Hola! ^w^/
Bueno... Este es mi primer fanfic... Y no sé que tal esté XC es fruto de mi pequeña obsesión por hetalia y mi reciente enamoramiento de cada uno de los 2p X3
Ojalá les guste!
Todo era lo mismo en la sala de conferencias. Los países hacían de todo menos preocuparse por los problemas del mundo.
Italia estaba comentándole a Alemania sobre una excelente pasta que había comido hace unos días.
Romano le gritaba a España en italiano, mientras éste sólo se reía.
Prusia le contaba a Austria acerca de las cosas asombrosas que el asombroso él había hecho mientras formaba parte de los caballeros teutones, cosa que el señorito no escuchaba para nada, al tener la mirada clavada en Hungría, quien discutía con Rumania.
Los nórdicos estaban en su mundo, Finlandia hablaba con Suecia, quién sólo le respondía con monosílabos. Dinamarca se reía al escuchar a Noruega tratar de convencer a Islandia de llamarlo "Hermano mayor" mientras que éste lo mandaba al diablo.
Para variar, Inglaterra y Francia estaban peleándose, mientras Rusia sólo sonreía al verlos, con su típica sonrisa tétrica.
Polonia jugaba ajedrez con Lituania, aplicando la Ley Polaca cada vez que estaba a punto de perder, para disgusto del primero.
Grecia estaba dormido, rodeado por cerca de veinte gatos.
Y América estaba tan absorto jugando en su videojuego, que no prestaba atención a todo eso.
Mientras tanto, en el grupo de los asiáticos; Hong Kong jugueteaba con un pequeño cachorrito de panda, mientras Taiwán no apartaba la mirada de un librito con dibujitos un tanto sospechosos. Sin embargo, Corea del Sur observaba cada cinco minutos el reloj.
¿Dónde estarían Japón-nii y China-ge? No había oído de ellos en casi toda una semana. Lo cual, tomando en cuenta de que él estuvo a punto de ser deportado de China por acosar al país en cuestión; era excesivamente raro.
Apartó la vista del reloj, y suspiró. Los otros países habían tomado el retraso de esos dos como excusa para no empezar la conferencia sino hasta que llegaran. A este paso, Inglaterra transformaría a Francia en una auténtica rana, Noruega ahorcaría a Dinamarca con su corbata, y el cuarto sería invadido por todos los gatos de Grecia, el cual ya no podía ser visto entre tantos de dichos animalitos. En serio, ¿Cuánto tiempo pensaban tardar?
-Perdón por la tardanza.
-Estamos aquí.-
El ruido de la sala se apagó cuando todos voltearon hacia el par de asiáticos que habían hecho su aparición. Ambos estaban de pie en la entrada, y al ver que los demás países no emitían ninguna queja por su atrasada llegada, se fueron a sentar. Corea tuvo la tentación de frotarse los ojos, para cerciorarse si lo que había visto era una ilusión. ¿China-ge y Japón-nii llegando juntos? Y lo que es más, ¿Sentándose uno al lado del otro? Sintió escalofríos al oír a cierta húngara y cierta taiwanesa –inclusive a cierto francés,- emitir una risilla pícara. Al parecer ellos también se habían dado cuenta de su repentina cercanía. Se encogió de hombros y se acomodó en su silla. –Bueno.- pensó. –Supongo no está mal que sus hermanos mayores volvieran a ser amigos.-
La conferencia comenzó, para desagrado de muchos países. América comenzó con su argumento de cómo podrían usar un superhéroe para disminuir la inflación, o cómo podrían construir un refrigerador gigante alrededor del Polo Norte para detener el deshielo.
-¡E incluso podríamos construirles un hotel a todos los osos polares! –Agregó América.- ¡Así no tendrían que preocuparse por quedarse sin casa si el Polo se derrite! –
Lanzó su sonora risa, la cual llenó todo el lugar. Pero esa risa se desvaneció poco a poco; mientras el americano volteaba hacia a Japón.
El observado lo miró.
-¿Si? –Preguntó.
-Eh… -Respondió América.- Estás de acuerdo conmigo, ¿Cierto?-
El japonés no parecía comprender. – Eh… Pues debo admitir que los países no tienen suficientes recursos para construir un refrigerador en medio del Polo; además, pensar que es posible conseguir un motor de enfriamiento lo suficientemente grande y potente como para abastecer al Polo Norte entero del frío necesario…-
Todos miraron estupefactos mientras el país suspiraba.
-Quizá sea irrespetuoso América-san, pero siento que más que nada es una estupidez.-
La sala quedó en un silencio comparable al de una tumba… Japón… ¿No estaba de acuerdo con América? Incluso Suiza no sabía si aplaudirle o gritarle qué demonios estaba mal con él.
China se apresuró a corregirlo. –Eh… Porque sería mejor usar una hielera en lugar de un refrigerador, eso era a lo que Japón se refería.-Cuando el país mencionado se iba a quejar, la mirada asesina de China lo evitó.
El ambiente se alivió cuando Japón asintió y le sonrió a América. –Aunque la idea de volver a enfriar el polo artificialmente sólo pudo haber venido de un gran héroe, América-san.-
El americano se rió. -¡Por supuesto que sí! ¡Yo soy el héroe!
La conferencia siguió, aparentemente sin ningún percance.
Aunque Inglaterra sintió de repente un sentimiento de desconfianza creciendo en su pecho.
Ese aroma… Ya lo conocía. No sabía si Hong Kong se había dado cuenta, pero el olor que emanaba China era inconfundible… ¿Qué demonios?
La sala se iba vaciando poco a poco, mientras los países se disponían a regresar a casa después de la singular conferencia.
El inglés caminaba a lo largo del pasillo, sintiendo el recuerdo de ese aroma llenarle los pulmones. Empezaba a sentirse enfermo…
Se detuvo, al escuchar una discusión proveniente de un pasillo que se unía al que estaba él. Eran China y Japón.
-Eres un imbécil. –Dijo el primero. –Debiste haberle seguido la corriente, se supone que siempre lo haces.
-Me disculpo. –Hubo un silencio, Inglaterra supuso que Japón hizo una reverencia.- No sabía que este América-san estuviera tan acostumbrado a las acciones de los demás…-
China suspiró.
-Como sea. Pero asegúrate de ser más cuidadoso, por favor. No quisiera que nos metamos en problemas por tu culpa.-
Inglaterra arqueó las cejas. Eso era demasiado. El tono de China hacia Japón era demasiado tranquilo y hasta maduro. Además, ¿A qué se refería Japón cuando dijo "Este América-san"?
Se acercó a la pared cuando los dos países se dirigieron al pasillo, para no ser descubierto. Apenas le dieron la espalda, él se aproximó. Sólo había una forma de confirmar sus suposiciones.
-Oigan.-
Ambos se detuvieron y voltearon hacia él; con una extraña para ser de ellos –e incluso tétrica- expresión seria.
-¿Qué quieres Inglaterra? –Respondió China.
Inglaterra frunció el ceño.
-¿Qué les hicieron?-
Ahora China fue quien hizo una mueca.
-¿De qué hablas, imbécil?
Inglaterra rió para sí.
-A los verdaderos China y Japón.-
"Japón" parecía incómodo. –Inglaterra-san… ¿Qué le sucede? No sabemos a qué se refiere.-
Inglaterra miró a "Japón", y después a "China", quien le sostuvo la mirada, igual de molesto.
"China" suspiró y agitó la mano, como espantando una mosca.
-Bien, bien. Si no tienes nada más que decirnos Inglaterra, nos vamos.-
Comenzaron a alejarse. El inglés sonrió.
-Opio.-
"China" se detuvo y permaneció como congelado en su lugar. Japón miró a Inglaterra, quien sonreía con triunfo, con los brazos cruzados.
-China siempre me ha llamado Opio. Ah, y por cierto; -Levantó el índice.- A eso es a lo que apestas. Y China no ha fumado opio en… Cerca de cuatrocientos años. –Su expresión volvió a endurecerse.- ¿Quién eres tú? ¿Y qué le hiciste al verdadero China?-
-Inglaterra-san…-"Japón" se veía serio, pero se escuchaba preocupado.
Iba a decir algo, pero "China" se le adelantó, riendo.
-Vaya, vaya… -Se volteó para encarar al británico. -Y nosotros que creímos que el Inglaterra de este sitio sería un imbécil comparado con nuestro Inglaterra. –Volvió a reírse, aunque después volvió a mostrar esa expresión neutral.- Te equivocas en una parte. –Se encogió de hombros.
"China" acercó una mano a su cabello. Inglaterra sintió un nudo en el estómago, al ver cómo el asiático removía un par de pasadores de su coleta, y después la misma caía al suelo, como si nunca hubiera formado parte de ninguna cabellera.
Por un par de segundos el inglés vio atónito el cabello que estaba en el piso; después alzó la mirada para ver a un chico exactamente igual a China; exceptuando el cabello corto hasta la nuca y el cuello de la chaqueta, que al parecer se había levantado. "China" sacó una pipa de su bolsillo y sacando un cerillo la encendió y comenzó a fumar.
Exhaló el humo del opio, viendo a Inglaterra pasmado en su lugar.
-Ambos somos China. –Dijo.- Pero yo soy mucho mejor.
Y ese fue el primer capítulo! w oAo no se muy bien cómo es la personalidad de 2p japón, así que si no es así; son libres de corregirme nwn (pero no tan duro que lloro QwQ)
¿Dónde creen que estén Japón y China? owo
