"¿Hermano?"

Un par de ojos ambarinos se abrieron de golpe, después de parpadear un par de veces para aclararse la vista, se volvió hacia la fuente de la voz y se reunió de inmediato con un par de inocentes ojos azules.

"¿Hermano?". El dueño de los ojos azules llamo de nuevo, inseguro; el mayor gimió cuando su pacífica siesta fue perturbada pero no pudo evitar suavizando su mirada en el niño en frente de él.

"¿Sí? ¿Qué quieres, Aladdin?" Trató de sonar tan impaciente como pudo, el joven cuyo nombre fue Aladdin se removió nerviosamente por un tiempo, dándole miradas nerviosas al mayor, el no pudo evitar levantar una ceja, curioso de lo que el niño quería.

Finalmente, el joven reunió todo su valor y espetó: "¿Puedo jugar con el agua de la laguna, por favor?" declaró, el mayor parpadeó y suspiró antes de contestar: "No, no puedes."

"Ay, por favor, por favor, sólo por un rato", frunció el ceño el niño de cuatro años de edad, le suplicó con sus mejores ojos perrito abandonado.

"No," dijo el chico mayor, hizo caso omiso de la súplica del más joven y voltio la cabeza evitando así el adorable acto que hermano pequeño estaba tratando de hacer.

"Pero-", empezó Aladdin pero su protesta fue interrumpida.

"No hay peros, sabes que mamá y papá no serán felices si usted regresa a casa todo mojado", el mayor se cruzó de brazos infantilmente a pesar de ser el mayor.

"¡No te preocupes! Voy a asegurarme de no mojarme y si el hermano mayor Judal no les dice nada, ¡entonces ellos nunca lo sabrán!" el niño exclamó alegremente, una gran sonrisa se posó en su cara como si fuera la mejor idea del mundo. El otro chico ahora conocido como Judal suspiró de nuevo y empujó suavemente la frente de Aladdin pero lo suficiente fuerte para ganar un grito del chico.

"¡Ay!,¿ qué fue eso?" el chico sostenía su frente dolorida y la froto suavemente intentando quitar el dolor.

"No significa no Aladdin, y se acabó" concluyó Judal, Aladdin puso mala cara y con un resoplido voltio la cabeza lejos de Judal mientras se sentaba a su lado, Judal pozo una mirada perezosa en el niño que actualmente estaba poniendo mala cara y suspiró por enésima vez ese día.

"Aladdin", llamo Judal, pasaron unos segundos pero ninguna respuesta o movimiento fue recibida del otro, y eso lo confirmó, Aladdin estaba enojado con él y Judal no le gustaba nunca que Aladdin se enojara con él, siempre terminaba con un insensible Aladdin y Judal odiaba ser ignorado.

"Aladdin", trató de obtener una respuesta del silencioso chico que incluía picarlo, hacerle cosquillas y persuadirlo, pero aún nada, como era de esperar.

"Está bien, me rindo usted puede jugar con el agua", declaró Judal, derrotado por su hermano menor, casi al instante, el oído de Aladino se animó y al momento siguiente, estaba lanzándose a su hermano mayor en un fuerte abrazo.

"¡Te quiero! ¡Hermano Judal!" los ojos de Aladdin se iluminaron en éxtasis, Judal estaba un poco sorprendido por el súbito cambio, pero no pudo luchar contra la suave sonrisa que se extendía por su rostro mientras agitaba el pelo azul de Aladino afectuosamente. "Sólo asegúrate de no quedar demasiado mojado."

Asentir con su cabeza Aladdin corrió tan rápido como sus pequeñas piernas podían llevarle al estanque y metió las piernas en el agua, él se rió y suspiró un poco por la frialdad del líquido sobre su piel, mientras su flauta de oro brillaba bajo la luz del sol.

Judal siguió al entusiasta niño, todo el tiempo pensando si había echado a perder mucho a su hermano menor, observó como la trenza de Aladino, que le llegaba a la cintura, bailaba con el viento y se dio cuenta del elemento de oro.

"Aladdin, ¡debes guardar primero flauta!" Judal aconsejaba mientras acortaba su distancia.

"No, ¡está bien!" respondió Aladdin, sacando el agua con sus pequeñas manos.

"¿Está seguro?" Judal preguntó, mientras se sentaba junto al estanque, con las piernas cruzadas.

"Sí, es un regalo tuyo hermano y yo quiero que esté a mi lado ¡para siempre! Además, te prometí que cuidaría muy bien de él", insistió Aladdin, tocando su flauta con ternura.

Judal no dijo nada más y en su lugar cerró los ojos para disfrutar de la cálida brisa, sabía que era inútil tratar de volverse a dormir, aburrido podría ser la palabra correcta para describir lo que estaba sintiendo en estos momentos. Entonces, de repente, la bombilla de luz se ilumino como se le ocurrió la idea exacta de cómo gastar su tiempo. Él sonrió con picardía, manteniendo un ojo en Aladdin, se colocó al lado de Aladdin casi sin hacer ruido.

"Aladdin", ronroneó al oído del joven, Aladdin dio un salto, dejando caer el agua que recogió en sus palmas, Aladdin voltio para protestar, pero se encontró con salpicaduras de agua tiradas directamente a la cara, tosió y se secó la cara con las mangas de su ropa , murmurando incoherentes protestas y amenazas.

Judal se rió cuando le Aladdin lo miró con una mirada que decía "sólo espera, voy a conseguir mi venganza", apenas tuvo tiempo de esquivar el ataque de agua lanzado en contra suya y cuando él se las arregló para esquivar se vio obligado a enfrentar unas cuantas salpicaduras de agua más que lograba esquivaba con gracia, Cansado de esquivar Judal lanzó algunos ataques contra Aladdin también y la mayoría de ellos lo golpeaban debido a que eran más rápidos.

Después de un tiempo, Aladdin estaba furioso porque él era tan mojado como una rata ahogada mientras Judal todavía estaba completamente seco, sentado junto al estanque con una sonrisa orgullosa en su rostro, ninguno de su ataques llego incluso cerca de Judal ,el adolescente siempre se las arregló para girar su cuerpo y evitar la humedad, Aladdin pronto renunció a intentar conseguir su venganza.

Judal sonrió y se recostó, cerrando los ojos y se relajó al oír el sonido de las hojas susurrantes, era en efecto una tarde tranquila, tal vez demasiado tranquila...

El viento aumentó su velocidad, El ambiente de repente se hizo tenso las nubes oscuras se reunieron y lo más importante, el Rukh estaba inquieto, Judal se incorporó inmediatamente antes de que el vértigo inundó su mente, él simplemente lo ignoró y trató de ponerse de pie.

"Aladdin" Gritó, con la esperanza de oír una respuesta del joven, pero cuando no recibió ninguno le comenzó a entrar el pánico tambaleándose logro apoyarse en un árbol cercano, esperando que el mareo se vaya.

Sintiéndose mejor se apresuró a escanear el área su corazón latía tan rápido que parecía como si no tardaría en salirse de su pecho.

"Aladdin" Llamó de nuevo buscando desesperadamente la respuesta familiar hasta que lo vio en la esquina de sus ojos.

Aladdin estaba allí en el medio de la laguna. Su cabello azul le cubría sus ojos, Judal corrió a su lado torpemente mientras el agua le salpicaba todo.

"Aladdin" Gritó. Aladdin se quedó quieto en el estanque sus ojos estaban muy abiertos y sin vida como si estuviera en shock, para cuando Judal alcanzo a Aladdin comenzó a sacudirle los hombros , con la esperanza de que saldría de cualquier trance que estuviera.

Afortunadamente, después de unas cuantas rondas de agitación, Aladdin se movió alzando su vista haciendo que sus temerosos ojos se encontraran con los rojos de su hermano, sus ojos poco a poco volvieron a la normalidad a pesar de que obviamente seguía teniendo miedo. Al ver que Aladdin estaba de vuelta al mundo de los vivos otra vez, Judal dejó escapar un suspiro de alivio y se arrodilló para recoger Aladdin en un abrazo, susurrándole palabras suaves y relajantes para el niño. El muchacho se tensó para poco después relajarse en el cálido abrazo.

"Hermano, los pájaros blancos están entrando en pánico algo malo le paso a la ciudad me dicen que la oscuridad está llegando", dijo Aladdin temblando ligeramente y se aferró a la ropa de su hermano con toda la fuerza que tienen su pequeños dedos, él se asustó cuando lo vio, el rebaño de Rukh negros que se agolpaba en el pueblo en el que estaban residiendo.

Judal estaba consternado, pero no cesara en sus esfuerzos de calmar al niño que continuaba temblando en sus brazos. Los Rukh estaba volando a su alrededor y pudo ver la emisión del aura oscura que provenía de la ciudad, Cogiendo a Aladdin se precipitó hacia la ciudad, la preocupación corría por sus venas, Aladdin no hizo ningún ruido, optando por enterrar su cabeza en la ropa de su hermano.

"¿Qué?" Judal estaba en una pérdida de palabras cuando vio la ciudad, fue horrible, cientos de cuerpos yacían aquí y allá, así como el hedor de la sangre empañaba el aire, el fuego parecía hacer una fiesta salvaje consumiendo las casas y edificios, Judal hizo una mueca al verlo, cuando sintió el bulto en sus brazos moverse, mantuvo su mano sobre la cabeza del joven para evitar volteara la vista a lo que tenía en frente.

"¿Qué está pasando? ¿Quién? ¿Por qué?" Sus pensamientos eran un revoltijo miles de preguntas se desplomaron sobre él y ya podía sentir un dolor de cabeza que se aproximaba. Estaba completamente desconcertado, Su mente no pudo procesar algo útil en estas circunstancias.

"¡Hermano! ¡Cuidado!" Fue sacado de nuevo a la realidad por una voz que conocía demasiado bien y se voltio rápidamente, tenía el pelo largo un color azul oscuro que lo siguió, sus ojos se abrieron a la figura que se encontraba frente a él, era un hombre alto y fuerte, musculoso y una clara locura que brillaba en sus ojos en su mano sujetaba una espada ensangrentada, él se acercó cada vez más y más a la pareja.

Judal sostuvo a su hermano en sus brazos protectoramente, la espada en lo alto bajo rápidamente, cerrando los ojos se preparó para el dolor, Sin embargo, el dolor nunca llegó en su lugar el sonido de un "golpe" se oyó después un aullido de dolor del hombre.

Aladdin abrió la boca y los ojos Judal se abrieron de golpe el hombre que estaba de pie unos segundos antes estaba tumbado en la piscina de su propia sangre la situación dejó aún más confundido Judal pero antes de que se pudiera colocar su guardia en alto alguien hablo al acecho en la oscuridad.

"felicitaciones a ustedes jóvenes amados por el Ruth" Una profunda voz sonó y apareció una sombra, La oscuridad se calmó un poco para revelar a un hombre con un pañuelo que cubría la mayor parte de su cabeza, este hombre estaba rodeado de negro Rukh.

"¿Quién diablos eres?" Judal preguntó bruscamente, mirando al extraño con precaución.

"Vamos, vamos que no es una forma educada de hablar con sus mayores, Judal. Además," con eso, él desapareció de su vista antes de que volviera aparecer justo en frente de Judal. "No queremos que el pequeño Aladdin recogiera ese lenguaje tan vulgar, ¿verdad?" mientras que él continuó acariciando la cabeza de Aladino, el niño de cuatro años de edad, se apartó del contacto y se aferró a la ropa Judal.

Judal se apartó del hombre sospechoso manteniéndose cerca de Aladdin apretando los dientes miró a la figura. Sus ojos color ámbar mostró claramente desafío el hombre no fue en lo más mínimo afectado por la mirada hostil que recibió, en cambio, él parecía bastante divertido.

"¿Quién eres y cómo sabes nuestros nombres?" Judal demando, sus ojos color ámbar quemando peligrosamente mientras que los azules de Aladdin estaban llenos de confusión y vacilación, el hombre se echó a reír y, como si fuera una señal, varias figuras más emergieron de la oscuridad, todos con sus rostros cubiertos con un pañuelo.

"¿Nosotros? somos Al Sarmen y estamos aquí para ayudarle."