Basado en la cancíon: Frozen de Madonna...
Primer Fanfiction que escribo...(en realidad el primero que termino)
Espero que les guste!
Corazón Frío
Blanco, muy blanco pensó el pequeño Chazz mientras contemplaba la nieve a través del ventanal de la sala, para el pequeño infante de cinco años eso era algo nuevo.
-¡Mami, es blanco!-exclamó sorprendido mientras su madre, Victoria Preinston se acercaba a él. Esta acarició los cabellos negros de su hijo dulcemente mientras tomaba su mano y abría el ventanal.
Una vez afuera, Chazz soltó la mano de su madre y fue corriendo a aquel paraíso nevado. Miraba sorprendido como pequeñas bolitas blancas caían del cielo.
-Es frío-comentó cuando una le cayó en la nariz. Su madre río dulcemente.
-Como el corazón de algunas personas-dijo. Chazz pestaño dos veces y observó sin comprender a la delgada mujer de ojos grises.
-¿Frío?-preguntó
-Frío-respondió Victoria.-Hay personas que tienen el corazón frío, son personas malas que no quieren a nadie y nadie los quiere.-
-¿Y yo tengo un corazón frío?-preguntó el niño asustado. Su madre sonrío dulcemente y acarició la pálida mejilla de su hijo.
-Tú nunca vas a tener un corazón frío, Chazzy. ¿Pero sabes que es bueno? Que puede curarse.-
-¿Curarse? ¿Cómo?-preguntó entusiasmado, su madre lo abrazó y le dio un beso en la mejilla.
-Derritiéndoselo…dándole amor- Chazz sonrío y a los pocos segundos estornudó. Su madre lanzó una pequeña risa angelical.
-Será mejor que entremos…no quiero que te enfermes-dijo Victoria mientras tomaba su mano y juntos entraban de vuelta a la casa.
Chazz Preinston abrió los ojos. Ya no se encontraba en la nieve con su madre, sino en la cama de su dormitorio en La Academia de Duelos. Alto, atractivo y solitario, el joven de quince años había cambiado mucho. Ya no era el pequeño niño inocente, se había vuelto egoísta y arrogante, descubrió que se puede ser feliz con dinero, y que solamente se necesitaba a si mismo…o eso pensaba.
Corazón frío pensó. Giró la cabeza y miró a la ventana. Ese día las clases habían sido suspendidas debido a las fuertes nevadas. No había nadie afuera, ni siquiera Jaden Yukii divirtiéndose con sus juegos infantiles. Extrañamente, todo estaba tranquilo en la "zona de los rojos", el grado mas bajo de toda La Academia…
Probablemente todos estén con mucho frío para salir volvió a pensar. Nuevamente suspiro y extendió la mano hasta alcanzar un medallón dorado que descansaba sobre la mesa de luz; tomo la cadena entre los dedos haciendo que girara sobre si misma. Sonrío en su interior.
Talvez la felicidad no sea como yo pensaba…Talvez necesite que alguien me derrita el corazón… ¿Pero quien será?... ¿Serás tú? se preguntó mientras apoyaba su otra mano detrás de la nuca y observaba como giraba el medallón dorado.
