Bueno, esto es un pequeño drabble…algo que tenía que sacarme del pecho. Es selfcest USxUS.
Reflejo.
Alfred no era un chico de rutinas, todo lo que hacía era espontaneo y sin pensarlo dos veces; pero había algo, algo que por mas alocado que fuera su día o lo tarde que fuera a una cita que jamás dejaría de hacer y eso era mirar el espejo que colgaba frente a su cama en la puerta de su armario.
El espejo no tenía nada especial. No, era un espejo común y corriente con bordes ásperos y sin ningún adorno que lo hiciera más atrayente, si fueras a pasar junto al espejo probablemente no lo verías ni dos veces, sin embargo Alfred estaba fascinado con el espejo y no era por el espejo en si sino que era por el reflejo, el reflejo de un chico casi de su misma edad, con vibrantes ojos celestes y una sonrisa que iluminaria el lugar más oscuro del planeta.
"quieren llevarme lejos" suspiro el ojiazul al espejo, el reflejo solo sonrió y negó con la cabeza
"no les hagas caso, sabes que donde tu vayas yo iré contigo"
Alfred suspiro pesado y se acerco al reflejo, su nariz había topado con el frio cristal, sin embargo al sentir como el reflejo topaba su nariz también pudo sentir el calor que le transmitía por lo que sonrió "no van a dejar que me lleve el espejo…"
El reflejo se separo por un momento, pensativo, debía haber una forma de que ambos estuvieran juntos, malditos humanos que quieren destruir lo que no entienden y al parecer los padres de Alfred no entendían su amor, no les permitían estar juntos y querían mandar al americano a un lugar lejano en donde todos vestían de blanco y nadie podía mirarse al espejo
"ven conmigo…" suspiro el reflejo, Alfred levanto la vista para ver esos hermosos ojos azules que tanto amaba
"¿Cómo?" levanto su mano y la puso contra el cristal, el reflejo imito sus movimientos y puso su mano contra la del americano sonriendo como tanto le encantaba a Alfred que sonriera
"de este lado podemos estar juntos, solo….solo tienes que cruzar a este lado"
Alfred asintió y se separo del espejo, sabía qué hacer y no tenía mucho tiempo para hacerlo, sus padres no tardarían en llegar por él y llevarlo lejos, lejos de la única persona con la que quería estar, lejos del único ser que era capaz de hacer a su corazón latir rápido y sentir que se detenía cada vez que lo veía "estaremos juntos…por siempre" el americano sonrió y se acerco al espejo dándole un pequeño beso al reflejo "te amo" suspiro al mismo tiempo que el reflejo y sin decir una palabra más levanto su puño y golpeo con fuerza el espejo haciendo que este cayera al suelo en pedazos.
Y fue así como un par de horas después cuando los padres de Alfred regresaron a casa su madre subió a la habitación del americano y al abrir la puerta grito en agonía, la agonía que solo una madre puede sentir al ver a su hijo tirado en el suelo sobre un charco de su propia sangre sosteniendo en su mano un pedazo del espejo que tanto amaba.