Wenu, pos aki esta sta historia k tnia penado publikr ia dsd ace tiempo, wenu, ahora stoi bastant inspirada en ella, asi k spero actualizar pronto, aunq no kiero dscuidar ms otras historias (tnwo a mi kerida Peripecias mui dscuidada xro sk un m sale, n srio!) Wenu, spero k os wuste sta dskbellada historia jejeje k m vino a la mente... Ia no m acuerdo ni kndo! xD
Wenu, ants d nada kru advrtir k contiene SPOILERS d HBP, aunq supongo k a estas alturas tods ia lo abreis leido, nunk sta d + recordarlo x si akso, asi k si no lo abeis leido, no os recomiendo seguir! Jejeje
NOTA: El primer kpitulo sta situado en el 6º libro d JK poco después de que Harry y Ginny se hicieran novios, y un poco antes de la noche D... Wenu, seguro m entendeis, no? Jejeje Spero k les wust mi historia, ls djo cn la introducción!
LA PRINCESA OSCURA
INTRODUCCIÓN:
EL PACTO
Sabía que tenía que haber pedido a Harry la capa de invisibilidad. Era una locura lo que estaba haciendo. Eran cerca de las tres de la mañana y Ginebra Weasley caminaba lentamente, en pijama, por un desierto corredor, rumbo a la biblioteca. ¿Su destino? La sección prohibida.
Se detuvo en la puerta de la biblioteca. Si no se hubiera metido en aquel lío... Ahora necesitaba saber cómo diablos se deshacía una maldición que le había hecho Pansy Parkinson. Sí, y lo peor de todo era que no podía decirle a nadie que todos los días, a las doce de la noche, su piel se volvía verde durante una hora. Había logrado neutralizar la maldición, por suerte, y tan sólo actuaba esa hora al día. Y el colmo es que no podía contárselo a nadie, porque entonces Pansy contaría también las maldiciones que Ginny había practicado con ella como conejillo de indias.
Suspiró, iluminada por el suave resplandor de su varita y abrió la puerta de la biblioteca, que, por suerte, no chirrió. Pero supo que algo estaba mal en el momento en el que vio un suave resplandor al fondo del pasillo, en la sección prohibida, que, de pronto, se apagó. Ginny agarró su varia con fuerza:
- Nox- susurró muy bajo. "Hay alguien aquí" tuvo la absoluta certeza que aquel brillo provenía de otra varita. Retrocedió. No podía ser un profesor, no habría apagado la varita. Allí había algún otro alumno.
Pero ella no veía nada, tenía que retroceder unos pasos más para llegar de nuevo a la puerta y perderse por algún corredor… De pronto, algo chocó contra ella. Cayó hacia atrás, amortiguando su caída con los brazos, pero sin poder evitar una exclamación de sorpresa:
- ¡Ah!- entrecerró los ojos y pudo vislumbrar una silueta que también había caído al suelo, a pocos pasos de ella.
- ¿Qué demonios...?- empezó una voz, pero pareció darse cuenta de su error, el haber hablado. Y Ginny reconoció aquella voz, con un arrastre de las sílabas inconfundible.
- ¿Malfoy?- se le escapó, bastante sorprendida. Al segundo se tapó la boca, pensando si echar a correr, aunque el riesgo de no encontrar la puerta o de tropezar con algo era bastante alto. A su lado, Draco Malfoy se removió bastante inquieto.
- ¿Quién eres?- preguntó el muchacho, desconcertado al haber sido reconocido. Aquello podría traer bastantes problemas a sus planes. Lo más rápido que pudo llevó su mano al bolsillo y sacó su varita-. ¡Lumos!- exclamó.
Ginny entrecerró los ojos, cegada por el rayo de luz que brotó de la varita del Slytherin. Draco Malfoy parpadeó un par de veces, todavía sin levantarse, al ver a quien tenía delante de él... Ginny llevaba un pijama que le quedaba ligeramente pequeño, como la mayoría de ellos y le marcaba el cuerpo. Cuando sus ojos se acostumbraron a la luz, no pudo más que sonrojarse levemente ante la atenta mirada gris del chico.
- Weasley, ¿Qué diantres haces aquí?- soltó él, mientras ocultaba de la vista el libro que había estado leyendo. "Tenía que haberme quedado en la Sala de los Menesteres en vez de aquí..." pensó el rubio, ligeramente preocupado, aunque sin demostrarlo para nada.
- Yo debería preguntar lo mismo, ¿no crees?- inquirió ella, desafiante. Draco arqueó una ceja. Había tenido algún que otro encontronazo con la Weasley y sabía que la menor de la familia tenía un carácter bastante explosivo, pero no iba a permitir que una Weasley lo chantajeara.
- Vaya, vaya a la pequeña comadreja se le ha pegado el espíritu quebranta normas de su querido novio San Potter… Tengo una noticia para ti, Weasley, que Potter siempre se libre de los castigos no va a hacer que tú también lo hagas- sonrió de medio lado, mientras se levantaba del suelo, airoso, aún con la varita en alto. Ginny también se levantó, aunque quedó unos centímetros por debajo del rubio.
- Vaya, pero que casualidad, tú también estás aquí... Y te recuerdo que tú también vas a ser castigado, Malfoy- sonrió con una sonrisa que nada tenía que envidiar a las de él-. El hecho de pertenecer a una familia de descerebrados mortífagos lameculos tampoco va a hacer que te libres del castigo.
- Ten cuidado con tus palabras, Weasley- siseó Draco-. Te arrepentirás de eso cuando pidas clemencia porque tu estúpido bando haya perdido la guerra y sea masacrado. Cuando yo os masacre a todos, uno por uno- sonrió con superioridad, acercándose a ella, con una expresión furiosa.
- Malfoy, estoy tan segura de que tú no masacrarás a nadie que me tiraría de un puente antes de que lo hicieras- la pelirroja permaneció impasible, sin alterarse lo más mínimo con el acercamiento del chico y mirándolo fijo a los ojos-. No llegarás a más que un estúpido pelota de Voldemort esperando un poco de su poder, cosa que nunca conseguirás.
- ¿Así que no seré nada más que un estúpido pelota de Voldemort?- Ginny abrió los ojos, muy sorprendida de que el rubio lo llamase por su nombre-. Creo que te equivocas, Weasley, yo voy a ser mucho más poderoso que Voldemort.
- No me hagas reír, Malfoy- contraatacó Ginny, empezando a molestarse ligeramente por la proximidad del chico-. Estoy tan segura de que no llegarás ni a lugarteniente de uno de sus ejércitos que si llegases a ser tan poderoso como Voldemort, me volvería tu esclava- comentó con burla.
- Tengo una idea mucho mejor- comentó él, con una sonrisa divertida en los labios. Ginny lo miró, expectante a ver lo que se le ocurriría al chico-. Si yo me vuelve tan poderoso como Voldemort tú… Te casarás conmigo.
- ¿Qué?- dejó escapar ella, totalmente incrédula, segura de que el chico le estaba tomando el pelo. Pero estaba bastante serio. Parpadeó, sin poder creer que Draco Malfoy acababa de pedirle de una sutil y remota forma, que se casara con él.
Y para el mayor desconcierto de la pelirroja, aprovechando su confusión, Draco Malfoy se acercó a ella y la besó el los labios. Fue la cosa más extraña que le había pasado en la vida. Una parte de ella quería salir corriendo de allí, pues no le gustaba nada el rumbo que había tomado todo aquello, pero, todavía confusa y hecha un lío, sin saber muy bien por qué empezó a responder al beso. Y de forma repentina, el beso terminó cuando el chico se separó de ella.
- Me tomaré eso como un sí- comentó él como si tal cosa. Ella fue a abrir la boca para protestar, pero no le salían palabras de la boca. Draco se separó más y estaba a punto de irse, pero se volvió y dijo-: Por cierto, Weasley, yo no te he visto aquí y tú tampoco a mí.
Y desapareció, mientras la pelirroja, a la que le fallaron las piernas se recostó en el frío y húmedo suelo de la biblioteca. Su mente era un torbellino de sensaciones. Y una extraña idea se formaba en su mente. Le había sido infiel a Harry, si aquel beso contaba como infidelidad. Acababa de decirle, o darle a entender, al mayor enemigo de su familia que se casaría con él si se convertiría en el nuevo líder de los mortífagos en el futuro. Y ni una cosa ni la otra le acababa de desagradar del todo.
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Pocos días después Dumbledore fallecería y Draco huiría del castillo. La relación entre Harry y Ginny terminaría y empezarían a formarse unos vestigios de un futuro enrevesado y confuso.
El 18 de julio de aquel mismo año, Ginny desaparecería sin dejar rastro. La versión oficial sería un secuestro indefinido, quizás por los mortífagos, podría estar muerta. La realidad una bien distinta.
CONTINUARÁ...
Wenu, k ls parecio? M a nantado la conversación! Jejeje, pnse k m abia kedado peor, xro al releerlo no sta tan mal? Sk m parec adorabl, primero ella llevaba el control y al final si keda sin palabras! Jejeje
N fin, primero kiero avisar k no pienso aser ls kpitulos excesivamnt largos xk spero scribir sta historia rapido, k si no m kedo ataskda i s horrible! Jejeje wenu, ps spero actualizar Peripecias pronto (Ejem...) I tb spero k m dejeis muxos reviews, si? Jejeje!
Spero ls aya gustado, no olviden los reviews!
AnnaBlack