HOLA!
Despues del ROTUNDO FRACASO que tuve del capitulo final de "La otra cara" aquí les tengo lo que podrían tomar como la continuación... creo que aqui ya podre escribir un poco más abierta, sin restringirme tanto en la edad de los chamakos sin qeu se vean unos pubertos, jajaja...
Ojala y les guste y porfa, REVIEWS! No me dejen caer más en depresion literal!
1. Dos mismos caminos separados: Paris
Un teléfono sonó... una muchacha interrumpió su sueño y se sobresaltó al oírlo. Comenzó a revolver los papeles del escritorio buscando el teléfono... éste continuó sonando por unos segundos más...
---¿Dónde ésta? --- alzó todos los pergaminos y sobres que estaban sobre la mesa hasta encontrarlo debajo de su chaqueta---¿Bueno...?
---Hola preciosa... --- contestó del otro lado de la línea un chico con evidente alegría. ---¿Dónde has estado?
---Alan... me quedé dormida, pero he estado aquí en la Universidad
---Deberías descansar unos días, te harían bien... a mí también me hacen falta vacaciones ¿qué tal si tu y yo...? --- comenzó de forma pícara
---Solo necesito una noche entera para dormir, solo eso... ¿por qué no llamaste antes? --- la chica hizo un puchero con el que sonó tierna --- Queria verte para el almuerzo
---La convención apenas acabó... ¡parecía que esos magos no habían comido en toda una semana!
---¿Entonces cuando te voy a ver? --- comenzó a enrollar el cable telefónico en uno de sus dedos
---¿Qué te parece esta noche? Cena para dos en mi casa a la luz de las velas...
---Mmmm... me encanta la idea --- la chica mostró su perfecta sonrisa al oír esto. --- Pero mañana necesito estar temprano con la profesora Audrey... ¿No podría ser en mi casa? Jean tendrá turno en la noche... estaremos solos
---Perfecto, a las siete estaré en tu casa... te amo--- estas ultimas palabras las susurró para que solo le pudieran pertenecer a ella y no al viento.
---Yo también te amo, adiós --- colgó con una sonrisa enorme. Comenzó a buscar su bolso debajo de pergaminos usados y nuevos, fólders y sobres, recibos y facturas de todo tipo hasta que lo encontró debajo de su escritorio --- Tengo que arreglar este caos... --- miró el relajo que tenía en el pequeño cuarto, era como una oficina. Pasó de reojo el reloj de pared, eran las 12:50 PM --- Lo haré mañana...
Recogió sus cosas, salió de su oficina y la cerró con un encantamiento. Bajó los dos pisos por las escaleras hasta el estacionamiento. Lily Evans era una joven hermosa de 20 años. Tenia el cabello rojo como el fuego y los ojos de un verde esmeralda, su piel blanca como de un ángel contrastaba con su carácter, un tanto de demonio. Llegó hasta su automóvil, un mini convertible de color negro. Subió al vehículo y salió de la Academia de Aurores de la ciudad de Paris...
Cogió un celular de la guantera y marcó el numero telefónico de su casa mientras viraba a la izquierda, dirigiéndose al centro comercial... sonó unas tres veces hasta que la contestadora sonó por el auricular.
---Hola, llamas a la casa Evans-McCabe... --- esa era su voz... pero otra chica continuaba el mensaje
---Si no te contestamos es porque probablemente no estemos en casa --- era la voz de Jean, su mejor amiga desde el inicio de sus estudios en Hogwarts.
---¡Eso es obvio Jean! Déjame a mí poner el mensaje... Hola, llamas a...
---La casa donde los chicos guapos se reunirán porque aquí solo hay puros bombones --- después de esto, Jean comenzaba a reír sin parar
---¡Jean! Ay, olvídalo... solo deja tu mensaje y tu numero y trataremos de comunicarnos contigo...
---Eso si Alan deja de llamar cada cinco minutos a Lily... --- mencionó más divertida que antes
---¡Te voy a mat... --- en aquel momento se escuchaba la señal para dejar tu mensaje. Cada vez que Lily escuchaba esa grabación recordaba el primer día después de la mudanza hasta su casa en St. Pierre Buechamp
---Jean, supongo que debes estar dormida... recuerda que hay comida en el refrigerador, no quiero que te me desmayes otra vez a medio turno ¿ok? Probablemente llegue hasta las 6, así que no te veré sino hasta mañana... Y no se te olvide comer ¡por favor! Esperemos que escuches este mensaje antes de que se te haga tarde... recuerda que el doctor Jacques no tiene mucha paciencia... nos vemos. --- la pelirroja colgó y entró al enorme estacionamiento del mall.
Después de un par de horas, Lily salió con tres bolsas en una mano llenas de ropa, zapatos, accesorios entre otras cosas y un refresco en la otra... faltaban 15 minutos para la seis. Le daría tiempo justo para llegar a casa, alzar un poco el tiradero, preparar la mesa y cambiarse para su novio. Subió a su auto y salió a una de las calles principales de la ciudad de la Luz.
---¡No¡No puede pasarme esto a mí! --- miró hacia delante después de unos cinco minutos de haber partido hacia su casa, había un embotellamiento sobre la avenida que se alargaba al menos las siguientes siete cuadras. Miraba de vez en cuando su reloj... 6:00... 6:10... 6:25... 6:40 y ella seguía atorada en el tráfico. ---Alan va estar esperándome... espero que no se moleste.
Salió de la avenida y comenzó a zigzaguear a través de pequeñas calles. Viviendo ya 3 años en esa ciudad, la conocía perfectamente. Paris era una ciudad tranquila, en especial la zona del mundo mágico. Le agradaban todo esa gente tan amable y elegante, justo como su abuela Lilian; los portales de las casas tan decorosas le recordaban de vez en cuando Londres.
Después de librarse de la masa automovilística, condujo la más rápido que le permitía su conciencia, tampoco quería ganarse alguna multa por exceso de velocidad... Un letrero con el nombre de la calle marcaba el inicio de la misma, su casa era de las del fondo, pintada de azul cielo con el techo blanco. Se estacionó frente al garaje sin importarle tumbar un bote de basura. Alan ya la esperaba con un par de bolsas de papel en la puerta y con una cara de aburrimiento, eran las 7:30 PM
---Lo siento Alan--- sin decir más, Lily corrió a sus brazos y lo besó tiernamente en los labios.
---¿Lily... ---no lo dejaba de besar, esos labios le daban una energía en su cuerpo que evitaban parar los roces.--- ya viste... --- entre cada beso, Lily procuraba demostrarle lo mucho que lo amaba... --- que hora es?
---Perdóname... --- al fin lo soltó y bajó la cabeza como una niña pequeña que se arrepentía de una travesura
---¿Por qué llegaste tarde?
---Fue al centro comercial por unas cosas... y cuando salí había mucho tráfico
---Bueno, prefiero eso a que te la vivas en la escuela.
---No me has saludado... --- ahora fruncía el ceño, aún así, Alan la veía tan encantadora como la primera vez
---Hola preciosa--- la rodeo con los brazos y sus labios jugaron un poco con los de ella. ---¿cómo estuvo tu día?
---Perfecto, porque ahora tu estas aquí... --- ambos sonrieron y dejaron que el silencio se prolongara, lo único que necesitaban era mirarse a los ojos.
---No es que me queje, pero... ¿no vamos a entrar?
---Claro... --- Lily comenzó a buscar las llaves en su bolso, éste estaba igual de caótico que su cuarto en la Universidad --- solo que las encuentre... aquí están. --- abrió la puerta de caoba gruesa. --- Sola dame cinco minutos y estaré lista --- le dio un corto beso sobre los labios y subió corriendo las escaleras blancas.
Alan prendió las dos velas que alumbrarían la mesa y con un toque de su varita éstas comenzaron a flotar por encima de él. Todo estaba listo: la cena, el vino... solo faltaba algo.
---¡Lily¿A que hora piensas bajar?
---Ya voy, ya voy... --- se escuchaba la voz de la pelirroja desde la planta alta
---Mujeres, se tardan tanto... --- el chico se miró en el espejo del recibidor, tenía el cabello corto, castaño claro, sus ojos eran oscuros aunque cuando estaba feliz proyectaban una luz muy particular que los clareaba, su nariz recta y delgada, al igual que su labios, tenia un semblante firme debido al ejercicio diario, era un poco más alto que Lily...
---Ya estoy lista... --- su novio giró la cabeza hacia ella y sonrió ampliamente
---Wow... te ves como un ángel --- traía un sencillo vestido blanco de un solo hombro a la altura de las rodillas donde tomaba un poco de vuelo. La delgada figura de Lily se dibujaba perfectamente a través de la prenda, traía un collar de jade que hacia juego con su mirada. El cabello le dejó suelto dejando que algunos mechones jugaran con su rostro. Ella bajó los escalones con delicadeza hasta el pie de las escaleras donde Alan la esperaba con el brazo extendido --- No se como le voy hacer para que nunca te vayas de mi lado.
---Eso es fácil... ---pasó uno de su dedos por los labios de Alan --- mientras no dejes de besarme
---Hecho... ---él sonrió, cerro su ojos y simplemente se acerco a ella hasta que sus labios se tocaron, fue un beso tierno pero prolongado... Alan la abrazo para no dejarla ir, no queria que ese momento terminara.
---¿Y que tenemos para la cena? --- Alan le abrió la silla y Lily se sentó dejando caer la servilleta sobre sus piernas.
---Pues para iniciar, un buen vino blanco Beaumes de Venise--- le ofreció una copa llena de la bebida espumosa, Alan tomó la suya entre los delgados dedos --- y un brindis.
---¿Y en nombre de quien el brindis?
---De la chica más hermosa de toda Francia... por no decir del mundo--- Lily no pudo evitar ruborizarse ante los comentarios de su novio. Desde hace 7 meses que lo había conocido en un restaurante cerca de la Universidad donde Alan trabajaba. El era un excelente chef que poco a poco había ganado algo de fama y prestigio. Al principio solo había sido su amigo pero con los detalles que el chico siempre tenia hacia ella, la había enamorado por completo. Ahora estaba segura de que lo amaba y que estaba dispuesta a pasar el resto de su vida con él.
---Gracias... ---acercó su mano hasta acariciar la de él.
---Y para comenzar... Minestrone di fungi e pomodori --- pronuncio el chico con un excelente acento italiano
---Genial... --- aquel platillo era de sus favoritos. Era pasta con una salsa de tomate con verduras variadas, en esta ocasión champiñones. Se le agregaba un poco de aceite y especies mientras se preparaba. Al final se le añadía algo de queso parmesano... la pelirroja tomo su tenedor y dio el primer bocado. --- Mmmm... esta... delicioso...
---Sabía que te gustaría. --- Alan tomó asiento y comenzó su cena... Continuó la velada muy tranquila. Después de la entrada, el plato fuerte consistía en Chateaubriand, un platillo francés que básicamente era lomo de ternera asada a fuego vivo. Esta vez, el joven chef lo había acompañado con un coulis de papa y una ligera guarnición de verduras al vapor.
---No puedo más... si como alguna otra cosa ya no entraré en este vestido
---¿Eso significa que te lo quitarías? --- comentó de manera pícara el joven sin dejar de mirar a su novia.
---No, significaría que me pondría la pijama...
---¿Entonces no quieres postre?
---¡Claro que sí! Una deliciosa cena no esta completa sin postre.
---Entonces tenemos aquí un zabaglione
---¿Y que es eso? --- Lily miró de forma extraña el plato que le ponía delante Alan.
---Es un postre italiano que tiene huevo batido, vino Marsala y fresas... --- ella no dejaba de verlo con precaución como si eso fuera una bomba que no tardara en explotar al menor movimiento... Alan rió al ver a sí a su novia--- Deberías probarlo, es magnifico...
---Pues tu eres el experto... tendré que confiar en ti --- probo una cucharada de la natilla con los ojos cerrados. Para su sorpresa aquel postre era de lo mejor que hubiese probado. ---¡Sabe delicioso!
---Te lo dije...
---¿Sabes que? Esos idiotas que tienes por jefes en el restaurante no saben lo que tienen en sus manos... deberías aceptar ese trabajo en Lyon, ahí te va ir mucho mejor y bien lo sabes. Además queda la idea de abrir tu propio restaurante
---Aún no tengo el dinero suficiente como para abrir el negocio y lo de Lyon ---el chico suspiro mientras se cruzaba de brazos --- Créeme, lo he pensado mucho pero no resistiría estar tan lejos de ti... y tu tampoco puedes irte de la escuela nada más por seguirme.
---Podría... --- la pelirroja se levantó de su asiento y se acercó a él que también ya estaba de pie --- si tu lo quisieras
---No Lily... no podría pedirte eso, es tu carrera y se que la amas tanto como yo adoro mi trabajo. --- después de esto, el silencio se prolongó escuchándose solo las respiraciones de ambos chicos y el suave viento que corría fuera de la casa. ---Ven aquí... --- estiró sus brazos y con ellos rodeo a Lily. Aspiró el perfume de su cabello, de su piel, de sus labios...
Alan nunca le pediría a Lily que abandonara todos su planes que tenia para su futuro, eso era demasiado... ¿pero si ella aceptara?
---Alan, sabes que te amo y que haría cualquier cosa por estar a tu lado. --- la pelirroja respondió al pensamiento del castaño. Alzó la cabeza a la altura de sus ojos y sin dudarlo unió sus labios con los de él.
Alan respondió con ternura que poco a poco se transformó en pasión. Lily lo rodeó por el cuello jugando un poco con su cabello con una mano y la otra la pasaba por debajo de la playera del chico sintiendo su pecho y su corazón latiendo a mil. Alan no resistía más y ella tampoco, comenzó a besar su hombro desnudo y luego su cuello dejándose llevar por aquel sentimiento que los había envuelto centímetro por centímetro... la tomó por la cintura y la sentó en la mesa sin dejar de besarla y sentir un fuego recorrer sus venas.
Los dos sabían que era un momento perfecto... Alan aventó todo lo que estaba en la mesa sin importarle que todo se rompiera. Los besos y la pasión continuaron, ambos se recostaron sobre la madera blanca sin dejarse de recorrer con la boca y el corazón el uno al otro. Alan se quitó la playera de un jalón dispuesto a que todo pasara...
---¡AHHHHHHH¡LILY! --- la puerta se abrió y en el marco de la puerta apareció la Srita. McCabe llorando... Alan se apresuró a recoger su ropa y ponersela, Lily se acomodó el vestido y el cabello.
---¿Qué paso¿Creí que tenías turno ahora? --- Lily intercambio una mirada nerviosa con su novio mientras que abrazaba a su amiga que ya estaba en la sala.
---Si, solo... solo que... me salí... --- la chica se trató de tranquilizar pero al ver a Alan detrás de la pelirroja se soltó a llorar más --- ¡Además te arruino la noche¡AHHHHH!
---No Jean, no te preocupes... --- agregó el chico tratando de tranquilizarla...
---Alan solo pasó a visitarme un momento
---Es más ya me iba --- cogió su chaqueta y se dirigió a la puerta que seguía abierta
---Espera Alan... --- Lily se separó de su amiga y se dirigió a su novio --- Lo siento... esto es... algo debió pasarle en el trabajo y...
---Te entiendo, no hay problema
---¿Cuándo nos vemos?
---Que te parece mañana... hay una fiesta en casa de unos amigos
---Suena bien
---Paso por ti a las 9:00 PM ¿ok?
---Perfecto, lo estaré esperando... --- le dio un beso profundo y se despidió nuevamente.
---¡Lo siento Lily! Pensé que ibas a estar sola...
---Eso no importa ¿qué te pasó¿Tuviste problemas con el doctor Jacques? --- tomo asiento a lado de su amiga temiendo de lo peor
---No, pero creo que los tendré por haberme salido sin avisar...
---¡Ay Jean¿Entonces, porque estas llorando?
---Por... por Gerard --- nuevamente soltó a llorar. Se recostó en las piernas de Lily mientras que ella le acariciaba la cabeza. Gerard había sido el último novio de su mejor amiga, un francés bien parecido que estudiaba para sanador al igual que Jean.
---¿Qué ocurre con él?
---Quería hablar conmigo, así que después de atender a la Sra. Giscard por los ataques de sus plantas carnívoras, fui con el a la cafetería. Estaba muy serio y creí que solo queria arreglar algo relacionado con el hospital... Comenzó a hablar y en menos de cinco minutos había terminado conmigo...
---¿Pero, pero que te dijo? Tal vez solo quiere un tiempo, yo que sé... talvez lo interpretaste mal...
---¡Claro que no! Me dijo que estaba harto de la carrera de sanador y que lo único que lo retenía ahí era yo, así que lo mejor era terminar... no encontró mejor forma de deshacerse de mí...
---¿Eso te dijo¡Es un idiota! Y por eso mismo no merece tus lagrimas... --- Jean se dejó abrazar por quien considerara su hermana. --- Que te parece cenar... eh... no recuerdo su nombre, pero eso es lo de menos ¡esta delicioso!
---Esta bien... --- ambas chicas se dirigieron a la mesa, cuando Jean vio que todo estaba tirado en el suelo hecho añicos y recordó ver a Alan solo en pantalones... --- Eh, creo que si interrumpí de verdad ¿no?
---Este... --- Lily se sonrojó un poco--- sí, pero no importa
---¿Cómo que qué importa¡Lily, ese chico te adora!
---Si, y yo a él...
---¿Se casarán algún día?
---No lo sé... pero me gustaría ver como sería mi vida si lo hiciéramos... Reparo --- Lily apuntó con su varita a todos los trastes rotos, de inmediato todos los trozos se unieron y parecía una vajilla completamente nueva--- Fregotego --- en esta ocasión se limpiaron las manchas de salsa y vino del piso.
Jean terminó de comer tras una extensa platica para después cada quien subir a sus respectivas habitaciones. Lily entró al baño, se puso la pijama y se lavó los dientes. De inmediato se dejó caer sobre la cama con una pregunta rondando su cabeza: Si no se casara con Alan ¿con quien lo haría?
