Akira: Bien aquí Akira reportándose damas y emmhhh… aquí ahí caballeros? No? bueno solo damas!

Grimmjow: ¿Y se puede saber para que me arrastraste a esta locura tuya?

Akira: ¡Oh vamos será divertido!

Ggio: Si Akira–sama está aquí entonces yo también lo estaré

Grimmjow: ¡¿Y qué haces tú aquí pequeñajo?!- dice mientras un rayo azul sale de sus ojos

Ggio: he venido aquí por Akira-sama -le salen rayos amarillos de los ojos y se chocan con los de Grimmjow y ambos sisean como gatos

Akira: ¡Venga con ustedes! Bueno antes de que se derrame sangre les dejo leer el cómo empezó esta descabellada historia de enredos amorosos y ¡para el próximo cap. conocerán a Shani-chan!

Los dos: ¡¿Quién es Shani?!-dicen mientras se crispan

Akira: este es nuestro opening esperemos les guste! : "suki kirai" de los hermanos Kagamine

Sacar el Rompecabezas es lo Más Sencillo

Una joven caminaba con paso lento, aunque a veces lo apresuraba haciendo que su largo cabello azul el cual le llegaba a la cintura se meciera ante el acto, hacia su nueva escuela pero que más podría hacer ¡estaba emocionada y a la vez nerviosa, tanto que hasta sus hermosos ojos de color violeta brillaban de tantas emociones reunidas! ¡Qué tal si algo pasaba en cuanto llegara! ¡De solo pensar lo que ocurriría en ese nuevo lugar le daba miedo y alegría! ¿Se preguntan el nombre de esta chica? Pues su nombre es Mady Bernat ¡nuestro primer personaje principal! Apenas vio la entrada sintió lo que se llama mariposas en el estomago.

-¡Pero está bien! -gritó en plena entrada, solo para luego ponerse peor que un tomate- Vamos…vamos… ¿qué cosa mala puede pasar hoy? –Y como si Kami-sama la hubiera escuchado pudo sentir como el suelo empezaba a temblar un poco– ¿E-eh? –se dio vuelta solo para distinguir a lo lejos algo parecido a una nube de polvo…

-¡Yo llegaré primero cabello de menstruación! –ese grito la alarmó, no sabía por qué pero al parecer eran dos chicos.

-¡En tus sueños tabla! ¡Yo llegaré primero!

Al parecer uno era más bajito que el otro que tenía el cabello rojo.

-¡Me tendrás que pagar todo lo que quiera de la cafetería! –afirmó el pelirrojo.

-¡En tus sueños#$#%$&! –dijo el supuesto chico más bajito acelerando el paso, pero entonces se dio cuenta de algo.

-E-e-es una chica…-anunció Mady al verla más de cerca y sintiéndose una torpe por no haberse dado cuenta de que se trataba de una chica.

-¡Yo ganaré tabla!

-¡En tus sueños grandísimo...!

Sólo aquí es cuando estos locos se dan cuenta de la situación

–¡CUIDADO! ¡CASTIEL FRENA! –gritó la chica reduciendo la velocidad de su desbocada carrera.

-¡AHHH!

En ese mínimo e insignificante instante ambos se dieron cuenta de que se estrellarían contra Mady en la entrada, eso era raro, por lo general todos sabían que a esa hora era zona de muerte si estabas parado ahí. Trataron de frenar cuanto pudieron y al hacerlo se podía escuchar como sus suelas se desgastaban produciendo el sonido de llantas de carro frenando con gran fiereza.

-…. –Mady se quedó muda del miedo y como no, solo le esperaba sentir el enorme impacto que se le venía encima, le temblaba el cuerpo como gelatina ¡los dos iban a estrellarse con ella! Pero en vez de eso pudo sentir como era llevada hacia atrás por un par de brazos…un par de brazos que luego la abrazaron de manera protectora y que hacían que su corazón se acelerase como un motor de fórmula 1, después pudo ver cómo, tanto el chico como la chica, se estrellaban contra un montón de arbustos y por último con el césped del suelo

-¿Q-q-qué? ¿Es-es-están bien? –aún no salía de su shock reciente.

-¡Buenos reflejos Lysandro! –dijo la chica saliendo de entre los arbustos como si nada y levantando el pulgar con una sonrisa de satisfacción, esa sonrisa era… bastante linda desde la perspectiva de Mady, y eso que estaba hecha un desastre ya que tanto ella como el otro muchacho (aunque este se había dado de lleno contra el árbol junto a los arbustos) estaban con la cara y la ropa con tierra, y con ramitas en el pelo en el caso de la muchacha.

-¡Me alegro de que estés bien! ¡Por cierto mi nombre es Akira! ¡Un gusto! –esta última saludó a Mady.

-U-un gusto también…uh…-al momento de querer estirar el brazo la aludida se dio cuenta de la situación en que se había visto envuelta.

1° El rostro de la chica se le hacía conocido.

2° Se dio cuenta de que estaba prácticamente siendo abrazada por un par de brazos bastante fuertes al parecer de un chico-

3°Parecia que el chico pelirrojo estaba sangrando.

-Emmhhh… no es que me incomode o si se si a ti te incomoda pero creo que la estas apretando mucho Lysandro, está más roja que un tomate –dijo la chica de cabello negro, pero ella estaba en otro mundo… literalmente.

-Oh… lo siento señorita –en cuanto él la soltó se giró para verle la cara.

-…. - se quedó más muda de lo que era, el chico era realmente hermoso, su cabello era tan blanco como la nieve, su piel era de un color precioso, su vestimenta lo hacía ver como un príncipe, sus ojos… ¡santo cielo sus ojos! ¡Uno era tan bello como un rayo de sol fundido en oro y el otro era tan verde que parecía pertenecer al fondo espeso y lleno de vida de una selva virgen!

-¿Ahora qué pasó? ¡Está más roja que el cabello de Castiel! –señaló Akira y fue ahí cuando se puso a pensar más por su pelirrojo amigo y no por la chica que casi atropelló –¿D-d-dónde está Castiel, Lysandro? ¿Nueva?

-… -Mady pareció salir de algún tipo de trance solo para señalar completamente roja, hasta que los colores se le fueron completamente de la cara de forma abrupta, a un punto detrás de ella.

Akira se dio vuelta viendo a su amigo pelirrojo literalmente estampado contra el tronco de un árbol mientras que un hilillo de sangre caía por el mismo.

-¡AAAHHHH!

MÁS TARDE ESE DÍA

-¡¿Acaso te crees inmortal como para estar ahí bien plantada a esa precisa hora, Nueva?! –el tiempo había ido algo lento desde que la chica de pelo negro y el muchacho que la había salvado literalmente despegaron al pelirrojo del árbol –¡¿Acaso eres suicida o qué?!

-Pe-perdón…-decía la muchacha de cabellos azules agachando un poco la cabeza en muestra de completa sumisión.

-¡Cállate Castiel! ¡Ella no tiene nada que ver con que hayas metido así la pata!

Y de nuevo así empezaba una pelea verbal entre Akira y Castiel. En lo que había presenciado Mady ya iban unas cinco en el cuarto de hora que pasó o al menos ella pensaba que había pasado desde que llegaron a la enfermería para que atendieran al chico pelirrojo, pero entonces se dio cuenta de lo que pasaba en ese preciso instante ¡tenia al chico albino junto a ella!

-Será mejor salir de aquí antes de que se ponga peor señorita –dijo éste retirándose a la puerta.

-S-si –Mady después lo siguió.

-Dígame ¿cuál es su clase?

-Pues… se supone que debía ir a ver al delegado para que me diera la información de los horarios y las clases y… ¡Espere! ¿A dónde va?

-Te llevare a la sala de los delegados.

-¿En verdad?

-Sí

-Muchas gracias… -fue lo único que dijo Mady en el transcurso de un Largo, larguísimo minuto. Él chico, al igual que ella, no habló, pero aun así podía sentir como los colores se le subieron a la cara e incluso a las orejas.

-Es aquí…-dijo finalmente apuntando a la puerta que tenían en frente ¿Cuándo llegaron tan rápido? –Lo lamento pero mi compañía ha llegado hasta aquí, debo retirarme a menos de que quiera que Castiel y Akira terminen yéndose de manos.

-Bueno si es así entonces yo…

-Me retito señorita…

-¡Mady! –gritó sin siquiera haberlo pensado y solo se cubrió la boca–. Yo…

-Está bien señorita Mady –el escuchar decir su nombre la hizo sentirse en las nubes–. Pero debo retirarme, espero que no lo tome mal.

-N-no para nada emmhhh…

-Lysandro -dijo dando una pequeña reverencia y depositando un beso en su mano derecha ¡en verdad parecía un príncipe! –Lysandro Styles– continúo levantando la cabeza y así los ojos violeta se chocaron con el ambarino y el verde profundo.

-...Lysandro… -al decir su nombre Mady sintió un millón de mariposas revolotear en su vientre, se sentía tan bien…después se decidió por entrar finalmente al aula solo para no encontrar a nadie en ella –. Ni un alma… -susurró antes de ir hacia una silla para sentarse a esperar al delegado, y aunque no sabía bien qué era o cuál era la razón de que el corazón le latiera de manera tan rápida, podía sentirlo, había leído de este tipo de hecho en los libros que tanto le gustaba leer, en aquellos momentos en donde la protagonista se… enamoraba…

-Perdón por la espera –alguien abrió la puerta –. Me encontré con Lysandro y me dijo que esperabas aquí. Mi nombre es Nathaniel, bienvenida a tu nuevo insti… -el habla del muchacho se quedó en la nada al momento en que ella levantó la cabeza; cabello rubio y los ojos como oro, con un atuendo algo formal para su edad.

-¿Delegado? –le preguntó Mady con cierto temor, siempre era así con alguien que no conocía– ¿Eres el delegado? –pero el muchacho estaba en otras, el apenas vio esos grandes y bellos orbes violeta o… ¿eran amatistas? No le importaba, lo único que le importaba era ver a esa chica sentada ahí mientras que los rayos del sol al igual que el viento que se filtraba por la ventana hacían revolotear su cabellera azulada a la vez que le daban más brillo. ¿Quién es ella?, se preguntaba sintiendo como su boca se abría ligeramente, ¿por qué mi corazón va tan rápido? Era lo que pensaba en tan solo fracciones de segundo, la muchacha se limitaba a verlo desde su sitio. Era como si el delegado estuviera en un lapso apartado de su mente.

-¿Estás bien? –le preguntó Mady abandonando la silla para luego posar su mano en el hombro del muchacho.

-S-sí –fue su rara respuesta, él no era de los que titubearan al hablar y eso le sorprendía –¿Cuál es tu nombre? –inquirió ya un poco más confiado.

-Eh...M-Mady…Mady Bernat.

-Mady –sin saberlo al decir su nombre la chica desencadenó una serie de eventos futuros para todos aquellos que estaban en el instituto, ya que ahora…Cupido tenía como presa al mismísimo instituto…

Akira: Hasta aquí llega el intro de esta descabellada historia

Grimmjow: aquí la única descabellada eres tú

Ggio: ¡deja de insultar a Akira!-le lanza una mirada amenazante-Akira estoy seguro de que tu historia será hermosa y conmovedora tal y como tu eres

Akira: …

Grimmjow: ¡aléjatele enano!

Ggio: ¡oblígame inútil!

Akira: antes de que estos dos se maten les digo lo siguiente: esperamos su apoyo y sus Reviews pronto , a todo esto nuestro ending es "Trust me" de Yuya Matsushita