Durante la temporada 5 de Smallville y la temporada 3 de Gossip Girl
En la afueras del pueblito Smallville
Granja Kent, en el granero. Vemos a Clark sentado en el sofá sentado, sin creer lo que le acaba de decir la morena que esta a su lado. Ella se llama Georgina, se conocieron hace unos meses en un bar, ambos estaban ebrios.
Fue el día en que Jonathan Kent murió y su relación con Lana empezó a echar a perder, Sparks se sentó a su lado, pasándose la mano por el pelo. - ¿Podrías parar con eso?
Lo siento, sera que mis instintos de madre están apareciendo - le dice, mientras suspira
Clark tenía sus manos en sus cara, no podía creer lo que estaba pasando
Meses antes
Ciudad de New York
Universidad de New York, dormitorios
Clark no se había molestado en aprender el apellido de la joven, bueno eso se decía. Pero sabe que su super memoria se lo recordara, ella es inteligente y tiene la piel pálida, cabello castaño oscuro, como ojos marrones.
Esa fue la primera de muchas noches, en que ella lo dejo pasar la noche allí.
Durante las noches, la ve dormir boca abajo en la cama con su cabello cayendo en cascada sobre su espalda y cubriendo su rostro, piensa en Lana. Si todo fuera tan fácil, como con ella.
Días después
Georgina y Clark están en la cama, este mira el cielo de la habitación, mientras que lo observa y le dice algo que viene pensando hace varios días desde que lo conoció - Grandullón, pareces un niño pequeño y triste - a la vez la joven castaña oscura con sus dedos recorren suavemente su cabello oscuro.
Kent sonríe y le besa el cuello, haciendo que grite - te parezco que estoy triste, cariño? - le pregunta.
Él nunca le a contado sobre sus padres y mucho menos de Lana, pero parece que ella lo lee como un libro. Viendo como es en realidad en en estos días.
Luego de otra round de mucho sexo, la joven pareja volvió a quedarse dormida. Una hora después Georgina volvió a despertar, se le quedo mirando con una gran sonrisa depredadora. Aun estaba fascinada con el cuerpo de Clark, además que es fácil de manipular, fácil de usar y fácil de llevar a la cama.
Recuerda como lo conoció, ella había ido a beber algo cerca de la universidad y claro conocer a alguien que la haga vibrar. Cuando entro al Bar, lo vio en la barra hermoso y ebrio. Le encanto al instante de verlo, por lo cual tenía que hacer su jugada
Se acercó seductoramente - Hola, hermoso - tomo asiento a su lado
El babeando, se le quedo viendo - Hey, disculpa creo que debo irme - Clark se levanta y pierde el equilibrio, Georgina lo alcanza a tomar del brazo y lo sienta en la silla
Creo que no, mira en el estado en que estás. No puedes irte solo, por unos días estaré sola. Mi compañera de habitación no estará, te puedes quedar y necesito que alguien me cuide - le dice, mientras le guiña el ojo, se aferra de su brazo y le acaricia sus músculos
Clark estaba mareado por el licor y por todo lo que hablaba la joven - ni siquiera te conozco
Mi nombre es Georgina Sparks y prometo que te cuidare... - ella jugaba con su cabello
Clark se le quedo mirando - mi nombre es Clark Kent
Bueno, Clark Kent. Es tiempo que nos vayamos a la cama - el se le quedo viendo los ojos muy abierto, estará ebrio pero escucha muy bien. Ella tomó su teléfono y pidió un taxi, luego miro al mesero que era un conocido suyo y aventura de una noche - Jim, la cuenta de mi amigo Clark y ayúdame a llevarlo al taxi
El se le quedo viendo, sabiendo su reputación - enseguida - respondió, prefirió no discutirle nada. Estaba por irle a pedir la cuenta, cuando se volvió a escuchar la voz de ella
Me tendrás que acompañar - ella observa a Clark - voy a necesitar ayuda, para llevarlo al dormitorio y desvestir - decía con una sonrisa
A la mañana siguiente
Universidad de New York. Dormitorio de Georgina
Los rayos del sol aparecían por la ventana, a través de las cortinas entre abiertas. Clark gimió suavemente, sus párpados se agitaron, y poco a poco fue consciente de una rigidez placentera era su pene erecto se movía hacia arriba, saliendo de la gruesa piel sudada y sudorosa de cabello negro azulado que le cubría la ingle y el abdomen profundamente surcado. Poco a poco notó un fuerte olor que parecía ser una mezcla de sudor masculino y semen seco, cubierto con un olor a sábanas sin lavar. Abriendo los ojos, miró confundido alrededor de la habitación desconocida, tomando la maraña de sábanas sucias donde estaba acostado y se levanto de la cama, vio un espejo de cuerpo entero en la parte de atrás de la puerta y miró, desconcertado, a la estrella porno masculina desnuda que le miraba fijamente y le devolvía la mirada.
¿No puede ser, soy yo? ¿Dónde diablos estoy? ¿Dónde están mi ropa? - se preguntaba. Al abrir un puerta que se encontraba al final de la habitación, se encontró con un baño muy limpió.
Al mismo tiempo, se abría la puerta del dormitorio. Revelando a la joven de cabello castaña oscuro de anoche, le sonrió y le dijo - Hola Clark, ¿dormiste bien? - Mientras la miraba con la boca abierta, ella en verdad que es hermosa. Se dio cuenta que traía dos bolsas, las tomo y se las dejo sobre el escritorio - gracias, como dormías fue a comprar unas cosas para el desayuno. - ella se le quedo mirando y se sonrojo - pareces que podrías usar una ducha, si quieres te enjabono la espalda ... y quizás tomes cuidado con ese bate de béisbol que sobresale de tu entrepierna.
Clark aun aturdido, no le presto atención y entró en la ducha, encendió el agua caliente, recogió la pastilla de jabón de color cobre y comenzó a enjabonarse el cuerpo. Cerrando los ojos, se entregó al placer mientras sus manos enjabonadas trabajaban la barra en la densa alfombra negra que adornaba su vientre, como también su pecho musculoso y sensibles pezones.
Él sin darse cuenta, que la joven se había desnudado y había entrado con el. Tomo el shampoo y comenzó ligeramente, a frotarlo en su cabello. Mientras su cuero cabelludo comenzaba a hormiguear, para después tomar la barra de jabón que el estaba ocupando y frotar sobre su espalda y culo, hacia abajo por las peludas columnas de sus piernas, se relajó mientras ella ponía una espuma espesa en su entrepierna, extendiendo delicadamente la espuma refrescante sobre sus bolas. - Mierda, se siente bien - rugía Clark.
Una hora después...
Los dos nuevos amantes se despertaron de nuevo, tumbados sobre la cama. Con sus cuerpos desnudos recién bañados, ella lo acariciaba por todos lados. Ella observaba sus brazos musculosos, hombros anchos y su pecho firmemente desarrollado, para luego susurrar. - Eres un espécimen magnífico, ¿no? - Clark se sonrojo
Gracias - respondió en un susurró, mientras volvía a dormir
