Algo que escribí ahora mismo porque simplemente no puedo dejar de pensar en Castle y en todo lo que sucedió

Duerme imperturbablemente después de pasar horas dialogando solo bobadas porque ninguno de los dos quería tocar el tema que realmente importaba, ese dichoso expediente que no logra cerrar en su cabeza, que esta desvelando su conciencia mortificándole hasta el cansancio. Probablemente nunca sabrá explicarle con palabras lo mucho que lo extrañaba, lo acerbo que era llegar a una casa vacía y estar llorando como loca porque no tenias ni idea de cómo estaba, ni con quien, si estaba pensando en ti, si quería volver. Estuvo dos meses acostada en un sofá mirando su foto en la pizarra, tratando de mantenerse de pie, reviviendo la fe cada vez que moría. Cerraba los ojos y lo veía, caminando hacia ella con su pelo alborotado dándole ese suave beso que la volvía a enamorar cada mañana.

Constantemente le repugna tener tantas dudas, simple y sencillamente no puede poner en tela de juicio el amor que han compartido durante años, el compañerismo, la complicidad, la entrega, la pasión, todos esos momentos que se fueron tejiendo entre los dos con una simple mirada de intimidad que nadie mas podría leer. Ha notado sus ojos tan perdidos como si para él tampoco existiese una explicación y la idea de que todas las evidencias son ciertas sencillamente lo esta aniquilando. En sus pupilas se escondía cierta vergüenza, cierto odio así mismo por cada lagrima que ella derramaba, porque estaba al punto de jurar protegerla por el resto de sus días y ahora ni siquiera saben en que pagina han quedado después de este periodo de incertidumbre.

Es necesario hablar, permanecer tan juntos como siempre. No es fácil, si lo fuese no tendría nada que ver con ellos. Apenas recuerda un segundo que no haya sido complicado, que no le hubiese costado resolver. Y dentro de todas esas interrogantes se encuentra irremediablemente feliz porque su hombre al fin esta en casa. Aquella imagen del puente, su auto en llamas no es algo que pueda borrar fácilmente, fue cuando vio correr toda su vida en un minuto y algo se rompió en su alma cuando creyó que no existiría nada mas, que no volvería a besarle, que ya no podría tocarle, que nunca mas sabría lo que es sonreír por alguien que simplemente te ama. Necesita dejar de llorar, necesita dormir y relajarse pero no lo consigue. Recuerda de repente que aun no ha besado sus labios, no puede ser que haya pasado meses soñando con la posibilidad de volver a besarlo y ahora que esta a centímetros no pase nada.

-Desearía mucho acordarme de todo por mas doloroso que fuera, antes que hacerte daño- no sabia que estaba despierto parece que no es la única que no puede dormir, parece que el tampoco logra explicarse como es que han pasado por tanto y como es que es tan difícil pasarlo por alto ese hecho- Desearía ahora mismo estar casado contigo, llevarte de la mano, imagine que cuando pasaran dos meses ya estaríamos hablando de tener hijos, ser una familia, te estaría convenciendo noche tras noche- ahora es mas inevitable llorar, porque ella se esta muriendo de dolor, de nostalgia, de culpa porque no puede ayudarle, porque no puede explicarse todos esos sucesos si la situación fuera a la inversa quizás el hubiese sido mas positivo al respecto, pero ella no lo es no puede inventarse una historia sin lógica y sufre por eso- Lo lamento mucho se que dices que no es mi culpa pero aún así me siento culpable

-¿Me besas?- ella pregunta secándose un poco las lagrimas, se siente sensible como nunca, tal vez no tenga todas las respuestas aun pero hay algo que si tiene de vuelta y después de todo lo que han luchado por estar juntos no quiere que una incógnita deteriore el deseo o se lleve lo bueno que han construido- fue un infierno estar sin ti- confiesa

-Te creo, porque si yo hubiese estado dos meses sin noticias tuyas probablemente me hubiese pegado un tiro o hubiese enloquecido, no lo se, pero no creo que hubiese sido la mitad de fuerte que tu- él simplemente no puede dejar de acariciar el rostro de la detective se siente tan seguro del amor que ella siente, es como si cada prueba lo hiciera mas duradero, mas real, se la imaginó perdiendo el equilibrio como tantas veces y quiso golpearse por ser la causa- Te amo Katherine Beckett y voy hacer todo lo posible por recuperar tu confianza

- Tienes mi confianza Castle de otro modo no estaría aquí, yo paso sobre cualquier hoguera voy en contra de todo, hago lo que sea por nosotros perdóname si te hago sentir de otra manera- ahora es ella la que acaricia su rostro y vuelve a experimentar la electricidad inundando salvajemente sus venas- Echo de menos tus labios Rick

Él simplemente tiene miedo de apresurar las cosas, que ella se sienta mal, tiene tanto miedo de alejarla que le están temblando las manos estando tan cerca de su mujer. Ella tampoco quiere lastimarlo, donde quiera que haya estado su cuerpo ha sufrido consecuencias, seguro que no mas que su mente pero de igual manera, esta sensación es algo nueva para los dos. Es obvio que han estado separado antes, alguna semana que ha tenido que viajar por alguna promoción pero aún así era imposible despegarse uno del otro, el llamaba hasta para saber de que color era su tanga, y hasta se veían obligados hacer el amor por el teléfono cuando la desesperación era tan grande como los kilómetros de por medio. Además pensó que la próxima vez que lo harían, ella estaría en su vestido de novia el había prometido llevarla cargada hasta la habitación y quitarle hasta la ultima prenda con sus dientes. Pero hay algo que en este momento ella no puede parar y es el antojo de sentirse suya después de todo es maldito tiempo.