Era un domingo como cualquier otro, las aves cantaban y tanto un rubio como un chico de cabellos morados estaban sentados en unas gradas a la espera que llegasen el equipo contrario para un amistoso partido entre la prefectura de Odaiba y la de Shinjuku, Takeru estaba vestido como el árbitro ya que Daisuke se lo había suplicado durante semanas. Aun sin ser un partido oficial ya que de serlo podría tomarse a mal.

—Enserio tu novio me ha suplicado durante días que arbitre esto—Comento el rubio con una sonrisa en la cara.

—Eres el único en quien podía confiar esto, yo lo haría, pero me iría peor que a ti—rio un poco mientras miraba calentar al chico de cabellos rojizos.

—Si claro no podría ser peor a la vez que Daisuke perdió la apuesta con Taichi y tuvo que correr en bóxer por el fraccionamiento—rio al recordar la experiencia.

—cierto estuvo a punto de ser catalogado como un criminal sexual de no ser porque tiene 14 años—las carcajadas inundaron las tribunas logrando que el de cabellos pelirrojos volteara a ver a ese lugar con una cara de incertidumbre.

—Aunque no todo ha sido así, su hermana casi lo mata cuando fui a su casa una vez presentándome ya no como su amigo si no como su novio—el chico de cabellos morados miro un poco al suelo con una media sonrisa.

—Eso es lo de menos, él estaba tan emocionado que aceptaras ser su pareja que se la pasaba escribiendo tu nombre en sus libretas, era divertido picarle cuando le pedía los apuntes—comento para levantarle el ánimo al otro, pasando desapercibido que llegaba el otro equipo y que una chica de cabello castaños arrastraba a su lado a un chico vestido de mujer.

—Aunque fue mejor cuando hemos tenido que correr al puente arcoíris cuando ataco Diaboromon hace ya unos años— agrego a la conversación —Joe tenía una cara digna de fotografía al momento que Daisuke le dijo que éramos dos para una bicicleta—

De repente un grito saco de la plática a los dos, logrando que el rubio se levantara de su asiento y caminara al campo.

El partido fue excitante, Hikari lanzo a una chica a los brazos del mayor de los chicos ahí reunidos esperando ver la aparición de la pareja de Taichi y apartarla para llevárselo lejos, pero sucedió todo lo contrario y Taichi se la llevo.

—¿Te ha sucedido algo así con Daisuke? —pregunto el rubio mientras el pelirrojo iba a comprar unas bebidas para ellos.

—sí, pero siempre las rechaza amablemente—contesto antes que Hikari le murmurara algo al pelirrojo que logro subirle los colores.

—Ya veo Hikari no me ha hecho algo similar, ¿Qué crees que le haya dicho a Daisuke? —

—Supongo que algo referente a la chica que se llevó Taichi, además que hoy no vi a Takato, creí que llegaría con sus compañeros de Shinjuku—

La plática termino con una amena despedida por parte de los dos interlocutores, mientras Daisuke abrazaba el brazo de su novio y se dirigían a casa.

—Y… ¿Quién era la chica? —pregunto el pelimorado a su pareja observando cómo se coloraba hasta las orejas.

—Era Takato, Hikari le convenció de vestirse así para Taichi—contesto intentando ocultar su rostro en la espalda del otro.

Un susurro saco del estupor de la noticia al mayor que decía un simple "no le digas a nadie más", entendía el porqué de la petición de Dai, no todos los del grupo se tomarían a bien la treta de Hikari y el que el chico aceptara aquello.

—No le diré a nadie—Contesto besando las manos algo frías del pelirrojo.