HOLAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAA(?)
Bueno, emp... no se exactamente de donde salio, pero... ¡Aquí esta!
Demashitaa Powerpuff Girls Z, no me pertenece -si fuera mio, Ken seria mas uke de lo que ya es uwu-.
Este fic participa del reto temático del foro Power Z
Un día tranquilo y común.
La brisa fría de la mañana se metía de intruso en las sabanas de la joven Matsubara, que por inercia se abrazó a sí misma.
Dos minutos después el sonido del despertador interrumpió en los sueños de ella y con una mano que débilmente salió del cálido cubrecama, lo apago.
Bostezo mientras que con mucho desgano logro ponerse de pie, dirigiéndose al baño.
-o-
Ella escuchaba sus pasos apresurados, se le hacía tarde.
Cuando a unas pocas calles diviso el colegio y se tranquilizó al ver como algunos recién llegaban. Entonces recordó que había adelantado su reloj diez minutos, para prevenir casos como estos.
Se detuvo un momento, recupero el aire y camino más tranquila.
— ¡Kaoru, buenos días! — dirigió su mirada a la joven pelirroja que se encontraba sacando unos libros de su casillero.
— Buenos días Momoko — saludo haciendo lo mismo que ella. — ¿Has visto a Miyako?
Momoko solo le negó con la cabeza.
— ¡Chicas! — vieron las mejillas rosadas de Miyako por la corrida, y también por el frío.
— Una mañana helada ¿verdad?
Ambas asintieron.
-o-
Las clases fueron lo más agobiante para ella, salvo que al menos estaba sentada cerca del radiador.
Al sonar el timbre del el ultimo receso, el profesor cerro su libro y salió.
— Oye Kaoru — miro hacia arriba y vio esos ojos rojos.
— ¿Qué quieres?
— Acaso, ¿no dormiste bien? — sonrió.
— ¡Es tu culpa! Anduviste toda la noche llamándome.
Brick se rio — Podías haberme cortado.
Ella lo miro enojada.
— Tranquila, tranquila… Em, ¿Qué harás a la salida?
— Nada, ¿por?
— No te vayas del salón, te llevare a casa — sonrió mirando esos hermosos ojos esmeraldas.
Se fue, dejando a Kaoru un poco sonroja y sin tiempo de responder.
Y tampoco es que ella le diría que no, su silencio solo confirmaba más la idea del chico.
-o-
Abrió la puerta del salón y ahí estaba ella, con unos borradores en la mano. Seguramente la castigaron.
— ¿Otra vez? — le pregunto mientras ponía su chaqueta en una de las sillas.
— Fue la culpa de Himeko — se defendió.
— No dije nada — se disculpó, él sabía que esa chiquilla era como un silbato, cada vez que hablaba era irritante.
El empezó ayudar, Kaoru no se opuso, minutos después terminaron y ahora ambos se dirigían a la salida.
— Kaoru.
— ¿Hm?
Él se detuvo un momento al igual que la morena, llevo su mano a su camisa y saco el segundo botón— Ten.
— ¿Qué quieres que haga con un botón? — lo recibió.
— Ponlo en un lugar visible, es un símbolo.
— ¿Símbolo de qué? — pregunto mientras lo guardaba.
— Tu solo hazlo — hablo al momento que tomaba la mano de la chica y empezaba a caminar.
Según una costumbre algunos chicos les regalan el segundo botón de su camisa a las chicas que aman, ya que, este es el más cercano al corazón.
¡Okay! Es todo, espero que les guste~ u v u
Se despide
~*-*- Leyendo -*-*~