EN EL BAR

La música los rodeaba, todos a su alrededor tenían razones de sobra para celebrar, todos reían gritaba y cantaban. Pero los dos solo permanecían con una copa en su mano, hablando tranquilos ajenos al alboroto de su alrededor.

Cada uno unidos en sus míseras personales, sus corazones se juntaron en son de compañía para poder ahogar sus dolores en un baso de alcohol.

La semana había sido pesada para ambos, las preocupaciones se cruzaban de uno a otro, y a si mismos.

El había tenido problemas con su trabajo, por mas que trataba de dar lo mejor de si mismo para todo saliera perfecto, nada era suficientemente bueno para complacer a su líder, el siempre le exigía más, más y más… y esa presión lo tenía al borde del colapso, una reacción que no sabia si llegaría buen puerto, y con altos grados de alcohol en su sangre.

Por otra parte estaba ella, que luego de haber pensado haberlo sacado de su vida, como fantasma había regresado, con discretos mensajes y fugases miradas, en su soledad sentía no tener la fuerza necesaria para decirle no, para sacarlo de una vez y para siempre de su vida, aquel hombre miembro del consejo de su villa, con dos pequeños hijos, que había jugado con ella por tres años.

-No dejare que me siga humillando, ya no me importa si me hecha- decía mientras tomaba una vez mas el vaso hasta su boca.

-Tienes que ser fuerte, Tsunade sama regresara y todo volverá ser como antes- le decía mientras le sonreía de forma de consuelo.

-No se si resista mas con todo esto, ese idiota no se conforma con nada, siempre me exige mas, y se que eso lo ase por que estoy en desacuerdo con el y la manera en la que se hizo al poder, es por que siempre protejo a Naruto, y por lo mas mínimo es a mi al que culpa-

-¿Sabes? tengo una teoría bastante interesante al respecto, yo creo que el es gay y se enamoro de ti, y ahora que tu estas con Sayo, el esta celoso-

-No digas tonteras- le respondió con el seño fruncido, ella se rió y se llevó la copa nuevamente a la boca.

En el pequeño local se hizo un momento de silencio, el había ido al baño y los pensamientos de ella volaron a las pequeñas notas que durante tres días le habían llegado.

Suspiro profundo miro hacia un lado y sin mas dijo –El me ha vuelto a escribir-

Shikamaru se quedo sin aliento ante la noticia, pero no lo demostró, solo la miro a la cara y le pregunto -¿Qué piensas hacer?-

-Si me hubieses hecho esa pregunta hace un mes a tras, no habría dudado en decirte ¡Al cuerno con el! pero ahora no lo se- dijo mientras jugaba un poco con la copa entre sus manos.

-Temari ya habíamos hablado de esto, no puedes hacer eso, el no te quiere, solo trata de jugar contigo, eres solo una muñeca con la cual se divierte, no eres mas que eso, no puedes volver a lo mismo-

-No sabes cuanta razón tienes Shika, lo tengo muy claro, me prometí a mi misma nunca mas, pero… me siento sola- lagrimas cayeron por su rostro, ella se apresuro a limpiarlas, el se apresuro a tomar una de sus manos entre las suyas y la acario tratando de trasmitirle todo el cariño que sentía hacia ella, hacia su gran amiga.

-Ha sido por eso que tu hermano te ha mandado una temporada hasta acá ¿no es así?-

-Gaara siempre se preocupa mucho, aunque no sabe nada de alguna manera lo sabe todo, el solo me dijo que me haría bien alejarme-

Compuso su sonrisa y las lágrimas dejaron de caer por su rostro, pero sus ojos reflejaban la soledad que sentía hasta ese momento.

-¿Que dijo Sayo cuando supo que vendrías conmigo a tomar unas copas?-

-No lo tomo muy bien, sabes que ella no le gusta que salga a solas contigo- respondió con fastidio en su rostro.

-No entiendo a esa niña, primero te dice que no quiere algo serio, luego se enoja por que tu le dices que no tienen nada serio, luego ella sale con su ex y te asé escándalo por que sales con migo, eso te pasa por andar con niñas chicas-

-las mujeres son muy…-

-¿problemáticas?... lo se- ambos se miraron y se rieron.

-Ella es muy linda, y tierna, se preocupa es dedicada y amorosa…-

-¿pero?-

-No lo se, hay veces que la veo mas como a mi hermanita pequeña, que como otra cosa, no puedo hablar cosas profundas con ella y no es buena jugado al Go-

Una linda melodía sonó en el aire, ella sonrió –Esa canción me encanta- Susurro alegre cerrando sus ojos, se puso a cantar.

El estratega solo la miro, ¿era el alcohol que ha esa hora tenia en la sangre? ¿O esa problemática mujer estaba mas linda que nunca?...

Cuando ella abrió sus ojos pudo notar que el estratega esta mirándola con mucho detenimiento, ella le sonrío y siguió cantando alegre, el solo le sonrío y la siguió en su canción.

No lo noto pero desde hacia mucho no le había soltado la mano, y a ella parecía no molestarle en lo absoluto.

La mesera le trajo la cuanta, Shikamaru la miro intrigado, el no recordaba haberla pedido y sabia bien que Temari tampoco ya que no le había apartado de su vista ni un solo momento, pero cuando lo noto estaban solo los dos en aquel lugar.

Entendiendo la indirecta, pagaron la cuenta y salieron del local, ella se acurruco en los brazos del estratega, el la abrigo con su chaleco.

-es mi amiga… es mi amiga… es mi amiga… diablos…. en mi mejor amiga- se repetía mentalmente una y otra ves.

-¿Sin daños a terceros Temari?- le pregunto de sobresalto

-¡sin daños a terceros Shikamaru!- le respondió sin pensarlo dos veces…