Capítulo 1: Nuevo hogar.

{-Que hemos hecho...¡Como hiciste eso Lynn Jr!, Era su hermano menor, ¡TU HERMANO!.

-Y-yo...yo...-Lynn no podía encontrar las palabras, se morían en su boca.

-Mi hijo...-Dijo Rita, quien a pesar de estar también enojada, no expresaba su rabia.-Cruzaste la Linea, jovencita, tu y todas tus hermanas, menos Lily claramente-Rita Cruzó los brazos.

Junto a Lynn estaban las demás hermanas, excepto Lily que estaba durmiendo. Todas estaban boca abajo, completamente avergonzadas por sus actos, no solo por lo que hizo Lynn a su hermano, sino también por todo lo que le hicieron anteriormente. Finalmente La que tomó la palabra fue Leni, para sorpresa de todos.

-Se que lo que...se que todo lo que le hicimos a Linki no tiene justificación, pero si sirve de algo...seamos nosotras las que tengamos la obligación de encontrarlo. Han pasado ya 4 años, pero no pienso rendirme, ¡Lincoln debe saber que lo siento mucho por todo! lo hago por el, no por mi.

-Leni tiene razón, debemos hacerlo por nuestro hermano, ojalá nos castiguen obligándonos a encontrarlo, con eso, será suficiente para que todo vuelva a la normalidad mientras aún podamos. por favor...-Dijo Luna.

Los padres se miraron.}


En las calles de Filadelfia, un chico de 15 años, con una camisa naranja bajo una chaqueta marrón, tenis blancos, Jeans azules y de un cabello blanco largo que llegaba hasta su nuca caminaba en la calle acompañado de un maletín de equipaje, dentro tenía comics, Ropa del mismo estilo de la que el usaba y un saco de dormir, en su mochila una hamburguesa, pan, gaseosas y jugo de naranja en caja. Se detuvo frente a una cancha de basketball donde un grupo de jóvenes de su edad, 5 afroamericanos y 2 caucásicos, Uno de ellos notó su presencia y se acercó. Era afro, de pelo rapado, sudadera azul marino y pantalones cafes.

-Hey!, que tal, con ese cabello de nieve podrías atraer chicas.-Dijo a modo de broma.

-No gracias, no estoy de humor como para andar con chicas, acabo de llegar a Filadelfia.-Dijo el peliblanco con melancolía, cosa que fue notada.

-Oye...Bienes de muy lejos ¿no?-Preguntó el chico con curiosidad y un poco de lástima al ver su expresión y sentándose al lado suyo.

-Vengo de Michigan- Respondió.-Me fui hace 4 años, acabé aqui ahora como me vez, en el camino una veces intentaron asaltarme, pero lo evité escondiendo mis cosas, pero en dichas peleas perdí unas 3 veces, las restantes las gané a puño limpio, pero voy sin rumbo, no sé hasta donde iré.-Argumentó.

Los otros chicos se habían acercado también y oyeron la historia, el chico peliblanco les pareció simpático y el chico que se acercó primero fue el cual más le agradó.

-Que duro amigo, si no quieres decir más, no lo hagas, pero si ya estas cansado de viajar te diremos algo, frente tuyo hay una bodega abandonada recientemente, además si quieres podemos mostrártela.-Dijo el chico mostrandose amigable.-Por cierto me llamo Douglas Johnson, pero todos me dicen Dudley.-

-¿cual es tu nombre?-Pregunto uno de los 2 chicos blancos que era castaño y de camisa roja y jeans.

-Lincoln, Mi nombre es Lincoln.-

Los demás se presentaron como Jack Withney, Nick Gates, Donnie Darson y Dave Anderson, mientras los 2 blancos eran Leo Haggar y Terrence Stuart, este último era Británico, junto con Nick y Dave; fueron a la bodega que tenía un enorme vestíbulo y un cuarto extra por separado, además de 2 baños, uno estaba en el segundo piso y en este había un mirador hacía el vestíbulo por un lado y por el otro un ventanal. Lincoln no tardó en acomodarse y agradeció a los chicos. La electricidad aún funcionaba. Lincoln vería como encargarse de pagar la cuenta más tarde luego de conseguir un empleo o algo por el estilo.

-¿Puedo hacer algo a cambio por ustedes?-

-Nah, nos caiste bien, solo cuidate, aunque quizás algún día te pidamos que juegues basketball con nosotros.-Dijo Dudley.

-Hecho. Aunque debo decirles que no soy muy bueno en los deportes.

-Para todo hay una primera vez, Lincoln, los talentos no se obtienen de la noche a la mañana.-Dijo Leo

Se pasaron un par de horas charlando sobre ellos y el por qué Lincoln se fue de su casa ¿era necesario incluir el incidente de superticiones en un juego? probablemente no. Entre las cosas que hablaron era el hecho de que el peliblanco tenía en total 10 hermanas para el asombro de los chicos, Leo contó que su padre antes era un luchador profesional y un ex alcalde de una ciudad llamada Metro city y de que Dudley aguantaba a 2 hermanos gemelos mayores más como le enseñaron algunas técnicas de boxeo. Ya las 5 de la tarde algunos de los chicos se retiraron a sus hogares. Cuando quedaron solo Lincoln y Dudley.

-Oye...-

-Si, Dudley?-Preguntó el Peliblanco.

-Lincoln...sabes, hay un amigo que ese nombre le resultaría familiar.-Respondió el Afroamericano.

-¿A que te refieres?- Pregunto Lincoln.

-Nada, es solo un amigo de hace 2 años, jugamos los fines de semana con los chicos, una vez me contó que tenía un amigo que se llamaba como tu, pero...mejor olvídalo, no es nada.-Colcuyó Dudley.

- Bueno esta bien, gracias por todo, Nos vemos Dudley-

-Adiós Lincoln.- Dijo y se retiró del lugar.

Lincoln se fue al cuarto del primer piso, ahí puso su saco de dormir junto a su equipaje y tomo su cena en el suelo. ya a las 8 se fue a dormir.

-Mmmhh, creo que...me instalaré aqui, ya que si sigo viajando, me quedaré sin nada.-pensó Lincoln-creo que me quedaré aquí definitivamente-concluyó antes de cerrar los ojos.


{Irlanda, ciudad de Naas, Kildare.

-Es hora de que sigas con la tradición familiar, Nieto mio, a tu edad me coroné el campeón de este torneo, luego tu madre, y es hora que tu sigas la linea- Dijo un señor de 50 años semi calvo de 1,99 metros en silla de ruedas y con unas ropas de boxeo en su regazo junto a una mujer castaña de 2,78 metros de alto, hablandole a un joven de aspecto rubio pero con la cabeza rapada dejando notar un poco de su color rubio de 19 años, medía 2,05 metros y ojos grises, el chico al recibir las ropas de boxeo sonrió con una peculiar mueca, un tanto perturbadora de que dijiera algo como "Deliciosos ropajes", consistían en una camisa sin mangas de 3 lineas horizontales, la inferior era naranja, la superior verde y la del medio blanco, acompañados con unos shorts azul, zapatos marrones, calcetines grises como sus ojos y unos guantes de boxeo naranjos, la mayoría de los colores eran los representativos de Irlanda.

-Ya lo sabes Hijo mío, gana, conviertenos en una dinastía de campeones-Dijo la madre.

El chico Rió con ansiedad y fue a probarse la ropa, al salir, con su perturbadora sonrisa (que no intimidaba a su madre y abuelo en absoluto) dijo:

-Voy a partirle la crisma a todos.}


Nota 1: este chico Irlandes será como el villano de esta historia, pero sabremos de el mucho más adelante. Lamento si esta parte fue cortita, pero me esforzaré por hacerlas más largas.

Nota 2: En un principio hiba a ser una AU de no such luck, pero luego cambié de opinión y decidí que No.