[Es una``historia´´ de amor en la cual Hermione renuncia a todo por el amor y acaba siendo mala. Espero que os guste, lo siento si convierto a la Hermione siempre buena y realista en alguien algo un poco mala...pero por amor a veces haces hasta lo imposible.
Es mi primera ``historia´´espero que os guste :)
Forget&Forgive]
A pesar de que le dolía el hecho de que se estuviera liando con Lavander le quería….o al menos eso pensaba ella, o tan solo le gustaba o lo que fuera. Lo que importa es que le dolía que no fuera ella la que besaba sus dulces y carnosos labios o acariciaba su cuerpo ahora mas firme y perfeccionado que cuando le conoció y no era mas que un crio que se reía de ella.
Ahora era todo un adolescente fuerte, cuadrado gracias a la edad, aunque ahí siguieran sus pecas que tanta gracia le hacia.
Se levanto de la cama y se dirigió al baño para ducharse. Un rato después una muchacha de formas ya muy sensuales y atractivas salió de la ducha y se miro al espejo.
Había dejado de ser la mojigata del grupo y de la clase. Aunque siguiera siendo la empollona su cuerpo no decía ya eso, el tiempo había hecho su efecto al igual que la edad y las hormonas.
Sus curvas eran muy prominentes y el pelo ya ahora mucho mas largo y más cuidado le llegaba hasta la cadera y cuando se lo alisaba le llegaba hasta los glúteos.
Se secó y se sonrió a si misma en el espejo, sabia que aquel día seria especial, lo notaba y estaba nerviosa. Era sábado así que no tenia porque ponerse uniforme. Saco del armario unos leggins negros con estampado de flores negras y una camiseta con un solo hombro negra también. Se puso sus zapatos de tacón azules oscuros y se arregló el pelo en una coleta alta que se la medio aliso.
El maquillaje era muy natural apenas si se notaba, cogio su varita la caual la guardo y salio de la habitación rumbo al Gran Comedor.
Al bajar las escaleras vio que sus amigos no la esperaban;-Seguro que Ron se moria de hambre-,dijo riéndose y bajo sola al GC.
Al entrar en el GM todas las miradas se voltearon hacia ella y no era para menos, el cambio había sido tan drástico como del día a la noche y le sentaba de maravilla. No tardo demasiado en sonrojarse y rápidamente fue a sentarse con sus amigos que estaban riéndose de la cara que los chicos habían puesto.
-vaya, hoy has roto con la pana-dijo Harry riéndose y bebiendo un trago de jugo de calabazas.
-gracias Harry y buenos días chico-les sonrió ampliamente a todo y se sirvió unas tostadas un vaso de café.-que tal estáis todos ?-pregunto a sus amigos los cuales no tardaron en contestarle diciéndole que perfectamente y contarle sus planes de irse a entrenar algunos de ellos, algunos ir a dar un paseo o simplemente estar en la sala común tranquilos.
Mientras hablaban entretenidamente una rara sensación recorrió su cuerpo y sin saber por qué su mirada se dirigió hacia la mesa de los Slytherin, especialmente se fijo en uno; Draco Malfoy. Al parecer estaba mejor que nunca, aunque fuera de los ``malos'' no se podía negar que estaba perfectamente perfecto.
Su cuerpo muy definido y cuadrado le sentaba de maravilla, sus ojos grises como el hielo mas frio del invierno y su pelo rubio como el centeno en un mes de verano hacia que se vieran como una ángel caído.
No podía evitar pensar eso, aunque ella quisiera a Ron, o al menos ella creía eso.
No podía dejar de mirarle o no quería pero de repente algo cambio en el Draco y aparto la mirada de Blaize con el que mantenía una entretenida conversación y la dirigio hacia ella. Al verla su mirada cambio de divertida a una fría aunque sensual, como si tratara de conquistarla aunque eso fuera imposible.
Hermione no dejo de mirarlo, no iba a ser ella la cobarde asi que espero a que el aparta la mirada y si no fuera porque Blaize le dio una colleja el tampoco habría dejado de mirarla.
