Ranma ½ y todos sus personajes le pertenece a Rumiko Takahashi, que si me perteneciera a mi….en fin, esto esta hecho sin fines de lucro! Meramente para entretener.
CAPTURANDO TU CORAZÓN
- Capítulo 1 -
Click click click
¿Porque fotógrafo de bodas?
Porque no siempre hay torneos locales de artes marciales que ganar, sobre todo para mi en este preciso momento, pero la gente insiste en casarse todo el tiempo. Parejitas que se miran embobados, que sienten que nadie más sentirá el amor que sienten ellos dos en "su día". Ay, cómo empiezo a odiar esa frase. "En su día". Nada más con esas tres palabras y ya todos piensan que tienen permiso especial para ser groseros, demandantes y lo peor, exageradamente cursis.
Oigo un chasqueo de dedos y el ya clásico "hey tu!". En serio, creo que necesito imprimir una camiseta que diga "me llamo Ranma" aunque río para mí mismo porque me imagino una que dice "me llamo Ranma y que quieres en este instante imbécil".
Son demasiada palabras y no se vería bien...aparte de que no sería bien visto y así quien me va a volver a contratar.
Volteo a ver quien me llama con tanta sutileza y elegancia, y tengo que bajar la vista considerablemente hasta localizar los ojos de un pequeño hombrecito con cara de rata.
-Hey tú -otro chasqueo de dedos pasa por mi cara, ganas de darle una patada a este enano no me faltan- no te estamos pagando para que te pares en una esquina a tomar el sol -literal me había separado por dos minutos del magno evento porque tenía que cambiar el lente de mi cámara -mi señora quiere que tomes más fotos de ella con su nuevo esposo en el pabellón de las rosas.
-Si si, ya voy, solo estaba haciendo ajustes a mi equipo. Asumo que tú señora no quisiera verse borrosa o mal iluminada correcto?
-La belleza de mi señora Kodachi no tiene igual, podrían tomarle fotografías en plena oscuridad y aún así serían hermosas
Wow. ¿Cuánto le pagará Kodachi a este intento de humano para haber generado tal admiración? Peor fuera que no hubiera dinero involucrado. Que asco que fuera por amor.
-Ya, vamos, llévame a ese famoso pabellón -termino de acomodarme mi chaleco especial, es como un arnés, hecho de piel, donde puedo cargar con comodidad 3 cámaras al mismo tiempo. Veo de reojo a mi asistente y amigo Mousse, juntar un par de lámparas y reflectores, también con una cara de desgane. Caras que nos hemos ganado a pulso, sobre todo con esta boda.
-Por aquí...señores -dice el mequetrefe de 3 bigotes con sarcasmo. De nuevo, ganas de arrancarle esa sonrisa sarcástica a golpes nacen en mi
El lugar de esta boda, no puedo negarlo, si es impresionante. Una verdadera mansión japonesa de múltiples pisos, pero con agregados y añadidos estructurales y decorativos más al estilo francés neoclásico. Es una fusión interesante, aunque para nada va conmigo. Me gusta más lo sencillo. Cruzando uno de los jardines al costado de la mansión se divisa una estructura de acero, un arco como los que te indican la entrada del metro en París. Pero este dice "Pabellón del Oeste", con la típica letra art-nouveau, como las de Alphonse Mucha.
No que yo sea un cerebrito, pero a mi mamá le encanta ese pintor. Ella si es una verdadera dama que seguramente estaría fascinada con este lugar. Fascinación que de inmediato se olvidaría al notar cuántas chicas hay en las bodas y como no me he buscado novia entre ellas. Ugh. No puedo evitar sentir un escalofrío
-Hey tu! -aquí vamos otra vez con el "hey tu"- no te distraigas, que no tenemos todo el día, la señora quiere las fotos con el atardecer de fondo -super original, pienso, ruedo los ojos sin poder evitarlo
-Saotome, en que tanto estás pensando hoy? Tu pobre cerebro, si siempre lo tienes inactivo, hoy debe estar exhausto -sonora carcajada que sale de la boca de mi amigo.
Lo volteo a ver con los ojos entrecerrados y un puño alzado -como te odio, para que demonios te ofrecí este trabajo
-Bien que me amas y lo sabes
-No es cierto, te tolero
-Me amas con locura y pasión -más carcajadas salen de Mousse, y no puedo evitarlo, me relajo un poco y rio para mi mismo
-Estaba pensando en lo curiosa que es esta casa
-No, estabas pensando que en qué si tu mamá estuviera aquí te estaría regañando de que como no has conseguido chica con tantas a tu disponibilidad en estos eventos, tanto las bodas como los torneos
Abrí mis ojos como platos. Y de nuevo vi feo a Mousse (¿cómo me puede leer tan bien?!). Definitivamente, le voy a prohibir que nos acompañe a comer con mi madre, ella siempre le está recalcando estos sentimientos...bueno, frustraciones.
-Ya, ya Saotome. Relájate. Pronto terminaremos con esta sesión, pasarán a la pista a presentarse frente a sus amigos y podremos comer algo
-Pronto ajá si claro. Te recuerdo que el itinerario que nos dio la "wedding planner" es de como 20 cosas antes de poder comer. Y luego es tomar 4 horas de fotos de los invitados ya comidos y bebidos "bailando" en la pista
-Ahí ya es cosa de la pareja, no de la planeadora del evento, querer hacer que esta boda dure 26 horas
-Y es por eso que cobramos por hora -refunfuñé
-Más la comida gratis -sonríe descaradamente mi amigo, mientras seguimos caminando al famoso pabellón.
Finalmente bajo el arco, genuinamente salió de mi un abrir de boca y ojos. Era un jardín impresionante, no exageradamente grande (unos 8 metros de ancho por 30 metros de largo), sino por la cantidad de rosas que había en el. Arbustos de rosas por todo el perímetro, por lo menos de 2 metros en su profundidad en algunos puntos. Rosas de todos colores, de todos tipos. Se habían instalado arcos similares al de la entrada, más sencillos en su diseño aunque más altos, para crear enredaderas de flores similares a las rosas y dar una ilusión de una bóveda sin techo de puras flores.
De inmediato saqué mi cámara y empecé a tomar fotos. Aunque no se vieran los novios, este era un espectáculo digno a ser fotografiado. Pude haber pasado horas ahí, haciendo tomas generales, tomas de cerca, múltiples ángulos...pero un grito de "hey tu" me sacó de mi ensoñación. Cierro mis ojos y frunzo el ceño, mientras bajo la cámara de mi cara. Pude oír una disculpa y un ligero empujón. No alcancé a voltear a ver quien había sido, porque sentí la presencia del minion con bigotes a mi lado.
Me giré a ver fríamente al hombre-rata, y con toda la dignidad que pude juntar le respondí -si, ¿que ocurre?
-Lo que ocurre es que ya está por atardecer, ¡y tú andas perdiendo el tiempo con todo menos con la belleza hecha persona de mi señora!
-No es perder el tiempo, ignorante, ¡es hacer pruebas!
-¡Sólo haz lo q se te pida!
-Ya señor Sasuke, ya vamos a iniciar las fotos de la bella...pareja -dice tranquilamente Mousse, aunque noto un deje de risa en su voz. Veo que ya colocó algunas luminarias y tiene el reflector dorado en sus manos
Finalmente volteo a ver a la pareja, es la tercera sesión de fotos del día directamente con ellos (primero cuando se estaban arreglando por separado, seguida por una inmediatamente después de dar el "si" en el altar en un templo cercano). Aún no puedo ver que los atrajo el uno al otro.
Si, la novia es bella aunque tiene una mirada de loca. De esas que automáticamente te hacen mentir sobre tu nombre y donde vives. No le quieres dar más datos de los necesarios porque se ve que es capaz de aparecer en tu casa, mandil puesto con la cena servida como si le hubieras pedido que lo hiciera.
Tiene largos cabellos negros, en una coleta alta, con un fleco prominente y ondulado. Es su cuarto vestido del día, ni quiero pensar cuántos más tiene pensados. Labios rojos, aunque una sonrisa demasiado grande que causa escalofríos. Y su risa, ni hablar. La primera vez que la oí mis pelotas automáticamente se encogieron. Reitero, esta mujer es de temerse.
Y es por eso que no comprendo nada cuando volteo a ver al novio.
Un espantapájaros tiene más personalidad. No, más bien, un espantapájaros se ve más vivo que este tipo. Flacucho, no pasa el 1.65 de altura, pesando como 20 kilos y con bolsas debajo de los ojos del tamaño de mis puños. Jamás había sugerido maquillar a uno de los novios, pero si no quería que mis fotos parecieran de una novia y un recién-difunto, había que tomar medidas drásticas (no sirvió para nada).
Encontré a la pareja del año situados frente a unos arbustos de rosas del color más peculiar. Eran negras. Cientos y cientos de rosas negras.
-De acuerdo -dije con mi voz de autoridad, tratando de infundir confianza en mis clientes- Kodachi, por favor podrías tomar con ambas manos el ramo, Gosunkugi, necesito que muevas tu cadave- ejem, muevas tu cuerpo más a la izquierda. Si, ahora rodea con tu brazo la cintura de Kodachi. Perfecto
Click click click
Es todo lo que suena en lo que muevo tratando de capturar algo interesante con esta pareja tan peculiar. Sigo lanzando indicaciones, para cambios de posturas, que si ella sentada, el parado...mientras que yo me agacho, me estiro, giro de un lado a otro.
Parecerá que soy un genio detrás de la cámara (y lo soy), pero la verdad solo estoy indicando poses que he visto en Pinterest en los boards de miles de chicas que sueñan con casarse.
Amo la fotografía, es una de mis dos grandes pasiones en la vida, pero fotos de paisajes no pagan la renta. Quieran o no, el negocio de las bodas es extremadamente redituable. Cobrar 4 veces más por algo suena normal. En un principio queríamos cobrar menos, pero la gente desconfiaba de nuestros buenos precios. Así que, para que hacernos los difíciles (y económicos).
Los días de boda son días largos y cansados, sin contar los días y semanas después haciendo selección y edición de las mejores fotos. Sin embargo, es un trabajo que me permite tener mis propios horarios, y me deja tiempo libre para mis otros intereses, como las artes marciales. Creo que me la vivo entrenando y fotografiando. Y comiendo. Y la ocasional cog-
Más chasquidos de dedos me sacan de mi cabeza
Que ocurre -escupo entre dientes, tratando de modular mi voz para esconder mi enojo
-La señora Kodachi le está hablando joven
-Ah, lo siento. Cuando uno está en "la zona", con tales modelos de belleza inigualable, es difícil desconectarse -trato de decir esto con mi voz más melosa y sensual. Aunque escuchar las risas al fondo de Mousse no ayudan a mi causa -dígame, que se le ofrece Kodachi
-Quisiera poder hablar con usted a solas -me asusta, porque si no supiera mejor diría que su tono de voz era…¿seductor?
Nos alejamos unos cuantos pasos del set informal que hemos creado. Kodachi se acerca demasiado a mi, al punto que me echo dos pasos hacia atrás. Toso ligeramente y pongo mi cara más profesional.
-Dime Kodachi, ¿qué necesitas?
-Te necesito a ti en 20 minutos en el baño del tercer piso
-Eh...que?! ¡¿Cómo?!
-Es que querido, con esa cara de adonis que tienes, una simplemente no puede dejar pasar la oportunidad -sonríe "seductoramente", aunque a mi sólo me causa que se me hiele la sangre
-Perdona Kodachi, pero no me parece correcto lo que estás proponiendo. Sobre todo con tu muerto, digo, marido, ¡ahí mismo!
-Humph, Gosunkugi no se tiene que enterar. Aunque si lo supiera no se molestaría. A él a veces le gusta verme...con otras personas
Oh por dios. Se me cae la mandíbula de la impresión. Por lo menos algo de sentido tiene su unión.
-Aún así Kodachi, aunque él diera su permiso frente a un notario, me temo que no sería capaz. Me...me estoy salvando para mi matrimonio. Si, la cosa es...este, esteee, si...soy virgen, puro y casto -junto mis palmas y pestañeo haciendo mi cara de mayor inocencia posible- y solo quiero estar con una mujer para toda mi vida, con mi futura esposa -trago saliva esperando que crea una de las mayores mentiras que jamás he dicho. Ja, virgen yo (¡¿con esta cara y este cuerpo?!).
-Pero, ¿no te gustaría llegar con conocimiento y experiencia a tu noche de bodas?
-No no, no no no, así estoy bien. Gracias. Quiero solo experimentar el placer de juntar botes con mi futura mujer
-Que manera más...dignificada...de llamarle al acto. De acuerdo, pero si llegas a cambiar de opinión, sabes dónde encontrarme
-Muchas gracias por la oferta Kodachi. Umm, según itinerario ahora toca su entrada al salón, así que nos vamos para allá para tener todo listo. ¿Te parece?
No me quedo a oír su respuesta. Entre el codazo que le dí en el costado a Mousse, y la mirada que le hice, el entendió perfecto el mensaje. Otra insinuación comprometedora por parte de una novia. Juntó a toda velocidad su equipo y salimos corriendo hacia el salón.
-¿Entonces Ranma? -comenta mi amigo con una ceja alzada
- ¿Entonces que Mousse?
-¿En donde te pidió que la vieras para un rapidín nupcial?
Un gruñido de frustración salió de mi -en un baño de la mansión. Obvio le dije que no. Sobre todo cuando me comentó que el fantasma de su marido no tendría problema en quedarse a observar
La cara de Mousse era todo un poema. Ojos abiertos. Boca abierta. Cejas tan arriba que se perdían con su fleco.
-Nooooo, no me digas que...
-Sip. Como dicen, siempre hay un roto para un descosido. O en este caso, un pervertido para una desquiciada.
-También debe ayudar que Gosunkugi es un millonario
-Espera, ¿que?!
-Si, lo investigue un poco después de la cita de presentación que tuvimos con ellos, tú no?
-La verdad no, entre menos sepa de estas parejas siento que trabajo mejor. Ya sabes, para ser objetivo
-Y porque eres un amargado...
-Si, también -dije riendo -no lo voy a negar
Nos posicionamos en una de las esquinas del salón, rodeados de mesas de invitados impacientes por la entrada triunfal de los recién casados. No puedo negar que si era un salón impresionante, con la capacidad para 300 personas, y una pista gigantesca al centro para el baile. Decorado exageradamente, con arreglos florales demasiado altos y voluminosos al centro de cada mesa. Hechos a base de más rosas negras, algunas en jarrones de cristal, algunas en jarrones de oro. Ocho candiles, de esos de diseño rebuscado y anticuado, de miles de pequeños cristales colgando, eran toda la iluminación del lugar. Eso nos iba a complicar un poco las cosas, pero somos lo suficientemente buenos como para poder sacar las mejores tomas bajo las peores condiciones.
-Y, ¿cuál canción crees que escogieron para su primer baile? Te apuesto 100 yens a que es "My Heart Will Go On" (en las bodas más ridículas que hemos tenido éste siempre ha sido el tema seleccionado!)
Mousse frunció el ceño -no, yo creo que será "I Will Always Love You", de Whitney Houston. Te recuerdo que le he atinado a las últimas 3 bodas, y aún no me has pagado
Tosí para hacerme el desentendido. Rápidamente cambiando mis lentes y revisando tanto la batería como el espacio de guarda en la tarjeta de memoria de la cámara, comencé a tomar fotos de prueba. A veces de las mejores tomas candidas de los invitados salían de estos momentos. Pasé sigilosamente entre las mesas, el continuo click click clic de mi cámara siendo ignorado por todos los invitados. Aunque pasando cerca de una mesa no paraba de oír un tap tap tap. Seguro era una falla de alguna de las bocinas, que molesto para los de esa mesa.
De la nada sonó la voz del maestro de ceremonias, porque si, ésta era una de *esas* bodas. Con un maestro de ceremonias informando que ocurría a todo momento, casi casi avisaba cuando el novio estornudaba. En mi opinión, era de lo peor.
Considerando el número de bodas a las que habíamos ido, eran verdaderamente pocas las que habían sido de mi agrado. Se que en parte es por ser un amargado en los temas del amor, pero porque las considero innecesariamente exageradas. ¿Que tiene de malo una simple ceremonia, con no más de 30 invitados?
Me fui acercando a la posición ideal para capturar la entrada triunfal de la parejita.
Tal y como había pensado, Kodachi traía un nuevo vestido. El fantasma que iba a su brazo seguía con el mismo traje negro.
Comenzó a sonar "I Don't Wanna Miss a Thing" de Aerosmith. Rodé mis ojos, ni siquiera se molestaron entrar al salón con una canción de ésta década...
Mousse se paró a mi lado, con su fotómetro en mano para que hiciéramos los ajustes necesarios a las cámaras. Aunque yo fuera el fotógrafo principal, sobre todo para las sesiones con las dichosas parejas, Mousse siempre me hacía segunda ya que iniciaba la fiesta. Así podíamos cubrir más terreno, tener más ángulos y más opciones a la hora de editar.
-Sabes, no importa que tanto ajustemos la velocidad de las cámaras y el balance de blancos para que se vean mejor iluminadas, Gosunkugi no va salir en ellas -reí maliciosamente
-Ni me digas, debimos de haber cobrado más por la edición, vamos a pasar horas en Photoshop trayéndolo a la tierra de los vivos
De nuevo la odiosa voz del maestro de ceremonias retumbó en mis oídos, aunque finalmente dijo algo que me agradó. Iba a comenzar la cena
Le hice una seña a Mousse, lentamente nos retiramos a la cocina, nos urgía un descanso y alimento.
-Entonces, mi pequeño màngmù -comencé a decir mientras mordisqueaba una brocheta de pollo -que hay de nuevo contigo
-El hecho de que te hayas molestado en aprender a insultarme en mi idioma habla tan mal de ti...y no estoy ciego!
-Claro que lo estás. No solo de los ojos, sino de todo lo demás
-Deja de decir eso...RinRin me ama.
-La que te ama es su prima, pero tú insistes en no ver lo que no quieres ver
Mousse, de origen chino, se había vuelto uno de mis mejores amigos en la carrera. Me encanta decirle cegatón, en todos los idiomas que se me pudieran ocurrir (entre otros apodos más, creatividad no me falta), ya que tiene muy mala vista. Y aún peor, se rehúsa a ver cosas que todos tenemos muy claras. Su novia RinRin lo usa como chofer personal, cartera y para el acostón ocasional. Si es que ella no consigue a alguien más con quien ponerle el cuerno ese día. Por más que le he dicho que no le conviene, el muy tarado no la quiere dejar.
En cambio, la prima de RinRin, Shampoo, muere por el. Babea cada vez que se lo encuentra, dice que es el hombre más atractivo del mundo. Que sus ojos color turquesa son misteriosos y divinos. Sé todo esto porque si le das un par de tragos a Shampoo, ella puede recitar una oda de tres horas sobre lo "hermoso" que es "su Mousse", aunque al final termina hablando en mandarín. Con todo y eso, ella es mucho más decente que RinRin. He intentado echarle la mano pero Mousse es sorprendentemente necio...
-No hablemos de Shampoo, que el otro día se metió a mi baño mientras estaba yo en la tina
Opte por no decir nada, aunque si pensé que Shampoo tenía que ser una de las chicas más valientes y/o desesperadas que jamás he conocido.
-Ok ok, no hablaré de Shampoo -Mousse me miró con desconfianza- ¡es en serio!
-RinRin me mandó un mensaje hace rato
-RinRin es una tonta que no te conviene -lo interrumpí
-¡Quedaste que no hablarías de Shampoo!
-Y no lo hice, estoy hablando de la aprovechada de RinRin
-Ranma, en serio, ¿porque somos amigos?
-Porque te digo tus verdades, tu me dices las mías y ambos elegimos no hacernos caso. Eso y que tengo una cuenta de HBOgo y te presto mi contraseña
-Ah cierto -respondió con seriedad- entonces te puedo decir que por mucho que me critiques por estar con RinRin, mínimo yo sí estoy abierto a la posibilidad de una relación. No como tú.
-Ugh, no empieces con esto otra vez. No es que no pueda tener una novia es que no quiero tener una novia. Mírame -señalo mi cuerpo y cara -con este paquete atraigo a suficientes mujeres. Pero todas son iguales, cero interesantes. Nada divertidas para querer pasar más de un par de horas con ellas
-Par de horas? Ja, seguro no duras ni cuatro minutos...ouch! -sobándose el brazo comienza a reír -pero que delicado me saliste. Te diría q traes ese humor por urgido, pero traes la camisa que siempre usas después de tener sexo
Me le quedo viendo a Mousse, luego volteo a ver mi camisa blanca, con cuello estilo chino -¿Cómo? En serio uso la misma camisa después de...
-Si, cada vez. Hasta tu madre lo ha notado
-¿Queeeeé?!
-Bueno, después de que le hice el comentario al respecto...
Maldigo y miro hacia el techo. Con razón siempre me mira feo cuando uso esta camisa. Ahora tiene sentido. Escucho la sonora risa de Mousse, burlarse de mí y de mi relación con mi madre es una de sus actividades favoritas.
Volteo a ver mi reloj, haciendo una mueca -ya no falta tanto para el primer baile. Venga, vamos de regreso al salón, que la loca y el muerto viviente no tardarán en entrar.
La pareja se posicionó al centro de la pista, cuando empezaron a tocar los primeros acordes de la canción más famosa de Whitney Houston. Maldije en voz baja. Mousse solo rió, y extendió la mano para que le diera los ahora 400 yenes que le debía.
Sonreí y levanté mi dedo medio en su dirección.
Sonaron los aplausos de la gente sentada aún en sus mesas, eran una verdadera mezcla extraña de personas. En lo que yo tomaba fotos de los recién casados moviéndose por la pista (aunque pareciera más bien que Kodachi estaba arrastrando a su esposo), Mousse capturaba los rostros de los invitados.
Ya nos conocíamos bien la rutina. Dentro de poco todos comenzarían a unirse a la pista, tomaríamos fotos de la fiesta y de los invitados antes de que perdieran todo el estilo y nos iríamos.
Directo a un bar.
NOTAS DE AUTOR:
Holiiiii! Finalmente pasé de dejar reviews épicos al punto de ser vergonzosos para finalmente escribir algo mío.
Estoy segura que esto es sorpresa para varias chicas de aquí, no dudo que me lo harán saber pronto (temo tanto por lo que pondrá la infame Azusa Calzón Tormenta…)
La idea general de Ranma fotógrafo salió gracias a un post super tonto en facebook, como casi todas las buenas ideas, pero cuando me lo imaginé todo frustrado tomando fotos en una boda, literal escribí 6 hojas sin parar.
Ya que desconfío de mis propias capacidades, le pedí a la muy linda Shojoranko de darme su opinión de lo que llevaba escrito y me dijo que tenía que publicarlo. Así que si hay quejas, pues ya saben con quien! (mwuahahaha)
En fin, los dejo, espero les agrade este primer capitulo!
DanisitaM
