Capítulo 1

Jack caminaba por los pasillos de la escuela con el mismo pensamiento que la mayoría de la población escolar en esos momentos.

Escuela otra vez. Las vacaciones recién terminaban y los alumnos ahora volvían al internado Moon High.

Aunque para Jack era más una prisión que una simple escuela, lo único que lograba que pudiera sobrellevar con tranquilidad los días, eran sus amigos, los cuales seguramente encontraría una vez llegara a su habitación y colocara, o mejor dicho aventará sus pertenencias dentro de ella como era costumbre en él.

Con llave en mano, Jack llegó a su habitación casi rezando por tener de compañero a alguno de sus amigos y no a algún extraño, o peor aún, a Peter Pan.

Para su buena suerte, al entrar se encontró con Hiccup, que como era de esperarse tenía su espacio de la habitación en perfecto orden.

"Parece que estamos otro año juntos", le dijo Jack sonriendo mientras se tiraba en la cama disponible dejando sus maletas en la entrada.

"A veces tengo el presentimiento de que sólo nos ponen juntos para ver si logró mejorar tu comportamiento", le dijo Hiccup metiendo sus maletas y colocándolas frente a la cama de Jack.

"Yo sé que a pesar de que te molesto y te meto en problemas en el fondo te fascina que seamos compañeros", le dijo Jack sentándose en su cama.

"Lo admito, muy, MUY, en el fondo, la idea no me desagrada" respondió Hiccup sacando su teléfono.

"Auch, ¿y a quién mensajes?", le preguntó Jack tratando de ver sobre el hombro de Hiccup.

"Hazte a un lado Jack, le habló a las chicas a ver si ya llegaron", le contestó a Jack una vez que Jack se movió.

"¿Y...?", le inquirió Jack esperando que respondiera mientras daba vueltas en la silla de su escritorio.

"Oh si, Rapunzel ya llegó y se encuentra en su cuarto cambiándose, dice que nos ve en el restaurante de pizzas aquí bajando en 15 minutos, y Merida dice que va para allá para apartarnos una mesa", respondió Hiccup mientras Jack seguía dando vueltas en la silla.

"En ese caso no hay que hacer esperar a Merida, y sabes cómo se pone y, lo mejor por nuestro bien es evitar que se enoje", le contestó Jack parándose para irse.

"Bien sólo espera y deja me cambio", le respondió Hiccup sacando ropa de uno de sus cajones.

"Parece que alguien quiere impresionar a cierta rubia", insinuó Jack.

"¿Astrid? En realidad no estoy seguro si aún me gusta", le respondió Hiccup colocando una mano en su nuca.

"Pff, si claro", le contestó Jack sarcástico.

"No te pedí que me creyeras", le respondió Hiccup entrando a cambiarse, "y además también podrías cambiarte para variar", le dijo una vez dentro del baño.

"¿Qué tiene de malo mi ropa?", le preguntó Jack mientras se observaba, llevaba puesto su sudadera azul favorita, pantalones cafés, y converse azul marino, con su cabellos blanco despeinado.

"Que siempre usas la misma sudadera", le respondió Hiccup una vez que salió del baño, llevaba puesto pantalones de mezclilla, una camisa verde sencilla, encima una chaqueta de cuero café y sus vans cafés.

"Oye es la de la buena suerte, además, no soy yo quien lleva trenzas", le argumentó Jack jalando una de las pequeñas trenzas en su cabello.

"Mejor que despeinado, ahora dejemos esta discusión para después, no podemos hacer esperar a Merida, sabes cómo se pone", le dijo Hiccup abriendo la puerta para salir.

Si Jack era honesto, Merida podía ser bastante intimidante, pero por el bien de su reputación jamás lo admitiría en voz alta.

Después de pocos minutos ambos amigos entraron al restaurante, donde no tardaron mucho encontrando a su amiga pelirroja gracias a que no estaba muy lleno, Merida se hallaba sentada con su teléfono en mano, vistiendo como a ella le gustaba, lo más cómoda posible, llevaba shorts de mezclilla por encima de su rodillas, una camisa verde oscuro de manga 3/4 y vans verdes claros y para su buena suerte no se encontraba enojada

"Hey Merida", le saludó Hiccup, tomando asiento junto a ella.

"Hey Rizos", le saludó Jack, causando que ella sólo lo mirara enojada y regresara a su teléfono, y unos segundos después lo dejara para atender a sus amigos.

"¿Y con quién hablabas tanto?, ¿por fin dejaste que tu madre te emparejara con alguno de tus pretendientes?", preguntó Jack casualmente mientras leía el menú.

"También me da gusto verte Frosty", le respondió ella enojada. "Hola Hiccup, y por sí de verdad te interesa, hablaba con Mulan, quién resulta ser mi nueva compañera de cuarto", les dijo de manera casual tomando un menú.

"¿Así que este año no estarás con Rapunzel, uh?", le preguntó Hiccup, aunque era más un hecho que una pregunta.

"Sip, pero está bien, Mulan y yo nos llevamos bastante bien, y Rapunzel no tendrá problemas en llevarse bien con quién sea que le haya tocado", respondió ella empezando a leer su menú.

Y era verdad, Merida y Mulan se llevaban bastante bien, especialmente por el hecho de que a ambas les fascinaba el deporte y no apreciaban por así decirlo el ser femeninas.

Y Rapunzel como Merida decía, solía hablar hasta con las piedras, su actitud tierna y dulce lograba agradar a la gente, por lo que seguramente se llevaría bien con su nueva compañera, fuera quién fuera, si lograba llevarse con ella se llevaría bien con cualquiera.

"¿Están listos para ordenar?", les preguntó la mesera.

"Un momento, estamos esperando una amiga", respondió amablemente Hiccup. Por lo que la mesera sonrió y fue a atender a otra mesa.

"¿Y ustedes son compañeros nuevamente?", preguntó Merida para hacer tiempo.

"Así es, Hiccup tendrá que aguantarme otro año", dijo Jack orgulloso, mientras Hiccup sólo giraba sus ojos.

"No sabes cuánto te compadezco Hiccup", le dijo Merida colocando una mano sobre su hombro, causando que Jack fingiera estar ofendido, y sin que ninguno de los dos se diera cuenta, que Hiccup se sonrojara.

Los tres amigos siguieron hablando durante unos pocos minutos hasta que llegó su amiga rubia.

"Perdonen la demora", les dijo una vez que se sentó, como Merida lo había dicho, Rapunzel si es lo que uno llama, femenina, llevaba un vestido rosa claro, un suéter delgado morado encima y flats color crema.

"No te preocupes no llevamos mucho", le dijo Hiccup.

"¿Ya ordenaron?", preguntó tomando un menú.

"No, te estábamos esperando", le dijo Merida.

"En ese caso hay que pedir", les dijo y todos asintieron.

Pronto llamaron a la mesera que pronto tomó su orden, y cuando menos se dieron cuenta, entre los cuatro se habían devorado una pizza grande de pepperoni, especialmente Jack y Merida, que aún buscaban en el menú que pedir de postre.

"¿Y qué tal tu nueva compañera?", preguntó Hiccup a Rapunzel mientras sus dos amigos seguían leyendo el menú.

"No lo sé, parece bastante interesante por la manera en la que esta acomodada y decorada su parte del cuarto, pero es todo lo que se de ella, aún no la conozco", les confesó.

Una vez Merida y Jack pidieron sus respectivos postres, Jack tomó la palabra.

"Vas a ver que se van a llevar bien, nadie puede no quererte", le dijo Jack.

"Gracias Jack, eso esperó", le dijo. Y poco después llegó el postre de Merida y de Jack, una rebanada de pay de manzana, y un helado de chocolate con trozos de galleta, en ese orden.

Y mientras estaban ahí, los cuatro hablaron de sus respectivas vacaciones, a que clubes se inscribirían ese año, entre otras cosas, tanto de la escuela como de otras actividades no relacionadas con ella, como eran las salidas los fines de semana, las bromas que Jack tenía planeadas y que arrastraría con él a Hiccup, las fiestas que habría ese año, el baile, entre más.

Una vez pagaron, los 4 decidieron pasar el resto del día en el parque.

Cuando por fin encontraron un buen árbol, Jack se trepo en él y se recostó en una de las ramas, y se preparó para tomar una siesta, Hiccup se recostó en el árbol mientras leía, Punzie a su lado mientras dibujaba un poco en su libreta la cual llevaba en su bolsa, y Merida se hallaba escuchando música con su cabeza en el regazo de Rapunzel, y sus piernas sobre las de Hiccup.

Eso era lo bello de su amistad, no necesitaban hablar entre ellos para estar juntos, sólo su compañía mutua era más que suficiente.

Todo era paz, o al menos eso creía cuando escucharon ciertas voces.

"Pero si es el grandioso Jack Frost y sus amigos", dijo una voz con sarcasmo.

"¿Qué quieres Pitch?", le respondió Jack enojada sentándose en la rama donde se acostaba momentos atrás.

"Uy, parece que Frost amaneció con el pie izquierdo", le dijo Hans.

"Y parece que te falto dormir un poco más, uno de esos sueños de belleza te vendría bien", le continuó Gaston causando que sus dos amigos rieran.

"¿Porque no se van a perder a otro lado?", les dijo Merida enojada mientras amenazaba a Gaston con su puño.

"Calmada muñeca, sólo estamos de paso", le respondió Gaston, causando que Rapunzel y Hiccup tuvieran que sostener a Merida para evitar que golpeara a Gaston por llamarla muñeca.

"Así es Frost, ya nos vamos, Dios, que humor traes", le respondió Hans riendo mientras caminaba sin voltear a verlos.

"Hasta la próxima Jack", le contestó de manera siniestra Pitch yendo detrás de Gaston y de Pitch, seguro los tres irían a donde siempre, su punto de reunión, o mejor dicho, el bar de Vanessa.

Vanessa era de las muchas que se juntaban con ellas, y como ellos ella se sentían superiores a todos y especialmente a todas las demás, su familia tenía grandes cantidades de dinero, y cerca de la escuela su tía manejaba un bar, al que claro sus amigos y ella tenía acceso ilimitado.

"Vámonos de aquí se me fue el humor", dijo Jack bajando del árbol.

"Secundo la moción, esos tres me sacan de mis casillas", le respondió Merida siguiéndolo.

"Podemos quedarnos en la sala de estudiantes, la mayoría están fuera del campus o en sus habitaciones acomodando o remodelándolas, así que no estará tan concurrido", propuso Hiccup, y los demás vieron que era en realidad una buena idea aceptaron.

Después de una corta caminata llegaron, y Hiccup tenía razón, casi no había estudiantes en la sala, por lo que aprovecharon y se sentaron en los sillones con vista a la ventana.

Eran varios sillones, uno largo donde se sentaron las chicas, otro más corto donde se sentaron Hiccup y Jack, y varios pequeños taburetes redondos que rodeaban en el espacio, donde el centro se situaba una mesita de madera.

Pronto los 4 amigos se encontraban en una ardua conversación sobre qué harían el fin de semana, mientras Merida quería ir al gotcha, Hiccup al cine Rapunzel a un nuevo restaurante, y Jack a la pista de hielo, fueron interrumpidos por el repentino cambio de actitud de Rapunzel, pronto se quedó callada, sonrojada y no dejaba de observar por la ventana.

Pronto los demás imitaron su ejemplo y se dieron cuenta a que se debía, Flynn Ryder y Pocahontas que venían caminando hacia la sala de estudiantes mientras hablaban entre ellos.

Flynn Ryder, o mejor conocido por ellos cuatro como el súper crush de Rapunzel era uno de los chicos más populares y cotizados de la escuela junto con Jack, Hans, Nod, Hércules, Sinbad y Aladdin.

En realidad Jack se llevaba bien con él, pero prefería estar con su amigos que con el grupo de amigos de Flynn, no que se llevara mal con ellos, al contrario, al igual que con Flynn, les caían bien, pero aun así prefería la compañía de sus amigos.

Flynn solía juntarse con Aladdin, Tulio, Miguel, Sinbad, Nod y para disgusto de Jack, Peter Pan.

Esos dos tenían una larga historia llena de rivalidad y odio mutuo el cual escondía y se demostraban mediante bromas.

Flynn se acercaba junto con Pocahontas, quién resulta ser su mejor amiga, y con quién todos incluso Rapunzel se llevaban bien.

Flynn iba con sus pantalones negros, camisa blanca y chaqueta de mezclilla, una combinación sencilla que aún si le quitaba el aire a Rapunzel, Pocahontas por su parte llevaba una blusa beish, leggins negros, un chaleco largó café, y botas cafés.

"Hey Jack, Hiccup" les saludó Flynn.

"Señoritas", les dijo guiñándoles un ojo a Merida y a Rapunzel. Lo que causó que Merida sólo volteara los ojos y Rapunzel se sonrojara y bajara la mirada para que nadie lo notara, aunque claro sus amigos lo hicieron.

"No molestes a las chicas Ryder, aún no es el primer de clases pero ahí vas", le regaño Pocahontas. "Hola chicos", les saludó a todos después de pegarle en la cabeza a Flynn.

"Hey", le respondieron los 4 simultáneamente.

"¿Les molestas sin los acompañamos?", preguntó Pocahontas.

"Para nada, tomen asiento", les dijo Merida.

Pocahontas tomó asiento en uno de los taburetes donde pronto la acompaño Merida sentándose en uno junto a ella, para que de esa manera Flynn se siente junto a Rapunzel.

Flynn como costumbre coloco su brazo sobre el respaldo del sillón, causando que Rapunzel se sonrojara casi inconscientemente de la cercanía que mantenían.

Pronto los 6 se encontraban hablando de la fiesta que Flynn daría, cada año el daba un Mega fiesta por su cumpleaños que resultaba ser una sensación en la escuela, y ese año, no sería la excepción, especialmente siendo su cumpleaños número 18.

"¿Y cuál es el plan Ryder?", le pregunto Jack intrigado.

"Aún está en planes, pero créeme que será inolvidable", le dijo Flynn chocando cinco con el peliblanco.

"¿Y a quién invitaras este año?", se animó a preguntar Rapunzel.

"Pues como este año es especial, planeaba invitar a más gente, ya saben incluso repartir volantes este año", le respondió con modestia.

"¿Estás seguro de eso?", le preguntó Merida, "hay mucha gente que estoy seguro no querrás en tu fiesta", le insinuó Merida.

"Si te refieres a Hans y a su grupo no me queda de otra, aunque fuera una fiesta privada este año tengo que invitarlos" respondió de mala gana.

"¿Que sucedió, o porque tendrías que hacerlo?", le preguntó Hiccup.

Flynn que parecía no querer hablar del tema volteó a ver a Pocahontas y con la mirada le dio a entender que les explicará ella.

"El papá de Flynn está saliendo con la mamá de los hermanos Stabbington, y le sugirieron", dramatizo ella con los dedos, "que invitara a sus posibles nuevos hermanos y a sus amigos", les término Pocahontas de decir.

Todos mostraron la pena que sentían por Flynn, tanto por la fiesta como por ellos dos siendo sus posibles hermanastros.

"Si, este verano fue una locura, si no hubiera sido porque Pocahontas iba a mi casa casi a diario o yo la suya, probablemente me hubiera vuelto loco con esos dos en la casa, tuve suerte que no invitarán a nadie a mi casa y que les dieran su propia habitación y no tuviéramos que compartir", les dijo Flynn mostrándoles lo positivo, aunque a Rapunzel el comentario que hizo de Pocahontas la puso algo celosa, todos sabían que Flynn y Pocahontas eran mejores amigos, casi hermanos, pero eso no evitaba que Rapunzel sintiera celos de vez en cuando.

"Oye y aún no les das las buenas noticias", le recordó Pocahontas.

"¿Cuales buenas noticias?", preguntó Jack.

"Ya verás, es algo así como una sorpresa, incluso para mí fue una sorpresa", le contestó.

Pronto el celular de Flynn sonó y él se alejó un poco para contestar, y en poco tiempo estaba de vuelta.

"Y la sorpresa viene en camino", les dijo a todos.

"Quedarán impactados, lo prometo", les dijo Pocahontas sonriendo con complicidad.