No puedo creer que haya escrito algo sobre este par.
Bueno, considerando que sigo sin superar el episodio 7 (¿Alguien ha podido superarlo?) anoche no podía dormir y se me ocurrió esto. Está inspirado en cierta escena de dicho episodio. Es cortito y sin mucha cosa, tal vez esté raro... Pero es a causa de que es la primera vez que escribo algo de este par.
Disclaimer: Yuri on Ice no es mío, para nada.
Aclaraciones: Victuri. Fluff, mucho fluff. Escrito al punto de vista de Yuri (más o menos). Inspirado en una escena del episodio 7. Cosa corta.
Si alguien está leyendo esto, ¡Espero te agrade!
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Despertó, y con una mano retiró la tela que cubría sus ojos. Su visión estaba borrosa, por el sueño y la falta de sus lentes, pero eso no impidió que observara claramente aquel rostro dormido encima de su pecho.
No le extrañó, para nada, que Víctor se haya quedado dormido ahí, tan cerca.
Ni siquiera se preguntó por la hora, si había pasado mucho tiempo, sólo se quedó donde mismo presenciando al otro dormir plácidamente. Le hacía creer que su pecho era cómodo, y ese pensamiento le causó una gracia agradable.
Oh, Víctor. Su ídolo, la única persona que tanto había admirado y por el que hizo un montón de cosas. Aquel que le resultaba tan inalcanzable, tan imposible, como si ambos fueran de mundos totalmente opuestos.
Pero la vida daba muchas vueltas, él era consciente de ello, y ahora estaba aquel ser que consideraba tan inalcanzable dormido sobre él, como si hubiera sido de esa manera desde siempre.
Y se sentía realmente afortunado. Desde que Víctor se presentó frente a él (de verdad, y no por medio de una pantalla como lo fue en un principio) fue como si la vida le diera una nueva oportunidad… Definitivamente, había comenzado a vivir por segunda vez.
Estaba tan cerca que se volvió su entrenador, haciéndolo surgir desde sus cenizas. Tan cerca que su relación se había fortalecido de una manera maravillosa. Tan cerca que podía sentir el calor de su respiración dormida sobre su pecho…
¿Cómo todo resultó de esa manera? Era la primera vez que se lo cuestionaba, un poco sorprendido incluso. Siempre había tenido cierta fijación con Víctor, como patinador sobre todo, y ahora su apego hacia él iba más allá que una simple admiración… Tenía el mismo concepto de su rutina, era amor.
Con lentitud y suavidad llevó su mano libre (la otra era prisionera del cuerpo de Víctor) sobre la cabellera platinada. Dio varios toquecitos en cierto remolido, riendo internamente con cada toque. Era tan relajante, lo ponía de muy buen humor. Ese tacto le daba entender que Víctor era real, que estaba ahí, y no era intocable…
En otras palabras, Víctor era todo lo que necesitaba.
-¿Te diviertes, Yuri?-
Dio un leve respingo y retiró rápidamente su mano. Se sentía como un niño pequeño que era descubierto en medio de una travesura. Víctor había despertado y ahora lo miraba con sus profundos ojos azules…Tan cerca.
Un rubor invadió sus mejillas, no sabía qué decirle.
Se miraron por unos pocos segundos, hasta que la risa suave de Víctor invadió la habitación. Después de ello, Víctor volvió a recostarse en su pecho dispuesto a continuar con su siesta.
Víctor no dejaba de sorprenderlo, y se había acostumbrado a vivir con ello; es más, era algo que hasta le gustaba mucho…
Porque, con cualquier acto, confirmaba cada vez más que Víctor estaba cerca, estaba para él. Y deseaba que fuera así por mucho tiempo…
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¡Gracias por leer! Y disculpen si hubo algún error (estoy bien ciega ya)
Me encantaría escribir más de ellos en un futuro, son como una parejita de casados y me encantan. Las parejas así son de mis favoritas.
¡Hasta una próxima vez! (espero)