Hallo!

Hoy me siento bien. Eh aquí algo corto que salió gracias a una de esas idioteces del facebook.

• Advertencias: ninguna.

• Derechos: Hidekaz

¡IMPORTANTE!

Esta es una Fic UK=USA (ver perfil)


~•~ Cold like your Lips ~•~

...

-¿Tienes frío? –pregunta el americano.

-No –responde cortante el inglés.

Alfred hace un puchero. Todos los factores necesarios para morirse congelado están ante él: el cielo nublado a punto de llover, un viento que corta la piel si no llevas abrigo, un paseo a la "intemperie" por el Hyde Park, el indigente calentándose con un improvisado fuego en el tacho de basura. ¿Qué más debe haber para que Iggy tenga frío?, se pregunta.

Hablando (pensando demasiado) sobre el inglés, lo mira de reojo. Observa su rostro pálido e impasible, su ceño algo fruncido, su mirada verde al frente y una sonrisa muy leve dibujada en sus labios. A Alfred siempre le resultó atractivo y hermoso. Lo enamora, le hace sentir cosas que no debería y, también, le provoca ansiedad. Es un héroe en busca del valor para decir las palabras necesarias. Baja la mirada.

-¿Tienes frío? –vuelve a preguntar.

-Por cuarta vez… no.

Continúan caminando. Arthur disfruta del viento que recorre el parque. Le da una sensación de pureza. También siente calor, mucho calor. Alfred está a su lado, caminado tranquilo como pocas veces sucede (salvo por su reiterada pregunta que ya le está fastidiando). Debe admitir que ese americano pone su mundo de cabeza y tiene planeado decirle unas cuantas verdades ni bien lleguen a casa, porque eso de jugar al gato y al ratón no le gusta. Quiere decirle que lo ama, quiere besarlo, quiere tocarlo y ser tocado, dormir abrazándolo y despertar junto a él. Esos pensamientos son un fuego de nervios en su interior que lo mantiene cálido.

-¿Tienes frío?

-No.

-¿Tie-

-No, Alfred. No tengo frío. ¿Cuántas veces más me lo preguntarás?

El mencionado detiene el paso y agacha la mirada.

-Las veces que sean necesarias para poder abrazarte –contesta con un rubor en sus mejillas, soltando esa frase cursi que mantuvo en su garganta todo el día.

Arthur lo mira sorprendido, analizando las palabras. De un momento al otro comprende que esa frase es un tímido inicio de declaración. A otro momento entiende que Alfred se le adelantó (eso le molesta). Al siguiente momento atrapa el rostro del americano con ambas manos, suavemente, y posa sus labios en los contrarios.

Estaban helados.

Alfred fue tomado por sorpresa. Abrazó el cuerpo de Arthur y sintió una oleada de tibieza recorrer su cuerpo, junto con unas cuantas mariposas allí por el estómago. Los labios del inglés se movían suavemente sobre los suyos y los brazos le rodeaban el cuello. Movimientos lentos, precisos, dulces. Alfred cierra los ojos, dejándose llevar por la sensación de estar flotando.

-¿Tienes frió? –le pregunta Arthur.

-Si… -responde temblando. El clima de Londres le resulta espantoso. Una cortina del vaho producto de sus respiraciones cruza por la mirada de ambos.

-Entonces, vayamos a casa. Conozco varias formas de calentarnos.

-Creí que no tenías frío…

Sonríe y atrapa los labios de Alfred- De pronto sí tengo…

~•~


¿Ta~da?

Díganme que les gustó. ¡Yo también puedo escribir romance! (?

Hay una segunda parte: Hot like our Bodies.

Otra cosa: si el tema de la marcación les interesa y quieren usarla, sólo avísenme y nada más. Danke!