Hola una vez más traigo mi respuesta a un reto y esta vez es para La Noble y Ancestral Casa de los Black
Disclaimer: Harry Potter y sus amigos le pertenece a J.K. Rowling. Todas las ideas que no reconozcan son mías. Esta historia participa el reto "Olores de Amortentia" del foro "La Noble y Ancestral Casa de los Black es la primera vez que participo para este forum
Agradecimiento a Doncella de Lorde quien beteo esta historia.. Gracias por todo y tu ayuda incondicional.
Dedicado a mis Scoroses queridas, a todas quien le guste esta pareja y a todos quienes la lean.
Revelaciones de un filtro amoroso
Brownies
Lily Potter no era la típica chica normal que seguía reglas y normas, porque como digna hija de su padre las rompía cada vez que podía. Harry le había dicho innumerables veces que no subiese al ático, y si lo hacía que no sacara nada de ese lugar, porque podría ser peligroso.
Un día de verano por la tarde, contradiciendo a su padre, subió al ático como cualquier persona curiosa, buscando aquello que era tan terrible que viera.
Entre la curiosidad de la pelirroja que buscaba estantería por estantería, un mal movimiento provocó que un libro le cayera en la cabeza.
—Eso dolió —se dijo a sí misma.
Lily tomó el libro en sus manos y comenzó a hojearlo de manera curiosa, era un libro de pociones. Aunque algunos lo ignoraran ella había heredado las dotes de su abuela en pociones, así que se sentó en el suelo del ático y comenzó a leer página tras página, hasta que encontró una poción que le llamó mucho la atención: Amortentia.
—Poción Amortentia: es uno de los filtros amorosos más fuertes del mundo…—leía en voz alta la menor de los Potter —Esta poción tiene un aroma diferente según la persona que lo huela para recordarles lo que más les atrae.
Lily dejo de leer un momento el libro y sonrió con malicia.
—… Esta poción no crea amor —siguió leyendo —solo crea un fuerte encaprichamiento, debido a que es imposible crear amor o siquiera imitarlo.
Lily se levanto dejando el libro en el suelo. Ya tenía pensado que haría ese verano, aunque tuviera que invertir todas sus vacaciones, trataría de conseguir hacer esa poción.
Una semana después de intentos fallidos y cuando ya estaba furiosa por sus constantes fallos, logro dar con los ingredientes adecuados.
Lily, quien estaba sentada en suelo del ático, pudo ver cómo en su caldero se formaba un brillo nacarado y que el vapor se elevaba formando espirales.
Cuando la pelirroja se acerco aun más a su caldero para poder oler el aroma de su poción, se estremeció. ¿Podría ser que…? ¿Cómo era posible que le recordara…? Se sintió confusa, lo primero que pensó es que quizá había cometido un error al mezclar los ingredientes, pero no, había seguido las indicaciones del libro al pie de la letra.
Un poco incrédula volvió a oler el caldero, y sus fosas nasales se impregnaron de un olor a canela y nueces, luego percibió el aroma del cuero, era como si estuviera una Quaffle dentro del caldero; pero el olor que más la estremeció fue el tercero, era tinta.
Cuando Lily logró identificar ese tercer olor lo comprendió todo y sintió mucho miedo, lo pudo reconocer rápidamente: olía a tinta recién escrita o más bien dibujada. Fue en ese momento cuando añoró los días en que tomaba el sol en los jardines de Hogwarts y no quiso aceptar que de su acompañante era de quien provenían dichos aromas.
Tres días después desde que Lily había hecho la poción, ella y el resto de su familia habían decidido visitar a los Abuelos Weasley como cada domingo.
Lily entro prácticamente corriendo a La Madriguera, saludo a su abuela que le comento que estaba haciendo sus famosos brownies, pero la pelirroja no le tomo mayor importancia.
Estaba en el Jardín de La Madriguera moviendo su varita para crear burbujas y así matar su aburrimiento hasta que sintió la presencia de alguien junto a ella. Pero incluso antes de girarse para ver quién era, sus fosas nasales se impregnaron de un olor que se le hacía muy familiar: canela y nueces. "Maldita poción" pensó la pelirroja.
—¿Lily, qué haces aquí sola?
Hugo se sentó junto a su prima, y mientras Lily trataba de hablar pudo observar que su primo tenía en sus manos uno de los famosos brownies de la Abuela Molly.
—¿Quieres? —preguntó Hugo acercándole el brownie y fue cuando ella comprendió que estaba perdida.
Nueces y canela, unos de los ingredientes de los famosos brownies de su abuela, amados por muchos, sobre todo por ella y su primo Hugo.
"Que alguien me mate" pensó la pelirroja afligida.
¿Cómo demonios había pasado? ¿Hugo Weasley? Por las barbas de Merlín, él era su primo y su amortentia, porque él olía a los brownies. Y lo peor de todo era que parecía ser el indicado para ella, aunque se negaba a aceptarlo y solo quería pensar que la poción estaba equivocada ¡Tenía que estar equivocada!
—¿Lily?
N/A:Se que algunos no les gusta el incesto, pero al menos este a mi me gusta mucho los encuentro muy tiernos de hecho de este del que más escribo, porque me parece que pudiera ocurrir.
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PD:¡Esta historia solo será publicada en FanFiction! Ya que solo tengo cuenta acá y desde hace años que solo publico en esta pagina.
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Besos y abrazos
¡Nos leeeeeemos!
Bella Valentía
