- Capitulo 1: ¿Tan solo son pesadillas? -

Un delicado y hermoso cabello dorado. Esa tímida pero encantadora mirada en sus Profundos ojos verdes, tan radiantes como las esmeraldas, acompañados por una largas y brillantes pestañas. una fina nariz, labios cuyo tono rosa natural hacen juego perfecto con el leve rubor que tan solo se encuentra un poco mas arriba en esas suaves mejillas, que contrastan drásticamente con el tono algo cremoso de su piel. Un cuello delgado y asombrosamente bello y lo es mas aun al contemplar las sombras que en el se forman al momento en que la luz lo toca. Esas pequeñas manos, se ven tan pequeñas e inofensivas que es difícil creer que han sido adiestradas para el diario vivir de un soldado. Una figura tan delgada y aun así tan atrayente, con una adecuada y claramente marcada cadera seguida por unas bellas y largas piernas. Unos hombros tan pequeños, estrechos, tan apegados al tórax que parecieran ser muy frágiles pero que de hecho son tan fuertes por el claro entrenamiento propio del cuerpo de un oficial.

Esta es la figura que observo frente a mi, sin dejarme sentir nada mas que sincera perplejidad mientras observo con la boca semi-abierta a este ser que parece ser demasiado hermoso para mi vista, si, aun demasiado puro para describirle como un simple ser humano al que contemplar.

Su entera existencia es tan pequeña y su lindura tan sublime, que pareciera estar llamándome... invitándome a comprobar si mis brazos son lo suficientemente largos para rodear sus homb...

"A- AAAAAAAAAAAHHH!"

De pronto, despierto del trance, de aquella maldición en la que estaba cautivo para encontrarme bañado en sudor y jadeando pesadamente bajo las delgadas sabanas de mi cama, sobre la que ahora me encuentro sentado.

"Otra vez esa maldita pesadilla"

Susurro mientras trato de regularizar mi respiración y pongo mi mano izquierda sobre mi rostro para asi lograr calmarme y para mi sorpresa, mi rostro parece estar ardiendo a diferencia de la temperatura del resto de mi cuerpo. En esta posición me quedo inmóvil por lo que creo son un par de minutos, intentando no traer a mi mente de nuevo las imágenes que contemplaba tan solo unos minutos antes. Con mi pulso aun golpeando fuertemente mi pecho y el sudor ya sintiéndose algo mas frió, me levanto y me dirijo al baño de mi habitación. Enciendo la luz y sin mirarme siquiera al espejo frente al lavabo (ya saben el lava manos) abro la llave y comienzo a lavarme la cara con agua fría aunque podría decirse que en vez de lavar simplemente estoy empapándome de agua fría hasta la altura de los hombros, tras lo cual finalmente me miro al espejo.

Lo que observo me irrita bastante, mi aspecto no podría ser mas desastroso, tanto es asi, que de seguro si alguien me viera pensaria que estoy muy enfermo.

"¿¡Que demonios me esta pasando!?"

Digo aun con la garganta algo apretada mientras doy un golpe de frustración a la pared junto al espejo.

Me toma solo un par de minutos tomar una ducha, cambiarme y volver a mi habitación. Me siento sobre la aun desordenada cama y veo la hora en el pequeño despertador a unos centímetros de mi...

4:37 AM [Nota: De hecho a esa hora estoy escribiendo esto xD] Hecho que me hace exhalar un pequeño suspiro. Aun sentado sobre mi cama pero con los pies apoyados en el suelo comienzo a traer a mi mente lo que dije antes frente al espejo... Que me esta pasando... no es como si no tuviera la mas mínima idea de porque es que he estado soñando con cosas como esta desde hace ya meses, o el porque de mi repentina excitación, o "quien" es la tan hermosa mujer a quien contemplo boquiabierto cada vez que tengo este sueño.

Así es, a estas alturas ya se cada una de estas respuestas, pero lejos de traerme paz y tranquilidad sinceramente me están enfermando. Anteriormente cuando solía tener estas pesadillas, solían ser mas pasivas, breves y borrosas como si fueran cubiertas por un velo que no me permitían ver al culpable tras estos confusos sentimientos. Cosa que cambió dramáticamente en estas ultimas ocasiones donde el sueño se vuelve cada vez mas real, duradero y finalmente pude distinguir claramente a esa persona, quien es esta mujer que invade sin permiso alguno mis pensamientos durante el dia y especialmente durante las noches.

Si, finalmente estoy seguro... no es otra sino la teniente "Noel Vermillion".

"Que Idiota!"

Digo en voz baja mientras caigo de espaldas en la cama y comienzo a mirar el techo de mi habitación intentando procesar este nuevo hallazgo que he hecho y de lo ridículo que me parece a simple vista...

De todas las mujeres con las que he tenido alguna clase de contacto este ultimo tiempo: La pelirroja Tsubaki, la fastidiosa Makoto Nanaya, la "madura" Litchi Faye ling, Esa anciana vampiro de Rachel Allucard, la inexpresiva Nirvana e inclusive Tao-Kaka...

"Tenia que ser Noel Vermillion"

La única a quien en incontables ocasiones le he dicho que debería simplemente morirse, que no vale nada, que no se interponga entre Nii-san y yo, que no vuelva a mostrar su rostro frente a mi cuando he tenido un mal día y ella simplemente entra en mi oficina y comienza a decirme el usual reporte del día con esa débil y torpe personalidad suya que me exaspera hasta el limite".

Y, sin embargo... ahora mismo me encuentro sonriendo involuntariamente mientras no puedo dejar de pensar en ella, aun cuando hace solo minutos traté de recordar a todas las demás mujeres,solo con recordar un encuentro por mas mínimo que sea con la teniente Vermillion produce que ella se apodere completamente de mi mente, sin permitirme concentrarme en algún otro asunto. Y entonces todas aquellas cosas de su persona que solían irritarme Y MUCHO poco a poco comienzo a verlas como algo increíblemente atractivo y lindo, algo de lo que quiero mas y que solo puedo contemplar en ella, no en otra mujer.

Me mantuve recostado así sobre mi cama durante un buen rato, simplemente recordando distintos momentos en los que cruzamos palabra y otros en los que incluso no hablamos nada, Pero a pesar de ello ocasionalmente cubro la parte baja de mi rostro para contener la risa que me produce el simplemente recordar alguna torpeza que haya hecho, como tropezarse y tirar los papeles al piso, o su rostro confundido ante algo que no entiende, o su expresión de la primera vez que le dije que no valía nada... Me siento como si hubiera hecho un enorme descubrimiento, algo extraordinario de lo que no me había percatado hasta este preciso momento y que ahora finalmente puedo ver y disfrutar con total claridad.

Pero... algo me hace quitar la sonrisa que había en mi rostro.

"Que estupidez estoy pensando"

Digo esta vez algo mas fuerte mientras me levanto completamente de la cama poniéndome de pie.

¿Que estupideces sin sentido estoy pensando? Es casi como si estuviera hablando de...

"¿Amor?"

Tras decirlo me encuentro totalmente paralizado, literalmente sin pestañear, ocupando todo el potencial de mi cerebro para intentar procesar lo que acabo de decir.

Vuelvo a sentarme sobre mi cama, aunque en realidad fue mas como si solo cayera sentado sobre ella al perder la fuerza en ambas piernas. Pongo instintivamente una mano sobre mi boca para retener lo que parecen ser nauseas y comienzo a sentir que nuevamente empiezo a sudar aun cuando esta vez ni siquiera estoy dentro de esa pesadilla. Aun sin quitar la mano de sobre mi boca y frunciendo el ceño comienzo simplemente a pensar, a pensar realmente:

¿Amor? ¿Romance? No puedo creer lo que estuve considerando durante esos momentos, ¿Que me esta pasando? Soy Jin Kisaragi, Portador de la legendaria espada congelante Yukianesa, Uno de los hombres mas importantes y ocupados del NOL, es mas ¡soy el heroe el heroe de Ikaruga! Sin olvidarme claro que

"¡Soy el mismísimo poder del orden personificado!"

Digo en voz alta, casi como si gritara, con una expresion arrogante en mi rostro. Estoy destinado a traer el orden al mundo al ejecutar al agente externo que esta causando el caos. Si! No hay lugar en mi vida para algo mas que esto, ¿amor? Haha! ¡Que estupidez! Pienso triunfante, y no otra que con la torpe e irritante Noel Vermillion ¿no?

Hoy mismo dejare en claro estos desperdicios de pensamientos con respecto a la teniente y me asegurare que no volvamos a vernos nunca mas depues de esto.

Vuelvo a mirar el despertador una vez mas y me percato que ya son las 6:50 AM, asi que aun con la arrogante sonrisa en mi cara decido finalmente que debo dormir al menos un poco, cuando de pronto paso a tocar levemente con mi antebrazo a "Yukianesa" que descansa en un soporte junto a mi cama.

Instantáneamente siento que un gran dolor me atraviesa todo el cuerpo, a tal nivel que me es imposible sentir mis extremidades o siquiera exhalar alguna palabra y claro mucho menos un grito.

Me desplomo boca abajo sobre mi desordenada cama mientras muchos pensamientos cruzan por mi mente, tantos que pareciera solo aumentar el dolor que siento. De pronto comienzo a perder el sentido del oído y mi vista comienza a ser borrosa y oscurecerse, en pocos segundos ya no siento absolutamente nada, incluyendo el dolor y comienzo a caer en lo que parece ser un profundo sueño

¿Sera esta la manera en como moriré? Me pregunto mentalmente justo antes de desvanecerme.

El sol esta radiante, el cielo semi cubierto con unas hermosas nubes que parecieran hechas de algodón de azúcar y una fresca briza que me hace pensar que presencio el clima perfecto.

Me percato que estoy sobre una pequeña colina totalmente cubierta de un verde y ligeramente mojado pasto que se siente impresionantemente bien bajo mis pies. Sin embargo, todo lo que he mencionado no es nada con lo que ahora captura mi atención.

Frente a mi a unos 4 metros de mi se encuentra una increíblemente hermosa figura femenina que camina lentamente hacia mi. Su brillante cabello rubio ondea suavemente al viento, sus hombros color crema se balancean elegantemente, sus pies dan pequeños pero firmes pasos sobre el húmedo pasto y en su rostro esta dibujada una coqueta sonrisa que no me deja siquiera percatarme que estoy aun atónito y totalmente boquiabierto por su increíble presencia y lo acelerado que esta mi pulso.

Cuando esta a solo 1 metro de distancia de mi ya no puedo contenerme mas e intentando calmarme un poco trago algo de saliva y susurro con dificultad sin bajar la mirada:

"Noel..."

Ante lo que ella se detiene bruscamente y me mira atónita con esas hermosas esmeraldas verdes que tiene por ojos e instantáneamente todo comienza a desvanecerse en 1 segundo incluyéndome a mi.

Siento frió... algo húmedo esta sobre mi frente y todo mi cuerpo pareciera estar hecho pedazos o es lo que creo a juzgar por el dolor que siento. Lentamente comienzo a abrir mis ojos y comienzo a mirar el techo, un techo impecablemente blanco. bajo la mirada y me veo bajo unas no muy gruesas sabanas blancas. Ah, ya veo... pienso,

"Estoy en el hospital"

digo en voz baja cuando me percato que al lado de mi cama hay alguien sentado en una silla, giro lentamente la cabeza que aun sigue doliendo y sin creer lo que veo me doy cuenta de quien esta mujer, si! La mujer que esta a mi lado portando su traje de soldado, con el cabello perfectamente recogido bajo la gorra de servicio y con un fuerte rubor en sus mejillas... Noel Vermillion.

impresionado me quedo mirándola por un par de segundos y de seguro con una muy extraña expresión en mi rostro, ya que ella se rehúsa a mirarme al rostro y parece estar mirando sus manos mientras mueve sus pulgares en círculos.

"Buenos días Major"

Aun sin mirarme a la cara, me da el formal y habitual saludo con esos pequeños y rosas labios suyos Que me sacan de mi trance y dejo de mirarla fijamente como estúpido como lo estaba haciendo hace 1 segundo, me recuesto sobre la cama, cierro los ojos y me pregunto:

¿Sera que aun estoy dentro de mi pesadilla? ¿O sera que tal ve...

¿E-Ah!? ¿M-Major? ¿Aun s-se siente mal?

Una tímida y encantadora voz me detienen de pensar mas, abro mis ojos y veo a Noel con los suyos muy abiertos, aun sentada en la silla pero inclinando la parte superior de su cuerpo levemente sobre mi, demostrando sincera preocupación en toda su presencia y claro con un fuerte rubor en toda su cara que me hace pensar casi instantáneamente en un tomate.

Ahora lo se... Esto es real, este momento en que estamos nuevamente nosotros 2 solos, cuando pareciera que el tiempo se detiene y ninguna otra cosa o persona importa.

Ahora lo se... al igual que este momento, este imparable sentimiento que golpea fuertemente mi pecho a cada segundo, el calor que cubre todo mi rostro y el temblor que embarga a mis manos no es simplemente un sueño, sino algo mucho mas problemático e innecesario, pero también muy profundo y real.

Amor...