POV HERMIONE
Me despierto en casa de los Weasleys a las 6:00 de la mañana, por ser el primer día me voy a arreglar de más, abro el armario de Ginny por que lo hemos dividido para las dos, me pongo un vestido muy bonito y provocativo que me regaló mi madre antes de hacer el hechizo de pérdida de memoria, me rizo el pelo con rizos bonitos y definidos y me maquillo, pero lo que son los zapatos me los pongo de deporte, voy más cómoda, pero del mismo color del vestido. Salgo del cuarto de baño y despierto a Ginny, vamos a volver a repetir el año perdido buscando los horrocruxes, Harry, yo y… Ron. Desde que me dio el beso en la batalla no me habla, ni siquiera quiere verme, no se que le pasa, respecto a lo de Ginny y Harry, son la pareja mas bonita que he visto en el mundo, y respetan a Ron, que es lo más importante, un día de este verano se puso tan celoso, de ver a su hermana morreándose con Harry, que por poco le manda un "avada kedabra".
¡Ginny! ¡Despierta! ¡Vamos a llegar tarde! –le grito yo, y ella se tapa la cabeza con la almohada
un ratito más mami –me dice Ginny y yo me tiro encima y ella se levanta de un salto -¡¿Qué haces loca?
Despertándote. Y no soy tu mami –de repente Ginny se puso roja como su cabello y yo me lie a carcajadas, ella se enfurruña y se queja
¡pero si solo son las ocho! –dice resignada y tapándose la cabeza con las sábanas, yo me siento a su lado a ver si se da cuenta de mi cambio de luz, pero parece que esta muy ocupada durmiendo, le cojo de la cintura
¡huuuuuuuuu! –la tiro de la cama, Ginny se levanta cabreada y despierta del todo, yo empiezo a correr por la habitación y ella me persigue con la almohada, cuando llevamos un cuarto de hora con el gato y el ratón, Ginny se dirige a nuestro armario a cogerse su ropa, yo me acerco a ella y me pongo en pose para que me vea, pero ella no se da ni cuenta
¿no me ves ningún cambio? –le pregunto y ella me mira y en cuanto me ve.
¡oh! Estas guapísima, no sabía que tenías un vestido tan bonito, aunque es un poco provocador, ya sabes –dice observándome mas detenidamente –a Ron se le va a caer la baba en cuanto te vea
yo no quiero que se le caiga la baba a nadie, y menos a tu hermano, me he hecho este capricho por ser el primer día, nada más. –digo yo, y la verdad es que en parte es verdad, puede que quiera llamar la atención un poco mas que de costumbre, pero quiero ser la Hermione Granger de siempre, no puedo cambiar lo que soy
venga, ahora mi ropa, ¿cuál crees que me sienta bien? –saca tres vestidos muy vonitos, y también un poco provocadores, pero menos que el mío –es que quiero asombrar a Harry –dice Ginny que quiere mucho a Harry, y yo también lo quiero, pero como un hermano, y respecto a Ron estoy confusa, se que lo quiero, pero no se como, creo que para mi es como Harry, un hermano. Yo le propongo a Ginny un vestido a boleo y parece que se queda conforme, y sale muy bella del cuarto de baño, casi igual que yo. Bajamos a la cocina donde esta la señora Weasley y el señor Weasley, con Harry y Ron, Harry se queda con la boca abierta mirando a Ginny y Ron babea por mi, Ginny tenía razón, yo me siento al lado de Ginny y en frente de Ron
ho-hola Hermione –dijo Ron, yo ni siquiera le miré, antes me evitaba y ahora quería llamarme la atención, todo el desayuno estuve hablando con la señora Weasley y Ginny, que también me dijo que iba muy guapa y yo me sonrojo. Cuando terminamos cogimos el coche y fuimos a King cross al andén 9 y ¾ para volver a Howarts, y ahora la directora era Minerva Mcgonagall, varios de los chicos que iban conmigo hace dos años también volvían a recuperar el año perdido. Después de despedirnos de los señores Weasleys subimos todos al tren, encontramos un compartimento vacío y nos sentamos en el, Luna, Ron, Neville y yo, Harry y Ginny no estaban, y tampoco quería saber donde, por que ya me lo imaginaba.
¿sabéis que tengo una colección de babosas carnívoras en mi casa? Y se me han escapado –dijo Luna y yo hice una mueca de asco, "Luna nunca va a cambiar" pensé yo con una sonrisa, Ron me miraba todo el rato, y yo incomoda me levanto
o dejas de mirarme así o me voy –le digo a Ron amenazadoramente haciendo ademán de abrir la puerta
vale, pero Hermione, ¿no te das cuenta?, yo no soy el único que te mira, todos los chicos que he visto se han quedado embobados al verte pasar, es algo normal –me sentía intimidada y observada, Ron ahora miraba el suelo, yo tosí y me volví a sentar. a la hora de viaje ya me estaba mirando otra vez, me levanté y abrí el compartimento
tengo que ir al servicio –digo y salgo en dirección al aseo de las chicas, para ver si se me había corrido el rimel de la furia, paso por delante de el compartimento de las serpientes, Zabinni, Not y el hurón se quedaron mirándome mientras pasaba y escucho a Zabinni comentar a los otros
¡diosss! que buena está Granger
no seas idiota, yo estoy mejor –dice la celosa de Parkinson
no te creas –escucho decir al hurón. me voy corriendo al servicio y me encierro, me miro en el espejo y tengo las mejillas sonrosadas ¿Cómo puede ser, tanta vergüenza he pasado? No se como, pero asta yo misma me veo una zorra como Parkinson, pero prefiero no pensar en eso. Cuando voy a salir me encuentro en el pasillo a Hurón-engreído-Malfoy, se acerca a mí con aire seductor, y yo lo esquivo, lo que me faltaba, otro plasta más. Me coge del brazo y me intenta arrastras al servicio de nuevo
¡suéltame, maldito hurón! –dije yo intentando zafarme de sus brazos, el me arrastra y cierra la puerta de un portazo, me mira con odio y con ¿deseo? Eso me parece, nos quedamos varios minutos mirandonos a los ojos, yo lo miro con odio -¡déjame salir o tendré que hacerlo yo!
Granger, Granger, ya se que me quieres y que quieres sexo conmigo, pero con habérmelo pedido habría bastado –dijo Malfoy y yo lo miré con odio, el se acercó a mí y yo me echaba hacía la esquina evitándolo
¡yo no quiero nada contigo! ¡y antes que quererte a ti prefiero querer a Goyle! –dije yo cogiendo mi varita preparada para atacar, el se acercaba a mí con una risa traviesa y con malas intenciones, yo tocaba ya la pared y no podía retroceder
creo que te vas a arrepentir de haber dicho eso atractiva sangre sucia –dijo y se me tiró encima haciéndome caer al suelo duro y frío, empezó a besarme el cuello y yo lo aparté, tomé mi varita he hice el conjuro "levicorpus" me levanté corriendo y salí del servicio, dejando al hurón pervertido encerrado en él.
Cuando me dirigía a mi compartimento, nerviosa, furiosa y excitada vi a Ginny y Harry medio en pelotas haciendo cosas indebidas, toqué con las manos la puerta donde estaban en pleno arrebato pasional, al escucharme se vistieron rápidamente y con voz entrecortada me dijeron los dos "¡pasa!" y yo entré, pero no me senté, me daba asco y vergüenza ajena
-no deberíais hacer esto en un tren lleno de niños de 11 años ¿y si os hubiera pillado Ronald? ¿Qué hubiera pasado? –dije haciéndoles o al menos intentándolo pensar con claridad -¿sabes lo que le hubiera hecho tu hermano a Harry? –Ella asintió asustada con la cabeza, y Harry se puso rojo –espero que me hagáis caso y os busquéis un lugar íntimo para hacerlo
- ¿Qué tienes en el cuello? –me preguntó Ginny, ¡oh por dios, como no me di cuenta? -¿son chupetones? –preguntó Ginny y yo me puse roja de vergüenza
-disculpadme, tengo que arreglar una cosa –dije y salí al cuarto de baño, donde el hurón estaba intentando salir con todas sus fuerzas, pero no podía por que yo, hermione Granger, o "sangre sucia" como me dice él, le he quitado su varita
- halohomora –dije con mi varita alzada y se abrió la puerta. Malfoy estaba rojo de la vergüenza, por que salió disparado al abrir yo la puerta, tenía las facciones asustadas y excitadas, yo me reí para mi misma.
- ¡oh! ¡el hurón se quedó encerrado en el servicio de las chicas! –le dije y me miró con odio, esta vez se dirigió a mi cabreado y descompuesto del odio
- Granger, pienso hacerte la vida imposible –me dijo Malfoy dejando la puerta del cuarto de baño entornada por si acaso, la verdad, que si me tocaba un pelo iba a terminar igual.
- ¿Cómo? ¿Dándome "placeres" insospechados para una sangre sucia? –digo yo, menos asustada, y a el se le cambia otra vez sus facciones y ensancha una sonrisa, solo para hacerme rabiar
- pues si eso te molesta y te hace daño, es lo que haré, pero como no quiero que disfrutes, te voy a humillar, y después te veré pidiéndome sexo a mis pies –dijo acercándose otra vez a mi amenazadora mente, yo iba otra vez a por el mango de mi varita para defenderme, ¡pero no estaba! ¡Asqueroso y descarado hurón! ¡no se lo tiene creído ni nada! –y esas marcas rojas que te he hecho en el cuello te sientan muy bien –dijo acercándose y arrinconándome contra la pared, con sus brazos a ambos lados de mi cuerpo y sin dejarme salir, comencé a respirar agitadamente debido a los nervios que me producía su cercanía
- esto que estas haciendo se llama acoso, Malfoy –dije mostrándome severa e intentando zafarme de su abrazo
- ¿no me digas que no te gusta, Granger? –dijo el pervertido y acosador hurón susurrándome en el oído –y si es acoso, te lo merecías ratita de biblioteca ¿o no? –yo metí mi mano en su bolsillo para sacarle mi varita, o la suya, el caso era dejar de sufrir, y noté que él estaba muy excitado, así que me di mas prisa –veo que te gusta toquetearme Grang… -yo salí corriendo antes de que él terminara de hablar y me puse una bufanda mientras iba al compartimento, me la puse para que no vieran los chupetones y para que no hicieran preguntas, entré y Harry y Ginny también estaban en el compartimento, Ginny se acercó a mi
- ¿Cuál era el asunto que tenías que arreglar, pilla? –Ginny se podría imaginar lo que había pasado perfectamente, pero no con el mismo chico, así que me inventé el nombre, por que si decía el apellido MALFOY se reirían de mí y no me extrañaría que lo hicieran, yo hubiera echo lo mismo
- emm… esto, era… Seamus –mentí, y Ginny se quedo conforme por que me dejó. El viaje pasó más lento que todos los años anteriores, no podía dejar de pensar en lo que me habría hecho Malfoy si no hubiera tenido mi varita, el nuevo look lo único que me trae son problemas.
- ¡eh! ¡Herms! ¡ya hemos llegado! –me dijo Harry, y yo de pronto salí de mi ensimismamiento. No soporto a Malfoy.
¿¡TENGO QUE COMPARTIR MI TORRE CON MALFOY!
POV HERMIONE
Me bajo con Ginny del tren y me subo en un carruaje con todos mis amigos. Luna está muy risueña, ojala yo pudiera estar como ella, seguramente lo estaría si Malfoy no se hubiera metido por medio.
¿creéis que pondrán pudín?, es que me he encontrado una de mis babosas carnívoras en la mochila, y a los dos nos encanta. ¿queréis verla? La tengo aquí –dice Luna y yo hago otra mueca de asco ¡pudín a una babosa carnívora!, miro a su regazo, tiene un paño con algo dentro, ¡la babosa!, me aparto lo mas posible de ella, de la babosa, no de Luna
no gracias. Esta mejor donde está –dice Ron que desde que le salieron babosas por la boca les tiene asco. Bajamos del carruaje y nos adentramos a nuestra antigua pero grande escuela de magia Howarts
¡Cuánto la echaba de menos! Todavía me quedan la mitad de los libros de la biblioteca que leer –digo muy entusiasmada, pensando en todas las horas de lectura que tengo de ahora en adelante.
Tu siempre pensando en libros Hermione –dice Harry con una sonrisa y nos coge a Ginny y a mi de los hombros –estas son las dos mujeres que mas quiero –dice Harry y entramos al gran comedor, para el discurso anual, donde los chicos están en fila para que el sombrero clasificador les asigne sus casas
Y pensar que hace poco éramos nosotros los que estábamos ahí –dijo Ron con un suspiro
Y nos han pasado tantas cosas desde entonces –digo yo también con un suspiro observando y aplaudiendo a los niño que entran en nuestra casa. a la hora del discurso de la directora MCgonnagall, se calló todo el comedor.
Aquí estamos otra vez reunidos en Howarts para cursar un nuevo año, y aparentemente tranquilo –dice mirándonos a nosotros –espero que los de séptimo año se apliquen, y se centren en estudiar, lo mismo que a los de primero. Como todos los años, os recuerdo que el bosque esta prohibido. Ahora vamos a nombrar a los premios anuales y a los capitanes de quidich: premios anuales: Hermione Granger –al decir esto me puse muy contenta, ya no tendría que con partir la habitación ni con Parvati ni con Lavender. Subí y me dieron el némero de la torre y una carta, con todas las funciones y las reglas, al final de la carta ponía "señorita Granger, espero que se intente llevar bien con su compañero de torre, fue al azar no me eche la culpa a mi. Minerva MCgonnagall" esto me dijo que mi compañero no iba a ser algo bueno para mi y también que no me caía bien – Draco Malfoy –al decir esto desfallecí, ¡me iba a tocar compartir la torre con el hurón pervertido! ¡NOOOO!, la profesora MCgonagall me miró y me hizo un gesto de que me controlase, el hurón se acercó a mi y me dedicó una asquerosa sonrisa de derrota –ahora los capitanes: Harry Potter –me puse muy contenta y abracé a Harry, el siempre había querido ser el capitán, aunque no se lo dijera a nadie, y lucía una sonrisa. Nombraron a los demás capitanes, pero no me enteré, nos sentamos para recibir el banquete, y Mcgonagall concluyó –espero que paséis un feliz año. Ahora disfrutad el manjar que os ofrece el colegio. Que aproveche –dijo y en la mesa aparecieron todo tipo de alimentos, incluido el pudín, algo que a Luna le iba a gustar, y a su babosa también, comimos y yo no pude con el postre, en cambio Ron ya estaba repitiendo. Ginny me miró
¿vas a compartir la torre con Malfoy? –me preguntó, ¿Por qué me lo había tenido que recordar, si ya casi lo había olvidado? Miré la mesa de las serpientes, y ahí estaba él, mirándome, yo aparté la mirada enseguida, ¿no me iba a dejar nunca en paz?
Si, por desgracia sí –dije yo y Ginny también miró a la mesa de las serpientes, tras unos segundos volvió la cabeza hacía mi
Creo que le gustas, no deja de mirarte
No le gusto, además para él y toda su familia soy una impura, mucho peor una "asquerosa sangre sucia", además, yo nunca me enamoraría de un hurón pervertido y desteñido –le expliqué yo, que estaba alta de gustarle a todo el mundo en un día. Ginny me preguntó
¿entonces que vas a hacer esta noche en la torre? –yo me quede asombrada, me imaginaba que al menos hubiera un mes para prepararla, no que nos trasladásemos esta noche
¡¿esta noche?
Si, como oyes, lo acaba de decir Mcgonagall, ¿no te has dado cuenta?
No, estoy despistada, y también desconcertada ¿tengo que estar cerca de Malfoy? –pregunté yo esperándome lo peor
Creo que va a haber dos habitaciones y un salón-cocina. Vas a tener suerte –me dijo con una sonrisa y yo solté un suspiro de alivio, ya salía la gente del comedor e iban a sus habitaciones –adiós Herms, que te valla bien –me dijo Ginny con una sonrisa maliciosa. Yo abrí mi carta para saber orientarme, y alguien me toco el brazo, me sobresalté
Hola, creo que vas a tener que "dormir" conmigo –lo que me faltaba, Malfoy me tenía cogida la mano y me llevaba por los pasillos
No voy a "dormir" contigo, ¿no te has enterado de que hay dos habitaciones?
Si me he enterado, pero eso se puede arreglar ¿estarías dispuesta, ratita? –dijo Malfoy con tono seductor
Antes muerta –respondí yo, y este me apretó mas la mano -¿sabes donde esta la torre?
Sí, me han dicho que detrás de este cuadro –dice el hurón deseando entrar
¿sabes la contraseña? Yo sí, déjame a mi: "chocolate con babosas" –y el cuadro con forma de pintor se abrió dejando paso a un salón muy espacioso, Malfoy cerró la puerta y se tumbó en el sofá despreocupado
túmbate aquí conmigo –dijo el asqueroso pervertido señalándome su pecho, para que me tumbara encima de él
ni loca –dije dirigiéndome a mi habitación, que fue fácil de reconocer, por que la mía tenía mis cosas y tenía los colores de griffindor, también tenía un baño, pero me di cuenta de que solo había uno… para los dos. Me cogí mi camisón, bastante ajustado pero bueno, y mi ropa interior roja, me duché y me preparé para dormir, cuando me iba a poner a leer, la curiosidad me invadió. Salí a tientas y me asomé al salón, pero no había nadie y las luces estaban apagadas, estaba enfrente de la habitación de Malfoy, y la curiosidad de saber lo que estaba haciendo me invadía. giré el pomo muy lentamente, la luz estaba apagada, y Draco estaba durmiendo como un ángel ¿Qué pienso? Me acerqué a ver si era verdad, y cuando estaba al lado de su cama, el hurón levantó el brazo y me tiró con él en la cama.
¿QUÉ HACES ESTÚPIDO? –Grité yo intentando zafarme de sus brazos, y al final me soltó
no es obvio, pegarte un susto. Aunque no lo parezca, no quiero violarte Granger, si alguna vez hago algo contigo será por que me lo pides –me dice el hurón con una odiosa y mala sonrisa
pues vas a tener que esperar toda tu vida hurón pervertido –le dije acercándome a la puerta y este se levantó también de la cama con la ropa puesta
ya verás como tarde o temprano me lo pedirás ratita atractiva. Ese camisón te sienta fenomenal, nunca me hubiera esperado esto de una sangra sucia –dijo examinándome con la mirada de arriba abajo, con una maliciosa sonrisa, y yo le contesté con una mirada de odio –pero siento decirte que esta noche tengo trabajo, vas a tener que pedir cita para mañana por la noche. –dijo el hurón bajando a abrir la puerta con una sonrisa en la cara, seguramente sería una zorra desesperada por tener sexo con el "sex simbol" de Howarts. Yo me fui a mi habitación y miré por la rendija de la puerta a ver quien era la "afortunada" que iba a pasar la noche con Malfoy para toquetearle y masturbarse con él. ¡es Pansy Parkinson! ¡como no!, me puse a escuchar la conversación
Draquito, vas a tener que hacer el hechizo para que Granger no escuche mis gemidos. Sería fatal que suspendiera o que Griffindor perdiera puntos ¿verdad? –dijo esta acercandose a "draquito" seductoramente, yo por poco echo chispas de la furía, iba a coger esa… mejor no pensar en eso, quería escuchar lo que decía Dra…malfoy
Déjala que nos escuche, puede que unas clases de educación sexual le venga bien para satisfacer a la comadreja o a san Potter –dijo Malfoy que sabía que estaba espiando, por que dijo –vamos a mi habitación, puede que las paredes miren –me cabree tanto que por poco salgo de la habitación ¡como era capaz de creer que yo haría eso con mis dos mejores amigos! ¡además Harry ya tiene novia! Es un estúpido malcriado que quiere fastidiarme en mi propia torre. Me fui a mi cama y me senté a leer un rato, a la madia hora comencé a escuchar a la zorra de Parkinson gemir de placer, a draco respirar agitadamente del esfuerzo y los crujidos que pegaba la cama por el peso de los dos. Me puse nerviosa, Malfoy me las iba a pagar, por que lo estaba haciendo a posta. Dejé mi libro a las dos horas de intentar leer pero perder la concentración por los asquerosos gemidos de Parkinson. Me tumbé y me puse la almohada en la cabeza, pero era imposible, solté un suspiro de cansancio y resignación. Me tiré toda la noche en vela andando por la habitación, cuando cesaron los gemidos, me fui a dormir, pero a las 4 horas sonó el despertador. Me levanté ojerosa, Parkinson ya se había ido, y yo no había dormido nada, es más por poco me duermo lavándome los dientes en el servicio
¡Granger! ¡vamos! ¡que vamos a llegar tarde! –dijo Malfoy desde el otro lado de la puerta pegando portazos de desesperación
¡yo no voy a llegar tarde, y menos contigo Malfoy! –le contesté yo poniéndome mi túnica a toda prisa salí y me encontré a…
¿yo enamorado de una sangre sucia?
POV DRACO
Hermione ha cambiado mucho, esta mas guapa, con más curvas, con mas pecho, es decir, he intentado seducirla por todos los medios para que pase una noche conmigo, pero tiene orgullo y no quiere aceptar que está enamorada de mí. La estoy esperando en la puerta de la torre para convencerla a hacer novillos, y ganármela de forma romántica, seguro que dentro de una semana ya me lo pide. Tengo pensado ir al bosque prohibido y decirle cosas bonitas, eso siempre cuela con las chicas, pego portazos desesperadamente a la puerta del servicio, y por fin se decide a salir.
me voy a clase. Adiós Malfoy –me dice la muy descarada pero guapa dirigiéndose a la puerta, la verdad es que me da pena, yo estoy acostumbrado a no dormir por las noches o a dormir poco y siempre me mantengo como una rosa, en cambio ella tiene unas ojeras que parece un zombi, yo me pongo delante de la puerta para que no salga.
¡quítate de en medio! ¡no ves que tengo prisa? –dijo ella intentando empujarme, pero yo era mucho mas fuerte, de todas maneras le deje que se esforzara un poco.
¡YAAA, MALFOY ESTO NO TIENE GRACIA! –Dijo la sangre sucia echándose para atrás y mirando me con odio –voy a tener que hacerlo a las malas –sacó su varita, y yo en un acto fluido saqué la mía y la desalmé, que difícil era invitar a Granger al bosque. Me volvió a mirar con odio y yo le regalé una sonrisa trabiesa, cogí su varita y me la metí en el bolsillo
Granger, hoy no vas a ir a clase –dije y ella de la furia que tenía estaba roja como el cabello de los Weasleys
¡QUE DICES! ¿¡ERES ESTÚPIDO O QUE! ¡YO NUNCA HAGO NOVILLOS, Y MENOS POR TI! –dijo chillando y yo tuve que moderarla para que se calmase, o mejor dicho amenazarla y sobornarla
mira Granger, vamos ha hacer un trato, si vienes conmigo al bosque prohibido…
¡al bosque prohibido! ¿tu estas loco o que? –me dijo y yo ya alto opté por dejarlo e intentarlo otro día, pero un Malfoy siempre consigue lo que se propone, y yo no iba a ser la excepción
no, no estoy loco. Por favor, escúchame Granger –ella se puso seria y se calló para escucharme, yo proseguí –si vienes conmigo, te prometo que no te molestaré mas por las noches, pero si te niegas a hacerlo –Granger apretó los puños –voy a tener que amenazarte
¿Qué clase de amenaza? –me preguntó mas tranquila, pero tensa y acercándose a mí para quitarme la varita, yo la cogí
pues puedo decirle a cierto amigo tuyo que estoy contigo y se acabará vuestra amistad para siempre… puffff! –hice un gesto
¡eres un…! No eres capaz de hacer eso –dijo ella corriendo hacía mí, yo la esquivé
¿Qué no lo soy? ¿me estas subestimando? –digo yo con las varitas en alto y Granger intentando cogerlas, ella dio un paso atrás, este juego me estaba empezando a divertir
se que no eres capaz, por si no te has dado cuenta malfoy, yo soy "una sangra sucia" miserable y vulgar –y atractiva también, pero no se lo dije. He decidido quitarme de mortífago, y ahora me da igual la sangre, además mi padre ahora esta en Azkaban y no puede regañarme ni torturarme como lo hacía cuando yo era pequeño.
A mi ya me dan igual las sangres –Her-Granger palideció y de repente me abrazó, yo me quedé asombrado, pero le respondí a su abrazo asombrado y confuso, oliendo su cabello con aroma a flores y cerrando los ojos. Sentí que desechaba por un instante todos mis problemas, y que me purificaba de repente, Granger se apartó de mí y me miró con lágrimas en los ojos, yo solo pude ponerme sincero e intentar transmitirle mi tristeza por la mirada
Me alegro de que te hayas dado cuenta de que no solo es la sangre lo que importa, sino que también el corazón. De todas maneras esto no te da derecho a que me toquetees ¿vale?
Vale, entonces, ¿vienes conmigo al bosque prohibido? –le preguntó con una sonrisa sincera, nunca me he sentido así, ni siquiera con Pansy, ella es para mi un juguete sexual, con el que satisfacer mis necesidades, en cambio Granger para mi sería algo mas que eso, además de mi amante sería mi amiga y le podría contar todos mis problemas, pero por culpa del pasado, de todo lo que le hice pasar, va a ser difícil de que me perdone del todo, y mucho menos de que sienta algo por mí. Creo que me he enamorado de Hermione Granger
El bosque prohibido
POV HERMIONE
No sabía que decir, yo nunca me saltaba las clases por una tan soberana tontería, pero de repente había sentido ¿pena? Por él, Malfoy también tenía problemas, no solo lo teníamos el trío de oro, yo sé que el padre de Malfoy esta en Azkaban y que su madre no para de llorar. Decidí que saltarme una hora o dos de clases no es tan malo, además, yo voy adelantada en materia, no me iba a perder nada importante
si, Malfoy. Voy. Pero dentro de 2 horas de vuelta al colegio ¿vale? –dije yo, y a Malfoy se le puso una sonrisa en su cara de tristeza
vale Granger, ¿nos vamos? –dijo abriendo la puerta para que yo saliera primero, y así lo hice, salí y lo esperé en la puerta del colegio. Por que Malfoy había ido a echarles una excusa a sus amigos las serpientes y a la zorrita de Parkinson, y yo fui a hacer lo mismo pero con los míos.
¡hola Herms! ¿vamos a clase? –me dijo Harry
no puedo, la directora me ha dicho que la vea en su despacho –una excusa muy buena, había estado en el viaje al comedor las alternativas que tenía y esta era la mejor de todas, por que la verdad no la podía decir por nada del mundo.
Aaa, y entonces, ¿Cuándo te veremos? –dijo Ron, que de repente habíamos recuperado nuestra amistad, y eso quería que durara, por que me acordaba del tercer año que éramos los tres muy amigos.
Pues dentro de dos horas, creo –puede que Malfoy me entretuviera, y si lo intentaba tendría que usar mi varita
vale, adiós –dijo Harry –voy a decírselo a Ginny, que seguro que te esta esperando en tu torre
¡ADIÓS! –chillé yo, alejándome corriendo, para reencontrarme con Malfoy en la puerta. Malfoy se encontraba en un muro pensativo, esto me extrañó, me acerqué y me puse delante de él para llamarme la atención.
¿Qué haces Granger? ¿me quieres dar un beso de bienvenida? –dijo el hurón con una sonrisa traviesa, poniendo ambas manos en mi cintura, yo las quité en cuanto me tocó
¡antes muerta! ¿no te he dicho que no me toquetees? –le dije yo que estaba llena de furia -¡Qué vivas mal no te da derecho a tocarme y a consolarte conmigo! – a Malfoy se le salió una lágrima de un ojo y yo me acerqué a él y lo abracé de nuevo
lo siento, Malfoy, no quise decir eso –le dije yo consolándolo, el me abrazó por la cintura y yo lo aparté con cuidado -¿nos vamos?
Venga vamonos, te quiero enseñar una cosa –dijo Malfoy y echó a andar hacía el oscuro bosque, yo casi corría detrás de él, por que andaba muy rápido
¿puedes bajar la velocidad? –dije yo respirando entrecortadamente por la carrera
te aguantas Granger –dijo andando mas rápido todavía solo para fastidiarme, me quedé quieta en el mismo lugar y grité
¡NO QUISE DECIRTE ESO HURÓN! ¡ME VOY A IR SI NO VUELVES DONDE ESTOY YO! –me quedé unos minutos parada en medio del oscuro bosque, donde se escuchaban todos los ruidos horripilantes que podían existir. Oí unos pasos, supuse que era el hurón-llorón-Malfoy, pero de todas maneras saqué mi varita. No me equivocaba, era él, y traía algo en la mano
Granger, eres una lenta –dijo el en tono de burla -¿qué? ¿me querías hacer un avada kedavra? –dijo mirando mi varita, que seguía alzada hacía su dirección, y la baje lentamente
Podría, no me subestimes "Draquito" –le dije yo en tono burlón, este hizo una mueca de sorpresa y se acercó a mí seductoramente
¿escuchando conversaciones ajenas, Granger? ¿es que quieres que te haga lo mismo que le hice a Pansy? Va a dolerte un poquito, por que tu nunca has mantenido nunca una relación con ningún hombre –dijo el descarado y pervertido hurón, ¡y yo que pensé que había cambiado!
No digas tonterías, lo escuché mientras leía. Y antes de pasar lo que pasó la pobre Parkinson, me suicido. ¿te vas haciendo a la idea huroncito? Tu nunca tendrás nada conmigo, y menos sexo. ¡Y a ti que te importa si he tenido relaciones o no! ¡eso es cosa mía! ¡no de un hurón pervertido! –dije yo zafándome de sus manos que me las había rodeado en la cintura
Ya veras como caes a mis pies, Granger –dijo este y se separó de mi, sabiendo que le podía pasar lo mismo que le pasó en el tren, solo que en un bosque con toda clase de criaturas peligrosas
¿Qué llevas en la mano? –pregunté yo, que no aguantaba mas la curiosidad
llevo lo que te quería enseñar, y tu serás la primera en verlo –me lo iba a enseñar, era un…
EL MEJOR DÍA DE MI VIDA
POV HERMIONE
Draco abrió su mano y…
-¿un llavero con una llave? –pregunté yo confusa
- sí, una llave –dijo él en tono tranquilo
- no será para encerrarme, ¿verdad? –pregunté yo que conocía lo que solía hacer Draco
- no me tientes Granger –dijo él y se guardó el llavero en su bolsillo
- entonces, ¿para que es esa llave? ¿Qué abre? –pregunté muy confusa
- es una sorpresa, sígueme –dijo Malfoy y yo lo seguí con una curiosidad fascinante, por suerte Malfoy iba mas lento, y no tuve que correr, ya íbamos por mas de la mitad del bosque y ya estaba cansada
- Malfoy ¿Dónde esta ese sitio? Estoy empezando a impacientarme –dije yo y este me susurró
- ten paciencia Granger, y no chilles –dijo Malfoy acercándose a un árbol que parecía estar hueco, se sacó las llaves del bolsillo y me las puso delante de las narices, y me tapó los ojos y la boca con las dos manos
- umhhhhhhhh –dije yo intentando quitarme sus manos de mi boca y mis ojos, pero era imposible, me tenía bien agarrada
- Granger, calla por favor, si me prometes que te vas a callar te suelto –yo asentí con la cabeza
- ¿de verdad? –me preguntó y yo ya cansada dije
- himmmmmmmmmm- Malfoy me soltó y yo eché a andar de vuelta al colegio, no iba a perder ni un minuto mas, por que seguro que Ginny ya me estaba esperando
- granger, ¿es que no quieres ver mi sorpresa? –me preguntó reteniéndome del brazo, yo me encaré
- a ti te da igual perder el día, porque el profesor Snape te lo perdona todo, pero a mi la profesora MCgonagall no me perdona nada. Adiós Malfoy –dije, pero este no me soltaba, sino que me apretaba con mas fuerza -¡suéltame maldito hurón!
-shhhh, no chilles –susurró Malfoy y yo me puse sarcástica
- ¿Qué? ¿la llave se puede despertar? –pregunté y Malfoy puso cara de risa
- ¿de verdad creías que la sorpresa iba a ser la llave? Granger, es otra cosa lo que te quiero enseñar –me dijo y a mi otra vez me invadió la curiosidad, ¿Qué sería lo que me quería enseñar Malfoy.
- me quedaré otro rato, pero me tengo que ir –dije yo dirigiéndome otra vez al árbol de antes que estaba hueco –es aquí ¿verdad? –dije en un susurro por el aviso de Malfoy
- Granger, veo que eres atenta y observadora –me dijo –te vas a quedar asombrada, ya lo verás. Ahora tápate los ojos, voy a abrir el árbol –dijo Malfoy y yo me tapé los ojos obedientemente, a la espera –ramillete de olivo –dijo Malfoy en un susurro y escuché el ruido del árbol abriéndose, Malfoy me guiaba agarrándome del brazo escuché el ruido de la llave contra una puerta, dentro del árbol. La abrió y me dijo en un susurro
- ya puedes abrir los ojos, Granger –yo los abrí lentamente, era un pequeño unicornio solitario y solo, tumbado sobre paja dorada y con un cuenco de leche de unicornio, para que el pequeño bebiera
- dioss, es hermoso –dije yo en un susurro, dando un paso hacía adelante
- nadie lo ha visto, solo tu y yo –dijo Malfoy que se dirigía hacía el unicornio, y el pequeño se intentó levantar, pero no pudo –está muy débil, su madre murió a manos de quién-tu-ya-sabes, antes de morir –Malfoy le acarició la cabeza y el pequeño lo miró
- ¿es chico o chica? –pregunté yo curiosa
- creo que es chica –dijo Malfoy sentado al lado del unicornio, y tenía una curiosidad, quería saber como se llamaba la pequeña unicornio huérfana
- ¿Cómo se llama? –pregunté con una sonrisa dando otro paso
- todavía no tiene nombre, pero puedes ponerselo tú. Es que no tengo mucha imaginación –dijo Malfoy y yo medité unos minutos la respuesta, al final me alumbré, y ese nombre le iba a quedar a la pequeña de maravilla
- a mi me gusta el nombre de… Aris –dije yo con una sonrisa –suena como iris, que es la parte del ojo de color y que capta la luz, solo que para ser mas originales e cambiado la "i" por la "a". y esta pequeña unicornio tiene luz y color, ¿te gusta? –pregunté yo y Malfoy sonrió
- me encanta. ¿quieres acariciarla? Creo que te ha cogido suficiente confianza –me dijo y yo asentí, me acerqué parándome de vez en cuando, y cuando llegué le toqué su cabecita, cuando vi que le gustaba mi tacto y no se asustaba la acaricié sin miedo
- hola Aris, pequeña, tu nunca estarás sola. Aris, Aris –dije sentándome al lado de Malfoy y acariciando a Aris, que se incorporó, quería jugar, y nosotros nos tiramos todo el día jugando con ella. Cuando ya eran las 7 o las 8 de la tarde estábamos Malfoy y yo cansados de tanto jugar, dejamos a Aris dormida profundamente y con una sonrisa que llenaba la estancia de luz
- Malfoy, hoy me lo he pasado muy bien –dije yo y hurón pervertido se acercó a mi seductoramente
- ¿eso quiere decir que te ha gustado? ¿me darás algo a cambio por haberte presentado a Aris? –dijo otra vez cogiéndome de la cintura, yo me quité inmediatamente
- ¿Qué te dije esta mañana Malfoy? –le pregunté yo y este se acercó otra vez a mí
- me dijiste que te toquetease lo que quisiera cuando quisiera sangre sucia –me cabree, yo pensaba que no me iba a volver a llamarme sangre sucia, yo pensaba que podríamos ser amigos, pero me equivocaba, no se por que creí en Malfoy
- ¡estúpido hurón desteñido y pervertido, vete de mi vista! ¡¿Cómo has sido capaz de llamarme sangre sucia? ¡yo pensé que habías cambiado! –dije y con lágrimas en los ojos me fui corriendo a mi habitación y cerré la puerta con llave para que no me siguiera, y además le eché asta un conjuro para que no pudiera abrir la puerta. Estuve llorando asta media noche y no se escuchaban gemidos ni nada por el estilo, y yo pensé "seguro que Malfoy se ha ido a la habitación de Parkinson a satisfacer sus necesidades varoniles" por eso decidí salir a la cocina a beber agua y a comer algo, por que no había comido desde por la mañana y estaba hambrienta, aunque no niego que no me lo halla pasado bien con Aris y Malfoy. Salí y la luz del salón estaba encendida, de todas maneras tenía que comer algo o me desmayaba, y mas con todo el ejercicio físico detrás de Aris que había echo. Malfoy estaba sentado en el sofá leyendo un libro de magia, yo pasé disimuladamente hacía la cocina y abrí la nevera, miré para atrás donde estaba Malfoy y me estaba mirando, ¡o dios, se me olvidó ponerme ropa menos provocativa! Llevaba un camisón violeta ajustado a mi cuerpo y por encima de las rodillas
- ¿Qué miras hurón? –le pregunté yo mientras me hacía la indiferente y sacaba la comida sobrante que había preparado Malfoy y hacía un hechizo para calentarla
- ¿tu que crees, Granger? De verás, como sigas comportándote conmigo así no me voy a controlar. Esta es a segunda vez que me excitas –dijo el hurón mirándome con una sonrisa maliciosa
- y tu como me sigas llamando sangre sucia, voy a venir así todas las noches y con mi varita en mano, para llevarte a Flich con "levicorpus" y que te vea excitado –le advertí y el volvió la vista al libro
- vale Granger, pero tu no vuelvas a llamarme hurón, o yo también tendré que venir provocativo –me dijo con una sonrisa y yo le devolví una mirada sarcástica
- ¿tu? ¿Provocativo? ¡já! ¡no te lo crees ni tú, Malfoy! –dije y solté una carcajada mientras sacaba el pastel de carne que había hacho Malfoy y cogí un vaso de zumo de calabaza, me senté en la silla y me lo comí todo, el pastel estaba riquísimo, y se lo felicité a Malfoy
- parece que el niñito de mamá no es tan inútil después de todo –dije yo -¿desde cuando sabes cocinar? –este se levantó dispuesto a irse a su habitación, pero de repente se acercó a mí y me soltó un beso en la mejilla
- me enseñó mi madre, Granger. Dulces sueños sang. Buenas noches, Granger –dijo y se fue dejándome con la boca abierta por el beso tan repentino y tosco en la mejilla, ¿tantas ganas tenía para no poder aguantárselo?, yo me fui a dormir, y me dormí de enseguida, por los llantos, la juega y el caluroso beso que me dio Malfoy en la mejilla. Fue un día muy cansado, y me daba la impresión de que el siguiente sería igual.
