Hola .w. Bueno esta es la primera historia que publico de Homestuck (gritos de chicas) y espero que les guste. Voy a hacer unas pequeñas aclaraciones...

Primero que nada, esta historia es AU (universo alterno) y va a tratar únicamente de los trolls. Ellos serán seres humanos y su apariencia física fue modificada de acuerdo a como mi imaginación -y algunas imágenes de Humanstuck- me dieron a entender (con esto me refiero al tono de piel, cabello, ojos, etc.), pero calma que no les cambiare la personalidad.

Segunda cuestión, la pareja principal aquí es GamzeexTerezi y sera una kismesisstude.

Tercero y ultimo... disfrútenlo.

Disclaimer: Homestuck, al igual que todos los personajes que aparecen en esta historia son propiedad de Andrew Hussie.


Capitulo uno.

Cambios para bien.

Paseando en este Corvair por la carretera los recuerdos comienzan a invadirme. Trato de ignorarlos cerrando los ojos y sintiendo como mis cabellos son despeinados por el viento que va en sentido contrario a nuestro destino, pero es inútil: ya se han apoderado de mi corazón y la imagen de mi madre hace que mis ojos se humedezcan ligeramente.

La depresión es una enfermedad sumamente horrible no solo para quien la padece sino también para las personas que conviven con el enfermo. Ver a la persona más importante para alguien morir lentamente en vida es algo que no le deseo a nadie, te desgarra el alma, te hace querer gritar y desquitar tu frustración en la primera persona o cosa que se cruce en tu camino.

La pérdida de un hijo en el vientre y el abandono de mi padre habían comenzado a sumergir a mi madre en un estado de apatía hacia ella misma: comía poco, dormía mucho, pasaba largos ratos encerrada en su habitación mirando por la ventana con sus ojos rojos de tanto llorar. Mi hermana y yo cuidábamos de ella, un amigo de la familia que era doctor nos apoyaba viniendo a monitorearla de vez en cuando y mi hermana consiguió un trabajo de medio tiempo. Pero mi bella madre cada día estaba peor y la situación termino por rebasarnos. Mi hermana a pesar de ser más grande que yo fue la primera en abandonar dejándome al completo cuidado de mi madre. A pesar de que manda dinero para el tratamiento nunca le perdonare el hecho de que se haya ido.

Los meses pasaron y se convirtieron en años. La escuela era un martirio pero ver a la mujer que me había dado la vida postrada en la cama sin ganas de vivir me destrozaba más que nada. El día en que comenzaron las vacaciones de verano mi madre me miro con sus ojos apagados y me sonrió de una forma en la que me rompía el corazón. Ya todo estará bien ahora, me dijo mientras se tapaba con las pesadas cobijas de su cama preparándose para tomar una larga siesta de la que ya no volvería a despertar.

Agite bruscamente mi cabeza sacudiendo esos recuerdos y dejando que el viento se los llevase consigo. Me quite los zapatos para subir los pies en el asiento y así poder abrazar mis piernas, había comenzado a tiritar del frio que se sentía en aquel auto descapotable sobre todo en el asiento del copiloto.

-¿Terezi?- la voz de mi hermana evito que me volviera a sumergir en mi mar de recuerdos.- ¿Quieres que nos detengamos a comprar algo? La gasolinera está a unos cuantos kilómetros.

Yo solo me limito a negar con la cabeza. No quería hablarle, aun sentía un poco de enojo hacia ella por el hecho de haber abandonado a mi madre cuando más nos necesitaba. Claro que el dinero que nos mandaba ayudaba bastante con los gastos en general pero lo que ella necesitaba era apoyo, no unos billetes cada mes.

-Mira, sé que aún no puedes perdonarme por haberte dejado y haber dejado a mamá también.- a pesar de haberse ido por casi cuatro años seguía conociéndome bien.- A mi también me partía el alma verla así y lo sabes, lo que tú no sabes es que toda esta situación comenzó a afectar también mi vida en general.- claro que lo sabía, la mía también comenzó a irse al carajo lentamente.- Ya no me concentraba en mis clases, mis calificaciones bajaron, mi rendimiento en el trabajo también bajo, las deudas comenzaban a acumularse y comencé a tener ataques de nervios.- de acuerdo, eso sí que no lo sabía.- Pasaba más tiempo en el hospital que en la universidad o el trabajo, un chico me hablo sobre una oportunidad laboral en Oklahoma y bueno… solo quiero que sepas que hice lo que creí que sería mejor para las tres.

-Latula…-hace tanto tiempo que no pronunciaba ese nombre, mi boca sabe raro.- ojala mi madre hubiera escuchado esto, porque a pesar de que yo le decía que estabas trabajando o estudiando se dio cuenta de tu abandono.

Después de decir eso me pase al asiento trasero, de entre mis cosas saque una manta roja, me recosté en el asiento y me tape con la manta. No podía ver a mi hermana pero sabía que ese comentario la había lastimado, segundos después me arrepentí de haberlo dicho pero las palabras habían salido solas de mi boca.

-Ya falta poco, no vayas a dormirte.- fue lo último que escuche antes de caer profundamente dormida.


Creo que quedo algo corto, no se :3

Todas sus opiniones y comentarios son bien recibidos. Gracias por haber leído y nos vemos en el prox cap.