"¿Otra historia, Boogie-chan? ¿Es que no te cansas de escribir idioteces?", os preguntareis.

La respuesta es ¡no!

Este intento de sit-com escrita surgió durante un trayecto de una hora en tren, con la música y tres chicas chillonas -totalmente ajenas a mí- como únicos acompañantes en el vagón.

Antes de nada, quiero dejar las cosas claras: este experimento no tiene -ni tendrá-, una continuación definida, por lo que pueden pasar meses antes de que suba otro capítulo. Básicamente porque es un experimento extraño que no sé si recibirá buenas críticas.

¡Pero se acepta todo! Desde buenas críticas, hasta emails con arsénico. Soy una tía tolerante.

Ahora, os dejo con... Lo que sea que sea esto.

Cómo convivir en pareja (y no morir en el intento).

Consejo #1: ¡No te escaquees de la mudanza, capullo!

La típica historia de siempre: Chico conoce a chica, se enamoran, discuten, al final se casan y tienen treinta hijos y veinte perros. Sí, esta no es más que otra de esas historias.

-¡Natsu! ¡Olvídate un rato de hacer el gilipollas y ayúdame a subir estas cajas!

-Relájate, no quiero recibir un "Lucy Kick" por la mañana.

-¿Cómo dices?

-Lo que has oído. Eres una mujer muy bruta cuando quieres, Luce.

-Gilipollas.

-Eso ya lo habías dicho antes, te repites.

Oh, excepto por unos pequeños detalles. Quizá debería haberos contado que, en esta historia, el chico y la chica ya se conocen. También debería haber mencionado que ambos se encuentran en plena mudanza. ¿Mudanza? Sí, esos dos iban a vivir juntos. Además, hay un diminuto detalle que se me ha pasado por alto.

Natsu Dragneel y Lucy Heartfilia van a casarse.

Como leéis. Nos hemos saltado la parte melodramática y hemos ido directamente a lo que importa: la vida en pareja. Aunque no es como si no hubieran compartido casa. Todos sabemos que la habitación rosa e impoluta de Lucy no tenía nada de "inocente y pura" al final. Sabéis a lo que me refiero.

Sexo. Sexo salvaje con un medio dragón.

¿Quién no lo querría?

No os ilusionéis, los treinta hijos aún no están ni imaginados. Dejemos eso a Juvia. Por lo pronto, lo único que puedo contaros es acerca de su vida juntos en un pequeño apartamento ubicado bastante cerca del gremio. Los que se quedan allí hasta altas hora de la madrugada dicen que han podido escuchar los gritos de Lucy. Por sus miradas os diré que no creo que los gritos fuesen de enfado, precisamente.

Esto está desvariando mucho, no he venido aquí para hablar de la vida sexual de Natsu y Lucy –aunque sé que es lo que más os interesa, panda de pervertidos–. Hablemos del día en que se mudaron.

¿Cómo definirlo?

Estresante se queda corto.

Habían puesto a todo el gremio a trabajar en eso. ¡Hasta Laxus estaba colaborando! Bajo la amenaza de una patada de Lucy en sus partes, eso sí. Lo importante es que trabajaban todos juntos. Erza y Lucy tomaron el mando junto a Mirajane -¿no es sorprendente la capacidad de esas mujeres para acojonar a todos a su alrededor?–, y no dejaron de gritar ni un solo momento.

-¡Gajeel, eres un jodido Dragon Slayer de metal! ¡Tus brazos se transforman en vigas de hierro! No creo que sea tan difícil para ti subir una puñetera caja al segundo piso.

Equipo Lucy- 1. Equipo "Pobres Magos"- 0.

-Elfman, ¿sabes qué no es de hombres? Sentarse a descansar. No me mires con esa cara de perrito mojado, hermano, levántate y lleva ese sofá al salón. Ponlo delante de la televisión si no quieres que llame a Ever, E-l-f-m-a-n.

Equipo Lucy- 2. Equipo "Pobres Magos"- 0.

-Gray…

-¡Ya voy, Erza! ¿Ves? Estoy subiendo el frigorífico a la cocina como me has dicho. ¡No me mates!

El resultado de aquel día deberíais decidirlo vosotros. ¿1674 - 0 para el equipo Lucy os parece mucho? Bah, da igual, lo que importa es que todos en el gremio durmieron como bebés esa noche. Especialmente Gray Fullbuster.

Llegados a este punto, os habréis preguntado dónde estaba Natsu Dragneel durante la mudanza y por qué había dejado solos a sus compañeros. La respuesta es sencilla: Natsu sabe cómo es Lucy, así que corrió lo más rápido que le permitieron sus piernas hasta que llegó a una especie de desierto en el que estuvo refugiado tres días hasta que lo encontró Happy. Lucy lo estaba esperando con tres de las cajas más pesadas, el televisor y un montón de ladrillos para construir una chimenea.

Juro por Mavis que nunca habréis visto a Natsu tan asustado como cuando Lucy le dio la bienvenida.

-Hola, cariño. Sube estas cosas, luego hablaremos amorosamente de tu desaparición.

-Fui a una mis…

-A callar. Sube las cajas y el resto de chismes.

Quizá Natsu sea el único ser vivo en el universo capaz de soportar veinticuatro horas al día a su futura esposa.

Gray comentó un día que si Natsu la aguanta, es debido quizá a que es una bestia en la cama.

No volvió a decir nada más sobre eso.

¿Por qué? Bueno, digamos que se pasó una semana entera "metido en una pecera". Pero esa es otra historia que Juvia se encargará de contar.

Algún día.

¿Y bien?

¡Recordad que aún soy muy joven y guapa para morir! D:

Debo confesar que esto está, en parte, sacado de mi experiencia con mi chico. :3 No es que yo sea como Lucy o el como Natsu -no, claro que no-, pero sí que me han pasado cosas similares a las que he escrito aquí.

¡Espero que os guste!

¿Merezco un review o una carta de amenaza? D8

Se despide,

Boogie.