Naruto Copyright © Masashi Kishimoto
Advertencias: Ooc, universo alterno.
Extensión: 420 palabras (Drabble).
: Mono-Life in mono :
Algo así.
Capítulo I.
—ddeıSmıle—
Hyūga Hinata.
·
The stranger sang a theme, from someone else's drea
·
Caminé por la acera —la cual parecía eterna— sosteniendo con firmeza el maletín entre mis manos congeladas.
La lluvia parecía no tener intensión alguna de parar. Frente a mis ojos, las gotas, escurriéndose por mis cabellos, caían al suelo para estrellarse contra éste.
La ventisca era incontrolable y mi falda danzaba junto a ella. Me sentía completamente sola en Kyōto, sólo las almas en pena parecían caminar al paso. Y aquello estaba bien.
Mi corazón latía tan lento desde que lo había visto que ya estaba acostumbrada a no sentirlo. Así que, ahora en la lluvia, mientras caminaba hacia mi hogar, intentaba escucharlo, para distraer mi mente y era inútil.
Lo único que hacía eco dentro de mí era el suave golpeteo de mis pies contra el suelo. La música sonaba ensordecedora en mis oídos y las bolsas con comida parecían ahuecar más agua que el mismo cielo y sus nubes ahora invisibles.
Mi mente no terminaba de desechar los pensamientos que lo mostraban a él, sólo podía pensarlo, sólo podía desearlo, añorarlo, amarlo. Únicamente a él.
Había intentado evitar aquellos sentimientos, pero fue irreversible.
Cuando sus ojos se posaron en mí y admiré la belleza de su rostro, la viveza de sus cabellos, la frialdad que encarnaba sus movimientos, quedé atrapada en su red. Me sentía como una presa más en su casería, sólo que era tan pequeña que él no tenía necesidad alguna de prestarme atención, de abalanzarse sobre mí y destrozarme.
En mi caso era más lamentable: yo misma me destrozaba.
Entré a casa y me deshice de la chaqueta color pastel que me habían regalado en mi cumpleaños pasado. La tiré en el lavadero y coloqué las bosas sobre la mesa. Todo goteaba, el suelo se mojaba por completo y decidí no intentar evitarlo.
Me introduje en la tina y dejé que el agua fría callera en mi espalda. El frío y el dolor que me causaba era la única forma de saber que él realmente existía y que yo, realmente lo amaba.
Por eso, ahora hacía mis caminatas matutinas procurando que fueran bajo la lluvia, para poder sentirme abrazada por él, para sentirme totalmente suya, poder sentirme feliz y hundirme más en mi masoquismo. Poder llorar sin temor a que me descubrieran, para poder ser yo misma. La frágil y torpe Hinata, la de corazón bondadoso que se destruía a sí misma en la oscuridad de su hogar.
Pero se equivocaban, me destruía en sus brazos, en la lluvia que clamaba su nombre.
…Gaara.
(Aquí)
¡Uf! —se sonroja—. Realmente me gustó, ¿qué les pareció? No pude evitar escribir este pequeño drabble que se convertirá en una serie de drabbles narrados por diferentes personajes. Algo confuso, lo sé. Pero ya veré como lo desarrollarlo —sí, lo sé, aún no he pensado como hacerlo—.
