Combatiendo el aburrimiento, he decidido escribir ésto, y como varias personas me han dicho que les gusta pues lo subo aquí, a ver que me dicen los profesionales xDD Ale, a disfrutar
"Fue extraño, todo pasó muy rápido. Un día estábamos escapando de ellas y al siguiente no volvimos a ver su remolque nunca jamás.
Nos sonrió el destino, por fin estábamos a salvo de aquellas tres locas enamoradizas.
Ed y yo nos alegramos muchísimo, ya que por fin empezaba nuestra vida amorosa. Nos reímos, saltamos de alegría y luego comprobamos cómo doble D se había quedado parado en seco y cómo segundos después echaba a correr hacia su casa.
No sé como no lo vi venir. Sabía que uno de nosotros iba a sucumbir, y todas mis cartas estaban en el idiota de doble D. A partir de ahí, la poca infantilidad que tenía se esfumó por completo. Cuando fuimos a hablar con él nos lo explicó. Temía que se explicara, por una buena razón, y es que acabó comiéndole el coco a Ed.
Ya no somos lo que éramos.
Mis dos mejores amigos están enganchados a las chicas que les perseguían, y lo peor es que me están comiendo el tarro a mí también. Hace apenas dos días habría traído la luna a la tierra si con eso hacía que mis dos mejores amigos volvieran a serlo.
Me han dejado de lado hasta que aprenda a aceptar tanto el destino, como mis sentimientos. Y solo me ha llevado un día.
Ayer me puse a pensar.
Pensé en todo lo que pasé por su culpa, todo aquel sufrimiento y frustración.
Noté cómo el corazón se me encogió.
Nazz, la chica por la que velamos todos, ya tiene claro a quién quiere, y por supuesto no es ninguno de nosotros.
Seguí pensando y dí con algo importante.
Nazz no es la chica que quiero. El estereotipo de rubia guapa, tonta y aplicada me queda muy atrás.
La chica que yo quiero tiene que ser valiente, salvaje, fuerte, divertida como la que más, que no se asuste ante nada ni nadie, y que no busque caerle bien a todo el mundo.
Y en cuanto dí eso por pensado, la imagen de Lee se me vino a la mente.
Intenté alejarla todo lo que pude, esa chica me aterrorizaba de una manera espantosa.
Mientras volvía la imagen lentamente, pensé en ella, y me asusté más al ver que encajaba en todo lo que yo quería.
Me dolió.
Me dolió muchísimo.
Que la chica de la que había huido desde el día en que la conocí fuera mi favorita era algo superior a mí.
No he dormido en toda la noche y creo que hoy tampoco lo voy a hacer.
Me he enamorado completamente de esa chica, y creo que va a peor.
Y me destroza que se haya largado sin siquiera avisarme ni despedirse de mí.
Y me destroza la idea de que yo no le guste, y que haya hecho todas esas estupideces solo porque está loca.
Genial, ahora mi corazón la defiende.
Estoy buscando a dobl Ed, porque me siento solo desde que se marchó. Y lo único que quiero es hablar con ella.
Terriblemente desolados, hemos comprobado que el destino es irretufable, y los Eds y las Kanker estaban destinados a estar juntos desde que tres chicas, exactamente iguales que nosotros, a su modo, aparecieron en nuestra vida secuestrándonos.
La amargura que sentimos los tres no es comparable a ningún otro sentimiento que hayamos tenido antes.
Porque lo queramos o no, las tres son nuestras almas gemelas, y nos han dado tan fuerte, que hemos tenido que aceptarlo de golpe.
Por lo menos doble D y yo sabemos qué nos pasa. Ed no tiene esa suerte. Se pasa el día hecho un trapo, ya nada es capaz de consolarle, ni siquiera sus estúpidos pollos.
Solo se sienta en el parque y se pregunta tristemente porqué no puede vivir sin May. Constantemente nos pregunta dónde está y cuándo va a volver. Doble D y yo le vemos llorar todos los días, y ver sus lágrimas de confusión es algo que me descoloca y me enfurece. Ojala esa idiota de dientes de conejo viera lo que le está haciendo a su "querido" Ed.
Dolor, es lo que sentimos ahora. Porque dolor es lo único que sabemos sentir ahora.
También me acuerdo de un día que me quedé observando a Lee.
Será por mi retorcida mente, pero me pareció algo así como… mona.
La vi femenina, en cierto modo. Como una chica, vamos. Eso me chocó, ver a las Kanker como chicas reales era prácticamente imposible.
Me encantaba su alocado peinado, sus estampados de lunares rojos, y sus ojos. Me pregunto cómo serán, aunque soy consciente de que no los veré nunca.
Evitando su atención y totalmente aterrorizado, vi a una chica lista, madura, desternillante, y perfectamente capaz de cuidar de tres personas la vez.
Me sentí raro, eso sí que fue lo más extraño que me pasó nunca.
Lo único que quería era que se me tirara encima como hace siempre, pero por no echarle valor, he acabado echándola de mi vida y echándola de menos.
Esto me resulta amargamente familiar, por lo de mi hermano.
Ella siempre me gustó. Me cabrea, pero me gustaba de verdad. Mucho. En serio.
Supongo que todos tenemos obsesiones.
La mía, el dinero, la suya, yo.
No era mala. Qué va.
Pero el miedo y la rabia que me provocaba el hecho que siempre consiguiera lo que quisiera, a diferencia del eterno perdedor que soy yo, lo bloqueaba absolutamente todo.
Me acuerdo de la movida que pasamos hace tiempo, cuando tuvimos que ir hasta a por mi hermano. Las tres nos salvaron por los pelos de Kevin, Rolf y Nazz, aunque no les volvimos a ver hasta pasados dos días.
Es triste cuando el miedo le puede al amor sin que ni siquiera te des cuenta.
Solo tengo una cosa que decir ahora, Lee, maldigo el día que entraste en mi vida, así como el día que saliste de ella.
Solo espero que allá donde vayas encuentres la felicidad, creo en el destino, y sé que ahora estás donde tienes que estar.
A pesar de que ese lugar no es aquí conmigo, ha sido un placer lidiar contigo.
Hasta siempre"
