Los personajes no son mios, sino de Stephenie Meyer

[Esme junto a sus 3 hijos: Emmett, Bella y Jasper son una familia de vampiros. ¿Qué pasará cuando Esme decida casarse con un humano? B/E E/R J/A]

bueno aqui va mi 3er fic...

espero que les guste.

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Blood Secrets.

Bella POV

No se como comenzar la historia de mi extraña familia, quizá será mejor que me presente. Mi nombre es Isabella Marie Swan y soy un vampiro de 545 años.

Claro que físicamente tengo mis 17 años eternos y quien me condenó a vivir esta existencia fue mi propia madre: Esme Swan. Ella fue transformada cuando tenía 30 años, dejándonos huérfanos a mí y a mis hermanos. En esa época mi mellizo Jasper y yo teníamos 5 años y mi hermano mayor Emmett tenía 7 años.

Cuando tenía recién cumplidos los 17 años con mis hermanos fuimos en temporada de caza a los bosques para aumentar la colección de osos de Emmett. Esa excursión no resultó como debía ser y en vez de ser los cazadores fuimos las víctimas. Un oso pardo atacó a Emmett dejándolo casi muerto, y haciéndonos a Jasper y a mi varias heridas. Con mucha tristeza tuvimos que dar por muerto a nuestro hermano y corrimos de regreso a casa, pero, para nuestra mala suerte, un puma olió nuestra sangre y fue a darnos caza. Mamá apareció en ese momento, intentó ayudarme, pero la detuve y le supliqué que salvara a mis hermanos primero. Ella me hizo caso e inició el proceso de transformación en ambos y volvió a donde yo estaba para salvarme a mí, pero mis heridas eran graves y antes de que ella llegase mi corazón se detuvo. Mi madre no se dio por vencida y, no se como, me trajo de vuelta a la vida dándole suficiente tiempo para inyectarme la ponzoña.

Mamá nos enseñó a alimentarnos de animales para tratar de llevar una vida casi "humana", pero claro con mis hermanos hemos tenido tropiezos en el camino, los únicos de la familia que nunca a probado la sangre humana son mamá y Emmett.

Descubrimos que algunos de nuestra especie teníamos poderes y le pedimos a un viejo amigo de la familia, Eleazar quien puede ver los poderes de los demás, que nos dijera si alguien tenía alguno. Resultó ser que Jasper podía controlar las emociones y era un escudo físico único, y por otro lado estoy yo que puedo controlar las acciones de las personas y soy un escudo mental. Eleazar nos explicó que esto se debía a que los pocos mellizos o gemelos vampiros que habían eran todos espejos y siempre hacían lo contrario al otro. Gracias a nuestros poderes somos respetados incluso por los Vulturi, quienes no se atreven nisiquera a hacernos enfadar.

Siguiendo con la farsa de ser humanos nosotros vivíamos como ellos, íbamos al instituto incluso, pero antes de que los humanos descubriesen que no envejecemos nos íbamos, quedando como un aterrador recuerdo para ellos ya que digamos que no somos tan agradables con ellos.

En estos momentos nos encontrábamos en Forks, un lugar terriblemente lluvioso y oscuro, perfecto para nosotros.

Estábamos sentados en el sofá del salón, con Jazz veíamos TV, mientras que Emmett estaba concentrado con su nuevo juego de video. Tenía sentado a uno a cada lado.

-Bells, ¿sabes a donde se fue mamá? -preguntó Emmett.

-Le pidieron que restaurara una casa en Chicago -respondí indiferentemente.

-Debe estar muriéndose de aburrimiento -Jasper pasó un brazo por mi espalda y me abrazó.

-El sol la debe estar volviendo loca -coincidí- pero aunque solo pueda trabajar de noche a ella le gusta su trabajo.

Escuchamos un auto desviándose al camino que conducía a la casa.

-Debe ser ella -Emmett puso cara de falsa tragedia- al fin se acuerda que tiene familia luego de 2 meses.

Le pegué un codazo.

-Cállate -me reí entre dientes.

-Mamá está yendo bastante lento... ella no conduce así -comentó jasper.

Escuchamos el auto detenerse en la entrada y, sorprendiéndonos a los 3, las 4 puertas se abrieron seguidas de una voz infantil, casi chillona.

-¡tu casa es enoooorme! –gritó.

Luego siguió la voz de mamá.

-no es para tanto, la casa en Vancouver es más grande –respondió.

Emmett se rió sonoramente y gritó hacia fuera con burla:

-¡mamá, ¿Qué hablamos sobre la modestidad?!

Los 3 nos reímos. Jasper olfateó y se calló de repente.

-humanos… -siseó y apretó la mano que tenía en mi hombro.

Las puertas del salón se abrieron y mamá entro en el seguida de 4 humanos. Las chicas estaban sonrojadas, mientras que los corazones de los 4 latían muy deprisa, se me hizo agua la boca.

Fue Emmett el que rompió la tensión que se había creado en el momento.

-¡mamiiii! –gritó emocionado.

Corrió hasta donde ella y la abrazó, haciéndola girar en el aire.

-Emmett…, hijo,… necesito… aire –casi se me escapa una sonrisa, eso lo decía para aparentar ser humana.

Por el rabillo del ojo me miró, suspiré y entorné los ojos mirando a mi hermano, el cual como si hubiese recibido una descarga eléctrica la soltó.

-¡no es justo! –se colocó frente mío- no te he dado permiso para hacer eso.

¡No puede ser más estúpido! Habían humanos ahí, y él como si nada hace alusión a mis poderes. Iba a atraparme entre sus brazos, lo que de seguro hubiese hecho que perdiese alguna parte de mi cuerpo, pero antes de que eso ocurriera su expresión se alteró, pasando a la confusión, luego a la pena y por último puso una expresión enloquecida.

Le sonreí abiertamente justo en el momento en que Jasper se colocaba al frente mío, tapándome de la vista de Emm.

-¿algún problema con mi hermanita? –puso una expresión que prometía violencia.

El terror y el pánico afloraron en el rostro de Emmett, pero yo no quería eso, lo controlé un poquitito, guiñándole un ojo a Jasper para que me siguiera el juego. Emmett sonrió, este era el fin de su dignidad.

-Jazz, por supuesto que no tengo problemas –esa era la voz más afeminada que le había escuchado, lo aguijoneé un poco más- y ahora iré a ponerme el vestido que elegimos para el castigo ya que yo perdí la apuesta.

Y con eso se fue, lo humanos tenían variadas expresiones y mamá nos miraba con reproche.

Aún controlábamos a Emm así que…

-uno –dijimos al unísono- dos –comenzamos a sonreír- tres –lo soltamos

-¡demonios! –se escuchó el grito de Emmett desde el patio seguido de un torrente de blasfemias.

No pudimos más y rompimos en risas. Jasper calló apoyado contra el sofá mientras que yo estaba pataleando en el suelo.

-eso no estuvo nada bien –murmuró mamá, pero ella también se reía silenciosamente.

Nos pusimos de pie.

-será mejor que valla a ver que cumpla la apuesta –me dijo con un guiño jasper, al tiempo que me sonreía.

Escuche como uno de los humanos hacía sonar sus dientes por la ¿ira? …. Que extraño.

-con su permiso –les murmuró educadamente a los humanos con la típica cortesía del siglo XV

-hija –me llamó mamá.

Fijé mi vista en los humanos quienes todavía me observaban con los ojos abiertos por la sorpresa.

-mamá ¿Quiénes son? –pregunté con inocencia.

El latido de los corazones de los humanos, que ya se había normalizado, se aceleró nuevamente. Vi al mayor de ellos, un hombre rubio y alto de unos 32 años, tragar saliva nerviosamente.

-hija, debo decirte algo… -luego rectificó- a ti y a tus hermanos –puso expresión seria- mejor deberías sentarte.

Le obedecí, pero pregunté con obstinación.

-¿Quiénes son? –mi voz se tornó dura.

Mamá tomó la mano del hombre rubio, oh no, esto va mal, inhaló aire y dijo:

-Bella, este es mi esposo, Carlisle Cullen –abrí los ojos presa del pánico- él y sus hijos han venido a vivir con nosotros.

Bueno aquí está el

primer cap.

En el próximo pondré la visión de

Edward sobre todo esto…

Esu

Kissus

Alice Eulberg~