Rayos, lo sé mátenme, soy desordenada, me disculpo una y mil veces, peor cuando me da la inspiración no puedo dormir hasta escribirlo, el capítulo del otro fanfic "Juntando a Naruto con Sasuke. Misión de rango s" llevo la mitad del capítulo, lo publicaré el lunes, porque ahora voy a ir a una zona donde no tengo internet... Bueno traigo este fanfic que se me ocurrió inesperadamente no sé si será de su agrado... espero que sí, sin más que decir, pasen, lean, disfruten y porfa dejen reviews si pueden ^^
HISTORIA DE MASASHI KISHIMOTO. YO SÓLO USO A SUS PERSONAJES PARA SATISFACER LOS DESEOS FUJOSHIS. :3
HISTORIA YAOI (HOMBRE X HOMBRE) SI NO TE GUSTA, NO LEAS ;)
100% MÍA, SE ME OCURRIÓ CUANDO ESTABA CAMINO A MI CASA XD
HIMITSU NO SHARINGAN
~El secreto del sharingan~
Capítulo uno
Cuando la fogata se enciende.
Hace unos días todo era normal, sus ojos veían en plenitud todo lo accesible al ojo humano, y su sharingan funcionaba a la perfección si quería evitar el ataque de un enemigo. Esa mañana debería haber seguido así, sin embargo...
Los tomates, el apio, una lechuga, carne de res, algunos condimentos, té, esas eran unas de las cosas que debía obtener en los mercados del pueblo, no había tenido tiempo antes por tanta misión que impusieron, ahora el refrigerador estaba vacío así que no podía simplemente pasar por alto este hecho. Siendo así, se bañó, vistió, arregló y salió de la residencia Uchiha camino al centro de Konoha. Por esos sectores no andaba nadie, nadie humano al menos, a los minutos llegó al inicio del pueblo y vio como una mujer le decía algo a su hijo que llevaba de la mano... Desnudo. Sasuke se detuvo, volvió a mirar, sí el niño estaba completamente sin ropa. ¿Acaso esa señora era ciega? ¿El niño no tenía frío? Estaban en primavera, la cual recién había iniciado y todavía quedaban rasgos del invierno pasado, ¿cómo se le ocurría a esa mujer llevar a su pequeño niño así? cogería un resfriado. Iba a decirle algo, pero vio como dos niños corrían nuevamente sin ropa cerca de él. ¡Ni calzoncillos tenían!
—Qué diablos... —masculló. No discernía que ocurría.
Adentrándose más en la Konoha matutina siguió viendo niños correr por ahí y por allá, adultos pasar, todos desnudos, sin nada. Sasuke se sonrojó, no porque le excitara la vista, sino porque le causaba vergüenza ajena y más viendo que todos hacían como que nada pasaba. Las mujeres, las únicas vestidas pasaban, conversaban al lado de esa cantidad de personajes masculinos que al parecer consideraban Konoha una playa nudista. Lo único que faltaba era que empezaran a hacer cosas en mayor grado...
—Esto es una maldita pesadilla. —se dijo a sí mismo sobándose arduamente las sienes.
¡Rayos! ¡Podía incluso diferenciar quien estaba excitado de quien no! Y prefirió no haber tenido ojos, cuando notó como un chico se excitó cuando su "amigo" lo abrazó sonriente... ¡Él no quería saber tanto! ¡¿Qué diablos pasaba?! ¿Era el día de los inocentes y le estaban haciendo una especie de broma con un genjutsu que él no podía identificar? Siguió su camino entre sonrojado y enojado, trataba de mirar el cielo, los tejados, y aún así terminaba bajando la mirada cada vez que entraba a un mercado por uno de los alimentos faltantes en su casa.
—Nadie se da cuenta... ¿Acaso estoy soñando?
Sasuke tímido pidió verduras a un joven que atendía, era rubio, y al mirarlo de espaldas le recordaba a Naruto... ¿Él también estaría desnudo? Un extraño deseo nació en él, el capricho de ir donde Naruto.
—Esto es malo. —se dijo sobándose un hombro con pesar.
El joven le pasó la bolsa con las verduras y recibió el dinero de Sasuke, el Uchiha ni miro el vuelto estaba demasiado empeñado en mirar las caras de las personas y que su vista no bajara de ahí.
Una mano se posó en su hombro.
—¡Sasuke, buenos días! —saludó el hiperactivo rubio con su típica sonrisa que imaginaba Sasuke de espaldas a él.
Los ojos de Sasuke se abrieron grandes, su corazón comenzó a acelerarse, su capricho volvió, esa inquietud en su interior. Tragó saliva, y con calma se volvió, miró directo a los ojos del rubio y dijo un "hola" casi sin voz.
—Siempre tan amargado tú. —se cruzó de brazos el rubio. —Sasuke fue bajando la mirada, viendo el abdomen formado del rubio, bastante bien para sus doce años, se percató del sello del kyuubi, aunque eso era nimio. Con esto ya podía decir que el problema era suyo, porque Naruto estaba como siempre, no parecía no traer ropa. Sus ojos bajaron aún más, ansiosos y se toparon con algo inesperado, no podía ver cierta parte. Naruto traía calzoncillos, unos verdosos algo ajustados a su cuerpo, que le formaban un perfecto trasero y una hermosa parte delantera.
La cara de Sasuke se sonrojó completamente, y a la vez frunció el ceño, esa maldita prenda estorbaba, molestaba. Olvidó que era él quien tenía el problema de ver desnudos y tomó el inicio de los pantalones del rubio, aunque él veía que era el inicio de sus calzoncillos.
—¿Sasuke? —el vengador comenzó a tirar hacia abajo, Naruto se afirmó entonces los pantalones mirando a todos lados, la gente pasaba y algunos se quedaban mirando. —¡Teme! ¡¿Qué crees qué haces?!
Sasuke salió de su ensoñación y atinó. Ahora ya igualaba el color de un tomate maduro.
—Tenías algo ahí... Yo... Sólo... Limpié... —miró a la izquierda buscando refugio de su vista en un muro solitario, a la vez pensó que eran flojos los que atendían ese negocio, porque ya eran las ocho y aún no abrían, ¡era el colmo de la irresponsabilidad! Fue entonces cuando cayó en cuenta de que era una casa.
—No tengo nada ttebayo. —dijo mientras observaba sus pantalones por un lado, y luego se miraba el trasero para ver si tenía algo. Sasuke no pudo evitar sonrojarse a más no poder y que su mente se llenara de pensamientos no muy sanos cuando vio esos perfectos y apretables glúteos ante él.
—Creo... Que iré a dejar esto a la casa. —dijo refiriéndose a la bolsa.
—¿Ah? —Sasuke ya no estaba, se había ido tan rápido como pudo, a pesar de cierta incomodidad entre sus piernas que endurecía con sólo recordar el trasero del rubio.
—Maldición... —apretó los dientes.
Era un día de la semana cualquiera, o sea había que reunirse con Kakashi-sensei y los demás miembros del grupo. Sakura era la primera en el lugar acordado y caminaba de un lado a otro con las manos en la cintura, estaba harta de esperar, ya eran las nueve y media, se supone que se juntarían a las nueve justas, pero ni Sasuke había llegado.
—¿Y si algo le pasó a Sasuke-kun? —se preguntaba y una cara de total horror fue la que formaron sus facciones. —Sasuke-kun yo... —entonces escuchó unos pasos, sin pensarlo dos veces se le lanzó encima. —¡Sasuke-kun!
—Sakura-chan no tienes que ser tan rápida. —se rascó la cabeza el ninja.
—Tú... —listo, golpe para saludar en las mañanas de Sakura Haruno. —No te atrevas a hacerte pasar por Sasuke-kun nunca más. — Bufó y se alejó unos metros del ahora herido.
—Quien querría hacerse pasar por ese Teme. —dijo a la vez que restregaba el chichón recién nacido en su cabeza.
—¿Sasuke aún no ha llegado? —preguntó el ninja copia mirando a Naruto y a Sakura.
—¡No puede ser! ¡Hasta Kakashi-sensei ha llegado antes que Sasuke-kun! —la pelirosada no se lo creía.
Al ver esto Naruto sintió temor, había visto a Sasuke en la mañana y no parecía el mismo Sasuke de siempre.
—Ese teme... Yo iré por él. —dicho y hecho salió en busca del Uchiha. Miró en los alrededores y al final fue directo a su casa con una rapidez incomparable, después de todo era un ninja.
—¿Sasuke? —golpeó la puerta y nadie respondió. Decidió entrar por la ventana.
En la ventana se quitó los zapatos y pisó sigilosamente. En esos momentos podía perfectamente pasar por una casa vacía. Sin entender nada unos brazos lo aprisionaron por la espalda, iba a sacar un kunai para defenderse, pero enseguida reconoció el olor del Uchiha.
—¿Sasuke?
—Naruto hagámoslo.
—¡¿Eh?! ¿Qué cosa?
—Hazme el amor... Na-ru-to. —dijo a su oído con una voz tan sexy que casi no reconoce quien era.
Naruto se volvió a verlo a la cara todo sonrojado. El sharingan estaba activado.
—¿Sasuke?
Kakashi observó desde la ventana.
—¿Ya está en edad? Supongo que sí. —sonrió con su ojito feliz. Por fin algo se iba a poner divertido en la aldea.
Sasuke agarró desprevenido a Naruto, comenzó por lanzarlo al sillón de una manera bastante... Sensual, como quien hace un street dance.
—¿Sasu...? —No le dio momento de hablar, comenzó a besarlo apasionadamente, impidiéndole tomar aire, por poco ahogándolo. Naruto rojo, lo apartó y lo miró, de verdad que algo le fallaba a Sasuke para que vaya y le robe su segundo beso, ya que el primero fue con Sasuke también, aunque por accidente... Mas, los accidentes no existen... —No puedo respirar. —Lo apartó cuando el osado Sasuke iba a volver a su acción de aprisionar sus labios.
—Naruto te deseo. —se sentó sobre él, piernas abiertas, sin ningún pudor.
—¿¡Eeeeeh?! ¿Sasuke? ¡Oye! —éste comenzó a moverse provocando una fricción entre sus miembros. —¡Aaahh! Sasu...ke...
—Tú también lo deseas. —seductoramente se sacó la polera mostrando su blanca piel y sus ansiosos y erectos pezones rosados, prosiguió a bajar la cremallera del polerón de Naruto y así quitarlo de una vez. Sólo quedó con la malla ninja, y por supuesto su collar azul que destellaba según entraran rayos de luz.
La mente de Naruto quedó en blanco cuando Sasuke lamió su cuello, siguió dando beso tras beso y mordió una de las tetillas del rubio, cerca de éstas, dejó hermosas marcas por todos lados, chupetones que advertían que era su propiedad. Lo besó de nueva cuenta introduciendo su lengua hasta donde pudiera, babeándose las comisuras de los labios y al separarse conectarse por un hilo de saliva.
—Naruto... —la fricción seguía y el miembro de Naruto se levantaba. ¿Qué más podía hacer? ¡Era hombre! No podía evitar que esos toques no lo excitaran, a pesar de ser siempre cabeza hueca, era un hombre, sus instintos estaban dominándolo, su control se estaba yendo al infinito y más allá, como diría Buzz lightyear. —Naruto... —volvió a escuchar su nombre. Le subía la temperatura, pero... Ese no era Sasuke.
Aguanto sus ganas de tomarlo ahí mismo, y lo sujeto de las muñecas.
—Tú no eres Sasuke.
—Naruto, soy yo, por favor...
Naruto negó y lo obligó a pararse para luego dejarlo sentado en el sillón. Se colocó de nueva cuenta su chaqueta. Tenía calor, demasiado, y sus pantalones formaban varios pliegues debido al levantamiento inoportuno.
—Sasuke... Es Sasuke. —dijo y salió corriendo, escapando de ahí.
Kakashi, quien observaba, sonrió.
~*Himitsu no Sharingan*~
Esa tarde no hubo misiones, solo un baño con agua fría de parte de Naruto y enojo de parte de Sasuke, el cual no evitaba apretar los dientes y enterrar las uñas en el sillón. Se moría de ganas, necesitaba a Naruto, lo quería a él. Sonrió de una manera seductora y pervertida. Naruto lo satisfacería costara lo que costara.
Necesitaba un buen ramen de Ichiraku después de semejante situación. Fue y se sentó, el viejo enseguida le sirvió agregándole carne de res extra. Iba en el tercer plato cuando Iruka apareció.
—Hola Naruto ¿no hubo misiones hoy?
—No, él día estuvo raro ttebayo. —sonrió con dificultad.
—¿Cómo raro?
—Eh... Pues, no sé... Es que es algo muy raro.
—¡Hola Naruto! —Chouji, Shikamaru, Kiba y Neji ingresaron, éste último parecía forzado. —Neji perdió una apuesta así que tiene que comer cuatro platos de ramen. —rió el más llenito de los nuevos clientes.
—Hola muchachos. —Rió entonces por Neji y le dijo al viejo que enseguida le trajera uno de los cuatro platos para verlo rezongar.
—Esto... Es mucho. —Neji veía el plato y meditaba como Naruto se había podido comer tres.
—Come, que me estoy aguantando las ganas por puro verte comer a ti. —dijo Chouji a la vez que se echaba como cinco papas de bolsa a la boca.
"Pero si estás comiendo" iba a decir Neji, pero prefirió callarse y comenzar a pagar su apuesta.
El primer plato fue terminado y el pobre Hyuuga estaba que se reventaba, no podía más.
Unas manos abrazaron posesivamente a Naruto por la cintura. Éste se sonrojó.
—Na-ru-to te en-con-tré. —Anunció el Uchiha. A Chouji se le cayó la papa de la boca, Sasuke llevaba unos muy ajustados pantalones negros y una polera sin mangas con cierre en el medio, entre abierta. Sasuke tomó a Naruto por las muñecas y lo llevó hacia la pared más cercana casi botándolo en el proceso.
Neji y Kiba abrieron la boca, se sonrojaron en el momento en que Sasuke besó apasionadamente a Naruto. Cuando el Uchiha tomó la mano de Naruto llevándola a su trasero hasta Shikamaru se colocó como el ketchup.
Mientras lo besaba se encargaba de sostener la mano de su zorro, para que estuviera en el lugar "indicado" o más bien, el que él quería.
Iruka se atoró con la escena... Al viejo se le cayó el colador con el ramen... La verdad estaban causando estragos con tan caluroso beso, y era sólo un beso...
Se separaron.
—Sigamos Naruto, hagámoslo.
—Estamos en el... —tomó aire y retomó sus palabras. —Estamos en un lugar público.
—¿Y? Mucho mejor. Hagámoslo aquí y ahora. Quiero que estés dentro de mí. —se relamió los labios, y Naruto congelado, tragó saliva.
La mano de Sasuke agarró con delicadeza y deseo el miembro palpitante del rubio por encima de la ropa, deseaba que fuera por debajo. Aquello era absurdo, podía a ver a todo varón de Konoha sin ropa, nadita de ella, en cambio a Naruto siempre lo veía con ese bóxer, que aunque le quedaba bien, lo odiaba, quería ver más. Naruto se sorprendió cuando se dio cuenta que Sasuke iba en serio, quiso bajar su pantalón para sacar su miembro fuera, lo detuvo sonrojado. Sabía que sería momentáneo, así que una idea iluminó su cabeza como una estrella fugaz y besó al vengador con fiereza, aprovechó los ojos cerrados del otro para así huir. Sasuke enfurecido abrió los ojos y se hizo sonar los dedos de la mano, Naruto sería suyo de eso no había duda. Sasuke se esfumó como buen ninja prodigio que era.
—¿Ese... Era Sasuke...? —la duda estaba de más, pero Kiba no pudo evitar hacerla. El chico se veía tan ardiente, tan sexy que prendió a todos los espectadores.
Los demás asintieron.
~*Himitsu no Sharingan*~
El rubio se refugió en su casa, luces apagadas, cerró la puerta y se adentró en su habitación. Suspiró.
¿Qué diablos le pasaba a Sasuke? Un ruido se hizo presente, estaba preparado para agarrar a Sasuke cuando fuese, en vez de eso una sombra más alta se presentó.
—¿Kakashi-sensei?
—El mismo.
—¿Qué hace aquí?
—¿Te escondes de Sasuke?
—Sí, no es que le tenga miedo, ¡pero enloqueció! —se sonrojó al recordarlo, entonces su mano aparentó que apretaba algo. El trasero de Sasuke no estaba nada mal. Kakashi tosió y Naruto regresó del planeta "I love Sasuke".
—No es que haya enloquecido. Simplemente su sharingan adolescente se activó. —sonrió con su ojito feliz.
—¿Cómo?
—Este es un tema del que quizás no sabes mucho, la abejita y el abejito, aunque puede funcionar entre dos abejitos...
—¡Al grano Kakashi-sensei!
—Entiendo.-tomó aire y siguió. —Sasuke está en una edad en la que el cuerpo pide... Pues eso, ya sabes, la adolescencia, las hormonas...
—¡Al grano!
—Sí, pues en los miembros de clan Uchiha esto es un poco distinto, dudo que Sasuke lo sepa porque era muy pequeño cuando perdió a su clan y no iban a decirle estas cosas a un niño. La cosa es que en el clan Uchiha cuando se llega a cierta edad, más bien cuando su cuerpo está listo para juntarse con otro, pero entonces no ocurre nada, el sharingan trata de ayudar al cuerpo, por eso empieza a provocar ciertos cambios.
—¿Cambios?
—Trata de ayudar a su portador ¿entiendes? El primer paso al que recurre el sharingan es el de mostrar el sexo de la persona que te gusta sin ropa.
—¡¿Ehhh?! —esto cada vez era más y más confuso.
—Escucha, el sharingan te dejará ver a todos los del sexo que te gusta sin ropa, y a aquel o aquella que tú ames, o que te guste, con quien tengas deseo o algún tipo de sentimiento será al único que no verás completamente sin ropa. El sharingan te cubrirá la parte que tú más desees ver.
—Ah, entonces si alguien lo ama a usted y tiene el sharingan, supongamos que lo que más anhela esa persona es ver su cara, ¿el sharingan no lo dejará verlo?
—Correcto, que listo estás hoy. —Lo felicitó irónicamente, Naruto se empuchó e iba a responder pero Kakashi se adelantó. —Si esa persona aun así no se da cuenta de sus sentimientos el segundo paso del sharingan será usar una de sus personalidades.
—¿Cómo? —Naruto alzó una ceja.
—El sharingan, buscando que su portador por fin libere sus deseos lo forzará a usar una personalidad que tiene muy dentro de él o ella. Haciendo que esta personalidad se explote, pero no solo será una, pueden ser muchas, hasta que logre tener al que quiere.
—¿Ah? Bien, creo que entiendo... Pero funciona con varios al parecer, porque Sasuke la uso conmigo...
—No, solo funciona con la persona que desea.
—Entonces... —algo dentro de Naruto, se sentía caliente, ardía como la lava de un volcán... Eso significaba...
—Naruto. —dijo una voz en las sombras. Los ojos azules relucieron al escuchar su voz y Kakashi sintió que estorbaba.
—Bueno creo que me voy.
—Espere Kakashi-sensei... —unos labios le impidieron el habla.
—Hagámoslo. —sonrió el Uchiha.
Kakashi ya había salido cuando el azabache lanzó al Uzumaki a la cama. Sus besos, todos eran el mismo paraíso y a la vez el infierno, no había mayor placer que sentir la lengua de aquella fiera desenfrenada sobre su piel, pero... ¡Siempre el pero!
—Basta. —lo inmovilizó el chico de piel tostada.
—¿Por qué? ¿No quieres hacerlo conmigo?
—Tú, calientas mi cuerpo... —se sonrojó y luego su voz fue algo más triste. —¡No mi alma! ¡No mi corazón! ¡No eres el verdadero Sasuke dattebayo!
El sharingan que estuvo todo este tiempo activado se ocultó y los ojos negros volvieron a aparecer.
—¿Na...naruto? —el casi último miembro del clan Uchiha cayó sobre el rubio exhausto. El aprendiz de Jiraiya acarició sus cabellos, eran tan sedosos.
—Tranquilo Sasuke, ya pasó.
Unos lamentos lo sacaron de sus delicadas caricias.
—¿Sasuke? —levantó su rostro, y sin importar la oscuridad de la habitación vio aquel rostro lleno de lágrimas.
—Naruto no me quiere. —caían las lágrimas. El rubio no evitó su repentino grito de terror... Sasuke estaba llorando como nenita, esto sí que era denigrante para el pobre Uchiha, si se viera desearía matarse una y otra vez para borrar aquella imagen...
—¡Kamisama dime que es una broma! —Naruto se aferró al marco de la ventana temblando y en la cama Sasuke seguía llorando como niño chiquito.
—Esto será... Complicado. —A Kakashi le caía una gotita al ver a Naruto muerto de miedo y a Sasuke como bebé...
~*Himitsu no Sharingan*~
Espero que no piensen que cambié la personalidad de Sasuke, sólo la alteraré a lo largo del fic para atraer el humor de esta grandiosa pareja que dicen shonen, pero yo y muchos (as) decimos que es yaoi totalmente jajajaja
Espero que les haya gustado, como dije antes la inventé mientras caminaba hacia mi casa, bueno departamento xD
La primera personalidad fue ardiente... la segunda al parecer será tierna... jajaja ya vendrán más, ¿cuál le gustará a Naruto? Se llevarán una sorpresa con eso, y aunque pregunten, me disculpo pero no daré spoiler, quiero que lean y disipen dudas jajajaja :3 :3 :3
GRACIAS POR LEER ^^ SI PUEDES DEJA UN REVIEW :3 :3 :3 Hasta el lunes, o la próxima akjhgajka
El lunes vuelvo a clases TT-TT...
...
Actualmente: Lo he editado y corregido ;) (11/12/16) Sí, volveré con esta historia xD
