NOTAS DE LA AUTORA
Ni que decir tiene que para escribir esta historia me he utilizado claramente en los personajes, ciudades y ambientación de Final Fantasy VIII, pertenecientes a Squaresoft.
Por favor, hay que tener una mente abierta porque aunque la historia puede ser típica en cuanto a algunos acontecimientos y a que todos conocemos como transcurren los hechos en el juego, sus ciudades etc etc, la personalidad de los personajes ha cambiado muchísimo debido a los hechos tan transcendentales ocurridos en FFVIII, por lo que muchos de ellos serán totalmente diferentes. Además, algunas de las parejas que aparecen pueden no resultar coherentes para muchos, pero he escrito a medida que mis pensamientos evolucionaban y me llevaban por derroteros que no imaginaba, solo me dejé llevar por la imaginación y poco a poco todo cobró sentido con la nueva personalidad de algunos de los personajes.
Espero que disfrutéis y que la experiencia sea positiva. Solo cierren los ojos cuando lo hayan leído e imaginen la historia y sus paisajes, olores y colores. Eso es lo que yo hago cuando escribo.
Dejen sus comentarios, los tendré muy en cuenta si tienen ideas que crean que pueden venir bien a la continuación de la historia.
¡Gracias por leerme! ^_^
CAPÍTULO 1: Continúa el final
Un día cualquiera en el Jardín de Balamb. Bueno, no tan cualquiera, uno de esos días cercanos a la derrota de Artemisa, en la que los ánimos de todos era muy variables y la excitación posterior a la victoria aún se palpaba en el ambiente.
Selphie se dirigía a uno de los pupitres de las aulas, para disponerse a escribir en su diario. Tenía tantas cosas que contar que no sabía por donde empezar. El Jardín de Balamb nunca había sido su hogar, ni el Jardín donde se instruyó, pero tantos acontecimientos de su vida estaban ligados a él que su unión hacía que prácticamente lo amara como a uno más de sus compañeros.
Se sentó en su pupitre, y con un suspiro, vino a reflejar la tranquilidad que le suponía volver a estar allí y volver a la cotidianidad de su vida. Se encendió el monitor, y una sonrisa se esbozó en su cara al ver el apartado de la revista Timber Maniacs, para la que su querido Laguna había escrito años atrás y que ellos habían ido siguiendo número a número sin conocer su autor. Pensó en volver a leer los artículos, pero eso sería en otro momento. Entró en su diario y, con mil cosas en la cabeza, dejó que sus dedos mostrasen todo lo que su voz no quería transmitir.
Diario de Selphie:
Mamemimomu, se que algún día estará de moda este saludo.
Han pasado unos días desde la lucha contra Artemisa, concretamente cinco. Tras nuestra aventura (por cierto, me alegro de que todos hayamos salido vivos de aquello), hicimos una gran fiesta, era para vernos a todos sin control alguno, menudo desfase. Ya hemos descansado lo suficiente como para continuar con las vidas que dejamos, cada uno en un sitio distinto, aunque hay algunos a los que aún les dura la resaca jijiji. Yo, por mi parte, querría volver a Trabia para ayudar en la reconstrucción del jardín, pero me da un poco de miedo separarme de mis amigos, parece como si dependiera de ellos para todo. Hemos pasado muchas cosas juntos. Ahora desde que nos levantamos hasta que nos acostamos pasamos el día charlando, paseando y descansando, menos Rinoa y Squall, que salieron pitando el día después de la fiesta... Aún el director Kramer no nos ha comentado nada sobre la posibilidad de que retomemos las misiones de Seed, debe pensar que hemos tenido suficiente por un tiempo... ¿Y si les pido a todos que me acompañen y nos echen una mano? No, creo que todos tenemos historias y heridas que cerrar...
Qusitis me ha comentado que no sabía que hacer, porque hay algo o alguien que la ata a Balamb y esta esperando a que las cosas se aclaren para tomar una decisión, pero que por otro lado, no quiere estancarse ni quiere que todo el embrollo del que hemos salido suponga un techo en su vida que le impida seguir creciendo... Nunca cambiará, siempre con ese afán de superación y ese nivel de exigencia consigo misma.
Zell ha vuelto con su madre, y no se moverá de allí hasta que pase algún tiempo, dice que necesita un poco de descanso después de tanto ajetreo. Lo que yo creo es que lleva tanto tiempo sin comer los bocadillos del jardín que quiere estar cerquita para poder comerlos a menudo. Es comprensible que tras lo cerca que ha estado de no volver a ver a su madre, y de todos los sacrificios que ha hecho, necesite volver a sus rutinas diarias. Eso tal vez le haga sentir reconfortado y seguro. Aunque creo que siempre le hará falta un poco de acción y en breve pedirá incorporarse a las misiones.
De Irvine se mas bien poquito. Apenas nos hemos visto desde la fiesta. Además, la última conversación que tuvimos fue bastante cortita, y solo me comentó algo de Fisherman´s Horizon. La verdad es que no me imagino a Irvine viviendo allí, ni me imagino el porqué de su decisión. ¿Qué tendrá que hacer allí? Bueno, como no era cosa mía, no le pregunté nada, aunque me huelo que alguna mujer tendrá que ver con su decisión jajaja. Conociéndole, irá donde haya alguna chica guapa... Está hecho un ligón y no creo que haber estado cerca de la muerte le cambie :P
De Squall y Rinoa que puedo decir. Por fin Squall ha dado su brazo a torcer. El amor que siente por Rinoa es más fuerte que su orgullo. Se fueron juntos a Timber al día siguiente de la fiesta. Rinoa quería visitar a Zone y a Watts, y Squall no quería separarse de ella. Espero volver a verles pronto. Creo que escuché que se tomarían unos días de vacaciones, como todos nosotros, y bien merecidos que se los tienen. Squall ha afrontado muchísimas responsabilidades y decisiones difíciles, y no está de más relajarse un poco. Lo que no sé es qué querrá hacer tras las vacaciones. Imagino que ahora que ha aprendido a mostrar lo que siente un poquito más y ha reconocido su debilidad por Rinoa, irá donde ella vaya.
Seifer ha decidido que se quedará en el jardín de Balamb junto con Viento y Trueno hasta que logren graduarse. Ha cambiado. Al día siguiente de la fiesta vino ha hablar con nosotros para pedirnos perdón por todo lo ocurrido. El director, Cid Kramer ha decidido no echarle tras los incidentes. Me alegra ver como intenta rehacer su vida. Además, en la fiesta anunciaron que van a hacer una convocatoria especial de recuperación para algunos alumnos a mediados de curso, así que espero que este año sea definitivamente el año de su aprobado. Los exámenes suelen ser dos veces en cada curso, uno en diciembre para alumnos aventajados (en el que aprobamos nosotros) y otro en julio, justo antes de acabar el curso, así que aunque no haya convocatoria extraordinaria a mediados de curso, Seifer tendrá muchas posibilidades de aprobar en Julio, porque seguro que se prepara a conciencia. Es increíble pensar que hace un mes estábamos examinándonos para ser Seed, y todo lo que hemos vivido en tan poco tiempo. Aunque menudas navidades que hemos pasado... Bueno, ahora que es Enero y que ha empezado un año nuevo, seguro que la vida nos sonríe de nuevo.
Laguna y los demás volvieron a Esthar, junto con Eleone. Nunca habría imaginado que Laguna sería presidente de una gran potencia como Esthar cuando lo veíamos en nuestros sueños. Aunque seguro que para poder afrontar tantas cargas y responsabilidades hace falta un carácter como el suyo, que hace que todas las dificultades parezcan una tontería y siempre consigue poner una sonrisa en la cara de los demás. Espero que sigan siendo tan felices como siempre.
Edea y Cid Kramer están viviendo en el jardín hasta que terminen de rehabilitar el orfanato. Me parece fantástico que quieran reabrirlo, porque la función que cumplía era maravillosa, y nunca podremos estar lo suficientemente agradecidos por habernos acogido cuando no podíamos valernos por nosotros mismos. Estoy segura de que ayudarán a futuras generaciones y que harán de este un mundo mejor con su labor. Y deseo fervientemente que Edea nunca tenga que volver a pasar por un trance como el que ha pasado, porque es una gran mujer, es Mamá Ede...
Es difícil pensar que todo va a cambiar de aquí en adelante. Se que nos tendremos que despedir, pero no puedo hacerlo, o tal vez no quiera. Entristezco solo de pensar que pueda pasar mucho tiempo hasta que vuelva a ver a mis amigos. Los recuerdos me vienen a la mente, y sufro al saber que no volveré a escuchar los comentarios ingeniosos de Irvine, las palabras dulces y siempre alegres de Rinoa, los discursitos aburridos y sin sentido de Zell, no volveré a ver la mirada intensa de Squall ni la pose autoritaria de Quistis. Dios mío, incluso llego a pensar que ojala no hubiésemos acabado esta misión. Se que es una actitud un poco egoísta, pero es que no quiero que se olviden de mi, de todo lo vivido, no quiero que olviden que somos compañeros y...AMIGOS. Es extraño que puedan crearse lazos tan intensos con personas que solo conocer desde hace un mes, que se conviertan en personas tan importantes en tu vida. Nos hemos salvado la vida unos a otros, así que supongo que siempre estaremos unidos, aunque no estemos cerca.
Espero que finalmente todos seamos felices y que podamos compartir nuestro tiempo juntos.
No tengo nada más que decir por ahora, así que me despido. Chao. ^_^
Selphie dejó de escribir en el diario del pupitre, apagó el monitor y levantó la mirada para descansarla del resplandor de la pantalla. Allí estaba Seifer, que la saludaba sonriendo. Caminó hacia su pupitre y comenzaron a charlar, cosa inimaginable una semana atrás.
SEIFER: No se como agradecerte el que me hayáis apoyado después de cómo me porté con vosotros. Tengo mucho que aprender y ojalá tenga la oportunidad de enmendar mis errores.
SELPHIE: No fue culpa tuya, te cegó la maldad de las brujas. Además, todo el mundo merece una segunda oportunidad, sobre todo si se arrepiente de lo que ha hecho. No te preocupes, cuentas con el apoyo de todos, aunque quizás sea nuestra confianza lo que más te cueste recuperar.
SEIFER: Estoy convencido de que todo cambiará, de hecho, yo mismo ya no soy el mismo que era.
SELPHIE: Me doy cuenta de ello, no creas...
SEIFER: ¿Qué te pasa Selphie? Te noto triste, ¿ha ocurrido algo? Tú no solías estar así, y mira que tu actitud antes me resultaba cargante...
SELPHIE: No, es tan solo que no deseo que todo este tiempo caiga en el olvido. Voy ha echar de menos muchas cosas. No quiero separarme de mis amigos y estoy un poco perdida... Ahora no se que va a ser de mi vida.
SEIFER: No tienes por qué estar triste. Ellos siempre estarán dentro de tu corazón, y cuando los necesites solo tendrás que pensar en ellos, y ellos notarán tu presencia. Lo que habéis creado ha sido algo más que una amistad, es un vínculo mucho más fuerte de confianza y fraternidad. De algún modo siempre estaréis juntos, aunque no lo esté vuestro cuerpo. Tómate un tiempo y reflexiona, no te fuerces a tomar decisiones tan pronto, porque precipitarse tampoco va a ayudarte. Lo que tenga que ser, será.
Tras esto hubo un silencio provocado por la mirada llorosa de Selphie. No alcanzaba a comprender como Seifer le estaba dando lecciones acerca de la vida y de como afrontarla, pero le fastidiaba asombrosamente que tuviera toda la razón.
SELPHIE: (llorosa) Gracias.
Seifer se sentía orgulloso de sí mismo, pero seguía sin gustarle la idea de no haber aprobado el exámen de Seed, por lo que su orgullo herido le hizo correr hacia la sala de entrenamiento y practicar duramente. Estaba preparado para el combate cuerpo a cuerpo, pero debía aprender a trabajar en equipo y a saber no dárselas de mejor que nadie. Tendría que trabajar duramente esos aspectos, pero se sentía capaz como nunca antes.
En Balamb. Zell está tumbado en su cama, pensando en lo que será de su vida a partir de ahora. Era fácil confundirlo con el Squall turbado por sus pensamientos en su cama del Jardín, porque su actitud era exáctamente la misma. Por momentos parecía no haber superado que todo aquello había acabado.
ZELL: (pensando). ¿Qué pasará ahora? ¿Qué estarán haciendo los demás? ¿Cómo estarán Squall y Rinoa? ¿De verdad podremos volver a nuestras vidas de antes y no estar juntos? ¿Podré volver a ser un simple Seed cuando hemos llevado a cabo la misión más peligrosa de cuantas hayan existido? Quistis...
En ese momento, se dio cuenta de que no era normal en él tomarse la vida tan en serio. Incluso se asustó, porque se vio pensando en una chica, de una manera especial, y jamás se había dado cuenta de cuanto dependía de ella. Durante el combate eran uña y carne, se leían la mente hasta el punto de que sus ataques conjuntos era devastadores y todo sin mediar palabra, y fuera del combate todas sus conversaciones -trascendentales o no- habían sido el calmante para los nervios, la cura de las heridas, la felicidad ante el miedo...todo. Era extraño, porque cuando era su instructora, sencillamente existía una atracción puramente erótica hacia ella, pero la conexión que habían experimentado aquel mes, era total y profunda.
ZELL: No puede ser. Me tengo que animar. Me estoy volviendo como Squall, le doy demasiadas vueltas a las cosas. Tal vez sea porque haber estado tan cerca de la muerte ha hecho que ahora me piense las cosas con más calma. Pero esto es demasiado... ¡Mamá, voy a salir!
MADRE: Vale Zell, ¿te espero despierta?
ZELL: No se a que hora llegaré. Si ves que vuelvo tarde vete a la cama.
Zell le dio un beso a su madre en la frente y salió. No sabía donde ir, pero en su subconsciente sabía donde encontraría lo que estaba buscando, en caso de que no hubiese partido ya hacia su nuevo destino. En su camino hacia el puerto pensó en encontrar respuestas, en que de ese día y de ese momento saldría a la luz lo que iba a ocurrir en adelante con su vida y estaba decidido a no dejar escapar la oportunidad de continuar lo que nunca empezó. Solo quería que al girar al puerto, el ferry no hubiese salido aún.
Quistis estaba allí, sentada cerca del muelle, mirando como se ponía el sol. El viento le daba de frente, y su cabello rubio se movía al compás el aire, suave y dulcemente. Zell respiró profundamente, aliviado por ver que aún no se había decidido a marcharse, que tenía la posibilidad de hablarle una vez más.
ZELL: No esperaba encontrarte aquí. Pensé que te habrías ido a Esthar con Laguna y Eleone en el ferry de esta tarde. Me he sorprendido al verte aquí.
QUISTIS: ... No hables ahora. Disfruta de la que posiblemente sea nuestra última tarde juntos. Mira como se pone el sol.
La cara de Zell se tornó de un blanco enfermizo y notaba como le faltaba la respiración. Finalmente Quistis se iría, y él tendría que hacer frente por si solo a lo que pensaba que sentía. Se dio cuenta de que averiguar él solo lo que sentía por otra persona sería imposible si ella se iba, pero se resignó y pensó que sencillamente era lo que tenía que pasar.
ZELL: ¿A dónde te vas a ir finalmente?
QUISTIS: No lo se. Aun no lo he decidido. Esta noche dormiré en el jardín por última vez. Tal vez si que me vaya a Esthar. Ya tengo la maleta hecha y mañana cuando venga iré donde me lleve mi instinto. Hoy no he sido capaz de hacerlo, tenía que despedirme. Como han cambiado las cosas. Hace unos meses era instructora del jardín, la más joven de la historia, y ahora he renunciado a mis privilegios de Seed, ahora no soy nada. Quiero empezar de cero. Me he dado cuenta de que quiero ver sitios, aprender cosas nuevas y ayudar a la gente, logré llegar al cielo demasiado joven, sin disfrutar de todo lo que quería, ahora me toca dejarme llevar. Mi único problema es que no quería separarme de vosotros tan pronto.
ZELL: ¿Y entonces porqué has decidido irte? ¿Has cambiado de opinión respecto a nosotros?
QUISTIS: No. Os quiero muchísimo, pero no puedo quedarme estancada, tengo que avanzar hacia mi futuro. Tengo muchas cosas que hacer, mucho por explorar, y no quiero que mi vida solo sea recordada hasta la derrota de Artemisa. Solo tengo 19 años, y quiero que mi vida no se quede ahí. El futuro no me espera, tengo que salir yo a buscarlo.
ZELL: Quistis...
QUISTIS: Zell, mira la puesta de sol.
Pasaron media hora juntos, viendo como el sol se ponía. Zell sentía como su corazón palpitaba más fuerte y como su respiración se agitaba. Intentaba dejar la mente en blanco, pro al contrario de lo que habría pasado hacía un tiempo, no conseguía lograrlo. Aunque consiguió no decir ni una palabra. No quería influenciar a Quistis en su decisión.
ZELL: (pensando) ¿Qué pasa? ¿Por qué tenemos tantas ganas de huir y olvidar todo lo ocurrido? No entiendo como pueden cambiar tanto las personas. Hasta hace unos días no queríamos separarnos. Nos preparábamos para la lucha final juntos. Quistis era la responsable de todos, formal y tranquila. Ahora no quiere quedarse aquí, el lugar donde su vida tomó sentido, donde llegó a ser alguien. Ha renunciado a todo aquello por lo que ha luchado tanto tiempo. Selphie era una muchacha alegre y divertida, y ahora esta triste. Antes solo pensaba en terminar con las brujas para poder volver a Trabia y ayudar a los suyos, pero ahora prefiere quedarse en el jardín de Balamb. Irvine era un chico inquieto, y por lo visto se ha ido a vivir a uno de lo lugares mas tranquilos del planeta. Y yo...yo era divertido, gracioso y un poco chiflado, pero ahora no hago más que pensar para mis adentros, analizo mucho las cosas y a penas hablo. Y Squall y Rinoa...bueno, ellos están genial, pero poco han tardado en salir corriendo de aquí...
En Timber, Squall y Rinoa disfrutaban de unos momentos de felicidad y tranquilidad. Paseaban juntos pos las calles, recordando todo lo vivido allí. Recordando como comenzaron su andadura juntos. Iban agarrados de la mano por la ciudad. Era de noche ya. Fueron al banco en el que un mes atrás habían visto a una pareja de enamorados juntos. Se sentaron y contemplaron las estrellas. La noche era perfecta.
Aquellos días habían estado con Watts y Zone, y el resto de los Búhos del Bosque. Todos estaban a salvo y habían celebrado el regreso de su "princesa". Les embargaba la tranquilidad y la felicidad de ver como todos habían logrado sobrevivir a la vorágine ocurrida.
RINOA: Squall, ¿te das cuenta de cómo están las cosas? Tu y yo, aquí, juntos...Es todo tan extraño.
SQUALL: Lo sé. ¿Quién lo iba a decir? No me imagino a mi mismo hace unos meses, antes de conocerte. Tú me has cambiado. Tu me has hecho mejor persona. Me has hecho sentir. Y eso que no te sorportaba al principio...
Squall puso una cara picarona, y Rinoa, reconociendo el tono burlón de Squall, se abalanzó sobre él para hacerle cosquillas.
RINOA: Ah, ¿no? Con que esas tenemos... a ver si te defiendes de esto...
Estuvieron jugando un rato, como el gato y el ratón, persiguiéndose y riendo, como si nunca hubiera existido ningún conflicto más importante que el de hacerse felices. Entonces Rinoa lo dijo...
RINOA: Te quiero...
SQUALL: ...Lo sé.
Squall había cambiado, pero era pedirle demasiado que mostrara tan abiertamente todos sus sentimientos. Él sabía que mostrar los sentimientos le haría vulnerable, y aunque sentía por Rinoa más de lo que podía explicar con palabras, no alcanzó a decírselo. Tampoco hizo falta porque su mirada lo decía todo.
En silencio, ambos se miraron a los ojos.
NOTAS DE LA AUTORA: Este capítulo ha sido actualizado y reformado (en 2010), porque lo escribí hace muchos años (2003) y releyéndolo me resultó muy pobre. Espero que os guste. Los demás también sufrirán cambios poco a poco.
Si tenéis cualquier sugerencia, estoy a vuestra disposición ^_^
