¡Holas!

Aquí traigo el nuevo fic que comenté en mi fic "Blanco y Negro" pero por si alguien no lo sabe, explicaré un poco de qué va la cosa jeje.

Este fic será similar a "Blanco y Negro" es decir, serán una colección de mini-one shots o viñetas independientes entre sí basadas en Mello y Near y la relación que les une. Unas veces estarán más centradas en uno u en otro, y otras veces en ambos por igual, incluso pueden aparecer otros personajes también.

Mientras que "Blanco y Negro" está basado en la tabla de 30 Vicios, éstas estarán basadas en la tabla Básica (ambas de la comunidad de LJ "30vicios").

Los capítulos, o mini one shots podrán tener cualquier género, advertencia, rating etc… incluidos temas yaoi o lemon, aunque siempre que alguno de los capítulos contenga algo de esto, será advertido al comienzo.

Pretendo que sean capítulos cortos, pero no drabbles, la extensión suele rondar las 3 páginas. Si alguno me ocupara más de 5 páginas, lo subiría como one shot independiente.

Y creo que no tengo más que comentar, sólo que espero que os guste y me dejéis comentarios XDDD. Ya tengo escritos varios capítulos de este fic y me ha costado decidirme por una de las historias para postearla como primer one shot del fic.

Personajes: 1.Mello, Near 2. Matt.

Rating: PG-K

Género: General (un poco Fluff)

Ubicación: Wammy's House Era.

Advertencias: ninguna aunque respecto al último párrafo cada cual es libre de encontrarle el punto yaoi o no.

Resumen: Para todo el mundo, Near era un robot que ni reía, ni lloraba, ni comía, ni expresaba nada, sólo pensaba, pensaba, pensaba.

ESCALERA

Mello opinaba que aquel niño nuevo era raro. En realidad, todos los niños pensaban eso. Aunque al niño nuevo no parecía importarle que todos le miraran y cuchichearan cosas a sus espaldas, que incluso los más atrevidos se acercaran a él y le hicieran extrañas preguntas mientras los demás se reían esperando la respuesta.

El niño nuevo nunca contestaba.

-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-

Mello y Matt atravesaban el hall para salir al patio cuando vieron aquella figura inconfundible en el piso superior. No habría sido nada llamativo sino fuera porque todo lo que hiciera el niño nuevo causaba curiosidad general. Ya fuera algo tan simple como bajar unas escaleras.

Se rezagaron en su camino, quedándose a observar, medio escondidos, la manera en que el niño nuevo bajaba los primeros escalones. Era muy pequeño y para hacerlo se ayudaba agarrándose a los barrotes de la barandilla, ya que el pasamanos era demasiado alto para él. Con la otra mano sujetaba un enorme conejo de peluche del cual no se había separado desde su llegada. Sus pies, enfundados en unos calcetines blancos, iban parándose en cada escalón, aún sin saber cómo hacerlo de forma continuada. Escalón a escalón, el niño nuevo bajaba muy despacito. En el lado opuesto de la escalera, los otros chicos, más ágiles y experimentados, aprovechaban el espacio libre para bajar corriendo, incluso saltando varios escalones a la vez.

- ¿Lo has visto? Qué tonto, no sabe bajar las escaleras.- dijo Matt.

- Yo creo que no sabe andar muy bien todavía, siempre está sentado.- dijo Mello.- Y creo que tampoco sabe hablar. Nunca dice nada, y el otro día James le preguntó si era mudo y tampoco dijo nada. A lo mejor es mudo. O sordo y por eso no entiende lo que le preguntan y no responde.

- No es mudo. Yo lo he escuchado hablar.- dijo Matt.

- ¿De verdad?- preguntó Mello girándose para mirar a su amigo buscando una explicación.- ¿Cuándo?

- El otro día le dijo algo a Roger, no pude escuchar el qué porque habla muy bajito.- aclaró Matt.

- A lo mejor sólo sabe decir unas cuantas frases, como esos juguetes que siempre repiten lo mismo.

- Seguro.- afirmó Matt, a lo que Mello volvió a girarse, extrañado.- He escuchado que en verdad es un robot.

- ¿Un robot? Pero eso sería guay. Aunque los robots no tienen pelo ni carne ni nada de eso.

- Más bien sería un androide.

- ¿Y para qué iba a traer aquí Roger a un androide?

- Porque los androides son muy listos y son como los ordenadores, hacen cálculos muy rápido y todo eso.

- No, Matt. Ese niño no es un androide, ese niño es tonto, si fuera un androide bajaría bien las escaleras.- objetó Mello.

- Yo creo que sí es un androide. ¿No has visto que siempre tiene la misma cara? No se ríe ni nada, eso es porque es un androide. Tampoco come, ¿no te has fijado que nunca va al comedor con nosotros?

Aunque Mello dudaba, ante todas aquellas evidencias no tenía más remedio que darle la razón a Matt y al resto de los niños que habían aventurado que el niño nuevo era una especie de robot de última generación.

- Y ese peluche gigante en realidad es su arma súper secreta para destruir la humanidad.-dijo Matt, que ya empezaba a encontrar emocionante la idea.

Aquello no pareció convencer demasiado a Mello, o quizás no le había prestado atención porque estaba pensando en una amenaza más inmediata.

- Pero si es un androide, entonces hará las cuentas más rápido que todos nosotros en clase de matemáticas.- dijo Mello, sintiéndose amenazado.

- Si no sabe ni andar bien, ¿cómo va a saber escribir las cuentas?

- Pues porque los androides no escriben, son como las impresoras, expulsan papeles con los resultados.

- Oh, es verdad.- le apoyó Matt, asintiendo.

En ese momento, un grupo de chicos bajaban corriendo. Considerando que el espacio libre dejado al otro extremo de la escalera no era suficiente para que todos bajaran a la vez. La solución más coherente habría sido bajar uno por uno. La solución más divertida era apartar aquel pequeño obstáculo del camino, que con su lentitud les estaba entorpeciendo el paso. El cabecilla debió pensar que nadie estaba mirando y decidió que, después de todo, a nadie le gustaba el niño nuevo y nadie se disgustaría si se caía "accidentalmente" por las escaleras.

Ni siquiera necesitó ejercer mucha fuerza para que saliera rodando. Los pequeños dedos trataron de sujetarse a los barrotes sin conseguirlo. Tampoco ayudaba que fuera prácticamente descalzo.

Mello no pudo evitar soltar una carcajada al verlo caer. Aún no era algo personal, pero de todas formas ver a alguien caerse siempre resultaba gracioso. Aunque el niño nuevo lo hacía más gracioso aún, hasta cayendo parecía torpe mas cuando ni en esas circunstancias se había soltado de su peluche, que rodaba también junto a él.

Lo apropiado habría sido perseguir a aquel niño que le había empujado para regañarle por lo que había hecho, y que junto con sus compañeros había desaparecido de la escena del crimen en un abrir y cerrar de ojos. En seguida Mello desechó tal idea. El niño nuevo estaba tumbado al pie de la escalera, sin duda dolorido. No podía dejar pasar una oportunidad así.

- Vamos, Matt.- susurró Mello, cogiendo del brazo a su amigo para salir de su escondite.

Ambos chicos corrieron hacia donde el niño nuevo se encontraba tirado y aturdido. Cuando llegaron hasta él, ya se estaba incorporando.

Para entonces, Mello le estaba levantando la camisa de aquel pijama blanco que nunca se quitaba.

- ¿Pero qué estás haciendo?- preguntó Matt, intrigado.

El niño nuevo se había quedado sentado, sin hacer nada mientras Mello observaba con atención su níveo cuerpo. La barriga, el pecho, la espalda… No parecía importarle que casi le estuviera desnudando.

- Voy a apagarlo.- dijo Mello, investigando la espalda del niño nuevo mientras éste no hacía nada por evitarlo.- Debe tener un botón por algún sitio, ¿no?

No encontró nada allí, salvo manchas moradas que se empezaban a formar debido al golpe.

- ¿Por qué quieres apagarlo?

- ¡Porque sacará mejores notas que nosotros!

Tras terminar de inspeccionar la espalda sin resultado, regresó a la parte frontal. El niño nuevo le estaba observando con atención, con aquellos ojos grandes y oscuros.

- Tenías razón, siempre tiene la misma cara.- confirmó Mello.- Además… ¿por qué no llora?- y esta vez se dirigió hacia él.- Oye, tú, ¿por qué no lloras?, ¿es que no te duele?

Se sorprendió, ya que no esperaba que le respondiera. Aunque no fuera con palabras, el niño nuevo asintió con la cabeza, aquellos extraños cabellos blancos alborotándose aún más. Después de eso, pareció ser consciente del dolor, contrayendo un poco la carita y cerrando los ojos.

- Los androides no lloran, Mello.- informó Matt.

- Sí, puede ser. Pero mira, Matt. No es sordo. Ha respondido a lo que le he preguntado.

Al momento Mello se dio cuenta de por qué el niño nuevo había hecho aquel gesto. En la tela del pijama, a la altura de las rodillas, una mancha de sangre se hacía cada vez más grande. Enrolló la tela del pantalón hasta dejar la herida a la vista.

Allí no había cables, ni engranajes, ni aceite, ni tuercas. Había piel desollada y carne abierta. Con curiosidad, y para acabar de zanjar sospechas, Mello llevó un dedo a la herida, rozándola. El niño nuevo se estremeció haciendo un leve sonido como si le escociera el contacto. Aún así, Mello internó el dedo en la herida, provocándole un quejido. Salvo eso, el niño nuevo tampoco hizo nada esta vez.

Su voz había sido tan débil y pequeña como su apariencia. Su sangre era roja, roja y caliente.

Mello fue castigado por tener inoportunamente las manos llenas de sangre cuando Roger entró al hall. Pero al menos había descubierto algo.

Ni siquiera el paso del tiempo cambió aquel concepto, aquella imagen que la gente solía tener de Near. Era un robot que ni reía, ni lloraba, ni comía, ni expresaba nada, sólo pensaba, pensaba, pensaba.

Sólo Mello conocía el lenguaje de sus gestos, de sus miradas y silencios. Sólo Mello sabía de aquellas otras expresiones de su rostro, de aquel otro timbre de su voz, de aquella piel que respondía por sí sola a base de matices. Tal vez fuera porque fue el único que se interesó por conocerlas y se obsesionó por descubrir sus límites. Quizás fuera porque Near no quiso que nadie más tuviera ese privilegio.

OooOooOooOooOooOooOooOooO

¿Os ha gustado? Espero que sí, y espero vuestros comentarios .

Me gustó tratar el tema de Near-robot jeje. No sé, es que creo que para todo el mundo, tanto dentro de Death Note como gran parte de los fans es una idea bastante generalizada de él. Poca gente se para a analizar el personaje y tal vez por eso sea uno de los personajes menos valorados de Death Note (y por qué no decirlo claramente, más odiado TT)

A mí me gusta Near (quien me conozca ya lo sabe) y quería abrir un poco el personaje a la gente. En Death Note Near es subestimado por Light, que sólo lo ve como una copia de L y poco más (al igual que la mayoría de fans de Death Note). En esta historia se muestra cómo Mello es el único en conocer al verdadero Near, el único que se pregunta si realmente detrás de esa imagen de robot, existe algo más.

Bueno, tampoco quiero ponerme a filosofear sobre esto, creo que el capítulo es bastante explicativo por sí solo XDDD ( y si no lo es, habré fracasado como escritora TT). Espero haber acertado al elegir este one shot como primer capítulo (y que la gente no huya despavorida incluso antes de leerlo XD)

Lo dicho, que espero que os guste y espero vuestros comentarios, please!! Como siempre, responderé los reviews cuando actualice un nuevo capítulo, ok?? Así que siento si tardo un poco en responder.

Besitos

Ak.