La Hija De Louis

Ester es el nombre de MI hija, la única persona que quedaba en el mundo del que estaba seguro de Amar.

Recuerdo el día que nació, Dios me regalo su vida… pero se llevo otra muy importante consigo.

Ángel, mi esposa, la primera mujer de la que alguna vez estuve enamorado, la única mujer que alguna vez ame… Se había ido, para siempre.

—No me dejes —Le pedí desesperadamente —No nos dejes —corregí.

—Nuestra hija… Amala por los dos —dijo ella —Ella es el fruto más hermoso de nuestro Amor.

—Por Favor —le suplique con lagrimas en los ojos, porque parecía estar rindiéndose —No te despidas de mi.

—Solo será un ''Hasta Luego'' —dijo con una suave sonrisa en los labios.

Levanto su mano con delicadeza y la coloco en mi rostro. Yo apreté su mano más a mí y cerré los ojos, no me quería perderme nada de su calidez.

—Louis —dijo débilmente —Solo tendré paz... Si me prometes que serán felices.

—Te lo prometo —le respondí de inmediato con las lágrimas corriendo por mi rostro, esa era su última voluntad, y unos segundos después su mano resbalo de mi rostro… Sin vida.

Solloce inconsolable, los médicos me apartaron para intentar reanimarla, pero yo sabía que sería inútil, su corazón se detuvo para nunca más volver a latir.

En ese momento nuestra hija empezó a llorar, era como si llorara la muerte de su madre, no intente ocultar mis lagrimas mientras me acercaba a su cubículo, era el ser mas pequeñito que había visto en mi vida, el único pedacito de ella (y mío también) que me quedaba, al verla se robo mi corazón tan rápido como Ángel en su momento, y allí fue cuando supe que era la única por la que valía la pena salir adelante.

Abrí los ojos y volví al presente; uno en el que habían pasado 10 años, y celebrábamos el cumpleaños de Ester, era una reunión pequeña donde solo estaban los chicos con sus esposas e hijos.

Al levantar la mirada vi que mi hija corría hacia mí, abrí los brazos y la cargue.

—Papi —dijo Ester mientras colocaba su manita en mi rostro —¿No quieres jugar conmigo a las escondidas?

Mi hija había sacado mucho de su madre, así que sentía que no la había perdido del todo.

Lo único aparte de que fuera sana, que le había escuchado decir a Ángel sobre la bebe fue que le gustaría que tuviese mis ojos… Y su deseo se cumplió.

Ester tenía unos grandes ojos azules, que lucían muy hermosos delante de unos largos cabellos enrulados que le llegaban por debajo de los hombros, como los de su mamá, aunque a diferencia de ella eran del color de mi pelo.

De todos los niños allí reunidos ella era, no solo la mayor, sino también la más alta.

—No lo sé mi Estrella (su nombre real) —le respondí, mientras jalaba con suavidad uno de sus rulitos para que rebotaran —Muy pronto será oscuro y alguno de tus primos se podrían perder.

"Primos" Cuando los bebes empezaron a llegar al grupo, todos los presentábamos entre ellos como primos, y nosotros nos presentábamos como sus tíos, porque al fin de cuentas éramos una gran familia.

En la carita de Ester relucía la insistencia cuando dijo —Anda papi, solo una vez.

Fingí que lo pensaba seriamente por un momento —Esta bien —Acepte.

—¡Sii! —Celebro ella —Vamos a decirle a todos.

Se bajo de mis brazos y me arrastro hacia la reunión, mientras se subía a una silla y se apoyaba en mi hombro para buscar equilibrio, exclamo —¡Necesito su atención por favor! —Todos nos miraron y Ester se acobardo un poco, por lo que se apresuro a decir —Mi papá les quiere decir algo.

Todos rieron y yo reí con ellos.

—Okey vamos a hacer un último juego antes de cantar cumpleaños, vamos a jugar a las escondidas.

Todos los niños gritaron emocionados mientras que los chicos intercambiaban miradas y las chicas miraban al cielo preocupadas.

—¿Seguro Louis? —se quiso asegura Bianca la esposa de Niall —Está a punto de oscurecer, parece que empezara a nevar de un momento a otro, y los peques se pueden perder.

—Lo sé Bi, lo hago solo por petición de Ester —le susurre —dile a los demás que rodeen el parque para que entre todos vigilen a los niños.

La compasión embargo a los ojos de Bianca y dijo —Esta bien —Se fue en dirección a los chicos y en el camino se detuvo a decirle a su hijo —Siham ve con tu tío Louis.

—Si mami —Dijo y se acerco corriendo.

Yo me perdí momentáneamente en mi dolor, porque mi hija JAMAS le diría esas palabras a su madre.

—Papi —susurro Ester —ya están todos, creo que puedes empezar.

—Tienes razón —le respondí en complot —Las reglas son —Dije en voz alta —Que nadie se puede salir del parque, todos se quedaran dentro de él, ¿entendido?

—¡Sii! —Corearon todos los pequeños.

En el medio del parque había un árbol gigante, así que me dirigí a él y le dije a todos los niños.

—Esta es la base, si los encuentran se quedaran acá tranquilitos, ¿Entendido?

—¡SII! —Gritaron al unisonó.

—Bien entonces… ¿Quién va a contar?

—¡TUUU! —Dijeron todos al mismo tiempo.

Levante las cejas y se me abrió un poco la boca de sorpresa.

—Está bien —acepte empezando a reír. Todos y me refiero a TODOS se rieron de mí, no sabía cómo pero siempre terminaba siendo el payaso de la reunión.

—Una cosa más —dije —Cuando sus padres los llamen, quiero que todos salgan de sus escondites y se dirijan a ellos, ¿Les quedo claro?

—¡Si, si!, Woow, ¡Ya! —Gritaron todos emocionados

—Eso va especialmente dirigido a ti —le susurre a Ester en el oído.

—¡Papi! —protesto ella, se bajo de la silla y antes de unirse a sus primos la oí murmurar —¡Son las escondidas!

La mira con suspicacia y me di la vuelta, de cara al árbol.

—1, 2, 3, 4 —Empecé a contar en voz alta, los niños gritaron, rieron, chillaron y salieron corriendo.

—4, 5, 6, 7 —se empezó a hacer el silencio en el parque.

—8. 9, 10 ¡Listos o no allá voy!

Di media vuelta y esbocé una sonrisa al ver a Thomy (el más pequeño del grupo de 4 años) escondido detrás de mi ocultándose solo con sus manitas.

Harry se destornillaba de la risa desde su posición, mientras que su esposa intentaba contener la risa.

—Vamos Thomy te encontré.

—Oh no —dijo con su vocecita de bebe muy sorprendido.

Di una vuelta alrededor del árbol y encontré a Liz hija de Zayn de 9 años.

—Por favor cuida a Thomy, está en la base.

—No, aquí no está —dijo ella

—¡¿Thomy?! ¡Thomy! —Lo llame mirando a todas partes, y lo vi caminando hacia los columpios, corrí a atraparlo y me dijo —Thomo, aquí esta Trebol.

—¡Thomy! —Protesto Trebol saliendo de su escondite —¡Nadie te pregunto!

—Trebol, ve al árbol y llévate a Thomy, no dejes que se vuelva a escapar de allí.

—Ok —dijo a regañadientes y se fue refunfuñando a reunirse con su hermana.

Al lado de los columpios estaba un arbusto en el que encontré Magalie.

—Siempre la encuentran porque no puede contener la risa —le dijo Liam a su esposa.

—Al árbol, vamos —le dije a Mag.

Mire al cielo, la temperatura estaba descendiendo muy rápido y aun faltaban por aparecer Katy y Siham hijos de Niall, y Ester.

Me dirigí a la pequeña casa de juguete, donde cabían cómodamente 4 niños sin problemas, me asome por la ventanita pero estaba vacía. Peine el perímetro con la vista y me tope con la mirada extrañada de Niall, mire a su esposa y también me miraba igual. La mayoría tenían los ojos en mí con miradas curiosas, y entonces escuche un golpe seco dentro de la casita. Me agache y abrí de golpe la puerta, y al meterme a gatas me encontré de cara con Siham, este me miro boquiabierto y soltó un —Oh oh

—¡Aja! ¡Estas fuera!... Buen escondite —le dije palmeando su hombro.

—Bueno, no podía colgar del techo por siempre —dijo con elegancia

Salimos de la casita y entendí porque sentía mis cuartos traseros que quedaron expuestos a la intemperie estaban tan mojados y fríos de repente, estaba nevando y demasiado fuerte para mi gusto. Siham me tomo del brazo impresionado y salimos corriendo al árbol donde ya estaban reunidos todos.

—Louis mejor nos vamos moviendo a la cabaña —dijo Zayn

—Ok, ¡ESPEREN! ¿Y Ester? ¿Y Katy? —pregunte azorado al ver que no estaban.

Liam, Sophia, Michi y Jenny se llevaron a casi todos los niños al sentir la tensión del momento.

Siham que se había quedado con nosotros fue el que respondió —Siguen en sus escondites, como aquella vez que… ¿Se acuerdan de aquella vez que jugábamos a las escondidas en el jardín de mi casa y cayo ese palo de agua de repente y Katy, Ester y Liz no se movieron de sus escondites a pesar de que se estaban mojando…?

—¡Siham! ¿Qué haces aquí? —Le recrimino su padre —Ve con los demás a la cabaña.

Mi corazón se acelero con angustia recordando ese día y pensando que ahora estábamos en una situación mucho peor.

—¿No falta nadie más, verdad? ¿Solo ellas dos? —pregunto Bianca.

—Si eso creo —dijo Zayn —De todas maneras iré a la cabaña a confirmarlo y de paso enviare a alguien con mantas y bebidas calientes.

—Busquemos a las niñas —le dije a los que se quedaron.

—Yo te ayudo —dijo Harry.

—Vamos a separarnos —aconsejo Niall intercambiando una mirada ansiosa con su esposa.

—Yo también ayudare —se apresuro a decir Siham y salió corriendo.

—NO —Dijo Niall y lo agarro por la capucha de su chaqueta —sigue a Zayn a la cabaña.

—¡Pero papá! —protesto, pero se calló al ver la mirada severa de su madre, y se fue corriendo tras Zayn.

—¿No vieron donde se escondieron? —los apure.

—Lo siento, pero no me di cuenta —se lamento Bianca apretando con fuerza su chaqueta a su cuerpo conservar el calor —todo se volvió un poco caótico y estaba preocupada mirando el estado del cielo.

—Yo tampoco vi nada —dijo Niall —Vamos a separarnos ya, no hay mucha luz, la nieve está cayendo sin parar y los vientos están fuertes, nos hará la búsqueda mas difícil.

—¡Ester! ¡Katy! ¡Salgan Ya!

Revise todos los escondites que me faltaban por buscar y repase los que ya había revisado.

Harry paso a unos 4 metros de mi y apenas pude escuchar un débil —¡Chicaas!... —Muy malo, Esta tormenta de nieve era tan fuerte que si no estábamos codo a codo no nos podríamos escuchar. ¿Cómo nos iban a escuchar las niñas?

Vi a los chicos acercándose a mí con cuidado por el hielo resbaladizo que cubría el suelo.

¡Qué frustración y miedo sentía! Examine las esculturas de figuras geométricas que estaban en el parque bajo las cuales se podían esconder los niños pero estaban vacías. Resople molesto y me levante para recibir a los chicos.

—¿Nada? —pregunte desmotivado al verlos.

—Nada —dijo cada uno de ellos.

—¿Están seguros de que están aquí en el parque? —Pregunto Harry con preocupación.

—Estoy segura de que están aquí en el parque —dijo Bianca aunque no sonaba muy segura.

—Cierto, nadie salió del parque ellas deben estar por acá —Corroboro Niall en intento por infundirle ánimos a su esposa.

—¡Ester! ¡Katy! ¿Me escuchan? —grito Harry.

—Deberíamos llamar a la policía —sugerí empezando a entrar en pánico —y a una ambulancia tal vez —las niñas ya tenían demasiado tiempo expuestas a las bajas temperaturas ¿quién sabe dónde?, lo peor que les podía pasar era la hipotermia, debíamos encontrarlas YA.

—Si —dijo Bianca con voz rota —buscare… tratare de contactar… una ambulancia o la policía... —dijo sacando su celular con manos temblorosas.

—Tendremos suerte si las líneas no están caídas —apunto Harry.

Niall se tomo del cabello —tenemos que seguir buscando, ir por los demás para que nos ayuden —retrocedió unos pasos y se cayó.

—¡Auch! jajaja —escuchamos en shock, y luego del montículo de nieve con el que Niall se había tropezado salió Katy sacudiéndose la nieve de encima y gritando —¡Papi! —su abrigo blanco se camuflaba con la nieve.

—¡Hija! —Exclamo Bianca —soltando el celular y llevándose las manos a la boca para reprimir un sollozo.

—¡Katherine Belle Horan! —dijo Niall con voz que trataba de sonar severa pero que se escuchaba quebrada —¿Por qué no contestaste?, te hemos llamado desde hace rato —y la abrazo.

—Papi —dijo Katy acariciando la cabeza de su padre —No te escuche, lo siento —y le devolvió el abrazo.

En ese momento llego Sophia con dos tazas de chocolate caliente y dos cobijas.

—Son para las niñas —dijo.

Bianca tomo una cobija, beso a Katy en la mejilla y la arropo fuertemente como un burrito, Katy saco con dificultad los bracitos de su cobija para tomar la taza humeante que le ofrecía Sophia.

—Ester todavía no aparece —le susurro Harry a Sophia.

Sohia se llevo una mano para cubrir su boca y me miro espantada.

Yo en cambio miraba a Katy, a quien obligaban a beberse el chocolate caliente, me arrodille a su altura.

—Katy —dije tratando de aparentar una tranquilidad que no sentía —¿No vistes donde se escondió Ester? —Si alguien lo sabia esa era ella, su mejor amiga de travesuras.

—Si la vi pero ¿si te digo no es trampa? —pregunto con inocencia.

—Mi amor, olvídate de eso ¿Sabes donde se escondió? —Le pregunto Bianca.

Katy se limpio el chocolate de la boca con la manga de su chaqueta (que se mancho por cierto) antes de mirar por encima de mi hombro y señalar el tobogán que tenía una casita cuadrada en el tope —La vi subir a esconderse en la casita del tobogán.

Suspire desanimado, ya había revisado allí antes y dentro no estaba nadie. Pero sin pensarlo más me apresure en la dirección que ella señalo y me subí directamente por tobogán a la parte superior y me asome de nuevo en la casa (en mi prisa algo me golpeo la frente)… Vacía.

Me mordí el labio tratando de contener las lágrimas que empañaban mi visión. "Nunca la encontrare" pensó la parte desolada de mi, que luchaba con la otra parte determinada que decía "busca indicios que te digan a donde fue".

Pero no veía ninguna pista, solo la nieve que había entrado a la casita y cubría el suelo de esta uniformemente, lo que me indicaba que Ester se había marchado de aquí antes de que empezara a nevar, analice mientras me sobaba la frente ¿Con que rayos me golpee?

Retrocedí para bajar de allí cuando mi cabeza se golpeo con algo desde atrás. Me puse de rodillas para ver qué era eso y me quede helado al notar que era el relicario de Ester, ella nunca se lo quitaba era un regalo de su madre ¿Qué hacia colgando del techo de la casita? Y ¿Cómo no lo vi al entrar?

Mire para arriba a las ramas del árbol que estaban sobre mi cabeza tratando de ver si Ester estaba allí encaramada ¿Se le había caído?

No la vi por allí, tome el relicario y al jalarlo escuche un —Ahhh —de dolor.

Toda la nieve que estaba sobre el techo de la casita cayó sobre mí cuando mi hija se incorporo de su escondite donde estaba recostada boca a abajo. Sus ojitos azules me miraron con reproche mientras masajeaba su cuello.

—Ester —Gemí y me resbale de espaldas por el tobogán, deslizándome hasta el suelo.

Su carita se lleno de preocupación al verme caer, se bajo con cuidado del techo, y se deslizo por el tobogán para aterrizar a mi lado. Limpio las lagrimas de mi rostro y me abrazo.

La rodeaba con mis brazos a la vez que las lágrimas se deslizaban por mis mejillas, y al igual que hizo Katy con Niall, Ester me acaricio la cabeza para reconfortarme.

—No te encontraba —balbuce, trate de recuperar la compostura —si te hubiese perdido… —comencé, pero ella me interrumpió —Eso no me hubiera apartado de ti —Aseguro a la vez que apretaba su relicario contra mi pecho.

Sophia se nos acerco y le dio una taza de chocolate caliente a Ester que hice que se tomara mientras la cubrían con una manta.

Sophia me pregunto con la mirada si Ester estaba bien, observe a mi hija que miraba distraídamente al parque y preguntaba —¿A dónde se fueron todos? —le asentí a Sophia.

—Se fueron a refugiar a la cabaña por la tormenta —le dije con una mirada cargada de intención.

Ester evito mi mirada y sorbió con fuerza su bebida para ahogar mi regaño.

—Hay un cumpleaños que celebrar ¡vamos! Adentro están todos ansiosos por comer torta —Anuncio Sophia con entusiasmo para aligerar el ambiente.

Ester le sonrió a su tía y mirándome me dijo —¡Vamos papi!

Nos levantamos y nos encaminamos a la cabaña. Su manito se cerró en torno a la mía y no la soltó en todo el camino, claro porque me estaba arrastrando.

—¿Cómo está Katy? —le pregunte a Sofi.

—¿¡Que le paso a Katy!? —Pregunto abruptamente Ester derrapando sobre el suelo, la sostuve antes de que se cayera.

—Está bien, ni siquiera tiene fiebre —aseguro Sophia —lo que paso fue que se escondió bajo un montículo de nieve y nos dio un susto porque no aparecía por ninguna parte.

—Uff que susto, que inconsciente es esa niña —dijo con desaprobación.

Nos la quedamos viendo con cara de "Mira quién habla".

Al llegar a la cabaña el alivio recorrió el rostro de todos ''Ester'', ''Estas Bien'' o 'Ya apareció'' exclamaron.

—Estoy bien —dijo Ester —y las buenas noticias son que… YO GANE LAS ESCONDIDAS.

—JAJAJA —todos rieron y se relajaron mientras que los pequeños le aplaudían o se quejaban —Bueno vamos a cantar cumpleaños —Dijo Michi la esposa de Harry.

Subí a Ester a una silla y le cantamos cumpleaños —"Cumpleaños Ester, te deseamos a ti…", —todos aplaudieron y gritaron —pide un deseo —le recordaron sus primos.

Ester cerró los ojos y susurro —Deseo que mamá este Orgullosa de mi —y apago las velas.

—¡Viva! —festejaron todos cuando soplo las velas. Mire a mi hija con Orgullo, de que a pesar de nunca haberla conocido, siempre tenía presente a su mamá.

—¡Ya estas vieja! —le grito Trebol.

Zayn le dio un coscorrón en la cabeza al tiempo que Ester le gritaba riendo —¡Cállate envidioso!

Trebol parecía querer responder, pero vio con el rabillo del ojo a su padre vigilandolo y se resigno a tomar el pedazo de pastel que le pasaba Jenny.

—¿Quieres chocolate caliente o refresco? —preguntaba Liam sirviendo las bebidas a los niños que se amontonaban a su alrededor.

Mire alrededor mientras la chicas se encargaban de cortar la torta y los cotillones, mientras los chicos tomaban fotografías y los niños se divertían; La alegría y el amor estaba en todo aire, A Ester nunca le faltaría nada de eso.

Ester recostó su espalda en mi pecho y me susurro —¿Estás bien papi?

—Estoy Orgulloso de ti —le respondí con rapidez mientras la rodeaba con un brazo.

Ella sonrió complacida, levanto su relicario a la altura de nuestros ojos y lo abrió.

En un lado había una foto donde salíamos Ángel y yo, y en el otro lado salía su madre sola.

—¿Y ella? —pregunto Ester acariciando la foto de su mamá.

—Ella también está muy orgullosa de ti.

—Y de ti también papi —dijo Ester.

La di un beso en la mejilla a mi niña. Aunque Ángel se fue aun le sigo dando las gracias por haberme dejado con una hija increíble.

Y Recordé sus últimas palabras, acaricie su foto y les dije a ambas —''Somos felices''.

FIN

Esta historia se me ocurrió en el 2012, como Directioner en esa época buscaba fanficts de 1D y todos los que habían eran solo de Harry y Zayn y los temas eran de amor. Así que siendo Louis uno de los que menos se escribía, y siendo mi debilidad, decidí crear yo misma una historia que tratara sobre una clase de amor diferente.

PD: La niña de la foto es Kristina Pimenova, así me imagino a Ester.

Me puedes contactar a mi twitter: TrueAleCriollo