I'm too sexy
Advertencias: Ambientado en el verano antes de comenzar la quinta temporada.
Disclaimer: The vampire diaries no me pertenece, es de L. J. Smith y The CW. Solo la trama es mía.
NdA: Noe, no he podido resistir la tentación de escribirte un Delena, el primero que escribo por "propia voluntad". ¡Espero que te guste este pequeño regalo bonus!
Palabras: 498.
Damon mueve la cabeza al ritmo de la música que suena por su móvil mientras se sirve un nuevo vaso de bourbon. Está solo en la residencia Salvatore. Stefan se ha marchado de vacaciones y Elena ha quedado con Caroline para terminar de ultimar unos papeles para la universidad. Ni si quiera puede salir a tomar un tentempié mientras espera a su chica porque todo el maldito pueblo ha aprovechado el verano para largarse a la playa.
I'm too sexy for my love, too sexy for my love
love's going to leave me
Damon sonríe al escuchar esas dos frases. La canción de los 90 comienza a sonar y el vampiro le da un trago a su bebida mientras se pone a bailar. Mucha gente dice que esa década no fue muy buena para la música pero para él, es una de sus épocas preferidas. Entre otras cosas porque tiene esta canción.
— I'm too sexy for my shirt, too sexy for my shirtso sexy it hurts…
Mueve las caderas al ritmo mientras poco a poco se va desabotonando la camisa. Se mira al espejo que tiene enfrente y mientras lo hace, piensa que esa canción fue hecha para él. Su sonrisa ladeada se adueña de él. Sabe lo bueno que está. Ninguna camisa debería privar al mundo de poder admirar su cuerpo fibroso pero sin muscular. Esculpido como si de un héroe griego se tratase.
El vampiro se pasa la mano por la los abdominales ligeramente marcados hasta la V que desemboca en su entrepierna. Cierra los ojos, alzando los brazos lentamente, cantando con voz grave la canción sin dejar de bailar. Por tres minutos, no existe nada más en ese momento que él moviéndose al ritmo de la canción.
Cuando la canción termina, alguien carraspea a su espalda.
Damon abre los ojos de golpe y se gira rápidamente, dispuesto a desplegar toda su chulería y sarcasmo sobre el que se le haya ocurrido espiar a escondidas. Entonces la ve, apoyada contra el marco, con una ceja levantada y una sonrisa burlona.
— Elena, ¿disfrutando del espectáculo?
Ella ríe.
— Bastante… — Avanza lentamente hasta quedar frente a él, recorriendo con su mirada el torso desnudo de su novio sin ningún pudor. — Así que, ¿esto es lo que haces cuando te dejo solo? ¿Bailar semidesnudo?
Damon se encoje de hombros.
— La ropa es mi prisión, qué le voy a hacer.
Elena le mira, mordiéndose el labio. Pero cuando el vampiro se inclina para besarla, ella lo esquiva. Confundido, ve como se dirige a su móvil y se sienta con él en un sillón.
— Entonces, libérate. — Ordena con la mirada oscurecida. Pulsa una tecla y la canción empieza a sonar de nuevo.
El moreno la mira boquiabierto y luego sonríe chulesco. Vuelve a bailar, moviéndose al ritmo de la música, quitándose el resto de la ropa poco a poco.
Si Elena quiere un streaptease, va a tener el mejor que nadie haya hecho nunca porque nadie es tan sexy como él.
Fin.
