Riiiiin… Riiiiin… Riiiiin…
-Moshi Moshi- contesto una voz masculina después de haber contestado el celular que estaba sonando hace unos segundos
- Buenas tardes, me podría comunicar con Nanase Haruka por favor.- decía una dulce voz femenina desde el otro lado de la línea.
-Mm… con el habla.-
-Ahhh… Haru-chan, ¡qué bueno que te encuentro!, te he estado llamando desde hace mucho pero no contestas y al fin lo has hecho. Kyaaaaaaa.- decía la joven del otro lado de la línea, mientras soltaba uno que otro grito de emoción, dejando a un sorprendido y un poco aturdido (N.A. Por los gritos) oji-azul.
-Mm… ¿XXXX?- pregunto un dudoso oji-azul
-Hai… Haru-chan hace mucho que te llamo y no me contestas, mou… debes de dejar esa costumbre de dejar tu celular en casa.-
-Mm… Gomen, pero ¿Qué es lo que necesitas?-
-Nee... Haru-chan no seas muy frio conmigo, mou… el trabajo es muy estresante y aquí me siento muy solita, así que quería regresar al lugar donde pertenezco y ser una adolescente normal como debí de haberlo sido, pero no tengo un lugar en donde quedarme así que quería preguntarte, si me permitirías quedarme un tiempo en tu casa.- dijo la joven sorprendiendo un poco al oji-azul –claro que solo será por un tiempo, hasta que consiga un departamento el cual comprar y después ya no te molestare más… Nee… Haru-chan entonces ¿si me dejarías quedarme en tu casa?-
-Si.-
-Además yo te pagaría renta y haría los trabajos domesti… ¡Un Momento! acabas de decir que ¿sí?- pregunto la joven un poco sorprendida por la respuesta
-Si.- volvió a responder el oji-azul, mientras separaba un poco su celular del oído.
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-KYAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAA… HARU-CHAN ¡ERES EL MEJOR!, enserio que lo eres ¡TE ADORO!, muchas gracias por recibirme ¡por favor cuida de mí!, Nee… Haru-chan de regalo por haberme recibido en tu casa te llevare una sorpresa…-
-Mm… y ¿Cuándo llegas?-
-Mm… Hoy es Viernes y me llevara un día entero hacer mi maleta, hacer algunos trámites y otros pendientes más… además de que es un día y medio de viaje… Mm... Yo digo que el lunes en la tarde llego.-
-Entiendo.- respondió el oji-azul mientras se encaminaba a una de las sillas del comedor de la cocina (antes se encontraba en el recibidor).
-Bueno Haru-chan me tengo que ir, tengo que empezar a empacar las cosas para el viaje.-
-Mm… Entonces te veo el lunes en la tarde.-
-Hai. Bueno Haru-chan me despido. Bye.-
-Adiós.- dijo antes de colgar, pero antes de hacerlo una voz lo detuvo.
-Haru…- pasaron unos segundos para que la voz que lo detuvo se volviera a escuchar
-Te Amo…- dijo en un susurro la joven para luego cortar la llamada y dejar a un perplejo oji-azul
-Yo también…-dijo en un susurro el oji-azul, para luego lanzar un suspiro y terminar cerrando los ojos, mientras recibía los últimos rayos del sol, antes de que este se ocultara completamente.
