Draco no se lo podía creer. Simplemente no podía.
Profesor….- miró a Snape como implorando porque fuese una broma. Snape miró al rubio tragando saliva. Luego alzó la vista hacia el director.
Albus… ¿seguro que es necesario? Yo no creo que esto solucione nada…
Pero- cortó el viejo- resulta que tú no eres el director, Severus. Y si. Es lo mejor. Después de todo este….escándalo…conviene hacer algo para que no se vuelva a repetir.
Draco miró con miedo a los presentes. Snape apretaba los labios porque sabía que nadie le iba a hacer caso; Dumbledore mantenía la barbilla alzada en señal de poder; McGonagall miraba preocupada al chico de la otra silla. Harry estaba en estado de shock y Lupin le daba palmaditas en la espalda. Pero los shocks no duran mucho.
Harry se levantó bruscamente tirando la silla. Miró a Dumbledore con verdadero odio.
¿Es que usted está loco¿O es que acaso no he tenido bastante con intentar ser asesinado año tras año por Voldemort?- Harry miró a Draco más furioso aún. Éste, inconscientemente se situó detrás de su profesor.- ¿Y ahora pretende que pase con él el resto del curso!
Harry siguió chillando durante un buen rato, con argumentos basados así todos en lo que le había hecho Malfoy desde que llegó y que tenia muchas mas preocupaciones que la de estar bien con él.
Dumbledore se masajeó las sienes y se levantó. Estaba realmente cabreado. Harry se sentó del susto. Esa mirada ya la había visto antes. Justo cuando entró en cuarto en la habitación del falso Moody.
Todos temían esa mirada.
¡ Ustedes dos!- dijo señalándolos.- No han hecho más que increparse y molestarse mutuamente desde que llegaron aquí. Pero esto se ha acabado. ¡A partir de este mismo momento dejarán de llevarse mal, dejarán de insultarse, dejarán de obstaculizar al otro y hacerle la vida imposible…intentarán llevarse bien! Nada de enemigos. Aliados, amigos, llámenlo como quieran, pero durante este penúltimo curso se llevarán mejor. Y no es una opción que puedan rechazar. Yo mismo me ocuparé personalmente de que se lleve a cabo. Se ayudarán mutuamente, en todo. Y estarán, durante el resto del curso¡juntos!
Juntos.
Juntos.
Draco odiaba esa palabra. La había empezado a odiar desde que Dumbledore les había hecho eso.
Harry estaba muy resentido. No podía creer que le hubiesen hecho esto. Decididamente el viejo se había vuelto completamente chiflado. ¿De verdad pensaba que Malfoy y él se llevaran bien¡Ja!
Draco posó su barbilla sobre su mano izquierda. Otra cosa¿por qué él sólo podía tener libre la izquierda y Potter la derecha? Estiró su mano derecha para escribir lo que les dictaba el profesor de pociones. Al hacerlo se llevó la izquierda de Harry consigo.
Harry notó que su mano izquierda se movía. Malfoy estaba escribiendo algo. ¿Para qué tomaba apuntes? Snape siempre lo anotaba en la pizarra, hacían la poción y punto. No se suponía que debieran recordarla después. Por lo menos no una tan difícil como esa. Pero Malfoy seguía escribiendo. Le estaba empezando a molestar ese vaivén del brazo. Intentó hacer caso omiso y se dedicó a vagar la mirada por la clase. Hermione susurraba al fondo con Ron, en la otra parte de la sala. Los pupitres de los Gryffindor. Y él estaba sentado en los Slytherin. Órdenes de Snape. Mantenerlo lo suficientemente cerca para poder vigilarlo.
Draco no podía entender cómo Potter pasaba tan olímpicamente de las explicaciones del profesor. ¡Ni siquiera había tomado un maldito apunte del nombre de la poción que estaba explicando¿Cómo narices aprobaba el imbécil? Suspiró con resignación y escribió enfadado.
Para ya.- Harry se giró para mirarlo.- Ya nos dará un pergamino con todo lo que está diciendo, Malfoy. No tienes que copiar al pie de la letra. Es un gasto innecesario y además me molestas.
Draco lo miró con los ojos como platos. Decididamente no entendía cómo aprobaba pociones.
Potter. Métete en tus asuntos. Por si no te has dado cuenta aún….y ya deberías haberlo hecho después de cinco cursos….el profesor Snape tiene una forma de dar información muy especial. Lo que, según tú, nos dará en el pergamino, no tendrá la mitad de la información que está diciendo ahora. Él nunca repite las cosas, por si no te habías dado cuenta. Pero, al parecer, eres demasiado estúpido como para entender nada.
Esta vez le tocó a Harry quedarse de piedra. Así que era eso…por eso siempre sacaba poca nota en los exámenes…y eso que copiaba de Hermione…pero claro, ella tenía ya toda la información junta…
Snape estaba impresionado.
No sabía cómo había empezado. La cuestión era que, en sus clases teóricas, la mayoría de los alumnos, todos los Gryffindors, pasaran de sus explicaciones, sin notas ni apuntes, excepto Granger. Y que los que los tomaran fueran sólo algunos Slytherins.
Pero para su sorpresa un Gryffindor, nada más ni nada menos que Harry Potter, lo estaba mirando a él y a un pergamino alternativamente, posiblemente copiando lo que dictaba. Pero eso no había sido la única sorpresa. Al parecer, al verle, los demás Griffyndors, instintivamente, habían empezado a hacer lo mismo.
Y de repente los tenía a todos copiando cada palabra que salía de sus labios.
La verdad es que no iba a poner esa poción en ningún examen, pero al verlos así, quizá debería…
Seguro que había sido cosa del señor Malfoy. Antes había visto como cuchicheaba con Potter, enfadado. Después, el moreno había comenzado de mala gana a copiar.
"Por Merlín, quizá salga algo bueno de esto, después de todo. Y yo que pensaba que Albus estaba delirando una vez más…."
Snape había creído firmemente que se matarían entre ellos nada más salir del despacho del director, pero al parecer, habían decidió ignorarse mutuamente. Cosa poco probable, pues, Albus los había atado con un cordel invisible mágico las muñecas. Y ahora tanto la derecha del señor Malfoy como la izquierda de Potter, estaban unidas.
Snape había intentado ponerse en el lugar de los jóvenes sólo para saber su reacción: pasear de esa guisa por todo el colegio hasta que finalizara el curso….si es que entonces desaparecía el cordel….no era precisamente lo que le gustaría hacer. Así que seguramente el odio de ambos se había acrecentado. Dos enemigos unidos, obligados a llevarse bien. ¿De verdad funcionaría? Snape lo dudaba.
Pociones terminó.
Y tocaba recoger y salir de clase.
Algo tan simple como esto, podía ser muy complicado si tenías tan solo una mano y otra de la que te tiraban todo el rato. Al final Harry esperó a que la serpiente recogiese y cuando terminó lo hizo él. Malfoy mientras se despedía de sus compañeros de Slytherin que miraban al moreno con caras de asco. Genial.
Por fin salieron al pasillo.
Al contrario de lo que se hubiese esperado, no estaban peleándose cada dos por tres. Draco y Harry estaban enfadados, amargados y cansados. No sentían ninguna necesidad de increparse el uno al otro ni de tan siquiera hablarse entre ellos. Era extraño. Seguramente el estar todo el día con el otro hacía que ya no fuera tan excitante pelearse.
O eso creía.
Después de pociones había descanso.
El descanso para comer.
Y eso signaba que había que ir al Gran Comedor.
Lo que equivalía a decir que…
¿Dónde vamos a sentarnos?- Harry miró a Draco por primera vez desde que salieran de pociones. Éste le devolvió una mirada de desprecio. Lo normal.
Esa es una pregunta estúpida, Potter. Yo, obviamente, iré a sentarme en MI mesa.
Y hacia allí se dirigió. Pero no consiguió llegar lejos, pues Harry no se movió de donde estaba.
Ya. Malfoy, por si no te habías dado cuenta, estamos atados. Lo que quiere decir que si vamos a un sitio, vamos los dos. Y, OBVIAMENTE, yo, no pienso ir a la mesa de los Slytherins.
¿No esperarás que vaya yo a la de los Gryffindors, verdad, Potter?
Muy bien.- Harry se sentó en el suelo, arrastrando a Draco. Estaba cansado.- Entonces pasaremos hambre.
Malfoy le miró con los ojos temblorosos y rabia. Al final echó la cabeza hacia delante y la escondió en su brazo gimiendo teatralmente.
¿Por qué me pasan estas cosas a mi?- le oyó decir Harry.
"Pero qué teatrero es."
Snape miraba la escena con preocupación. Los dos chicos estaban sentados en el pasillo, sin entrar, posiblemente muertos de hambre….no es que le importara mucho Potter, pero Draco no se merecía eso….era su mejor alumno…
Miró a Dumbledore.
Albus le devolvió la misma mirada.
Que se las arreglen. No pienso levantarles el castigo, Severus. Tienen que aprender a convivir entre ellos.
Snape suspiró con resignación. Nada podía hacer él más que mirar. Y eso fue lo que hizo.
No pasó mucho tiempo desde que los chicos se sentaran hasta que los demás compañeros de las respectivas casas se dieran cuenta de la situación. Y los Gryffindor fueron los primeros en actuar. El pelirrojo y la sabelotodo cogieron comida de la mesa y se levantaron, dirigiéndose a Potter.
"Como no. – Pensó Severus- compañerismo Gryffindor."
"Me pregunto qué harán los Slytherin ante esto…ah, ya veo. Claro, no podían ser menos."
Curiosamente, de la mesa Slytherin también se habían levantado dos personas. Blaise Zabini y Pansy Parkison se dirigían, también con comida, hacia donde estaba Draco Malfoy.
Snape sabía que el enfrentamiento entre casas era inevitable, pero en fin. Miró a Dumbledore por última vez.
Estaba sonriendo.
Maldito viejo chiflado.
Harry recibió a sus amigos con una calurosa bienvenida. Y sin hablar entre ellos, ignoraron por completo a Draco, que también hizo caso omiso de ellos, aunque el solo olor de la comida que traían hacía que se le revolviesen las tripas del hambre que tenía.
Draco se preguntaba por qué sus amigos no eran así. Deberían haber sido los primeros en venir y darle a él comida. Pero no, al parecer sólo los Gryffindor tenían ese detalle. Por un instante Draco sintió celos del trío feliz.
Oh, no…- gimió Ron, malhumorado. Blaise y Pansy se acercaban directamente hacia ellos. Les ignoraron. Harry vio por el rabillo del ojo cómo le traían comida a Malfoy. Seguramente se les había ocurrido después de ver a Ron y Hermione. Harry sonrió para sus adentros. Si no fuera por ellos ahora Malfoy estaría muriéndose de hambre.
