POR EL BIEN DE TODOS
NOTA: Este tonto fanfic lo escribí solo para entretener. No tiene mucha coherencia con la historia original, pero creo que lo encontraran divertido y original. Dejen Review por favor. No me maten.
Este proyecto es sin ánimo de lucro. Los personajes, los hechizos y los objetos mágicos son propiedad de JK Rowling.
…………….
Dumbledore caminaba hacia el Gran Salón. Después de tanta espera y maquinación, al fin había llegado el momento de culminar el plan que había pasado cinco años planeando, y que había decidido utilizar en caso de que Cornelius Fudge no lo escuchase cuando le habló del resurgimiento de Voldemort. El ministro no le había echo el menor caso, y ahora dependía de el salvar al mundo mágico, aunque tuviese que hacer algunos sacrificios para lograrlo. Con ese razonamiento, había instruido a todos los alumnos de Hogwarts como si fuesen un ejército de magos para derrocar al inservible ministro. Aprendiendo hechizos defensivos y embrujos muy potentes, solo le faltaba que todos sus alumnos se uniesen en contra de Fudge. Irónicamente, el mismo ministro le había ayudado a concretar ese paso, porque al ver enviado a esa arpía de Dolores Umbridge a vigilarlo, había logrado que todos los alumnos lo tomasen como un dirigente despótico y paranoico, a quien había que sacar del mando urgentemente para preservar la sociedad. Del resto, Dumbledore se había ocupado con anterioridad: para debilitar el poder del ministerio, la Orden del Fénix se había encargado de reclutar a varios miembros del ministerio, que desconfiaban de Fudge. Estos mismos miembros habían comenzado a reclutar a algunos de sus compañeros de trabajo, produciendo así, un efecto dominó.
El siguiente paso había sido el de encerrar a los miembros de la casa de Slytherin que se opusiesen a sus planes. Los habían atrapado y encarcelado en las mazmorras del colegio, dejando a Filch para que los vigilase. Una vez concretado el plan, solo habría que desmemorizarlos y no recordarían nada de su encierro.
Finalmente, solo había que proveer a su nuevo ejército de escobas voladoras suficientes para iniciar el asalto al edificio ministerial.
Al la mitad del pasillo, Dumbledore se encontró con su cuerpo docente.
-¿todo esta listo Minerva?-inquirió el director a la jefa de Gryffindor.
- por su puesto director- respondió ella.
Dumbledore, entonces, se dirigió junto con los profesores a cruzar la puerta que quedaba al final del pasillo, y que daba a un Gran Salón que, en ese momento, estaba repleto de chicos vestido con las túnicas del colegio, y que portaban varitas y escobas voladoras. Dumbledore carraspeó para llamar la atención, y comenzó a hablar:
-mis queridos alumnos, hoy iniciamos la revolución contra el corrupto ministro Cornelius Fudge, quien en su afán de mantener el poder, a ocultado la verdad y nos a dejado expuestos contra la creciente amenaza de Lord Voldemort-al oír el nombre, muchos alumnos hicieron muecas de dolor- por eso es que debemos formar un nuevo ministerio, un ministerio que se preocupe por nuestro bienestar y el de la comunidad mágica en general. Pero antes, necesitamos deshacernos de Fudge y su régimen autoritario. Muchos de los miembros del ministerio se han pasado a nuestro bando, y cuando acabemos con el mandato de Fudge muchos más se nos unirán, así que recuerden esto: nadie debe morir en este ataque. Los que están de parte del ministro son nuestros hermanos y hermanas, que terminaran por unirse a nuestra causa cuando vean que velamos por el bien de toda la sociedad de magos de Gran Bretaña. Con esto dicho, montemos nuestras escobas y comencemos la lucha.- al terminar su discurso, Dumbledore hizo aparecer por arte de magia escobas que montaron: él, Mcgonagal, Snape y Flitwick. Hagrid iría en la moto de Sirius, ya que las escobas no aguantaban su peso. El resto de los profesores se quedarían en el colegio junto a los alumnos de tercero, segundo y primero, para cuidar las instalaciones.
Comuna patada en el suelo, todas las personas en el Salón con una escoba se elevaron en el aire y siguieron a Dumbledore, quien cruzó las puertas del castillo y se dirigió junto a su ejercito a Londres, con Hagrid y su moto voladora siguiéndolos por de tras.
Fin del primer capitulo.
Dejen reviews. Porfa, no me maten.
En el siguiente capitulo habrá mas acción.