La primera reacción fue un ligero silencio general seguido por aplausos agigantados por los hufflepuffs, que estaban muy felices de tenerme allí. En cambio yo divisaba como mi túnica se empezaba a llenar de colores amarillos igual que mi corbata
No salía del shock, tanto que le pedí al sombrero que no me ponga en slytherin, este viene y me pone en la casa de los tejones. Sentí mis mejillas colorearse de un rojo intenso mientras tomó asiento junto a mis demás compañeros, los observo lo mejor que puedo y es entonces cuando veo a alguien con quien podría conversar
—Louis! Eh!
Él no parecía tomarme en cuenta, conversaba enérgicamente con sus amiga de quinto año, que lo observaban enamoradas, pero al menos lo conocía
—¿Albus? Oh santo calzón de Merlin ¿tu aquí?— una risotada salió de su boca, que se curvó en una Graciosa sonrisa—. Pensé que nunca iba a tener compañía
Fue a sentarme con los alumnos de quinto, que muy alegres me dieron la bienvenida. estar con Louis no era tan malo, sólo que este pasaba mucho hablando con las chicas, pero había una en especial que no dejaba de mirarla y eso me di cuenta
—¿Por qué miras mucho a Lucy?
Él se puso rojo de la cabeza a los pies y lo negó rotundamente. Fuimos a la sala común donde nos explicaron muchas cosas. Los siguientes días que pasaron, me bañé en vinagre tantas veces hasta que por fin me pude aprender el ritmo de helga, algo difícil de aprender para mi pero lo hice algo al final. La primera vez que me crucé con James, este me miró mal y yo solo me encogí de hombros y seguí mi camino
Ok, tenía que decirle a papá que estoy en hufflepuff, aunque creo que James ya le contó lo sucedido
