esta historia pertenece al reto del foro bienvenidos a storybrooke reto juegos de azar y hombrezuelos.
Todabia le costaba creer que había vuelto a ser un hombre y poder disfrutar, de cierto modo, de su humanidad.
Poner un negocio en el centro de Nueva York, no era ni por asomo cercano a lo que soñó cuando salio de Kansas al mundo para recorrerlo como un gran ilusionista, pero por lo menos era algo, si lo viera su padre en este momento estaría orgulloso, a pesar de las circunstancias, del hombre de negocios en el que se ha convertido, después de todo esto siempre fue lo que quiso que fuese.
Esa mañana de septiembre, a pesar de ser otoño amaneció especialmente cálida, y en la brisa sentía que ese día la suerte estaría de su lado. Abrió el local como todas las mañanas, un negocio de muebles reciclados; había crecido en una granja y aprendió entre muchas otras cosa a restaurarlos. Ese día paso delante de su vidriera una mujer de cabello rubio que lo impacto con su belleza, era alta de buen cuerpo y una sonrisa que lo desarmo completamente cuando al levantar la vista y miro hacia afuera por el cristal, ella entro y se dirigió hacia una pequeña mesa de café, el la veía caminar y se acerca hacia ella, no tenia idea que decirle, a medida que se acercaba olía su perfume en el aire y era hermoso.
- Veo que le ha gustado esta mesa.
- Si, es exactamente lo que estoy buscando.
- Soy Walsh.
Ella extiende su mano.
- Emma, mucho gusto.
- Entonces Emma, ¿Que estas buscando?
La rubia mira hacia abajo, y dice:
- Esto es exactamente lo que busco, recorrí todo Nueva York y llegue aquí pensando "este sera el ultimo lugar que buscare si no lo encuentro me rindo."
- Entonces que suerte que viniste, y que suerte para mi que lo tenga.
- ¿Para ti? Para mi, me ahorraste la decepción de mi hijo.
Walsh sintió que su mundo se derrumbaba, seguramente era casada y no podría saber mas sobre ella, pero probaría suerte.
- ¿Ho tienes un hijo? ¿Pequeño?
- Si, el tiene 13 años, pero aveces parece El, el adulto, me gusta pensar que es el hombre de la casa.
- ¿Que quieres decir? ¿Y su padre?
- Si lo encuentras házmelo saber.
- Perdón no fue mi intención... hable de mas.
- No esta bien, es una historia pasada, lo único bueno de esa relación es mi hijo que es el único gran amor de mi vida. Bueno pero ¿De que estamos hablando?
Ella sonríe y el se desarma cada vez mas.
- Bueno entonces ¿Cuanto cuesta?
- ¿Para ti Emma? U$800 dolares y no te cobrare el envió.
- ¿Estas coqueteando conmigo Walsh?
El se sonroja.
- Hay dios te sonrojaste, no fue mi intención.
- Esta bien, tienes razón perdón no suelo hacer esto con los clientes.
- Bien Walsh, me voy, es tarde y debo recibir a Henry en la escuela.
- Espera Emma, ¿Que pasara con la mesa?
- La compro.
Ella saca su tarjeta y se la entrega, el al devolvérsela al dorso del ticket escribe su numero y pone "LLÁMAME", ella sonríe y se va.
- Dios, esta mujer si que me tomo por sorpresa.
