Capítulo uno: Una nueva amenaza..
Rika caminaba lentamente por las calles principales de Shinjuku. Llevaba su ropa favorita, unos jeans azules doblados hasta las rodillas, unas cómodas zapatillas y una remera blanca con las mangas azules que su madre, Rumiko le había regalado; aquella remera que tenía un corazón completo en color azul. Había cambiado mucho desde su última aventura. Había comenzado a salir con Ryo, luego de varias insistencias de su parte. Se había vuelto muy buena amiga de Juri, quién por su parte salía con Takato, desde hacia ya más de un año. Ya la mayoría tenían 16 años, a excepción de Ryo quién tenía 17. Todos seguían con sus digimons y siguieron estudiando tranquilamente.
Caminaba casi sin mirar a su alrededor, iba algo distraída, escuchando a su banda favorita, Rammstein, en su MP3
Llegó hasta el final de la vereda y cuando estaba por cruzar la calle, sintió que algo la llamaba:
"Acércate.. Sabes que te necesito.."
Rika paró en seco al escuchar esas palabras. La voz no era masculina, pero tampoco parecía femenina. No parecía siquiera.. Humana..
- RIKA!!
Rika se sobresaltó ante el grito de Ryo y volteó rápidamente hacia él
- Ryo, ¿podrías gritarme un poco más fuerte? Creo que mi corazón no alcanzó de salirse de mi pecho.. – Le dijo ella, bastante molesta
- Mientras que tu corazón sea sólo mío, no tengo ningún problema con su ubicación, mi reina..
- Y ya te he dicho que no me llames así – Le espetó ella, aunque estaba bastante sonrojada
Ryo la miró con dulzura y le dio un beso en la mejilla
- Sólo te buscaba porque el padre de Henry me dijo que te buscara y mandó a Henry a buscar a Takato
- Y, ¿Para qué?
- En realidad, no lo sé.. Pero creo que hay un problema en el digimundo y el padre de Henry quiere probar nuevas armas
- ¿Nuevas armas?
- No lo sé, Rika.. Sólo sé que debemos ir
Rika lo observó y dijo en voz audible:
- ¡Renamon!
Renamon apareció tras ellas, detrás de una columna emplazada en la esquina
- ¿Sí, Rika? – Le dijo en tono suave, con la cabeza gacha
- Ve a la casa de Henry, el señor Wong nos ha llamado. Nosotros te alcanzaremos enseguida
- De acuerdo, Rika. Te veré allá – le dijo y sin más desapareció de la vista.
Rika tomó la mano de Ryo y ambos salieron apresuradamente hacia la casa de Henry
Cuando llegaron a la casa de los Wong, había bastante revuelo. Henry y Terriermon estaban enzarzados en una lucha contra Suzie y Lopmon, quienes querían entrar en el laboratorio de su padre, a pesar de que no lo tenían permitido. A su vez, Takato intentaba despedirse de Juri, su novia, aunque ella insistía en quedarse a curiosear.
Rika y Juri se habían hecho muy buenas amigas luego de las aventuras en el mundo digital; Juri estaba mucho más contenta que antes, porque gracias a los experimentos de Tao Wong, el padre de Henry, en conjunto con el equipo salvaje, había podido recuperar la información de Leomon desde la base de datos de Impmon y habían podido condensarla en un digihuevo color canela, al cual Juri llevaba a todas partes y cuidaba como un tesoro.
Cuando pudieron sacarlas de la casa, se dirigieron al laboratorio.
Ya en el lugar, Takato, Henry, Rika, Ryo y sus digimons, se sentaron ante Tao Wong y esperaron a que él hablara.
- Ustedes saben que los digimons son creados a partir de bases de datos y en su centro poseen un digicore. En especial en estos digimons, la digievolución se lleva a cabo mediante la recopilación de los sentimientos nobles, como el amor, el altruismo y la amistad, que ellos procesan como datos benignos. Los sentimientos impuros como la furia, la soberbia o el deseo de venganza dañan el digicore, porque para los digimons, son como datos dañinos y hasta nocivos. Por eso, a veces, los digimons digievolucionan de manera errónea
Takato bajo un poco la cabeza, apenado, pero Guilmon le dio unas palmaditas en la espalda y este volvió a sonreír.
- Bien, el caso es que por un problema de contaminación del D-Reaper, tuvimos que aislar una parte del digimundo, a la cual llamamos isla Yuutsu. Allí llegan estos datos dañinos, provenientes de los sentimientos impuros de los humanos.
Aunque no sabemos la razón, un digihuevo se formó en ese sector del digimundo. Al principio, su crecimiento era normal. Tenía el nombre de Shogakumon y aunque este digievolucionaba, su nombre nunca cambió. Poco después, nos dimos cuenta de que su digicore estaba invertido: No solo se alimentaba de las tristezas y el enojo de las personas, sino que rehuía a los sentimientos puros. Por eso, no quisimos sacarlo de la isla Yuutsu, ya que si lo privábamos de los datos que lo alimentaban, su digicore se desgastaría más rápido y con el tiempo moriría. No queríamos que esto pasara, ya que era el único en su especie y queríamos protegerlo..
- Eso parece muy noble de su parte, señor Wong – Le dijo Takato con una sonrisa, pero al ver la expresión en el rostro del padre de Henry, la retiró de inmediato
- En realidad.. Fue un error terrible..