LOS TEMPLARIOS
Por: Ivanov Shinigami
Capitulo 1
Prologo
Todo tiene un comienzo...
las flores, las estrellas,
el sol, el universo...
y tarde o temprano,
el tiempo de morir les llegara...Pero el amor siempre existirá...
aunque exista el odio y la envidia,
aunque todo se acabe,
este siempre perdurara...
En algún lugar del inmenso bosque, donde nada se ve, donde nada se escucha, donde la oscuridad desaparece el paisaje natural... existe un lugar mítico... un lugar donde la magia, los misterios y las leyendas son verdaderas... un lugar llamado Ayur...
Este poseía una gran ciudad, manantiales, ríos y riachuelos, con agua pura y cristalina, la tierra fértil y rica en abundantes alimentos, montañas con nieve blanca en sus puntas, praderas llenas de todo tipo flores y colores, un paraíso natural...
Hay habitan los templarios, una raza de seres hermosos, con corazones puros y bondadosos, que no conocen otra cosa que el amor mutuo y la belleza de la vida, el porque las cosas existen y la razón de ser, en ellos siempre esta presente la cooperación y el ayudar a los demás, sus almas no pueden obscurecerse tan fácilmente...
En este bello paraje, también habitan los tres magos templarios, mas viejos que el tiempo mismo, sin principio ni fin..., sabios y poderosos cada uno diferente del otro, Kalay representaba el valor, Xel-ha la compasión y Ai el más poderoso de los tres el amor, ellos protegían al pacifico y bello pueblo de cualquier amenaza, la amenaza más grande de todas... los hombres...
Los hombres son bélicos por naturaleza, son fáciles de seducir por la ambición y el poder, sus corazones sencillamente pueden contaminarse con toda clase de sentimientos abominables, no les importar nada y esto los lleva a su destrucción... la destrucción entre ellos... la destrucción de todo a su paso... todo lo que les estorbe...
Los sabios lo sabían, sabían que el ser humano podía corromperse en un abrir y cerrar de ojos, sabían que si entraban a la ciudad destruirían todo con tal de encontrar el poder que en esa tierra dormía... por ello crearon una gran muralla mágica, donde nadie puede entrar y nadie puede salir, amenos que sea mas poderoso que los magos mismos...
La ciudad era inmensa, templos y monumentos por doquier, al igual que las casas, todo hecho de mármol blanco precioso y brillante.
Cada templario se dividía por clanes, correspondientes a cada mago, del mago del valor era el clan guerrero, seres que custodiaban la ciudad y protegían a los demás templarios, vestidos siempre de negro, con su rostro cubierto y enormes lanzas en sus espaldas, se hacían llamar los templarios tétricos, del mago de la compasión eran el clan de la fortaleza, aquellos que labraban la tierra, pescadores y arquitectos, vestidos de ceda delgada, por las duras tareas que realizaban, y del mago del amor, el clan mágico, eran aquellos seres llenos de amor, vertían togas del mismo color que el mármol y poseían talentos diferentes, se definía como dones especiales.
Cada clan poseía un símbolo especial, y los pertenecientes de este también lo tenían, ya sea en el pecho, cerca de corazón o en el brazo izquierdo.
Cada templario nacía con este símbolo, según el tipo de corazón que tenían, de ahí se les preparaba para su trabajo que seria para toda la vida, no importaba si fueran felas (mujeres) o domers (hombres).
Los magos se encontraban en el enorme templo, en el centro de la ciudad, cada uno poseía una cámara de descanso diferente, pero la mayoría del tiempo se la pasaban meditando y escuchando algunas dudas y cuestiones de los demás templarios...
- en taro Ayur sabios templarios – indico uno de los templarios tétricos hincándose – lamento molestarlos, pero uno de los Ikes(niños) cruzo la muralla mágica... y no podemos ir por el...
- ESO ES IMPOSIBLE! – dijo el mago Kalay
- lo se señor, también para nosotros es increible, pero pido permiso para devolverlo... – dijo angustiado
- no, deja que el Fénix vaya por el... – indico el mago Ai
- como ordene... en taro Ayur... – dijo, hizo una reverencia y se fue
Cerca de la muralla mágica, los templarios se reunían para enterarse del acontecimiento...
- que sucede? – pregunto un joven templario del clan Ai, su cabello plateado le llegaba a la cintura, este se mecía de un lado a otro por el viento, su piel blanca se estremecía al pensar en lo que probablemente pasaba, sus ojos azul celestes se angustiaron al ver a un Ike conocido, que se acercaba a el llorando – que pasa Quatre? – se agacho para estar a la altura del Ike
El niño vestía ropas blancas al igual que el mayor, pertenecía al mismo clan, sus cabellos rubios se movían al rito del viento, su piel blanca como la porcelana temblaba y sus preciosos ojos color aqua estaban cubiertos por lagrimas – Zeck... es que Duo... Duo... – decía entrecortadamente
- que le pasa a Duo? – pregunto asustado, Duo era para el como un hermano pequeño, los padres de Duo habían desaparecido cuando el era un recién nacido, el se hacia cargo de el y se cuidaban mutuamente
- estábamos jugando... y acordamos una carrera hasta la muralla... corrimos hacia ella, Duo es mas veloz que yo, me detuve porque ya me había cansado, pero Duo no... al principio pensé que se estrellaría en ella, pero después la atravesó... intente ir por el, pero no pude pasar... después los templarios tétricos fueron con los sabios... pero Duo aun no regresa... fue mi culpa... – dijo volviendo a llorar
- no llores Quatre, no fue tu culpa – dijo abrazando al pequeño - Duo regresara sano y salvo – dijo sonriéndole al pequeño
En las afueras de Ayur...
Un Ike del clan Ai se encontraba sentado en medio de la pradera, su cabello castaño se encontraba desordenado y sucio al igual que sus ropas y su carita, sus bellos ojos amatistas estaban temerosos, rojos y húmedos de tanto llorar, nada se veía a su alrededor, estaba asustado por lo que había visto, no sabia donde estaba, lo único que recordaba era que estaba jugando con su mejor amigo Quatre, estaban corriendo y después paro en un árbol al ser el vencedor, pero al voltear ya no vio la cuidad... ni a Quatre, camino sin rumbo, hasta que se topo con cosas extrañas, cosas que no había visto y que llamaban su atención, era muy curioso y por eso se aventuro, entre ellas estaban varias cosas echas de acero, cosas que si se juntaban hacían la forma de un ser hueco... sin vida... después metales largos con filo, pero estos tenían algo raro, un liquido rojo que aun estaba fresco... al verlo se asusto aun mas y retrocedió, pero cayo en un charco de lodo mezclado con el liquido rojo, topándose así con un cadáver maloliente, se levanto lo mas rápido que pudo y corrió hacia la pradera hasta quedar sin aliento...
Ahora estaba solo, asustado y sucio... solo podía esperar... a que alguien llegara por el... solo esperar... no quería moverse de ahí... no quería volver a ver aquello tan aterrador...
Un haz de luz se vio en el cielo, como si el atardecer hubiese llegado repentinamente, el naranja se mezclaba con el azul, el pequeño lo vio y se aterro, pero la energía poderosa y cálida que emitía le hizo entender que no le aria daño, reconoció tal poder, era el poder de los sabios...
Una hermosa ave aprecio ante el, era el fénix de los ansíanos, habían ido a buscarlo... se sintió feliz, el fénix aterrizo a un lado de el, era un ave enorme, con plumas doradas y anaranjadas, acerco al Ike con su ala, lo abrazo, el pequeño al sentir el calor del ave se quedo dormido, esta lo tomo de su ropa y lo acostó delicadamente en su espalda para después cerciorarse de que estuviera bien, tomo vuelo y regreso a la ciudad...
En la ciudad se observo el resplandor del fénix, esto significaba que había regresado al pequeño Ike sano y salvo, el ave voló hacia el templo de los sabios, Zeck preocupado por su pequeño hermanito corrió junto con Quatre hacia el templo...
El fénix aterrizo en el patio central del enorme monumento bajando con suavidad al Ike, uno de los templarios tétricos lo cargo y lo llevo ante los ansíanos... al entrar en la cámara de meditación lo dejaron acostado al centro de los magos y se retiraron...
- pequeño Duo despierta – murmuro el mago Ai
- mmm... – susurro el pequeño abriendo los ojos lenta y pesadamente – ho! En taro Ayur sabios templarios – dijo levantándose rápidamente e hincándose al reconocer el sagrado lugar – disculpen mi presentación... – dijo al recordar lo sucio que estaba
- no te preocupes pequeño Ike – le sonrió el mago Xel-ha – ponte de pie - le ordeno
- si... – Duo se sonrojo, jamás había estado frente a los ansíanos, y menos tan sucio, se sintió avergonzado por eso, no merecía estar ahí, no lo merecía...
- no te sientas mal pequeño Ike, no es tu culpa... – le dijo el mago Kalay
- dime pequeño Duo, donde estabas? – pregunto el mago Ai
- en... en un lugar horrible... – dijo comenzando a llorar, las imágenes volvían a aparecer en su cabeza... esas cosas de acero... ese liquido rojo... ese cadáver... que era eso?... que significaba todo eso?...
- pequeño Duo escúchame... – dijo el mago Ai acercándose a el y tomándolo por los hombros – lo que hayas visto, no es tu naturaleza, tu jamás arias algo así, prométeme que nunca mas saldrás de la muralla...
- yo... salí de la ciudad? – pregunto el Ike sorprendido – pero como pude hacer eso, no soy tan poderoso como ustedes?...
- escúchame Duo... – le dijo el mago Ai con seriedad – jamás vuelvas a salir de la ciudad, ni por error, el mundo que viste afuera es horrible, al igual que tus hermanos, tu no perteneces hay, el hombre es un ser peligroso que se corrompe con facilidad, se marchita sin saber el significado de la vida, ustedes no, por eso prométeme que jamás saldrás de nuevo...
- lo prometo... – dijo agachando la cabeza
- que buen Ike eres, por eso te regalaremos al fénix... – dijo el mago sonriendo
- su fénix?... pero yo... no podría... – dijo asombrado
- el te cuidara, estoy seguro que le agradaste mucho, ya que tu eres una persona especial, cuídalo mucho, su nombre es Flerion – dijo colocándole algo en el cuello
- que es?... – pregunto curioso
- es una de las plumas de Flerion, a partir de ahora el te pertenece... – dijo el sabio volviendo a su lugar – ahora ve a tu refugio y descansa pequeño Duo, puedes venir al templo cuando quieras, puedes irte...
- estoy muy agradecido por el presente, en taro Ayun sabios templarios – hizo una reverencia y salió de la cámara
Pero algo les preocupaba... algo sumamente importante...
- esta asustado – dijo el mago Kalay
- nosotros no podemos comprender lo que el pequeño Ike vio haya afuera, solo espero que no le afecte demasiado – dijo el mago Xel-ha
- como pudo pasar esto, hemos vivido en paz mucho tiempo, hemos sido felices por largos siglos, sin embargo, no podemos seguir ignorando la profecía... lo que ha pasado es signo de que se cumplirá... – hablo el mago Kalay
- no la hemos ignorado, estamos concientes de ella a cada instante, simplemente no podemos dejar que perturbe nuestra vida actual, nuestros hijos se preocuparían y nacería la angustia en sus corazones – hablo el mago Xel-ha
- pero ahora se preguntan como un templario puede pasar la muralla sin el consentimiento de los sabios, y mas si es un Ike... – volvió a hablar el mago Kalay
- eso es verdad... Duo es un Ike y le enseñaremos todo lo que sabemos... sin embargo... debemos estar preparados, hemos vivido eones, somos poderosos, pero no invencibles, al final, tarde o temprano seremos cubiertos por el sueño eterno llamado muerte, no podemos evitarlo... el destino es el que es y no se puede cambiar... – hablo el mago Ai
- pero si desaparecemos, quien protegerá a nuestros hijos, ellos son puros e inocentes, como sobrevivirán ante esos seres abominables, el pequeño Ike estaba aterrado, como reaccionarían los demás?... – pregunto preocupado el mago Kalay
- desgraciadamente no podemos hacer nada, pero ellos son listos, y con ayuda de su alma pura, sabrán que hacer... porque el elegido los guiara... aunque sea duro el camino, siempre deben seguir... – concluyo el mago Ai
- que así sea... – dijeron los otros dos al mismo tiempo
Mientras tanto, en las afueras del bosque, se encontraban los reinos gemelos de Kalayd, que eran los mas grandes de la tierra media, se les llamaban gemelos por que los dos poseían la misma cantidad de tierra, por mucho tiempo existía la guerra entre ambos, guerra que pasaba de generación en generación, solo la enfermedad del poder y la sed de la ambición por obtener mas los reinaba.
Los reyes Odin Lowe y Treize Kushrenada seguían con esta tradición, no se detenían ante nada, no les importaba la cantidad de vidas que se sacrificaran, con tal de obtenerlo todo, eran capaces de vaciar el reino... si era necesario...
Los hombre peleaban sin ningún beneficio propio, desde jóvenes enseñados a odiarse unos a otros sin conocerse... matándose... gente desconocida que solo sacrificaba su vida por el anhelo de su líder, que tenia la cobardía de no presenciar la sangrienta y dura batalla que día con día se efectuaba en su nombre.
En el castillo Renada, en el gran salón el soberano se encontraba sentado en su enorme trono dorado portando su armadura con bordes dorados y el emblema real, su capa larga color sangre descansaba a un costado, al igual que su enorme espada, moviendo sus dedos impacientemente en el brazo del asiento, sin un segundo de paz, esperando el informe de la batalla, estaba desesperado, no dejaría que Lowe gobernara su tierra, la tierra que sus antepasados habían ganado y gobernado durante años, no lo permitiría...
Se escuchaba el sonido de unos pasos apresurados en el pasillo, el crujir de la armadura significaba que las noticias que tanto esperaba habían llegado... la puerta se abrió y un soldado paso por ella apresurado, hizo una reverencia y comenzó a hablar...
- rey Treize, hemos perdido la cuarta parte del ejercito de Oz! – informaba un soldado jadeando
- maldición! – dijo golpeando el brazo del trono – envíen mas tropas, no dejaremos que Lowe gane territorio, háganlo ya! – dijo furiosamente
- pero... mi señor... arriesgaríamos las reservas... – dijo el soldado temeroso
- NO ME IMPORTA! – grito furioso – no dejare que Lowe gane, jamás!
- ...pero señor... – trato de protestar el soldado
- porque te precipitas de ese modo?... – pregunto una silueta cubierta con una túnica azul marino, pero conforme se fue acercando esta se abría y mostraba el delgado cuerpo de una bella mujer, poseía un rostro joven y hermoso, su cabello avellanado caía graciosamente sobre sus hombros, sus ojos azules estaban fijos en el soberano, llevaba muchos años sirviendo en el castillo, era la encargada de los conjuros y pócimas, también era la mano derecha del rey... y su consejera...
- no aparezcas así Lady! – le reprocho el rey
- no te desquites con migo, guarda tu odio para cuando te enfrentes a Lowe – dijo sentándose en sus piernas – además... tu eres mucho mas listo que el... – dijo acercando sus labios hasta quedar a pocos centímetros de los del rey - ... deja que crea que ha ganado esta batalla, retira a las demás tropas que quedan... reúne un numero considerable, Lowe estará ocupado esta noche, es la celebración de su heredero, aprovecha que esta distraído y atácalos si piedad... – concluyo rozando sus labios con los de Treize.
- mi querida Lady, que aria sin ti... – dijo acariciando su mejilla y sonriendo – soldado, retire al batallón, dejaremos que Lowe se confié, y por la noche lo atacaremos...
- como ordene – hizo una reverencia y se marcho tan rápido como llego
Mientras tanto en el castillo Lowe...
El rey se encontraba bebiendo una copa de vino, parecía sereno y calmado, portaba su ropa de gala, por la celebración del cumpleaños de su heredero...
En el gran salón se observaban arreglos florales, las velas portaban el mejor aceite de todo el reino, el banquete era enorme, con comida diferente y extraña, la música se preparaba, todo estaba listo... solo faltaba que anocheciera...
- su alteza, nos informan que se ha destruido una cuarta parte del ejercito de Oz y que se esta retirando
- eso es bueno, muy bueno, no cabe duda que este es un buen regalo de cumpleaños para mi hijo – dijo el rey sonriendo – por cierto, donde esta?... - pregunto
- se encuentra en el jardín con la Sir Noin...
- mmm... tengan listo mi regalo, quiero que sea perfecto para mi hijo – dijo acercándose al balcón
- como ordene... – dice retirándose
El rey Lowe seguía moviendo la delicada copa con el exquisito vino dentro.
Se asomo al jardín para contemplar a su pequeño cabalgar con ayuda de Sir Noin, su madre desgraciadamente había muerto cuando el nació, y ahora consideraba a Noin como una hermana mayor.
Ese niño era todo para el, su vida, todo... pero en verdad quería un futura incierto para su pequeño?...
Continuara...
Notas de la autora:
Konichiwa!
OTRA VEZ YO! HE! HE! (salen serpentinas y confeti de la nada) Oo!
Trowa: te sientes bien? ¬¬U
Wufei: hayyyyy apenas el primer capitulo y tu ya empiezas con tus incoherencias ¬¬
Ivanov: Gomen, es que me sulfuro con facilidad U
Duo: ser feliz no es malo -
Wufei: feliz, pero no loco... ¬¬
Duo: oye! A quien le dices loco!
Wufei: a quien le quede el saco...
Duo: me estas diciendo loco!
Quatre: tranquilos chicos U
Ivanov: bueno, bueno, pasando a lo esencial...
Espero que este primer capitulo les guste, esta loca historia nació viendo corazón valiente, corazón de caballero, corazón de dragón, en fin puros corazones jejejeje (chiste malo) ¬¬U
También jugando Ztar Craft suena a queso (otro chiste malo) ¬¬U ya me callo! De ahí salieron los nombres de las ciudades y los templarios, pero con algunas modificaciones jejejeje ya saben como soy... y también Warlords Battlecry, ya irán viendo por que...
Poco apoco van a apareciendo mas personajes y con ellos mas animales mitológicos, es que me fascinan -...
Wufei: a quien le importa ¬¬...
Heero: déjala en paz!
Ivanov: hayyy .¬. te amo! heero-koi -
Heero: ¬/¬...
Ivanov: como decía! -...
Depende de ustedes si la continuo a no, si no para dedicarme por completo a LA ATLÁNTIDA! aunque la seguiré escribiendo en mi computadora, no me gusta dejar las cosas a media, solo no la subiré.
Pero si quieren mas SE LO DAREMOS! AL PUEBLO LO QUE PIDA! O/o! Gomen... U
Continuo: gracias a Youko (mi otra mitad) por ayudarme en algunos aspectos... arigato!
Bueno es todo por ahora, nos veremos la próxima vez...
Comentarios, dudas, jito matazos, ladrillazos, todo es bien recibido no me enojo...
Dejen reviews porfis!
Matta ne!
Propaganda: sigan leyendo la Atlántida! (¬¬ quien escribe eso?)
