Un humilde crossover con mis personajes favoritos de algunos juegos. Como siempre digo, los personajes no son míos, pertenecen a sus respectivos dueños. Y ahora a la aventura!

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Capitulo 1: El príncipe, la arquera y el brujo

La caída de Babilonia fue el fin, la gente huida a caravanas al igual que los soldados que no podían vencer a los extraños invasores. Ni siquiera la realeza pudo imaginar la derrota del imperio persa en su propia tierra. La ciudad quedó en cenizas y los invasores la tomaron como suya, mataron a los que quedaban. Mujeres y niños, no les importaba nada que sangre corría las espadas. El único que tuvo que huir a la fuerza y a petición de su hermano, el Príncipe, se lamentaba la caída de Babilonia desde el bote que tomó y veía el fuego rodeando Persia. Entre la impotencia y la ira, agarró el remo y se alejó de su hogar, jurando que algún día volvería a reclamar lo que era suyo y vengar a su familia y al pueblo.

Unos años después...

El Príncipe recurría al trabajo para sobrevivir y juntar el suficiente oro para pagar a un buen grupo de mercenarios y regresar a Persia y recuperarla. Pero corría el riesgo de ser traicionado y ser entregado al enemigo para beneficios económicos. El Príncipe no encontraba a nadie.

Después de una caminata larga y con la noche arribada, llegó a un pueblo en donde buscó una taberna para comer y recuperar fuerzas. El Príncipe con disimulo ojeaba a las personas que se encontraban a su alrededor. Granjeros, leñadores, algunos ladrones y buscapleitos, nada fuera de lo normal. Después de devorarse un pollo y cerveza, el Príncipe para no quedarse en el pueblo, salió de la taberna.

En otro lado, en el mismo pueblo, un hombre de cabello largo y blanco, serio y rudo peleaba contra misteriosos sujetos, blandiendo una de sus dos espadas. Lo superaban en numero y tuvo que abandonar el lugar y pensar un plan para vencerlos.

En las cercanías del mismo pueblo, una mujer de piel azulada y también de pelo blanco, lanzaba flechas con su arco a un grupo de ladrones que querían robarle. La mujer salió del bosque y entró en el pueblo para evitar ser robada.

-¡Príncipe!

El Príncipe se dió vuelta y vio que un hacha se dirigía a su cabeza. Se agachó al ver que ya la tenía cerca, el arma fue a parar a la pared, clavándose.

-El nuevo soberano de Persia pide una buena moneda por tu cabeza y eh venido de muy lejos por ti. Entrégate o sufre las consecuencias.

-¿Que me vas a ser? ¿Golpearme con tus amiguitos? ¿No puedes solo?

-¡Muchachos tras el!

El grupo de hombres se lanzó hacia el Príncipe pero éste contrarrestó los ataques como un relámpago. No hacía falta utilizar las Arenas para retroceder y escapar antes que aparezca el problema, eran hombres desesperados por oro. El Príncipe quería divertirse.

El hombre de pelo blanco retrocedía mientras esquivaba los ataques de los misterios sujetos hasta que chocó su espalda contra la del Príncipe, ambos se dieron vuelta con sus espadas listas para atravesar la carne.

-Tú no vienes con ellos.

-Viejo, ya tengo problemas con éstos tipos. Si quieres después peleamos.

-Parece que algunos te ganaron.

La mujer perseguida por los ladrones terminó en el medio de la riña. El Príncipe y el hombre de pelo blanco la miraban como ella los apuntaba con su arco y una flecha lista para lanzarse.

-¡Déjenme pasar!- Gritó ella.

-Si no te diste cuenta, estamos rodeados los tres. - Contestó el Príncipe.

Uno de los ladrones comenzó a mirar al Príncipe y tras unos momentos lo señaló con su cuchillo.

-¡Esperen todos! ¡Ofrecen una fortuna por ese tipo! -Exclamó el ladrón.

-No jodas que el es el príncipe de Persia. -Habló uno de los tipos.

-¡Tu cabeza es mía! -Gritó uno de los cazarecompensas.

El Príncipe, la mujer y el hombre de pelo blanco tuvieron que hacer una alianza forzada por la inevitable situación en la que se encontraban. Los tres pelearon contra los incontables sujetos que los perseguían por distintos motivos. La victoria fue difícil de conseguir pero ninguno de los tres perdió la vida. Tras recuperarse de la batalla, el hombre de pelo blanco miró al príncipe directamente a los ojos.

-Hay que aclarar las cosas.- Dijo.

El trio fue a parar a un tranquilo rió, lejos del pueblo y de los problemas. La mujer cazó un venado y el príncipe lo cocinó. Mientras comían, la dama fue la primera en hablar.

-Soy Traxes, Drow Ranger para los amigos, bueno si tuviera alguno jaja. Terminé aquí por esos tipos a los que matamos. Robaron mi bolsa con el poco oro que tengo y fui a recuperarlo.

-¿Vives sola?- Preguntó el hombre.

-Vivía con una "familia" pero me fui, motivos personales, nada interesante. ¿Y porqué llevas dos espadas? ¿Eres un espadachín?

-Soy un cazador de monstruos, casi como un mercenario. Geralt de Rivia. Vago por todo el mundo eliminando el mal en todas sus formas. Recibí un mensaje que alguien quería verme aquí pero como verán era una trampa.

-Para ser mayor te las arreglaste bastante bien. -Comentó el joven.

-¿Y tú en verdad eres eres un príncipe?- Preguntó la mujer mordiendo un pedazo de carne.

El Príncipe se levantó del suelo tomando valor para contar quien era a unos extraños que apenas conoció. Pero eran las únicas personas que no fueron a atacarlo. Mordió la carne cocinada y tiró el hueso al río.

-Soy el Príncipe de Persia. Mi pueblo cayó por unos invasores, mataron a todos y mi hermano me dijo que escapara. Luché por quedarme pero me obligó, no sé si está vivo. Quiero volver y recuperar Persia pero como verán no tengo nada... Ya no.

-Entoncesss ¿Como harías si quieres regresar? -Preguntó Drow.

-Tengo una bolsa con oro, suficiente para pagar gente.

-Supongamos que quiero ayudarte y recuperamos toda Persia y bla bla bla. ¿Y la paga?

-Te daré todo. -Le contestó el príncipe a la mujer.

Geralt analizó la situación y asentó con la cabeza. Bebió agua y se cruzó de brazos.

-Escuché gente que ofreció mucho, pero no todo. -Él hizo una pausa -Bueno ¿Cuando empezamos?

-¿Que?- el príncipe quedó incrédulo.

-Seguro el que tomó Persia puede invadir cualquier reino. Te ayudaré a vencer al invasor.

El Príncipe asentó a la unión de Geralt. Miró a Drow que después de unos momentos reaccionó.

-Eh bueno yo ¿Porqué negarme a una aventura? Además habrá recompensa.

-Tres no será suficiente, hay que reunir gente para éste trabajo. Vamos muchachos ¡Persia nos espera!

El Príncipe forjó una alianza con Drow Ranger y Geralt de Rivia. Apagaron el fuego y caminaron rumbo al destino. Suerte que todavía hay buenas personas en el mundo.

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El primer capitulo! Es medio corto pero prometo que el próximo será largo. Los juegos que voy a usar son: Sagas de Prince of Persia, The Witcher y Thief, Dota 2 y LoL. Capaz otro pero veré. Nos leemos luego! :D