Nota : Escrito antes de que saliera el capi 125
Advertencia : Tengan a mano un paquete de clínex... si quieren
Dolor
Kurogane no podía aguantar. No podía. Y aún así, él se mantenía a la cabecera de la cama en la que el mago descansaba Fye. Viéndolo así, le pareció que la cama era bastante...bastante incómoda.
El ninja sintió un escalofrío recorrer su cuerpo. El mago, que había intentado devolver al chico que bien conocían, había quedado en un estado deprobable. Estaba blanco como la tiza, su respiración era entrecortada. Y sin embargo el ninja pudo distinguir el tinte rosado de la fiebre en sus mejillas. Y eso ponía enfermo a Kurogane.
El ver aquella figura tan maltrecha, deshecha... aquella que se movía tan grácil, ahora se encontraba tan débil como para hablar. Esa figura tan rota... Eso le enfadaba consigo mismo. Si hubiera... si hubiera llegado antes, Fye no estaría en ese estado, con su vida colgando del hilo de un péndulo; seguramente estaría haciendo gracias con su nombre y todo por hacer sonreír al resto...
De nuevo clavando la vista en el inconsciente mago, se preguntó qué era lo que tanto miedo despertaba en él, si se protegía bajo esa máscara de sonrisas falsas. Suspirando, mojó el paño que tenía en su mano y lo colocó sobre la frente del mago, quien movió la cabeza y murmuró algo en sueños.
Sus pensamientos fueron cortados, cuando alguien llamó a la puerta.
- ¿ Kurogane-san?
El ninja apartó la vista del mago durmiente y se volvió hacia la fuente de la voz, encontrándose con la princesa Sakura, quien se acercó hasta la cama.
- Hn
- Kurogane-san¿ Fye-san...?
- Dudo que aguante más – dijo con cierto dolor en su voz
- Pero, Fye-san...
No había modo de evitarlo. Los ojos de la muchacha se llenaron de lágrimas y ella abandonó la estancia corriendo. Kurogane no se había dado cuenta de que sus ojos amenazaban con soltar esas lágrimas de frustación que con tan poco éxito intentaba controlar. Las secó rápidamente y juró a sí mismo que salvaría a Fye y lo protegería con todas sus fuerzas. Para ello pagaría a la bruja lo necesario para salvar al mago de la muerte segura, después él lo protegería a su forma. Al cruzar esos pensamientos por su cabeza, se vio sosteniendo fuertemente una mano del mago entre las suyas, mientras observaba el doloroso descansar del rubio.
FIN
Lo hice. aaaah, buf. si me dejaran reviews sabría cómo hice mi trabajo
el capi 125 ya salió en alguna página advertencia : para que no les den pampurrios, a Fye le convierten en vampiro para poder salvar su vida.
