mi tierra fértil, iniciando así el milagroso proceso de la vida.

La sala de su departamento estaba hecha un desastre, había copas de licor por donde sea que miraras, refresco, botanas, los ceniceros repletos de colillas y de cenizas de cigarros, sin duda la encargada de la limpieza tendría trabajo extra al día siguiente, solamente quedábamos el y yo de esa ruidosa fiesta, que era en lo que se había convertido su fiesta de cumpleaños.

Me sentía muy mareada desde hacia un buen rato y no era que haya bebido demasiado, sino porque las pocas copas que bebí se me subieron rápido a la cabeza. Esa era la primera vez que bebía.o:p/o:p

Risitas involuntarias escapaban de mi garganta sin que yo pudiera evitarlo, el se acerco a mi entonces y retiro de mi mano una copa casi llena de brandy que yo sostenía torpemente por mi borrachera, cosa que después le agradecí internamente, de haberme acabado su contenido la poca conciencia que aun me quedaba se hubiera ido por un tubo y de lo que después pasaría en su recamara no me acordaría absolutamente de nada.o:p/o:p

-ya es muy tarde Aome te llevare a tu casa –me solicito, extendiendo su mano para ayudar a levantarme de ese sillón, envolví su mano con las dos mías y lo mire fijamente a los ojos.o:p/o:p

-¿podría quedarme contigo esta noche? –le pregunte buscando en sus ojos dorados algún indicio de querer aceptarme en su cama, pero al parecer el no tenia muchas ganas de dormir conmigo.o:p/o:p

-estas muy ebria mejor te llevo a tu casa –me volvió a insistir.o:p/o:p

-no quiero Inuyasha y no estoy tan ebria como tu crees, todavía no te veo doble y todavía no veo elefantes rosas –el se sonrió ante mi entupido comentario, con esa sonrisa un poco chueca porque sus labios se curvaban mas hacia el lado izquierdo, no se si era algo natural o algo que el hacia a propósito pero lo que si se, es que eso fue algo que me llamo poderosamente la atención de el cuando le vi. Esa sonrisa por primera vez cuando sango me lo presento hace apenas una horas.o:p/o:p

Me adueñe de su brazo y lo jale hacia donde yo pensé era su recamara, gran decepción era la cocina.o:p/o:p

-podríamos hacerlo sobre la mesa, pero te abierto que seria algo incomodo.o:p/o:p

Me dijo en un tono divertido, pero a mi no me pareció nada divertido.o:p/o:p

-apuesto a que han sido docenas de mujeres las que has tenido sobre esa mesa ¿verdad? –no era una pregunta era un reproche, si hubiera estado en mis cinco sentidos me hubiera sentido tan tonta reclamándole sus conquistas cuando no existía nada entre nosotros.o:p/o:p

Fue esa noche en su fiesta de cumpleaños cuando sango me presento a Inuyasha formalmente y cuando cruzamos palabras por primera vez después de algún tiempo de solo conocerlo de vista. Yo iba muy seguido a las oficinas administrativas del taller de estructuras metalicas "colmillo de acero" a encontrarme con sango para irnos a comer juntas, negocio en el cual Inuyasha es el dueño era lógico que lo viera de vez en cuando.o:p/o:p

Abrí otra puerta de su amplio y lujoso departamento esta vez acerté, me adentre en la recamara y me senté en la orilla de la cama, sintiendo al instante lo cómoda y suave que esta era, no pude evitarlo me empecé a impulsar hacia arriba, saltando feliz en la cama como una niña de cinco o seis años, quizás fue ese comportamiento infantil que a veces poseo lo que me llevo a prepararme como educadora de niños.o:p/o:p

Inuyasha me observaba parado en el umbral de la puerta.o:p/o:p

-ya déjate de tonterías, voy a llevarte a tu casa –en esta ocasión su tono de voz fue mas firme dándome a entender que hablaba muy en serio.o:p/o:p

tenia que reconocerlo el podría ser un mujeriego de lo peor pero no era ningún aprovechado y no quería sacar ventaja de mi estado de embriaguez y si yo no era una sus mujerzuelas ¿porque mi empeño en querer perder mi virginidad con el? en ese momento no podía pensar claramente en el motivo, lo único que sabia era la rabia que había sentido al haberlo rodeado de esas bellas mujeres causa por la cual empecé a beber durante la fiesta y la rabia se extendió aun mas cuando Kikyo acaparo toda su atención. Según sango me había platicado Kikyo quería llevar a Inuyasha hasta el altar con el viejo truco de la novia embarazada, pero Inuyasha siempre cargaba con por lo menos tres preservativos en su cartera, hombre prevenido vele por tres, para ser solo su contadora le sabe demasiadas cosas a su jefe, pensé o es que sango es muy metiche o Inuyasha muy poco discreto me incline por lo segundo.o:p/o:p

Así que empecé a beber para apagar esa furia que crecía en mí en forma descontrolada, misma furia que empezaba a sentir nuevamente al pensar en la cantidad de rameras que habían desfilado por esa cama.o:p/o:p

Estando de pie y con el valor que las copas me daban me deshice de mi blusa y de mi falda quedando solo en ropa interior e Inuyasha parecía inmutable parado aun en la entrada de la habitación para ser un hombre tan fácil me estaba resultando muy difícil ¿tan fea y desagradable me encontraba? empezaba a fastidiarme su acritud.o:p/o:p

-Si yo fuera Kikyo ya te hubieras acostado conmigo desde hace mucho –le reclame nuevamente en ese tonito celoso que no venia al caso. estaba decidida a hacerle olvidar a esa maldita aunque sea solo por esa noche me acerque hasta el y empecé a desabotonar uno a uno los botones de su camisa y la jale hacia abajo con un poco de violencia para quitársela, pero la camisa no cedía por mas que lo intentaba no podía quitársela del todo estaba empezando a perder la paciencia cuando Inuyasha con una expresión divertida en su cara levanto sus manos y las puso a la altura de mi cara para mostrarme sus muñecas había olvidado desabrochar los puños de su camisa de manga larga.o:p/o:p

Estando ya su camisa haciéndole compañía a mi falda y a mi blusa en algún lugar del piso, empecé con mis manos a tocar sus brazos, notando lo duro y perfectos que estaban sus bíceps, me pare de puntitas para poder besar con mayor facilidad su cuello, el rebasaba con suma facilidad mi estatura y mas estando yo descalza, empecé a dibujar círculos con mis manos sobre su pecho desnudo y roce sus pezones con mis pulgares y el continuaba, como si nada, tan quieto como una estatua, no estaba segura de estarlo haciendo bien nunca antes había seducido a ningún hombre mejor dicho nunca había estado con ningún hombre a punto estaba de darme por vencida ante la pasividad de el cuando sentí que dos fuertes brazos me rodeaban sacándome mas de un suspiro, acaricio mi larga y negra cabellera con una de sus manos, sintiéndome desfallecer en sus brazos ante ese contacto tan sutil tomo mi rostro con sus manos y mi corazón latió a mil por horas, iba a besarme!!!... gran desilusión, solo pego su frente con la mía y me pregunto casi en un susurro.o:p/o:p

-¿Aome estas segura?o:p/o:p

-Si Inuyasha –nunca había estado tan segura de algo en toda mi vida, al menos en ese momento así lo sentía, ya después tendría suficiente tiempo apara arrepentirme sobre todo por las consecuencias que ese acto tan irresponsable me acarrearía.o:p/o:p

o:p /o:p

Me cargó y me recostó en la cama con tanto cuidado como si tuviera miedo de romperme, y no pude evitar preguntarme si con Kikyo era igual de delicado, ¡maldita sea! ¿Por qué tengo que pensar en esa bruja, en este preciso momento? Inuyasha es solo para mi por lo menos en este momento y eso es lo único que debe de importarme.o:p/o:p

Deposito mis manos una a cada lado de mi cabeza entrelazando sus dedos con los míos y besó cada centímetro de mi rostro, empezando por la frente, mis parpados, cada una de mis mejillas, tocaba el turno de mi boca, pero no me beso en los labios, tomo el sendero que llevaba hasta mi cuello, y fue dejando una trayectoria de pequeños besos hasta mi barbilla, sentí que levantó un poco su cabeza, ¡por dios esta vez si iba hacerlo! , sin embargo el encontró mas interesante mordisquear y juguetear con sus dientes con el lóbulo de una de mis orejas, y no era que eso me disgustara pero para que hacerme tonta toda la noche estuve preguntándome a que sabrían sus labios en la que se dibujaba esa sonrisa de fábula que tanto me gusta, de seguro no soportaba mi aliento alcohólico, no podía ser eso posible esa noche me haría el amor y ni siquiera me besaría en la boca, debí haber conseguido algún chicle de menta o algo parecido, entonces hizo lo que yo tanto esperaba, presiono sus labios con los míos, ¡dios! era mejor de lo que esperaba la sensación mas placentera que había tenido en mi vida, no tomo que insistir mucho para que yo le diera permiso de explorar en mi boca, sintiendo su lengua acariciando mi paladar mis dientes, mi propia lengua se unió en la suya en una especie de confrontación de lo mas exquisita, en fin paso su lengua por cada rincón de mi boca, arrancándome gemidos que salían de lo mas profundo de mi ser, acelerando cada vez mas y mas los latido de mi corazón, experimentando nuevas sensaciones que nunca nadie me había hecho sentir, ni siquiera el sentimentalismo de Hoyou, ni el salvajismo de Kouga en aquellos años de la prepa en que fui novia de houyo, cuando entre a la universidad un año después me hice novia de kouga y desde hace aproximadamente dos años que no salía con nadie entregada a mis estudios y después a mi trabajo ningún hombre me había llamado la atención como Inuyasha, sin duda Inuyasha era el balance perfecto entre houyo y kouga, quizás por eso con ella las cosas nunca pasaron de ser un simple noviazgo me alegro que así haya sido dudo mucho que ellos me hubieran hecho sentir lo que estoy sintiendo ahora con Inuyasha.o:p/o:p

Mis pulmones me suplicaban por oxigeno y contradictoriamente no quería que Inuyasha abandonara mi boca convirtiendo ese acto tan lleno de pasión en una exquisita y agradable tortura.o:p/o:p

Mire Inuyasha separarse un poco de mi para jalar aire con la boca abierta no pude evitar sonreír a el le había gustado tanto como a mi.o:p/o:p

Inuyasha se incorporo, observaba detenidamente cada uno de sus movimientos, imposible no darse cuenta del prominente bulto de su entrepierna desabrocho su pantalón permitiendo que se deslizara primero por sus caderas luego por sus piernas y luego cayera al suelo, llevando después sus manos al borde del elástico de sus calzoncillos, baje mi mirada no pude seguir mirándolo, una inesperada oleada de timidez invadió mi ser cubriendo mis mejillas de color carmesí.o:p/o:p

Un movimiento en la cama me indico que el otra vez estaba sobre el colchón, sintiendo su mano recorrer desde la punto de los dedos de mi pie, subiendo por mi pierna mi muslo mis caderas a pesar de ser un rocé tan suave casi imperceptible provoca que todos los bellos de mi piel se erizaran, apoyando sus manos a cada lado de mi cuerpo empezó a besar mis senos aun por encima de mi ropa interior que yo todavía traía puesta deslizando sus brazos por detrás de mi espalda me levantó para retirar esa prenda con mayor facilidad y la arrojo lejos como si estuviera molesto con ella. Me volvió a recostar y pasó algo que no me esperaba, más bien dicho no pasaba nada el se quedó muy quieto mirando fijamente mi rostro, ¿había algo malo en mi cara?, ¿Qué tanto me miraba?, no lo se, pero su mirada penetrante empezaba a mortificarme, acarició mi mejilla y acomodó un mechón detrás de mi oreja.o:p/o:p

-Eres la mujer más hermosa que he visto- me dijo con una sinceridad en sus ojos que no dejaba lugar a ninguna duda, pero yo tenía muchos motivos para dudar de su afirmación, "lo mismo les dices ha todas" pensé en decirle, pero de mis labios no salió palabra alguna, era tan agradable la atmósfera que se estaba creando entre nosotros que no lo quise arruinar, ahora entendía perfectamente porque Inuyasha podía tener a la mujer que quisiera, no solo era guapo y rico, además el poseía esa forma única de decir frases tan simples pero a la vez tan profundas haciendo imposible el no creerle y caer inevitablemente bajo sus garras.o:p/o:p

o:p /o:p

Estando mi cuerpo casi desnudo bajo el suyo, sintiéndome desfallecer en cada ocasión en que el pasaba sus labios cálidos y húmedos en cada centímetro de mi piel, acariciándome con sus manos sin restricción alguna, pensando que mi placer no podía ser mayor, pero creció enormemente en el mismo momento en que empezaste a mordisquear mis senos, seguido después mis pezones, ahora sin ninguna prenda estorbosa de por medio volviéndose imposible contener los gemidos que escapaban de mi garganta, loca de placer lo único que atinaba hacer era abrazarlo con fuerza, como si temiera que se me fuera escapar.o:p/o:p

o:p /o:p

-Eres ……la me…jor- me dijo con gran esfuerzo, no sabiendo exactamente a que se refería con eso, la mejor en la cama, imposible, siendo esta mi primera experiencia, no puede ser, tampoco me iba a poner a preguntarle, aunque lo hubiese querido no hubiera podido hacerlo, yo ya no era dueña de mi cuerpo ni de mis acciones y de mi boca solo salía su nombre, acompañada de un largo y sonora suspiro.o:p/o:p

o:p /o:p

Sentí su mano en mi entrepierna, tuve que apretar los dientes para que no se me escapara un grito, viendo como arrugabas el entrecejo, tan perdido estabas de pasión que no recordaba que te faltaba retirar esa última prenda de mi cuerpo ya no había tiempo para hacerlo de una manera delicada, tan desesperado te encontrabas por estar dentro de mí, que me la quitaste de un solo tirón, para que luego te acomodaras entre mis piernas, y guiándote con tu mano, colocaste la punta de tu miembro en la entrada de mi intimidad, apreté mis ojos con fuerza ante lo que venía, no pudiendo evitar mi nerviosismo, ni poderlo disimular, debí haber sido demasiado obvia por que Inuyasha no se atrevía a penetrarme.o:p/o:p

o:p /o:p

-¿Sucede algo malo?- me preguntaste, nunca en mi vida había tenido que contestar algo tan difícil y nunca pensé que era posible tener tantos sentimientos encontrados; pasión, temor, deseos, nervios y hasta curiosidad de saber que se sentiría tenerlo adentro.o:p/o:p

o:p /o:p

-No…..es…..que- trataba de contestar sin mucho éxito, -es que….he escuchado muchas cosas acerca de la primera vez.o:p/o:p

Pasaron segundos que me parecieron eternos, descifré en tus ojos, la incertidumbre, de seguir o parar e irte a duchar con agua fría para que se te bajara la calentura, pero ya las cosas estaban muy avanzadas como para detenerse y ninguno de los dos queríamos dejar las cosas a medias y fui sintiendo como tu rigidez fue entrando lentamente en mí, siendo cobijado inmediatamente por mi humedad y cálida cavidad y después de eso nada, permaneciste inmóvil, ¿Qué acaso, el señor toda experiencia no sabia que hacer con una virgen en su cama?o:p/o:p

o:p /o:p

En un tierno beso posaste tus labios en mi frente y entonces pude percatarme de la preocupado que estabas por no hacerme daño, llenaste mi boca con la tuya en un arrebatador beso, mientras empezabas a moverte lentamente, acoplándome poco a poco a tu ritmo imitando tu danza, -te amo- me dijiste al tiempo que aumentabas tus movimientos, no le di importancia sin duda fue por culpa de la excitación, flexione una de mis piernas y ni tardo ni perezoso te apoderaste de ella, envolviéndola en un vaivén sin fin que iba desde mi rodilla, pasando por todo mi muslo para llegar hasta la altura de mi cadera y tu otro brazo colocado a un costado de mi cabeza sosteniendo un poco tu cuerpo, dándote la oportunidad de acariciar de vez en cuando mi negra cabellera, enrolle mi pierna que se encontraba libre de tus caricias alrededor de tu cintura, la baje un poco más sintiendo la dureza de tus nalgas, tus embestidas cada vez más incontrolables, cada vez se me hacia más difícil seguir tus movimientos.o:p/o:p

o:p /o:p

-Vamos preciosa……falta poco- tratabas de animarme creyendo que me desfallecería de cualquier momento a otro, mis manos aferradas a tu espalda con fuerza, sirviendo de apoyo, tratando de complacerte y de complacerme, hacia un gran esfuerzo para impulsar mis caderas hacia arriba, tratando de que la unión fuera lo más profunda posible, en ese momento el cielo podría caerse a pedazos, arder el mundo en llamas, nada me importaba sabiendo que moriría feliz en tus brazos, sintiendo así mi primer orgasmo mi cuerpo empezó a convulsionarse, sintiendo la culminación del acto, arremetiste con mayor fuerza por última vez espaciando tu esencia en mí, negándote a salir de mi cuerpo pegaste tu frente con la mía, haciendo chocar nuestras agitadas respiraciones, mirándonos fijamente a los ojos, acariciaste de nuevo mi cabello pensando inevitablemente lo molido que debía de haber estado tu brazo izquierdo, puesto que aún se encontraba sosteniéndote, teniendo mucho cuidado de no aplastarme con todo tu peso, al tranquilizarse un poco nuestro respirar, saliste de mi lentamente como si te pesara mucho la separación.o:p/o:p

o:p /o:p

-¿Cuántos años tienes, Aome?- Me preguntaste, con curiosidad mientras me atraías a tu cuerpo sirviendo tu amplio y bien formado pecho como almohada.

-Tengo veinticuatro… Lamento no haberte traído un regalo de cumpleaños- Intente disculparme contigo.

-Me haz dado el mejor regalo de cumpleaños de toda mi vida- me dijiste con esa sonrisa de fábula que tanto me gusta. Mis ojos se empezaron a cerrar dando paso a ese sueño reparador que mi cuerpo tanto me exigía, totalmente ignorante en ese momento que tú habías sembrado con éxito tu semilla en mi tierra fértil, iniciando así el milagroso proceso de la vida.

continuara...

diganme si no es interesante la historia?...a mi me encanto...espero sus rewes..

ah, se me olvidaba subire un capitulo por semana...la uni me atrapa... jejeje. cabe mencionar que los rewis que me envien se los enviare a chobits080...de verdad me gustaria que dejaran rewis ^^

con respecto a mis historias, ya casi tengo listos los capis...no se desesperen..

nos vemos!!