Kuroshitsuji no me pertenece. Ni la trama, los personajes.

Disfrutad la lectura.

Y no olvides al final, comentar.

Sangre.

"-¡Corre!"

La desesperación y la angustia, crecían interminablemente en lo profundo de mi ser.

Dolor.

El fin estaba cerca.

Muerte.

Quería correr, moverme rápidamente y escapar de aquel ser que se encontraba delante mío, pero tenía tanto miedo, que mi cuerpo era incapaz de moverse.

Permanecía inmóvil, con ambas manos sobre mi pecho, como intentando proteger algo inexistente, con la espalda pegada a la fría corteza de un enorme árbol, mientras mis piernas temblaban violentamente, asiendo aún más imposible la huida.

Llovía.

Pero parecía tan lejana la lluvia, que era imposible para mí sentirla. Y no solo eso, el tiempo mismo precia haberse detenido. Pensándolo detalladamente nada parecía tener sentido, ahora que la muerte parecía estar tan cerca.

"-Morirás…"

-N-no- dije silenciosamente, casi en un suspiro.

Esta cerca… la muerte me asecha.

Quería ser salvado. Quería escapar del dolor y de la soledad. Quería olvidar, pero no morir.

"-Alguien… alguien venga a salvarme…"

Espere.

Un minuto. Dos minutos. Tres minutos.

Pero nadie llego. Estaba solo. Tan solo como un perro.

Lágrimas.

Frías lágrimas cayeron por mis mejillas, fundiéndose con la lluvia. Moriría.

Levante mi mirada, observando la enorme figura de aquel ser, invitándolo a terminar con mi sufrimiento. Sin embargo, el lejos de atacarme, observo fijamente mis ojos.

-¿Deseas Morir…?- me pregunto simplemente, sonriendo de una manera tan tétrica, que temblé.

Yo no respondí y solo me limite a mirarlo una vez más, pero esta vez con más detalle.

"-Es hermoso."-Pensé. Ya que, Poseía una belleza tétrica e inmortal. Un ser de hermosos cabellos negros y de inescrutables ojos carmesí.

-Respóndeme…- Ordeno, ahora sin sonreír.

-N-no…- dije entrecortadamente, esperando alguna reacción de su parte. Sin embargo, el simplemente se limitó a formar en sus labios una mueca extraña, que simulaba ser una sonrisa. Luego, comenzó a caminar lentamente hasta donde yo me encontraba, acorralándome totalmente. Yo solo cerré los ojos, esperando la culminación de mi atroz destino. Sin embargo, la muerte nunca llego y en lugar de eso, el agachándose hasta estar a mi altura, pego su boca a mi oído, permitiéndome sentir, su embriagador y frio aliento.

-Entonces… ¿Cuál es tu deseo?- Pregunto, antes de saborear con lentitud la piel de mi cuello, a lo que yo temblé débilmente.

Luego él se acercó más a mí, desabrochando descuidadamente mi ropa, para dejar al descubierto, la blanca piel de mi pecho.

Espere antes de responder, porque no estaba seguro de mi respuesta.

Lo mire.

Y luego antes de que pudiese reaccionar, me beso…

Y justo en ese momento, la oscuridad se acercó envolviéndome… Tan fría y lejana, como el olvido…

Continuara.

¡Dios!... ¿Qué pedirá Ciel...? (Risas)

Ni yo lo sé.

Sugerencias y dudas al 5555-5555.

O en un review.

Doy una paleta, un beso a un Sebastián de plástico con todas las Funciones incluidas (Baba) si me comentan.

Próximo capítulo: Cuando lo haga.

Ciel Uchia.