Si me tenés miedo…

Capítulo 1

Era probable que hiciera demasiado calor para tener puesta semejante campera. Sobre todo si se tenía en cuenta que la tenía puesta por encima de otra campera. Quizás eso era muy cierto, pero sabía que sus compañeros de equipo no le iban a decir nada. Después de unos años ellos habían logrado aceptar su extraña forma de vestirse y su capacidad atérmica. Él ya se había acostumbrado lo suficiente a permanecer en cualquier tipo de clima con la misma ropa y ésta no iba a ser la excepción.

Shino Aburame miró a su alrededor, el sol brillante del verano estaba secando el pasto. Al no haber recibido lluvia por varios días lo que antes había sido una gran colina verde brillante se había convertido ahora en algo amarillo seco. Por suerte el árbol que tenían por encima de sus cabezas proveía a los tres jóvenes ninjas de la aldea de Konoha con la suficiente sombra como para poder estar a gusto.

Esto era solo un pequeño descanso antes de seguir con la práctica. Los tres estaban respirando agitados después de haber estado practicando durante largo rato tratando de mejorar sus técnicas. Tanto Hinata como Kiba se habían sacado parte de la ropa que llevaban puesta en un comienzo, cediendo ante el calor reinante. Era la hora de la siesta y el sol en lo más alto del cielo pegaba fuerte.

Kiba se había puesto de pie junto a Akamaru que estaba con la lengua afuera jadeando. Si bien ellos podían sacarse ropa para pasar el calor, su amigo animal no podía sacarse el abrigo de piel natural. El largo y abundante pelaje blanco de Akamaru estaba haciendo que el pobre sufriera mucho el calor. ¿Sería este el día más caluroso del verano?

"Voy a llevarlo a que se meta un poco al agua"
"Ok... nosotros vamos a seguir entrenando. Vamos a estar en el bosque, que hay algo más de sombra, alcanzanos ahí ¿ok?" *Shino se puso de pie y comenzó a caminar hacia el grupo de árboles*
"Claro"
"Tené cuidado, Kiba-Kun" *Hinata lo saludó con la mano*

El chico y su perro se dirigieron a un lago no muy alejado del lugar mientras que los otros dos se encaminaron hacia los árboles. Cuando Shino y Hinata llegaron a un claro rodeado de pinos reiniciaron los ataques que venían realizando hasta el momento. Si bien habían estado juntos por ya varios años seguían teniendo la capacidad de – de tanto en tanto - sorprender al otro con un ataque inesperado.

Hinata corrió hacia Shino preparando las manos para su siguiente ataque pero ni bien se acercó lo suficiente al cuerpo del chico sintió una sensación muy extraña, como de ser levantada en el aire. Cuando logró entender qué era lo que había pasado se encontraba en una trampa de red colgada de una de las ramas más anchas de un árbol cercano. Debajo suyo estaba Shino tanto o más sorprendido que ella...

"¿Quién puso esto acá?" *la chica trató de moverse pero la red cedía ante la presión de sus manos al tratar de moverse por lo que se quedó más o menos como estaba*
"Quizás quedó de algún entrenamiento anterior"
"Bueno, pero una trampa de red no es algo que vaya a contener a muchos ninjas dentro ¿no?"

Hinata sacó un kunai de su cinturón y lo acerco a una de las uniones de la soga empezando a intentar cortarlo. Para su gran sorpresa la soga no cedió en lo más mínimo ante el filo del arma, incluso cuando la chica utilizó toda su fuerza para tratar de realizar el corte. Acto seguido intentó utilizar diferentes técnicas sin ningún tipo de resultado.

Shino había quedado sentado con la espalda apoyada en la red. Hinata estaba arrodillada con las piernas alrededor de las suyas y con el cuerpo de frente a él. Al haber tratado de cortar la soga la chica había tenido que estirarse por encima del cuerpo de Shino, no habiendo otra forma de sentarse. El Aburame agradeció en sus pensamientos tener la mayor parte de su cara tapada por la tela de la capucha, el cuello de la campera, los lentes y la bandana de la aldea porque estaba seguro que debía estar colorado.

"No puedo… no puedo cortarla"
"¿Alguna idea de qué tipo de soga se trata?"
"No, no conozco ningún material como este, no se corta con nada"
"A ver, pruebo yo"

Shino dejó salir a un grupo numeroso de kikais de su cuerpo y estos se agruparon en distintos puntos de la soga tratando de debilitarla, cortarla o separarla de alguna manera. Hinata apoyó las dos manos en la red tratando de ponerse un poco más derecha. Tenía la cara roja y acalorada por el entrenamiento y por esforzarse en vano para cortar las sogas.

"¿Estás bien?"
"Eh… sí, estoy bien Shino-Kun"
"Te ves muy roja… ¿segura que no te estará dando una insolación, no?"

El chico llevó la mano derecha a la frente de ella para sentir si tenía fiebre. Una sensación muy agradable recorrió el cuerpo de Hinata cuando la mano fría tocó la piel de su frente. No estaba segura de cómo funcionaba el cuerpo de Shino porque las veces en que había tocado su piel se podían contar con los dedos de una mano, pero sabía que su temperatura no era la de una persona normal. Con el calor que hacía el parecía estar perfecto.

El chico separó la mano después de un par de segundos pero Hinata la sostuvo contra su frente por un momento más con su propia mano. Shino no entendió del todo qué era esto pero el contacto con la piel de la chica le agradaba mucho y no era algo que se daba todos los días por lo que no iba a evitarlo a propósito. Cuando pasó casi un minuto y la chica aún no le había soltado empezó a ponerse nervioso.

La mano libre de Hinata buscó la mano izquierda de Shino y la sintió con cuidado recorriendo la palma con los dedos… no lo estaba mirando, de hecho, tenía los ojos cerrados, cubiertos en parte por la mano del chico que era enorme comparada con la cara de ella. Abrió apenas los ojos, mirando por debajo del borde de la mano del chico y estiró la mano con la que había tocado la mano izquierda de él y acarició su cara despacio.

Es probable que eso haya sido la gota que derramo el vaso. Shino sacó con brusquedad la mano que la chica aún sostenía contra su frente y trató de darse vuelta dentro de la red - sin demasiado éxito - para ver qué estaban haciendo sus kikais.

"¿Qué… qué fue todo eso?"
"¿Eh?... ah, perdón, Shino-kun si te molesté... es que tu cuerpo está muy frío y hace tanto calor"
"¿Frío?"

Ahora todo tenía sentido. Por un segundo su mente había divagado muchísimo y le había dicho lo que él quería creer: que ella le estaba acariciando porque - de alguna manera desconocida para él - Hinata se había dado cuenta de sus sentimientos por ella y le estaba correspondiendo con caricias. Claro, como sueño idílico fue muy lindo mientras duró.

"Mi temperatura siempre tiene que permanecer fresca para que mis kikais estén cómodos"
"Es muy agradable, sobre todo con este calor"
"¿Agradable?"
"Sí... es agradable sentirse fresco en verano cuando hacen estas temperaturas tan altas"
"Nunca pensé que nadie fuera a decir que el hecho de que mi cuerpo estuviese frío fuese agradable"
"Pero lo es, de verdad, verdad Shino-kun" *Hinata sabía que el chico siempre había tenido problemas con la aceptación de la gente hacia él por culpa de su clan*
"Gracias"

Shino hundió aún más su cara dentro del cuello de su campera. Siempre había pensado que el hecho de que su cuerpo estuviese fresco o casi frío podía llegar a ser algo que a las demás personas les pareciera extraño. Que alguien - más aún teniendo en cuenta quién es ese alguien - le dijera que era algo agradable lo ponía nervioso. Por suerte él tenía la capacidad de no mostrar nada de nada por fuera, tanto por la ropa que lo cubría como por la cara de poker que había logrado a lo largo de los años.

"¿Podés cortar la soga?"
"No, lo que no nos permite cortarla es que está sellada con chakra. Estoy pensando una manera de revertir eso"
"Ah… ¿deberíamos llamar a Kiba?"

Kiba se había dado cuenta de los sentimientos que Shino tenía por Hinata hacía ya bastante tiempo y solía molestarlo por eso. Que Kiba encontrase a Shino con Hinata arrodillada encima dentro de una trampa de soga no era la mejor de las situaciones. Iba a hacer bromas relacionadas con eso por tanto tiempo que no quería ni pensarlo... Pero por otro lado, tampoco encontraba una solución rápida al problema.

Hinata se tapó los ojos con las manos… la trampa estaba colgando de una rama justo en medio de un clareo en el bosque por lo que el sol les daba de lleno. Tenía muchísimo calor. Quería salir pronto y poder ir a pararse bajo la cascada y que el agua fría le pegara en los hombros y en la cabeza. Quizás sí se estaba insolando… hacía rato que no practicaban tanto a esta hora del día.

La chica decidió buscar dónde podían estar los puntos flojos de la soga utilizando su byakugan. Shino vio los cambios en la cara de la chica y supo lo que estaba haciendo. La cara de entre sorpresa y molestia que tenía Hinata le indicaba que algo no andaba del todo bien. El efecto del byakugan pasó rápido, mucho más rápido que cualquier vez anterior que él le haya visto hacer.

"La soga, no tiene puntos flojos, y Kiba-Kun se está volviendo a la aldea, el chakra en el cuerpo de Akamaru no se veía bien... yo... creo que no me siento muy bien"
"¿Te duele algo?"
"No, no, pero se me está nublando la vist…"

Hinata había llegado hasta el límite que su cuerpo le permitía… no se trataba de una insolación ni del cansancio del entrenamiento ni de las técnicas que había usado hasta ese momento... algo le estaba haciendo mal pero no sabía bien qué era por lo que no podía explicárselo a Shino. Sintió que la vista se le nubló, que los oídos se le tapaban y escuchaba como un pitido muy agudo, se sintió mareada y se dejó caer.

El peso de la chica cayó de lleno sobre el cuerpo de Shino sorprendiéndolo. ¿Por qué no había dicho antes que estaba tan mal en vez de seguirse esforzando? Si había algo que le molestaba de ella era eso, nunca quería molestar a los demás y por no querer molestar se metía en problemas ella. No podía negar que el hecho de que estuviera contra su pecho, contra su cuerpo, tan, tan cerca, no le molestaba en lo más mínimo. Apartó un par de mechones de pelo de la cara de la chica para verla bien.

Tenía un dilema entre manos. Podía enviar de inmediato un grupo de kikais a que buscasen ayuda y que vinieran otras personas de la aldea a ayudarlos. Esta opción implicaba que pronto iba a tener que alejarse del pequeño cuerpo inmóvil que estaba apoyado por completo contra su cuerpo. Que ella estuviese ahí, apoyada así era casi un sueño hecho realidad, si tenía que ser sincero consigo mismo admitía que no quería dejar de estar allí.

La otra opción, claro, era hacerse el sota y no hacer absolutamente nada hasta que alguien eventualmente apareciese o hasta que Hinata se despertase. En ambos casos, si alguien le preguntaba por qué no había mandado sus bichos a avisar de su situación en la aldea, podía decir que él también se desmayó por la insolación o que estaba mareado y no sabía cómo actuar...

Si la chica ese día no se hubiese sacado la campera para quedarse en la musculosa blanca que llevaba debajo, si tan solo ella hubiera caído a un costado de él en vez de en una manera tan perfecta encima suyo, si no fuese porque tenía mucho miedo de nunca jamás tenerla de vuelta así de cerca, quizás hubiera elegido la primera opción, pero no podía. Podía ser reservado, frío, misterioso, indescifrable, hasta "creepy" si se quería... pero seguía siendo humano.

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Gracias a todos por leer este primer capítulo de mi nueva historia de Naruto. ¿Qué les parece la pareja? Creo que hay demasiadas parejas que me gustan de Naruto, pero esta es una de mis favoritas. ¿Por qué Shino? No sé... supongo que porque los chicos misteriosos, serios, callados, etc. suelen ser los que más cosas piensan y esconden y eso es de lo más interesante.

Supongo que todos saben estas cosas, pero aclaro por las dudas:
* "Kikais" son los insectos que habitan el cuerpo de Shino y de todos los Aburames; son negros, alargados y con 6 patas.
* "Byakugan" es la técnica de línea sucesoria que utiliza el clan al que pertenece Hinata (Hyugas) con el que pueden ver mejor que lo normal y en un radio de 360º excepto por un punto ciego en la parte de atrás de la cabeza.

Voy a empezar a subir este fanfic todos los miércoles. Espero que el miércoles que viene continúen leyéndolo cuando suba el capítulo 2. Todos los comentarios y reviews son bienvenidos y me sirven muchísimo.