No podía evitar las ganas de llegar a casa, tenia nesecidad de hablar con Jake y saber como estaba, lo amaba tanto que poda sentir que no vivía sin el, hace ya dos semanas que no lo veía ni sabia nada de el, ayer recibí su llamada y sentí como el corazones me aceleraba al escuchar su hermosa voz, dijo que estaría viajando a Dember porque ya no aguantaba las ganas de estar conmigo.

"¿Nessie, Nessie?, hija reacciona".

"Lo siento mamá, estaba pensando en Jake…".

"No me sorprende hija, es el amor de tu vida…" Si eso era y algo mas, algo que no se podía describir con palabras ni gestos, algo que solo lo podíamos entender el y yo.

Llegando a casa baje del auto con mucha rapidez y abrí la puerta, ahí estaba el, sentado en el sillón blanco conversando con Papá, ambos nos miramos a los ojos, mi cuerpo no reaccionaba a tanta emoción el se acercó y me abrazó sus manos recorrieron toda mi columna, me estrechó contra su pecho caliente y me besó, fue el besó que tanto había estado esperando, que tanto deseaba probar.

"OH Jake, te he extrañado tanto, no quiero que te alejes de mí, nunca mas por favor, prométemelo".

"Sabes que no puedo, y aunque te ame con todo lo que tengo para dar no es suficiente…". No pude evitar dejar caer unas lágrimas cuando escuche sus palabras, era demasiado orgullosa como para que mis padres y Jake me vieran llorar, subí las escaleras lo mas rápido posible – felizmente no había heredado la torpeza de mi madre cuando era humana – y me dirigí a mi cuarto, me tire sobre mi cama y seguí llorando.

Pude escuchar el gruñido de mis padres hacia Jake mientras el subía las escaleras hacia mi habitación. "Bien hecho chucho", odiaba que mi padre lo llamara así pero esta vez no tenia ganas de replicar.

Jake tocó la puerta antes de entrar y limpié rápidamente las lágrimas que caían por mi mejillas que no habían demorado mucho en ponerse rojas.

"¿Puedo?" Me levante de la cama y le hice un gesto con la mano permitiendo su entrada.

"¿Qué es lo que quieres?"

"No puedo verte llorar, no mas Nessie…"

"Entonces dime lo que quiero oír…" Se acercó a mí y con un beso limpió una de las lágrimas que caía.

"Desearía, pero no puedo…"

"Entonces me iré contigo"

"Ness, ya hablamos de eso, sabes que no podemos, por lo menos no ahora…" Levanto mi quijada acercándola a sus labios, chocó su frente con la mía y le permití ver lo que por esos momentos cruzaba por mi mente.

Éramos el y yo, juntos en Forks, el pueblo donde mamá y papá se conocieron, donde tuvieron su primera historia de amor, donde yo pertenecía. Era un lugar mágico, lleno de criaturas que nunca nadie se imaginó encontrar. Ahí estaban Quil, Leah, Sam, Seth y todos los de la manada de Jake, un pequeño niño que se acercaba a Jake y le decía papá, éramos una familia.

"Woow, Nessie yo…" Cerré sus labios con un beso, encajando como siempre perfectamente, y no lo dejé ir, no quería que se fuera de mi lado, no podría soportarlo, y en el fondo sabía que el también sentía lo mismo que yo.

Lo tumbé sobre la cama y pude sentir como su cuerpo reaccionaba al igual que el mió, sabia que el quería lo mismo que yo, sabía que el me deseaba tanto yo como a él, era inevitable. Sentí sus dedos recorrer mi columna hasta llegar a mi cintura, tiré de su camiseta y la rompí en dos, no me importaba nada, ni mis papas, ni mi familia, absolutamente nada, éramos solo el y yo juntos en mi habitación haciendo lo que la naturaleza no podía evitar, haciendo lo que había estado retrasado por tantos meses.

El estaba ahora entre mis brazos y yo entre los suyos, su boca recorría mi cuello, podía sentir su aliento y el ritmo de su corazón acelerarse tanto como el mió, sin duda alguna ambos estábamos destinados a estar juntos, pasase lo que pasase.

De pronto sentí su cuerpo apartarse del mío, el momento había culminado y aún no tenia suficiente de el.

"¿Por que me haces esto Ness? ¿Porque ahora?"

"Dicen que la mejor manera de deshacerse de una adicción es cayendo en ella"

"Tu en verdad quieres que Edward me parta en dos ¿verdad?"

"No se atrevería, sé lo mucho que significo para mis padres"

"Tal vez un día de estos solo tengas de m recuerdo el plato que Rosalie hizo para mi…"

No pude evitar carcajearme, recordaba esa historia con mucho placer, cuando Rose y Jake no se llevaban nada bien.

"Ness, te amo, eres mi alma gemela, todo lo que necesito para vivir, por eso tengo que hacer una pregunta que tal ves me cueste pelea para que lo acepten, pero aún así lo intentare, porque te amo y nada ni nadie cambiara eso" Sus palabras me desconcertaron ¿Qué ibas a hacer Jacob Black?

"Renesmee Cullen ¿Quieres ser… mi esposa?"

"¿Qué?"Auch papá había escuchado la pregunta de Jacob, esto se pondría feo. "No Bella, yo lo mato,¿Cómo se atreve ese chucho a pedir la mano de mi hija?…Está loco si creé que aceptaré eso"

No dudaba en que mamá sabía como controlar a mi excéntrico padre. Ella lo haría reflexionar y yo pues ahora tenia algo que responder.