Hola! Espero y esto sea de su agrado.
Disclaimer: los personajes de Naruto son propiedad de Masashi Kishimoto, la historia es lo único mío Lol
Advertencia: esto es un Sasuke x Naruto que ira lento a causa de la trama :p
Disfruten~
"Wake up"
Tsunade mordía su uña de manera pensativa, eso era un endemoniado desastre, un muy endemoniado desastre. Y a decir verdad estaba preocupada, demasiado preocupada. Quería romper una pared de un puñetazo o algo así, cualquier cosa para liberar tensión estaba bien; ojalá Naruto estuviera despierto, sí, ese era el problema. Naruto no despertaba y ya llevaba así dos meses. Al principio se lo atribuyeron al cansancio, demasiado chakra utilizado, nada alarmante. Uchiha estaba del mismo modo, ambos se desmayaron al finalizar todo el asunto de la guerra.
Pero, Uchiha había despertado a la semana y Naruto no. Tuvo que moverse rápido para que los del consejo no hicieran rodar la cabeza del pelinegro porque sabía que Naruto no se lo perdonaría. Mierda, ese niño rubio era su jodida perdición. Apretó sus sienes intentando mitigar el dolor de cabeza provocado por las pocas horas de sueño, estrés y la preocupación. ¡Joder! Ni se había emborrachado de nuevo, nada de sake hasta que Naruto despertara. Eso había sido una promesa que la tenía con ganas de golpearse la cabeza contra el escritorio y golpear a alguien. Suspiró agotada, apoyó su cabeza contra el escritorio encima de los múltiples pergaminos regados sobre este. Papeles de reconstrucción, tratados, cuentas, misiones y por demás médicos se encontraban regados por toda la instancia.
–Que chiquero–murmuró la rubia con voz algo rasposa. Ni se dignó a alzar el rostro cuando escuchó la puerta abrirse porque sabía quién era–. Cuando Naruto despierte me retiro de esto, se lo dejaré a Kakashi, ya estoy cansada, Shizune–soltó otro suspiro.
–Entonces siga trabajando Tsunade-sama, sé que podremos hacer que Naruto-kun despierte, solo debemos seguir investigando mejor, tal vez y eso ni si quiera sea necesario y él despierte un día de estos–intentó animarla y agradeció que la rubia no pudiera ver su rostro contrariado porque siendo sincera ella también estaba muy preocupada, eso era extraño.
La mujer rubia se incorporó con pesadez–. Eso espero, Shizune, eso espero–murmuró viendo a través de la ventana. Debían ser como las dos de la madrugada o algo así–. Entonces, supongo que si estás aquí es porque encontraste material nuevo, ¿no?–la rubia miró a Shizune quien asentía y dejaba unos pergaminos sobre su desordenado escritorio–. Esperemos que esto sea lo que necesitamos.
–Verá que será así, Tsunade-sama–aseguró con una sonrisa la pelinegra–. Me retiró Tsunade-sama, seguiré investigando.
La rubia hizo un gesto con la mano mientras leía interesada los nuevos pergaminos, no estaba segura de si tendría algo útil pero tenía una corazonada. Esperaba no estarse equivocando.
Sasuke observó la figura de Naruto durmiendo plácidamente sobre la cama del hospital–. Estúpido, dobe–murmuró suavemente sentado en el marco de la ventana. No estaba seguro si la seguridad del hospital era tan mala que cualquier persona podía colarse para matar a alguien o si ya daban por hecho que nadie intentaría matar a Naruto por ser el héroe de la 4° Guerra Ninja. Cualquiera de las dos le desagrado.
Chasqueó la lengua mientras se acomodaba mejor en el marco de la ventana donde estaba sentado. En verdad que Naruto era un idiota, por fin estaba en la aldea y él no despertaba. Ya era un ritual aparecerse ahí en las noches para ver si el imbécil de Naruto seguía respirando o si no lo habían intentado asesinar o algo, Uzumaki era un imán de problemas. Sasuke alzo la vista al cielo, ya eran como dos meses en los que Naruto seguía inconsciente y no daba señales de despertar. Todos los días alguien llegaba a acompañarlo por las tardes por lo que él había decidido venir en las noches, nadie lo veía por lo que ninguna persona sabía que iba a visitarlo. Estaba seguro que muchos pensaban que era un malagradecido, bien, esos se podían ir a la mierda.
Se bajó del marco de la ventana con lentitud, caminó hasta donde se encontraba descansando Naruto–. Espero que despiertes un día de estos, dobe, porque esto es aburrido–murmuró mientras lo observaba con una mirada profunda. Su primer lazo de amistad–. Eres molesto–añadió al darse la vuelta para salir del lugar.
–¡Shizune! Prepara las herramientas y el traslado de Naruto a la sala B4–Tsunade se encontraba entusiasta, había encontrado cosas útiles en los pergaminos que Shizune le había traído. No había dormido casi nada por semanas ahondar más en el asunto y ahora ya todo estaba listo. Esperaba que eso funcionara.
–¡Sí, Tsunade-sama!–Shizune salió disparada a su encargo mientras que ella se dirigía a paso apresurado al hospital, si todo salía bien dentro de poco escucharía la voz de Naruto diciendo estupideces.
Caminó a paso seguro por el hospital realizando vagos saludos a las personas que le hablaban. Su objetivo primordial era la habitación del ninja número 1 en sorprender a la gente, en su mano llevaba los resultados de los últimos análisis que le habían practicado a Uzumaki. Todo estaba en orden. El sonido de sus tacones resonaba un poco contra el piso del lugar, al llegar al sitio alzo la vista de los papeles que estaba sosteniendo, afuera de la sala se encontraba Sakura acompañada del chico Uchiha.
–Estábamos aquí de visita cuando Shizune-san nos desalojó de la habitación de Naruto, ¿ya saben que pasa?–preguntó Sakura con un gesto ansioso en el rostro.
–Eso espero–la rubia suspiro–. Puedes entrar a ayudar Sakura, aunque lo que haremos será a nivel de chakra y unos cuantos sellos–aclaró la rubia.
–¡Sí!–la muchacha iba a entrar a la habitación hasta que recordó al Uchiha, le dio una mirada a Tsunade y la mujer suspiró.
–Tú también puedes entrar, Uchiha, pero no hagas nada–concluyó la mujer para después entrar en la habitación seguida por Sakura y Sasuke quien no había dicho nada.
Naruto estaba en una camilla en el centro de la habitación y Shizune ya estaba ahí para asistir a Tsunade–Sakura solo necesito que estés al tanto de sus signos vitales mientras Shizune y yo realizamos los sellos.
–¡Sí!–Haruno se posicionó cerca de Naruto.
–Bien, comencemos–la pelinegra asintió a las palabras de su maestra y en sincronía empezaron a realizar diversos sellos de manos. Miró como unos sellos empezaban a cubrir el cuerpo de Naruto y como este movió un dedo. Al parecer estaba funcionando. El chakra parecía fluir de manera correcta.
–¡Maestra! El chakra de Naruto está empezando a fluir de manera anormal. Está afectando el sellado–Sakura observó como los sellos rápidamente comenzaron a cubrir todo el cuerpo de Naruto hasta dejar solo una figura cubierta de negro.
–¡Detén el sellado, Shizune!–la pelinegra se detuvo al instante. Tsunade se acercó presurosa a la figura de Naruto. El ambiente alrededor del cuerpo era pesado, estaba cargado de chakra. Algo estaba pasando dentro de los sellos y no podían verlo–. Comienza con la anulación–los sellos de manos comenzaron de nuevo. Tsunade mordió su labio al notarlo, entre Shizune y ella no daban abasto para la cantidad de chakra y apenas los pies empezaban a mostrarse libres de sellos.
Giró su rostro sorprendida al notar como los sellos empezaban a desaparecer con más rapidez, a su lado se encontraba Sasuke con el sharingan activado observando concentrado a Shizune que se encontraba al frente de ellos.
–Ya solo falta el rostro–informó Sakura aliviada hasta que empezó a observar con detenimiento el cuerpo de Naruto. La masa muscular había disminuido, sus manos eran más pequeñas, abrió los ojos sorprendida al reparar en el pecho de Uzumaki–. No puede ser…–susurró contrariada cuando los otros tres terminaron.
–¿Qué ocu…?–Shizune se detuvo de preguntar al notar como Naruto empezaba a incorporarse.
–¿Qué?–Tsunade lucía impactada.
Sasuke estaba shockeado y aunque su rostro estuviera estoico su mirada lo expresaba todo.
–¡Qué bien dormí, dattebayo!–Naruto estiró los brazos ante las miradas incrédulas.
–¿Naruto?–susurró incrédula Haruno que era la más cercana al rubio.
–¡Sakura-chan! ¿Qué paso?–al ver el rostro contrariado de Sakura giró el rostro y noto la presencia de los otros tres–. ¡Oh también están Tsunade-obachan, Shizune-nee y Sasuke-teme!–Naruto iba a seguir hablando hasta que notó lo extraño de su voz, era el mismo timbre pero sonaba más suave y delicado…– ¿Qué le pasa a mi voz? ¿Por qué me ven así?–nadie parecía tener intenciones de contestarle.
–Mira hacia tu pecho, Naruto– el zorro habló en su cabeza.
–¿Qué pasa?– cuestionó el rubio mientras hacía lo que Kurama le había dicho. ¿Eso era un bulto? Lo toco y lo sintió real, eso era un pecho de mujer. Comenzó a respirar más rápido.
–Tranquilízate–Kurama intentó calmarlo.
–¡¿Qué me pasa?!–medio grito contrariado.
Y nadie supo que responder porque frente a ellos estaba otra versión de Naruto Uzumaki, una femenina. Parecida al oiroke no jutsu de Naruto en las facciones, solo que el cabello lo tenía corto, bastante corto aunque más largo de como normalmente lo llevaba. Su busto no era exagerado sino que uno promedio y de un rostro un poco redondeado, además que las marcas en sus mejillas se veían más delicadas.
Lo primero coherente que pudo pensar Tsunade fue un "ahora se parece más a Kushina".
Espero y les haya gustado. ^^ Muchas gracias por leer.
Nanami off~
