Era tarde y yo estaba tarde y yo estaba aburrido.

Seguía siendo tarde y aún estaba aburrido.

Noté que tenía hambre ¿podía comer? Daba igual, llamaría a pizzas castillo.

Tomé el teléfono y puse la marcación rápida. Contestaron.

-Hola Mario, quiero una pizza con queso, anchoas y peperoni extra.

-No soy Mario. -Dijo una voz femenina.

-Oh Bella, ¿ahora trabajas en pizzas castillo?

Ella rió levemente. -¡Nooo!

-Oh, entonces adiós. -Colgué el teléfono.

Seguía teniendo "hambre".

Volví a tomar el teléfono y use la marcación rápida.

-¿Hablo a pizzas castillo?

-Nooo… -Dijo una voz femenina en un tono malhumorado. -Emmett, soy yo, Bella.

-De acuerdo Mario, si no quieres no. -Y colgué.

-Tendré que decirle a Esme que me preparé una pizza. -Dije entusiasmadamente. -Oh, Esme no está.