Un día, conocí a un chico…
Cuando nos presentaron, sonrió maliciosamente, como un depredador observando a su presa y aclarando ese mismo día.
"Tú eres solamente mío, no tienes opción"
Me daba miedo, porque me prometí a mí mismo que no sería igual que mi padre, quien utilizaría cualquier método ruin para lograr mis objetivos; pero aquel muchacho no se rindió conmigo y continuo tratando de romper aquella coraza que me había impuesto; su arrogancia era digna de admirarse, en sus ojos se veía la seguridad de lograr llamar mi atención, me causo un poco de risa su actitud a la de un niño pequeño y brabucón tratando de hacer amigos.
"¿Daidouji no se enojara por estarte saltando los entrenamientos?" pregunta Toji con sarcasmo, mientras se encontraba sentado junto a Ryuuga en la torre más alta de la organización
"Yo decido cuando entrenar y cuando descansar; lo que piense mi lacayo, no es mi problema" aclara Ryuuga, con orgullo y mira a Toji con una sonrisa pícara "Pero… hay algunas excepciones, claro está"
"A mí no me molesta, pero…" comenta Toji, tímidamente
"Entonces, no te quejes" aclara Ryuuga, acostando su cabeza sobre las piernas de Toji y tocando uno de los mechones de su cabello "Deberías sentirte honrado, no a cualquiera le doy esa oportunidad"
Cuando me beso por primera vez, fue cuando nos encontrábamos en las montañas, hubo un deslice de rocas y utilizo su cuerpo para protegerme; antes de quedarse inconsciente, empujo con su mano que coloco sobre mi cabeza, obligándome tocar sus labios con los míos, sonriendo de satisfacción antes de perder la conciencia; me resultaba imposible creer su amor en mí, aquel pequeño pensamiento broto en mi como lágrimas y llore con fuerza, al saber que mis sentimientos egoístas surgían gracias a su presencia y deseaba estar a su lado…
Cuando tuvimos relaciones por primera vez, debo de admitir que yo tuve la culpa por dejarme convencer, aquel cruel muchacho, solo me quitaba sus ropas rápidamente para esparcir sus besos en mi cuerpo y dejar marcas sobre mi piel como su fueran sellos de su fechoría; trataba de cubrir mi rostro por la vergüenza que sentía en aquel momento, pero aquel joven solamente los apartaba y me miraba fijamente junto con una sonrisa maliciosa, como si estuviera diciendo…
"No te dejare escapar"
Nunca me tomo de la mano, aunque nunca dejaba de acariciar mi cabeza con cariño.
No me dijo que me amaba, pero si lo aclaro que solamente era suyo.
De nunca manera se casaría conmigo, aunque lo que más le molestaba es que lo dejara solo.
¿Cómo fui capaz de enamorarme de un hombre tan complicado? Me sorprendí cuanto bajaba la guardia cuando me encontraba a su lado y era un poco frustrante saber que había perdido; haciendo que el temor que oprimía mi pecho, que hiciera más fuerte...
Si esta persona se enterara de la verdad... ¿Dejaría de amarme?
Como habran notado, reemplace el capitulo que mas tenia por el que publique en el blog de mi pagina de Devianart (DeathScytheCrow, visitenla por favor!), le hice unas modificaciones y pude corregir las fallas (Si mi amiga Betty las mirara, les daria un patatus, LoL)
Pronto subiré el segundo capitulo!