Disclaimer: Pokémon no me pertenece es propiedad de Satoshi Tajiri .
Notas de autor: Regalo para Kotomi, porque ella ama el viridian, yo el hotrival... Y Silver a Yellow y N (L) jajaja.
Advertencias: Posible OoC. Trío.
—No.
Silver no se molestó siquiera en disfrazar su notorio enfado, casi abrazando sus rodillas mientras se intentaba hacer un ovillo en su sofá; pero su acompañante estaba poco dispuesto a ceder en sus deseos infantiles y egoístas.
—¿Por qué? — inquirió hincándose para verlo desde el suelo, como si fuera un pequeño shaymin a la espera de una caricia.
—Porque eres molesto, quítate.
El pelirrojo gruñó mientras N agachaba la mirada, pero fue la risa femenina en la cocina que provocó un sonrojo en las mejillas de Silver. Yellow salió para ver a los chicos, en aquella situación sin duda el extranjero ganaría; pero para sorpresa de ambos, ella lo vio con reproche.
—No, es no N.
—Deberías ayudarme, tú también lo querías. — El de cabellos verdes murmuró, pero cuando la rubia estaba por desmentir aquello, volvió a hablar—; Chuchu me lo dijo.
Silver pasaba su mirada de uno a otro, a veces no llegaba a comprender exactamente como ellos veían su relación y como terminaban metiéndolo a la fuerza en medio de ambos. Además, en momentos como aquellos, tanto Yellow como N parecían ser otras personas.
«El amor cambia a las personas» Crystal le había dicho con anterioridad, pero él no quería cambiar. Ni siquiera había pedido que aquellos dos se enamoraran de él, cuando no sabía cómo corresponderles.
Yellow y N se miraron y después a Silver, quien parecía haberse perdido en sus cavilaciones; una muy diminuta sonrisa amenazó con posarse en sus labios, pero en cambio desaparecieron rápidamente antes de regresar con un cepillo cada quien. Y en menos de un segundo, las hebras de color rojo se vieron acariciadas.
—¡LES HABIA DICHO…!—Silver se quedó a mitad de la frase.
Que les dieran.
Se cruzó de brazos poniendo mala cara, pero solo consiguió que N le picara la mejilla y que Yellow volviera a reírse por lo bajo. ¿Qué no eran rivales? Parecían los mejores amigos del mundo. Aunque tal vez eso tenía que ver con el hecho de que eran las personas más dulces y al mismo tiempo, las más molestas sobre la faz de la tierra. Pie grande y un gnomo les quedaban cortos, aunque en el caso de Yellow demasiado corto.
—Creo que nos ha matado en su mente unas tres veces. — La chica dijo con las mejillas rojas, logrando que Silver realmente les pusiera atención y se sintiera avergonzado por pensar así de ellos.
—Posiblemente. — N le sonrió antes de agacharse y robarle un beso al pelirrojo, Yellow por su parte, se sintió cohibida de repente por el atrevimiento del de cabellos verdes.
—Solo…hazlo. — Silver desvió la mirada avergonzado a muerte por aquellas demostraciones de afecto, pero cuando sintió a la rubia rozar sus labios se dio cuenta de que los sentimientos que residían en su pecho hacía mucho tiempo habían madurado.
—¿Ahora podemos peinarte?
El pelirrojo puso los ojos en blanco, pero como aquello no fue una negación; los otros dos lo tomaron como un sí (pues les convenía) y empezaron a cepillar las hebras rojizas.
...
—Lindas coletas. —Gold dijo nada más abrir la puerta de su casa y encontrarse a su mejor amigo con la cara más tenebrosa que había visto en todos sus años de amistad—¿tenemos que deshacernos de algún cadáver?
—Cierra la boca y quítame esta mierda.
Porque tal vez Silver podría amarlos, pero nadie iba a meterse con su cabello.
Nunca.
A favor de la Campaña "Con voz y voto", porque agregar a favoritos y no dejar un comentario es, como han dicho otras autoras:"como manosearme la teta y salir corriendo."
Hayden
