HOLA GENTE HERMOSA! Cuánto tiempo sin pasarme por acá a dejarles una historia XD… pero he venido a cumplirles! Esta vez traigo un trabajo que está publicado en un foro NaruSaku, lo estamos escribiendo entre mi amada Amazona Kim-chan y yo, y hemos decidido que lo publique acá para expandir nuestros horizontes (muajajaja… okno XD) esperemos que les guste, y como siempre…

REVIEWS PORFIS!

NO hemos autorizado a nadie para que publique este FF en ningún otro lugar que este y el antes mencionado, si llegan a verlo por favor avisar, gracias. NO AL PLAGIO

Disclaimer: ni Naruto ni sus personajes me pertenecen (por desgracia), este fic es publicado sin fines de lucro. OOC.

Rated: K+

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Cambiando Papeles

By: NathixG ft Kim-chan

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Una cálida y oscura noche daba abasto en la aldea de Konoha, una de las aldeas ninja más reconocida sobre las demás, ubicada en la Nación del Fuego, todo estaba en paz, los aldeanos habían ido a sus casas temprano, seguramente porque era domingo y los lunes todos van a trabajar y los niños a la academia…

Toda esa tranquilidad era sólo superficial, una pequeña corría sin descanso por un callejón, su cabello le llegaba a media espalda, vestía una polera azul con tres rasgados a cada lado de las mangas, un pantalón café claro y unas sandalias, su rostro estaba margullado, las lágrimas caían como pequeños cristales al suelo, si se detenía era su fin.

Unos aldeanos la venían persiguiendo, a decir verdad eran bastantes, en sus rostros se podían distinguir destellos de furia, odio y miedo en algunos. La pequeña seguía corriendo sin parar, hasta que llegó a la avenida principal, soltó un suspiro de alivio y tomó un poco de aire, su cabello era un rosa brillante, la luz de la avenida permitió ver además sus ojos color jade intenso y una mirada asustada, en un momento de descuido una mano se posó en su boca y la hizo ahogar un grito, la atrajo nuevamente al callejón para encontrarse con sus cómplices, los que tenían varios kunais y unas sonrisas que le darían miedo a cualquiera.

Los aldeanos que vieron la escena no hicieron nada por ayudarla, solo siguieron sus caminos sin importar que le pasara a la pelirrosa, en el callejón un aldeano tapaba la boca de la niña y los demás la golpeaban sin piedad, las lágrimas se hacían presente en su delicado rostro, de nada servía gritar, nadie la ayudaría. No era la primera vez que esto pasaba, normalmente la golpeaban hasta el cansancio dejándola malherida botada por allí sin cuidado alguno.

Las heridas causadas después de unos días estaban curadas sin razón aparente pues ella no acudía a pedir ayuda por miedo a que volvieran a lastimarla, pero eso no significaba que el dolor de la golpiza se fuera sin que pasaran unos largos y dolorosos días y a veces semanas.

-"¿Por qué?... ¿Por qué me odian?" –Pensaba la niña en sus adentros, esta era la tercera golpiza de la semana y por lo visto tenía para rato aun.

Un aldeano empuñó un kunai y cuando estaba por enterrárselo en el abdomen un hombre alto y de cuerpo esbelto lo detuvo, la pelirrosa veía borroso y solo pudo distinguir la silueta del hombre, tenía varios cabellos en punta y por su atuendo parecía un ninja.

-Déjenla– ordenó con voz severa y grave alejando a todos los aldeanos- Debería darles vergüenza ser esta clase de personas –los aldeanos no esperaron más y se echaron a correr, el hombre tomó en brazos a la niña que estaba inconsciente y desapareció sin dejar rastro alguno.

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El despertador sobresaltó a una jovencita de aparentemente 12 años de edad, aquel sueño se repetía varias veces al mes, recordaba pequeños fragmentos de ese día, había sido real, lo recordaba ya que después de la golpiza despertó en su casa con las heridas vendadas y no recordaba haber llegado ahí por cuenta propia.

Sus ojos estaban a la mitad, su cabello ya le llegaba a la cintura, sus ojos eran verde jade pero más intenso que de pequeña, se levantó como un zombie y llegó al baño, se dio una ducha corta y se puso con un vestido rojo con estilo chino, unas calzas negras, sandalias ninja, su bandana, roja por igual, la posicionó en su brazo y ató su cabello en una coleta alta dejando caer unos cuantos mechones rebeldes por su rostro.

-"¿Qué comeré hoy?, No tengo mucho para elegir…" –El refrigerador estaba algo vacío y en la estantería solo había cereal- Pues… Cereal seco –dijo mientras se servía cereal en un pocillo- Sakura… recuerda comprar alimento o morirás de hambre –se regañaba a sí misma.

Después de su "desayuno" tomó rumbo hacia la academia ninja, en el camino todos la miraban con odio y recelo, Sakura ya estaba acostumbrada a aquellas miradas y no le tomaba importancia, al entrar al salón eligió un puesto al costado que se encontraba vacío y se encaminó, la mayoría evitaba sentarse cerca de la pelirrosa, sin motivo alguno, casi al momento se arrepintió pues vio que se dirigía a la misma mesa una rubia de ojos azules con una coleta alta y un flequillo que tapaba su ojo derecho, que ni se inmutaba con su presencia.

-¡INOO-CHAN!– gritó desde uno de los asientos un muchacho de cabellos rubios alborotados y ojos azul cielo, vestía un pantalón naranja completo al igual que su chamarra- ¿Me dejas sentarme a tu lado? –Preguntó ignorando por completo a Sakura mientras se levantaba para colocarse a su lado en las escaleras interrumpiendo la subida de la aludida.

-Hn. –fue la única respuesta de la rubia algo molesta por ser interrumpida, lo que hizo que el oji-azul se deprimiera.

-Si quieres puedes sentarte a mi lado Naruto –dijo Sakura con una amplia sonrisa y algo de rubor en sus mejillas.

-Antes muerto… -murmuró Naruto haciéndola sentir algo mal.

-No sé cómo rechazas esa oferta Dobe –Un chico de cabello azabache con ojos negros que usaba una camisa azul, un short blanco y sandalias negras. Aquel niño se acercó al rubio posicionándose al frente de Sakura.

-Creí que te gustaba Ino-chan, Sasuke-Teme –Murmuró Naruto con una ceja en alto casi haciendo un leve puchero con sus labios.

-Pues a mí todas me parecen sencillamente hermosas, pero Sakura e Ino son las que más resaltan –Dijo con un tono seductor, Sakura lo miro con una ceja en alto y optó por lo más sano, así que lo ignoró.

-Yo creo que Ino es la más bella –unos corazones se formaron en los ojos del rubio.

-¡Eso es cierto! –Varios hombres de la clase apoyaron al rubio posicionándose al frente de Sakura para poder sentarse con Ino.

La oji-jade exasperada se abrió paso entre la muchedumbre hasta quedar en frente de Ino, dobló su cadera un poco pues se encontraba unos dos escalones por encima de la rubia, desafiándola con la mirada, ambas se lanzaban rayitos con la mirada y todos observan atentos la escena.

-No sé qué te ve Naruto, yo solo veo una chica sin corazón –escupió Sakura lanzando más rayitos de sus ojos-

-Me viene a hablar una frente de marquesina, ¿eh?– ambas fueron acercando sus rostros trasmitiéndose unas miradas de odio inigualables-

-Ino-cerda –dijo fuerte y claro Sakura.

-¡Sakura, deja en paz a Ino-chan! –Dijo Naruto apuntando a Sakura con su dedo índice.

Un novato se dio la vuelta para ver la escena y sin querer empujó a Sakura hacia adelante, por la cercanía de ambas sus labios se juntaron y se pusieron azules, se separaron lo más rápido posible escupiendo sin parar.

-Joder, ¡qué asco! –exclamó la pelirrosa mientras se agarraba el cuello y escupía.

-Ni que lo digas –murmuró Ino pasándose la mano por los labios sacando todo resto de aquel asqueroso… ugh… rastro.

-Se supone que yo le daría su primer beso a Ino-chan –A Naruto lo rodeaba un aura depresiva y la furia lo reinaba, pretendía matar lenta y dolorosamente a Sakura, al igual que muchos niños de la clase.

-¡Buenos días clase! –Dijo animadamente un adulto de pelo castaño, ojos cafés y una especie de cicatriz cruzando su rostro de un lado al otro, vestía un atuendo ninja típico.

-Buenos días Iruka-sensei –dijeron todos desanimados, finalmente Naruto quedó al lado de Ino en la mesa a la que se había estado dirigiendo y Sakura en el costado aun escupiendo por aquella repugnante experiencia.

-Hoy los uniremos en equipos de tres, a los cuales se les será asignado un jounin –todos sonrieron alegres- Ya que todos pasaron la prueba… todos son genins –todos asintieron con una gran sonrisa, menos Ino y Sakura que aún no se quitaban esa asquerosa sensación, algunos incluso jurarían que sus rostros seguían azules- Bien comencemos…

Todos los equipos fueron pasando y uniéndose, algunos con malas caras ya que les tocaron su peores enemigos o cosas por el estilo, otros felices ya que eran amigos de la infancia o sus padres se conocían. Este año decidieron unir a los novatos de tal forma de crear equipos fuertes en distintas áreas. Por ejemplo, un equipo seria experto en rastreo, otro en interrogación, etc.

-Equipo siete… Yamanaka Ino –todos se pusieron atentos ante el nombre de la rubia- Namikaze Naruto –el rubio pego un saltito de felicidad con un puño en alto en forma de victoria- Y Haruno Sakura –el rubio bajo la cabeza deprimido y Sakura salto de alegría.

-¡Soy un Namikaze! ¿Por qué me ponen con ella? –Dijo con arrogancia apuntando a Sakura.

-"Ella" tiene nombre Namikaze –Dijo Sakura cruzándose de brazos.

-Ash… Naruto… Los tres tuvieron las mejores calificaciones este semestre, se decidió dejarlos juntos para hacer un equipo poderoso en combate, cada uno tiene cualidades únicas, al igual que los demás ustedes tienen muchas cosas en común en el ámbito de combate –explico Iruka-

-Ino y yo somos fuertes… pero Sakura… -Dijo mirando de reojo a la pelirrosa que puso una mueca de fastidio poniendo los ojos en blanco.

-Si quieres yo ocupo tu lugar… -murmuró Sasuke algo sonrojado imaginándose los "entrenamientos" con ambas chicas -

-Ni que lo digas… está bien –se resignó Naruto-

-Equipo 8… Hyuuga Hinata, Aburame Shino y Inuzuka Kiba –los nombrados asintieron- Equipo 10, Uchiha Sasuke, Nara Shikamaru y Akimichi Chouji –los nombrados asintieron-

-¿Por qué 10 y no 9? –preguntó Chouji, un gordito que comía papitas sin parar-

-El equipo 9 está conformado por ninjas mayores que ustedes –explicó el sensei-

-Está bien… -murmuró el Uchiha- Espero que no sean unos vagos –dijo mirando de reojo a sus compañeros de equipo- Mierda… estoy perdido –se lamentó observando como Shikamaru bostezaba y Chouji solo comía-

Las conformaciones de equipo siguieron hasta que ninguno en la sala quedara sin compañeros de peleas, los nuevos equipos salieron al encuentro de sus respectivos senseis que los acompañarían como entrenadores por mucho tiempo más, el equipo siete esperaba aburrido que su sensei llegara, pero este no daba ni señal de vida.

-¡Ya me canse! –Exclamó Sakura cruzada de brazos- me las pagará por hacerme esperar…

-¿Qué harás? –Pregunto Naruto con una ceja en alto sin poder evitar sentirse curioso-

Sakura puso un borrador en la cima de la puerta, esperanzada que cuando se abriera su nuevo sensei quedara todo empolvado.

-Es un jounin, no caerá en ese viejo truco –dijo Ino aburrida con su tono de seriedad-

-Ino-chan tiene razón Sakura, no seas infantil –Dijo de la boca para afuera Naruto, interiormente quería ver aquella escena aunque nunca lo admitiría en voz alta-

Un hombre de cabello gris y alborotado abrió la puerta y el borrador callo en su cabeza, provocando las fuertes carcajadas de Sakura que intentaba infructuosamente acallarlas colocando sus manos sobre su boca, el peli-gris se adentró más en la habitación dejando ver su atuendo jounin, su máscara tapaba la gran mayoría de su rostro y su banda ninja caía sobre su ojo izquierdo.

-Mi primera impresión de ustedes… es que los detesto –Dijo provocando escalofríos en sus nuevos alumnos.

.-*En algún lugar de Konoha

-¿Estás seguro que los muchachos podrán con Kakashi? –Preguntó un hombre de cabello rubio y alborotado, ojos azules con su traje de jounin que estaba acompañado de una mujer de cabello rojo, ojos azules con algo de gris-

-Estoy seguro –dijo un hombre mayor, el gran Hokage-

-¿Quiénes son los compañeros de Naruto? –Preguntó la mujer-

-Compañeras, Kushina, compañeras –corrigió el Hokage- Yamanaka Ino y Haruno Sakura

-Haruno Sakura… -murmuró el rubio-

-Minato… ¿estás bien? –susurró Kushina algo preocupada poniendo una mano sobre su hombro-

-¿Cómo está Sakura? –preguntó Minato con los puños cerrados-

-Aparentemente se encuentra bien, a medida que ha ido creciendo se ha podido defender –Dijo el Hokage parándose de su asiento-

-¿Lo sabe? –Kushina mostraba preocupación en su rostro-

-Aun no… sólo espero que no salga de control y podremos manejarlo sin que lo sepa –Dijo el Hokage mirando al cielo-

-Comprendo… gracias Hokage-sama, nos retiramos –la pareja salió del despacho dejando a un Sarutobi bastante pensativo-

-Lamento haberles fallado –murmuró para sus adentros el anciano mirando específicamente la cabeza tallada del cuarto Hokage-

.-*Con el equipo 7

-Bien, tengo un juego para que se conozcan mejor –dijo el peli-gris tocándose la frente- Deben decir su nombre, su edad, lo que les gusta y disgusta, y sus sueños

-Kakashi-sensei empiece usted para tener la guía –Dijo la pelirrosa tocándose la nuca con ambas manos, los demás asintieron apoyando a su compañera-

-Bien… Mi nombre es Hatake Kakashi, mi edad… no les interesa, me gustan pocas cosas y me disgustan bastantes, y mi sueño… no lo he pensado –Narró Kakashi con una mano en su barbilla y su ojito feliz-

-Qué gran presentación… -murmuró la pelirrosa sarcástica-

-Okey, mi turno –habló el rubio animado como siempre- Mi nombre es Namikaze Naruto, tengo 12 años, me gusta comer ramen y pues… -miro a Ino que solo mostraba indiferencia- odio los tres minutos de preparación del ramen y lo molesta que es Sakura –Naruto mostró superioridad y Sakura bajo la cabeza- y mi sueño es… ser tan buen ninja como mi padre

-Interesante… -dijo desinteresado Kakashi, con tono aburrido- Siguiente…

-Mi nombre es Yamanaka Ino, tengo 12 años, me gusta entrenar y entrenar –Sakura y Kakashi le miraron aburridos, Naruto en cambio la miró con corazoncitos en sus ojos- Odio a la gente falsa y mi sueño es… -pausa- Vengarme de cierta persona… -dijo con recelo y odio-

-"Esto se pone interesante… ahora solo falta la pinky" –Pensó Kakashi-

-Mi nombre es Haruno Sakura, tengo 12 años, me gusta hacer travesuras y entrenar, odio a las personas que juzgan y odian sin conocer –esto lo dijo algo deprimida y todos la miraron extrañados- y mi sueño es ser la próxima Hokague y ser reconocida por todos –dijo golpeando su puño contra su mano-

-"Una vengadora, una optimista y un enamorado… ¡que lio!" –Pensó Kakashi algo fastidiado- Pues… eso es todo por hoy, necesito leer mi libro y me molesta su presencia –confesó Kakashi deprimiendo a sus alumnos- Mañana los espero en el campo de entrenamiento número 7 para nuestro primer entrenamiento, no coman… o se arrepentirán si lo hacen –dicho esto desapareció en una nube de humo dejando a los tres jóvenes sorprendidos-

Ino comenzó a caminar lentamente hasta llegar a la calle, Naruto intentó seguirla pero le perdió el rastro al instante, atrás de él venía Sakura corriendo a toda velocidad para poder alcanzarlo, Naruto suspiró fastidiado y se volteó a verla.

-¡Espera Naruto! –Sakura se detuvo y quedó en frente del rubio-

¿Qué? –preguntó él tajantemente con una clara señal de molestia en su rostro-

-Estaba pensando si… -susurró algo sonrojada y Naruto la interrumpió-

-No, mis padres vienen por mí –Dijo viendo hacia la calle donde venía Kushina y Minato tomados de la mano- ¿Ves? Ahí están

-Ah sí… Lo siento… -Sakura bajo la cabeza y se dispuso a irse pero una voz la detuvo-

-¿Haruno Sakura, cierto? –Preguntó Minato acercándose a Sakura y arrodillándose a su altura-

-Sí… -le respondió Sakura, aquel hombre se le hacía familiar (a parte de su claro parecido con el chico con el que había estado hablando hace sólo pocos segundos) pero no sabía de dónde-

-Mi nombre es Minato, un placer –Minato tiernamente le revolvió los cabellos a Sakura-

-Papá… ¿pero qué haces? –Preguntó Naruto con una mueca de disgusto en su rostro-

-¿No podemos conocer a tu nueva amiga?–Dijo Kushina con una sonrisa acercándose a Sakura- Mi nombre es Kushina –la pelirroja sin preguntar abrazó a Sakura con todas sus fuerzas dejando algo pasmada a la pelirrosa, nunca había recibido más que golpes e insultos de las personas y una muestra de afecto le extrañaba-

-Ella no es mi amiga… es una persona muy molesta –dijo Naruto cruzándose de brazos, aquellas palabras clavaron en el corazón de Sakura, le dolió, y bastante.

-Y-yo mejor me voy… adiós Kushina-san, Minato-san –Dijo la pelirrosa tragándose un nudo en la garganta y separándose de Kushina- Un gusto… -Sakura sonrió forzosamente y se fue corriendo rumbo a su apartamento-

Minato se dio la vuelta y quedo en frente de su hijo, lo miró con desaprobación lo que hizo que Naruto tragara saliva, Kushina se paró y comenzó a caminar algo molesta delante de los dos rubios.

-Aquello que hiciste no estuvo bien –regañó el rubio mayor-

-Es la verdad, además he escuchado a varias personas y niños de la academia que dicen que ella es un monstro así que… -Naruto no pudo seguir porque su madre le estampó una bofetada que lo dejó callado y sorprendido-

-No vuelvas a decir eso nunca, ¿oíste? –Amenazó su padre-

-Sakura-chan no es un monstro, ni está cerca de serlo, ¿ok?. Gracias a ella sigues vivo–La voz de Kushina se sentía enojada y decepcionada-

-Lo siento… -Dijo Naruto sobándose la mejilla, no comprendió las palabras de su madre, pensó que era un error o algo así pero sobre todo no entendía por qué sus padres defendían tanto a esa molestia, ni siquiera la conocían, se fue el resto del camino en silencio y al llegar a su casa se encerró en su habitación-

.-*Con Ino

La rubia llego a su casa algo cansada y fastidiada, tener un equipo solo retrasaría sus planes, aunque debía admitir que esos dos le caían bien, se recostó en su cama y cogió una imagen de su velador, en aquella imagen salía un joven rubio de cabello más oscuro que Ino, con su mismo look, ojos azules y con sus dedos en "V", no tenía más de 15 años en aquella foto, Ino estaba abajo del joven con cara de fastidio y al lado de ambos había un hombre de mediana edad, cabello rubio oscuro y ojos verdes.

Ino suspiró con pesadez, aquella foto le traía bastantes recuerdos, su hermano había exterminado a todo su clan junto a su mejor amigo, ella fue la única sobreviviente de aquella masacre, se torturaba por aquel día haber sido débil y no haber derrotado a su hermano, ella no tenía la culpa, pero aun así había jurado vengarse y nada le haría cambiar de opinión…

-Te mataré… Deidara –susurró la rubia-

.-*Con Sasuke

El chico llegó a su casa con un suspiro de fastidio, su padre se encontraba de misión así que sólo fue recibido por su madre que le tenía preparado un cuantioso almuerzo, después de su comida subió a su habitación fijándose si había alguien cerca, al estar seguro de que se encontraba sólo sacó de un escondite secreto que tenía bajo una tabla suelta del piso la una fotografía familiar, la última que se habían tomado todos juntos, pocos días antes de que sucediera aquella tragedia.

-¿Por qué tuviste que irte... hermano?

.-*Continuará…

Bueno! Esto ha sido todo por hoy, nuevamente esperamos que lo hayan disfrutado n.n este ff está avanzado así que sin falta cada dos semanas les traigo un capi

Matta Ne!

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