¡Wiiii! Ustedes me pidieron la segunda temporada, y yo cumplí, espero que la disfruten tanto como la primera, por cierto, agradezco un montón sus reviews, espero que sigan comentando, en cuanto al título, en el último capítulo se darán cuenta porqué le puse así.

Otra cosa, tengo un hermanito de la edad de Trish, así que no se me dificultó mucho personalizarla, además de esto, al final de cada capítulo haré una pregunta, espero sus respuestas

Ya saben de dónde vengo, ya saben cómo me convertí en lo que soy, pero ahora les contaré lo mejor que me ha pasado en la vida, conocer a la pequeña Trish Duncan, la niña de tan solo 6 años que cree en mí y puede verme, con el tiempo pasó a convertirse en mi mejor amiga, aunque para que lo entiendan mejor, regresemos al día en que nos conocimos…

-Oye, niña- le decía chaqueando los dedos frente a sus ojos -Espera… Estás… ¿Estás escuchándome?- preguntó ilusionada, la pequeña asintió levemente -¿Estás viéndome?- volvió a asentir -Está viéndome… ¡Está viéndome!- contestó saltando alegre.

- ¿Coral Snow? ¡No lo puedo creer!- dijo saltando.

- Siempre eh creído en ti- le dijo contenta…

No podré negar que eso fue lo mejor que me pasó en la vida, ¿Quieren que les cuente las cientos de aventuras que tuvimos juntas? Pues bien, comencemos, esto sucedió un mes después de que nos conocimos…

- ¡Hey, Trish!, ¿Qué quieres que hagamos hoy?- le preguntó Coral acercándose a ella.

- Lo siento Coral, hoy no puedo salir a jugar, debo hacer tarea- le dijo deprimida.

- ¿Y se puede saber qué clase de tarea es?- le preguntó sonriendo traviesamente.

- Debo investigar al menos cuatro cualidades de las babosas infiernos-

- Hmm… si algo eh aprendido en mis 755 años de espíritu, son las cavernas, te llevaré a la caverna Magma*, si mal no recuerdo hay un para ahí-

- No es por sonar grosera Coral… pero cada vez que voy contigo a alguna caverna o a la casa de mi abuela termina en desastre, ¡Y eso que la casa de mi abuela queda a un kilómetro de mi casa!- le dijo exasperada.

- Okey, okey, admito que mis últimas ideas no han sido muy… adecuadas a la situación, pero prometo que esto saldrá bien- dijo haciendo una cruz del lado izquierdo de su pecho, en el corazón, aunque cruzó los dedos detrás de su espalda, sabía que nada saldría bien, aunque, siempre decía que era mejor intentar y fallar que nunca intentar.

- Está bien, y que sea rápido, mamá me mata si cuando llega no me encuentra-

- ¿Y la nana?-

- Está dormida como roca-

- Perfecto, ven, dame la mano- Trish la obedeció y Coral tomó vuelo directo a la caverna Magma.

- Etto… ¿Coral estás segura de que esto es seguro?- le preguntó la niña al pasar volando sobre un volcán y notar que el suelo estaba rojo a causa de la temperatura que levantaba, probablemente si bajaba para caminar se quemaría los pies.

Coral en un ágil movimiento la sentó sobre sus hombros a modo de caballito.

- Relájate enana, yo estoy aquí para cuidarte, no temas- dijo relajada, pero luego abrió los ojos como platos al ver que iba achocar con un volcán -¡Cuidado!- dijo esquivándolo, causando que el movimiento tirara a Trish de sus hombros, la alcanzó a agarrar del cuello de su blusa para alzarla en brazos.

- ¿Estás bien petisa?- le dijo, le había puesto esos apodos a causa de que era algo más baja que el resto de los niños de su edad.

- Si, pero recuérdame jamás aceptar tu oferta para ir de viaje a una caverna que contenga lava-

- Despreocúpate, lo haré, ahora, hay que encontrar esa babosa, agárrate fuerte- le advirtió antes de salir volando lo más rápido que pudo.

Recorrieron todo el lugar, hasta encontrar la única allí, Coral sabía del derecho y del revés que la babosa infierno le pertenecía al protector de las cavernas, así como Burpy a Eli y antes a Will.

- ¡Eureka! Ahí hay una- exclamó Coral al ver que había una en la base de un volcán -Pues bien, anota- le dijo acercándose, quizá demasiado para una babosa salvaje.

La babosa algo furiosa porque hayan invadido su caverna saltó en un cráter que estaba continuamente expulsando aire, con la velocidad proporcionada se transformó y Coral se vio obligada a huir de allí para que su "enana" no saliera lastimada.

- ¡¿No que esto saldría bien?!- preguntó/gritó Trish mientras se flexionaba hacia adelante para que la bola de fuego que lanzó la infierno no le diera.

- ¡Sabes que yo sé que no era cierto!- le respondió Coral, mientras daba un giro y evitaba otra bola de fuego.

Salieron de la caverna Magma entrando en la caverna Campo Callado, donde pasaba un hombre con una botella en su mano, luego de haber consumido tres más, el mismo vio pasar a Trish volando, pues Coral era invisible para él, y una babosa infierno persiguiéndola detrás, abrió los ojos todo lo que pudo, miró a ambos lados y tiró la botella en un cesto, creyendo que ya empezaba a alucinar.

Se escondieron en un callejón y así pudieron perder a la infierno.

- Más te vale haber anotado todo, ¡Porque no repetiremos eso nunca más mientras viva!- dijo mientras la bajaba a Trish y tomaba una gran bocanada de aire, se sentó en el suelo y apoyó ambas manos en su aleta.

- Por supuesto, ahora tengo que dibujarla- Coral la miró con los ojos como platos y luego dejó caer la cabeza hasta golpearse con su aleta.

Claro, luego de eso salimos cual cohetes a la casa de mi petisa favorita y llegamos justo antes que su mamá, no la castigó, pero tuvimos que regresar a la caverna para que dibujara a la babosa, luego de eso, aprendí algo muy, muy, muy importante, jamás hagas enojar a una babosa infierno salvaje.

Caverna Magma: Como en la serie y en las películas nombran solo algunas cavernas, se me ocurrió que una de ellas se llame caverna Magma, donde antiguamente vivian colonias de infiernos.

Pregunta: ¿Tienen hermanos? Yo si, uno pequeño, pero a pesar de eso es una gran pesadilla

Espero que les haya gustado la primera parte de este fic, seguiré con las aventuras, y espero que el próximo capítulo sea más largo, sin más, nos leemos el próximo sábado, beshitos.

PrincesaLuna.